Reintroduccion de la Guacamaya Militar en el estado de Nuevo Leon

Transcripción

1 Reintroduccion de la Guacamaya Militar en el estado de Nuevo Leon Ing. Eduardo Adrián Treviño Zepeda, M.C. Centro de Ciencias y Artes A.C. México Naturaleza y objetivos de la propuesta Parte de la misión del Planetario Alfa es la de despertar en los estudiantes y visitantes en general conciencia ecológica a través de la sensibilización hacia el medio ambiente y los elementos de la naturaleza. Para ello, el Planetario Alfa cuenta con un área exterior destinada como aviario, registrado como AVIARIO DEL CENTRO CULTURAL ALFA con la clave: INE/CITES-DGCERN-CR-IN-AV-0001-N.L./97. Cuenta con un terreno de 3,840 metros cuadrados formado principalmente por áreas verdes, andadores y un arroyo represado de agua proveniente de veneros de la Sierra Madre, la cual fluye continuamente todo el año. Las aves se encuentran en semilibertad, por lo que no se cuenta con jaulas dentro de las instalaciones físicas del aviario. Se ofrecen visitas guiadas para estudiantes de escuelas públicas y privadas y al público en general se le permite las visitas abiertas con supervisión de un encargado. Cada especie en exhibición cuenta con su cédula informativa, describiendo el nombre común, nombre científico, distribución, hábitat e información general. En la actualidad, se cuentan con 32 especies diferentes de aves, destacando entre ellos la familia de los anatidos (patos, gansos y cisnes). Se ha logrado con éxito la reproducción de las siguientes especies: Pato de Collar, (Anas platyrhynchos) Ganso Egipcio, (Alopochen aegyptiacus) Pavo Real, (Pavo cristatus) Pato Mandarín, (Aix galericulata) De las especies mencionadas, los patos de collar han sido sujetos de liberación en lugares protegidos de caza, con la supervisión y autorización de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) del Estado de Nuevo León. Esta especie anida en forma natural en el aviario y en la época de otoño, un buen número de estos se integran cada año a la ruta migratoria. Los excedentes de esta especie son los que se liberan

2 intencionalmente. Cada animal es anillado para su control y se provee en él de un número telefónico para que pueda ser reportado a nosotros el hallazgo de alguna ave criada en nuestro aviario. Hasta la fecha, se ha tenido un único reporte desde el municipio de Zaragoza, Nuevo León. La reproducción de las aves se realiza, en la mayoría de las especies, de forma natural. En caso de huevos abandonados se cuenta con una incubadora para tratar de rescatar los productos. Nacidos éstos, se integran con hembras con crías de similar edad. Existe el interés por parte de la PROFEPA en otorgar permiso al Planetario Alfa para ser custodios de aves provenientes de los decomisos que la dependencia realice. Gran parte de las aves que estarían en custodia son de la familia de los psitácidos (loros y guacamayas). Partiendo de la experiencia previa en la reproducción, rehabilitación y liberación del Pato de collar, el cual es posible observar más comunmente en diferentes presas y lagos de la región, se propone extender esta actividad a las aves en custodia para reintroducir en el Estado las aves que estén amenazadas o ya no estén presentes en forma silvestre. Este esfuerzo se concentrará inicialmente en la Guacamaya militar (Ara militaris) la cual habitó en el sur del Estado de Nuevo León y que por más de 50 años no ha sido vista en esta región. Justificación de la propuesta En el Estado de Nuevo León, la Guacamaya militar estuvo presente hasta mediados del siglo pasado y hoy en día hay personas que todavía recuerdan haber visto parejas o pequeños grupos en las zonas montañosas de los municipios de Zaragoza, Galeana, Iturbide y Linares. La desaparición de esta especie se debió probablemente a que fueron colectadas en exceso por la voraz demanda del comercio que existe de ésta especie. Sin embargo, el hábitat natural de estas aves aún se encuentra en condiciones biológicamente aceptables para considerar la reintroducción de esta especie en la región. Guacamaya militar (Ara militaris)

3 Siguiendo un programa específico para la rehabilitación de las capacidades de vuelo de las aves y entrenándolas en localizar su alimento en la naturaleza, es posible en el mediano y largo plazo lograr el objetivo planteado. Alcances En la etapa inicial del proyecto, se contará con la capacidad de trabajar con la Guacamaya militar. Se seleccionará una zona de liberación dentro del Estado de Nuevo León y se persistirá en ese lugar hasta que se logre una comunidad estable antes de elegir otra zona. Será un proceso lento, ya que se cuenta inicialmente con pocos pies de cría y es necesario juntar un grupo entre 15 a 20 individuos y que éstos tengan la madurez reproductiva para iniciar la liberación del primer grupo. Sin embargo, la gran mayoría de las aves de la familia de los psitácidos en todo México, están amenazados. Según el éxito que se logre con la reintroducción de la Guacamaya militar y a que en un futuro se amplié la capacidad del aviario para trabajar individualmente con otras especies, se considerará participar en otros proyectos de reproducción, rehabilitación y liberación. Descripción de la propuesta Se propone la ampliación del área actual del aviario, utilizando zonas de áreas verdes anexas, para albergar dos domos de 12 metros de diámetro recubiertos con malla metálica en los cuales residirán las aves en custodia. Habrá en su interior áreas verdes, perchas, flujo de agua continua y refugio para los animales. El público en general podrá introducirse en ellos y apreciar estas aves. Se contará con puertas de seguridad para evitar que las aves salgan accidentalmente del área. En la Figura 2 se aprecia un fotomontaje de los domos que serán utilizados. El primer domo estará destinado a diferentes tipos de loros de tamaño chico y mediano. El propósito del segundo domo es albergar únicamente Guacamayas militares. A diferencia del primero, en este domo existirá una malla metálica que protegerá al público de un contacto directo con estos animales, ya que pueden llegar a ser peligrosos por la gran fuerza que pueden ejercer con su pico y garras. Al igual que en el área actual del aviario, se contará con cédulas explicativas de cada especie y se hará énfasis en el proyecto de reintroducción de la Guacamaya militar y en general de la importancia de cuidar el medio ambiente.

4 Se considerará el siguiente plan de manejo para el cuidado de las aves en general: se realizan diariamente observaciones generales y particulares de los organismos. En caso de detectarse una anomalía en alguno, éste es capturado, desparasitado, revisado por el médico veterinario y es puesto en cuarentena hasta que se recupere satisfactoriamente. Se contará con jaulas de cuarentena y corrales para aislar los animales en estas condiciones. La reproducción de las aves se realiza en la mayoría de las especies de forma natural. En caso de huevos abandonados se cuenta con una incubadora para tratar de rescatar los productos. Las aves serán alimentadas con frutas frescas y concentrados comerciales especialmente formulados para iniciación, crecimiento, engorda o ponedora, dependiendo de la época del año. Se controla la presencia de depredadores mediante trampas mecánicas tipo jaulas. De los depredadores, los más comunes son tlacuaches y zorras, los cuales son liberados posteriormente. Fotomontaje de los nuevos domos del aviario del Planetario Alfa

5 Impacto potencial Está de más decir los beneficios para el medio ambiente que se lograrían con la reintroducción de esta especie en una zona donde desaparecieron por razones de la sobreexplotación humana. Es difícil garantizar el éxito del proyecto. Se contará con la infraestructura, disposición, recursos y conocimiento para poder lograr el objetivo planteado. El éxito de la reintroducción del Ara militaris en el Estado dependerá de la persistencia que se tenga en lograr el objetivo y a que no se afecte más el hábitat. De alcanzarse el objetivo, puede servir de estandarte y de ejemplo tangible a seguir por diferentes organizaciones y concienciación de la comunidad en la necesidad de preservar el entorno. Perspectivas / planes / proyecciones Utilizando la infraestructura propuesta y con el apoyo de la PROFEPA, el Planetario Alfa planea continuar con la labor de contribuir al medio ambiente recuperando la fauna que alguna vez existió en la región. Los esfuerzos se concentrarán principalmente en la reintroducción de la Guacamaya militar, por lo que se destinará uno de los dos domos para su uso exclusivo y se tendrá especial cuidado para favorecer la reproducción de esta especie. Se cuenta actualmente con tres parejas reproductoras, pero se estima obtener un mayor número por las incautaciones que regularmente realiza la PROFEPA del Estado. Partiendo del grupo actual y considerando que una pareja de Guacamayas militares en condiciones de cautiverio pueden procrear en promedio 4 crías por año y que estas alcanzan la madurez en 4 años, en un lapso de 5 a 6 años se puede contar con un grupo suficiente para realizar una liberación. El área tentativa del programa de liberación es en la ladera poniente de la Sierra Peña Nevada, ubicada en las cercanías del municipio de Zaragoza, Nuevo León. Esta zona es atractiva por las siguientes razones: Esta zona es donde se reportó por última vez esta ave en el Estado. Las condiciones del hábitat son todavía aceptables. En la actualidad se observan estas aves en el lado oriente de la sierra, perteneciente al estado de Tamaulipas.

6 Es necesario construir en el sitio de liberación una jaula de vuelo para la adaptación de las aves a su nuevo entorno. La jaula deberá contar con 60 metros de largo, 7 metros de altura y 7 metros de profundidad. Dentro de la jaula es necesario colocar perchas en los extremos de las jaulas para permitir el vuelo de las aves. El periodo de adaptación es de 2 meses, en los cuales las aves deben ser alimentadas con productos naturales del área, como lo son las bellotas y piñones. Transcurrido este tiempo, la mitad del grupo es liberado. Es necesario colocar un comedero en la parte superior externa de la jaula para que el grupo liberado pueda alimentarse mientras reconocen la zona y buscan las fuentes naturales de alimento. Hasta que se compruebe que pueden valerse por si mismas, el segundo grupo es liberado y se suspende la alimentación artificial. Es necesario contar con personal que se encargue de la supervisión de las aves durante este proceso de adaptación. El terreno necesario, la logística y los recursos humanos y económicos de esta etapa del proyecto están todavía en desarrollo y discusión con la PROFEPA.