4 CONSEJOS PARA PERMANECER FIRMES 1 Timoteo 4:6-16

Transcripción

1 4 CONSEJOS PARA PERMANECER FIRMES 1 Timoteo 4:6-16 Hermanos estamos en tiempos finales y el Señor en su amor para con nosotros ha querido guardarnos de las cosas que veremos venir cuanto más se acerque el día de su venida, donde Satanás con más furia estará esperando el momento en que pueda echar mano de algún débil que no esté firme en la verdad o de alguno que creyendo que está firme se ha descuidado de su fe, para hacerlo caer. En 2 Tesalonicenses 2:1-3 dice el Apóstol Pablo: Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con El, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca. Nadie os engañe en ninguna manera: Porque no vendrá sin antes venga la apostasía y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición. El apóstol Pablo estaba preocupado porque estos hermanos estaban pasando un período de prueba de su fe, y han sido perturbados por los falsos, que aprovechan precisamente los momentos de confusión, dolor o persecución para dar al mundo algo nuevo o decir algo que nadie haya dicho. Nosotros no estamos exentos de los momentos de persecución y prueba, y el Señor tampoco quiere que nos movamos de la manera de pensar, en la que él nos ha mantenido en la sinceridad de servirle y de glorificarle. En esta oportunidad recibiremos 4 consejos del apóstol Pablo con los cuales podremos enfrentarnos frente a todo el que quiera movernos de nuestra manera de pensar. Estos consejos los vemos en 1 Timoteo 4:6-16, a quien le escribe para que sea un buen ministro de Jesucristo. Estamos viviendo en tiempos difíciles en los cuales Satanás se ha dedicado a perseguir la mente de los cristianos, óigalo bien, nuestra mente esta ahora padeciendo persecución. Ya no existen rivalidades con los falsos, sino entre creyentes, por el hecho de que muchos quieren tener primicias de decir lo que nunca se ha dicho, llegando siempre a decir lo que la Biblia nunca ha dicho. Pero Pablo comienza diciendo: TIMOTEO, si esto enseñas a los hermanos, serás buen ministro de Jesucristo. I. NUTRIRSE II. DESECHAR III. EJERCITARSE

2 2 IV. OCUPARSE PRIMER CONSEJO: I. NUTRIRSE (1 Ti. 4:6) Un creyente débil nunca podrá enfrentarse a la falsedad por lo tanto: A. DEBE NUTRIRSE CON LAS PALABRAS DE LA FE 1. La fe viene por el oír, y el oír por la palabra de Dios. Es esta la única manera en que el creyente puede aumentar y fortalecer su fe (Ro. 10:17). El cristiano que no se alimenta se atrofia y nunca hallará la victoria durante esté en el camino de la fe. Por otro lado debemos estar fuertes en el conocimiento de Dios para que nuestra fe esté también fortalecida en demasía. 2. La madurez espiritual es la que nos ayudará a vencer a los que hoy quieren desviarnos de la verdad y esta se obtiene únicamente en la medida en que nos nutrimos de la Palabra pura de Dios. 1 Pedro 2:2-3 dice: Desead como niños recién nacidos la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación si es que habéis gustado la benignidad del señor. 3. No habrá nunca otro alimento espiritual que las palabras de la fe, para que estemos siempre nutridos y creciendo en la obra del Señor. Muchas veces quisiera acabar con todos los libritos con los cuales se ha comercializado el evangelio, que todo lo que han hecho es traer más confusión al pueblo de Dios. Con lo que dice la palabra es suficiente, por lo que los comentarios de los hombres en cuanto a opiniones están de más. B. NUTRIRSE CON LA BUENA DOCTRINA QUE HAS SEGUIDO Didaskalía = doctrina = enseñanza. 1. Pablo conocía la enseñanza que había recibido Timoteo y de quien la había recibido (2 Ti. 1:3-5).

3 3 2. Timoteo no tenía en este tiempo toda la literatura que tenemos hoy, sino solo la PALABRA DE DIOS. 2 Timoteo 3:10-17 es un gran ejemplo de la doctrina que había seguido TIMOTEO. 3. Ciertamente muchos libros son de gran ayuda para los cristianos, pero una gran parte de lo que encontramos hoy debe ser desechado. POR ESO PABLO ENSEÑA TAMBIÉN A: II. DESECHAR (1 Ti. 4:7a) Este es el 2do consejo para Timoteo. A. DESECHA LAS FÁBULAS PROFANAS 1. Si leemos 1 Timoteo 1:3-7 nos daremos cuenta de lo que se refiere Pablo, cuando nos habla de las fábulas profanas, a las cuales nosotros debemos desechar. El mandato es: Que no enseñen diferente doctrina. Que no presten atención a doctrinas extra-bíblicas. PORQUE ESTO NO EDIFICA. 2. Si leemos 2 Timoteo 2:23-26 entenderemos el porqué del consejo. Nuestro propósito no es discutir sino convencer y traer al arrepentimiento a los que andan en pecado. 3. Las fábulas a que se refiere Pablo les llama profanas. PROFANO se refiere a todo aquel que no entiende de una ciencia y en este caso de las cosas de Dios (Jer. 9:23, 24). B. DESECHA LAS FÁBULAS DE VIEJAS 1. Solo son cuentecillos que creen los niños, que no pasan a ser más que supersticiones que las abuelas tratan de imprimir a sus nietos para guardar la tradición de generación en generación. (Jer.10:13 y Ez.14:6). 2. De estas cosas tiene que cuidarse todo hombre de Dios que pretende estar firme en la doctrina del evangelio, pues lo que

4 4 importa para todos nosotros es la verdad de la Palabra y no lo que es la tradición de los pueblos. 3. Es importante que cada creyente en Cristo se despoje y deseche todo lo que ha aprendido fuera de la Palabra de Dios y que de validez solamente a lo que ella le demanda. AHORA PABLO MANDA A TIMOTEO A: III. EJERCITARSE (1 Ti. 4:7b) A. EL MANDATO ES A EJERCITARSE EN LA PIEDAD 1. Pablo tiene en su mente el gimnasio griego y el culto al cuerpo que existía en aquella época, quienes se despojaban de todo cuanto les impedía su libre movimiento. Estamos en una época bien parecida. 2. Pablo llama a Timoteo a ejercitarse igual que ellos, en cuanto a su mismo empeño y dedicación, pero en el ámbito espiritual como dice (He. 12:1-2). 3. Todo creyente tiene la obligación de ejercitarse en las cosas de Dios, pues en las cosas de Dios es que encontraremos la seguridad de obtener la vida eterna. El apóstol ahora agrega: B. EL EJERCICIO CORPORAL PARA POCO ES PROVECHOSO 1. Diría Pablo, solo sirve para mantenernos en forma física para predicar el evangelio, pero yo sé que debo ocuparme más de la piedad y más cuando yo se que el corporal puede mantenerme con buena figura, pero la piedad en buena forma espiritual. 2. No es que Pablo estuviera en contra de los ejercicios físicos, sino que él sabía que ellos no le servirían a Timoteo para hacer tesoros en los cielos, ni para obtener coronas por su ministerio. 3. Los creyentes del tiempo de Pablo, estaban siendo tentados en

5 5 esta área de su vida y Pablo se apercibía de esta tentación. Es por esto que advierte y plantea a Timoteo como establecer su prioridad. Más le recuerda, que: C. LA PIEDAD ES DEL TODO BENEFICIOSA 1. Porque tiene promesa de esta vida presente en la cual estamos y logramos con ella obtener la paz espiritual que gobierna a todo creyente. LA PIEDAD, es la disposición del ánimo que lleva al creyente a dar a Dios el supremo lugar en la vida, e inspira a vivir cerca de él. 2. La piedad también tiene promesa de la vida venidera o sea Esperanza que mueve nuestra fe, con respecto a lo que Dios nos tiene guardado para la eternidad. E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, Justificado en el Espíritu, Visto de los ángeles, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria (1 Ti. 3:16). 3. Pablo se dispone antes de dar su último consejo a Timoteo a declarar el móvil de su vida de piedad y de fidelidad a Dios. Que por esto mismo trabajamos y sufrimos oprobios porque esperamos en el Dios viviente; que es salvador de todos los hombres, mayormente de los que creen. Esto manda y enseña. Ninguno tenga en poco (que nadie piense bajo de ti) tu juventud, sino se ejemplo de los creyentes en la palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza (1 Ti. 4:10-12). Ahora entre tanto que voy, dice Pablo. Un último consejo: IV. OCUPARSE (1 Ti. 4:13) Dice (Pr. 13:4 y 26:16) El alma del perezoso desea, y nada alcanza, más el alma de los diligentes será prosperada. En su propia opinión el perezoso es más sabio que 7 que sepan aconsejar. (Que la plenitud del consejo)

6 6 A. OCÚPATE EN LA LECTURA 1. La lectura pública. Es bueno recordar la forma en que los primeros creyentes se ocupaban de estar preparados para poder leer la Palabra de Dios en público. (2 Co. 3:14); (Col. 4:16). 2. Asimismo, la lectura personal es aún más importante, pues todo creyente tiene que alimentarse a través de la lectura de la Palabra de Dios, para de esta forma poder crecer espiritualmente (Ap. 1:3 y Sal. 1). 3. Todo cristiano que se ocupa de la lectura, será un creyente fortalecido y preparado para presentar su fe ante cualquiera que le demande del conocimiento de Dios y podrá glorificar a Dios, aún no tenga en su mano la Biblia, pues la Palabra de Dios estará en su corazón. B. OCÚPATE EL LA EXHORTACIÓN 1. Palabra de advertencia, consejo, aliento, con toda paciencia y doctrina. Esta es una demanda muy clara en aquellos que hacen morar la Palabra de Dios en su vida. El apóstol Pablo así lo declara cuando escribe a la iglesia del primer siglo. (Col. 3:16-18; 2 Ti. 4:2) 2. Las palabras de exhortación son las palabras que llevan a lograr el objetivo que como ministro debemos obtener, al tratar de convencer a una persona de hacer la voluntad de Dios. (2 Ti. 4:3-4) 3. Esto es un don de Dios, pues no todos pueden ni tienen la capacidad para exhortar como Dios demanda, pues el propósito de uno que exhorta es lograr que esta persona sea persuadida de hacer lo que dice Dios y abandonar lo que es pecaminoso. C. OCÚPATE EN LA ENSEÑANZA 1. Ya Pablo había declarado esta cualidad el la lista de los requisitos de los obispos (3:2), este es una de las principales responsabilidades nuestras. De hecho, en esta lista, se dice que

7 7 el obispo sea apto para enseñar. 2. La enseñanza es la clave del crecimiento, un creyente que no aprende y se nutre de la Palabra de Dios, es un cristiano que caerá fácilmente en las garras del diablo y no podrá tener argumentos en su alma para contender por su fe. (2 Ti. 2:2) 3. Como pudimos ver en la introducción del primer punto, Pablo exhorta a Timoteo a enseñar: ENSEÑAR viene de la palabra griega Hipotítemi que significa poner firme fundamento bajo los pies. Es por tanto una responsabilidad del cristiano, estar preparado para echar un fundamento para su fe, que sea para la gloria de Dios. CONCLUSIÓN Y APLICACIÓN: No descuides el don que hay en ti. Todo don que recibimos es para ministrar a la iglesia, por tanto nunca debemos descuidarlo. Ocúpate de estas cosas, PERMANECE EN ELLAS, para que tu aprovechamiento sea manifestado a todos. Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; PERSISTE en ello, pues haciendo esto, te salvas a ti mismo y a los que te oyeren (1 Ti. 4:14-16). HERMANOS TOMEMOS UNA FIRME DECISIÓN DE ESTAR Y PERMANECER FIRMES.