1.- ORIENTACIONES NARRATIVAS

Transcripción

1 LA NARRATIVA ESPAÑOLA POSTERIOR A 1939 La novela española de posguerra arranca con la pérdida de numerosas referencias literarias, motivadas por diversas razones: la muerte de algunos escritores (Unamuno, Valle-Inclán...); el exilio de otros (Ramón J. Sender, Max Aub...); la censura y la imposibilidad de importar textos de autores extranjeros. 1.- ORIENTACIONES NARRATIVAS Después de la Guerra Civil, los narradores crearon una nueva tradición novelística que retomó los modelos de la narrativa realista de Galdós y Baroja. De este modo, se rompió con el vanguardismo y la experimentación iniciados antes de la guerra. Desde el punto de vista del contenido, en la novela de posguerra aparece una actitud de compromiso con la realidad. La censura fue una circunstancia omnipresente en la inmediata posguerra y en la década de los cincuenta, en la que se mantuvo una novela de contenido social y de crítica al régimen imperante. Hacia los años sesenta, el contenido dejó de ser fundamental y los autores empezaron a preocuparse más por la forma de narrar. La innovación técnica caracterizó la novela de esta década y de los inicios de los setenta. Este cambio es reflejo de una mayor apertura cultural que dio acceso a las aportaciones de la novela occidental del siglo XX. Las principales corrientes narrativas son: -Años cuarenta: Coexisten varias tendencias: la novela nacionalista, el realismo tradicional y el tremendismo o novela existencialista. También existe una tendencia humorística o fantástica. -Años cincuenta. La orientación predominante es la novela de compromiso social. -Años sesenta. Las innovaciones narrativas del siglo XX y la influencia de la novela hispanoamericana se dejan notar en la novela experimental. -Años setenta en adelante. La novela de esta época se caracteriza por la variedad de modelos y temas. 2.- LA NOVELA EN LOS AÑOS CUARENTA La novela de estos años se caracteriza por la presencia de la realidad como tema literario. Coexisten varias tendencias: 2.1 Novela nacionalista. La novela de los vencedores plasmó la visión ideológica de los falangistas. En estas novelas, el mundo se divide entre vencedores y vencidos. La familia y la religión proporcionaban al individuo el marco fundamental para su vida. Algunos autores de esta tendencia son: Felipe Ximénez de Sandoval, Rafael García Serrano Novela fantástica y humorística. La fantasía y el humor constituyeron recursos para rechazar una realidad que resultaba demasiado terrible. El representante más destacado de esta corriente es Wenceslao Fernández Flórez. 2.3 Realismo tradicional. 1

2 El realismo proporcionó algunas novelas en las que la vida de la burguesía es el tema fundamental. El argumento, muy extenso, se suele desarrollar en un largo período de tiempo con una amplia sucesión de hechos. Algunos autores de esta corriente son: Juan Antonio de Zunzunegui e Ignacio Agustí. 2.4 La novela existencial. Camilo José Cela. En 1942, Camilo José Cela inicia la corriente existencialista de la novela española con la publicación de La familia de Pascual Duarte. Esta tendencia, también llamada tremendismo, se caracteriza por los siguientes rasgos: -Los temas son: la incertidumbre del destino humano y la dificultad de comunicación personal. -La presencia de situaciones muy duras. El destino trágico del protagonista se resuelve en una violencia extrema y sin sentido. -Los personajes son seres marginados, violentos u oprimidos (criminales, prostitutas...) -Se mueven en un espacio limitado, estrecho o cerrado, la celda de una cárcel, la habitación de una casa, etc. -En la narración predomina la primera persona. -Se utiliza un lenguaje duro, reflejo de las circunstancias. Camilo José Cela. Nació en Iria Flavia, La Coruña, en 1916 y murió en Madrid en Fue miembro de la Real Academia Española; ha recibido importantes distinciones a los largo se su vida, entre las que destaca el premio Nobel de Literatura en Ha escrito poesía, cuentos e importantes libros de viajes como Viaje a la Alcarria, pero sus novelas integran lo mejor de su obra. Su producción narrativa puede dividirse en tres etapas: -Primera etapa (años cuarenta). Marcada por el reflejo existencial de la vida española de posguerra. Pertenecen a este período La familia de Pascual Duarte y Pabellón de reposo. -Segunda etapa (años cincuenta). Introduce el realismo social de carácter objetivista con La colmena. -Tercera etapa (a partir de los años sesenta). En ella se deja influir por la corriente experimental. Aporta innovaciones tipográficas (como falta de puntuación) y estructurales (desaparición de los capítulos, cambios de punto de vista...) Pertenecen a este período: Mrs.Caldwel habla con su hijo, San Camilo 1936, Oficio de tinieblas 5, Mazurca para dos muertos... La familia de Pascual Duarte. Esta novela relata la historia de un condenado a muerte. Su vida está llena de episodios terribles, como el asesinato de su propia madre. El autor retoma la tradición del realismo del siglo XIX y de la picaresca. De esta última recoge el modelo de la carta que explica una autobiografía. El relato en primera persona contribuye a que la narración cree la sensación de documento. Pascual Duarte, en una carta a don Juan Joaquín Barrera, explica por qué ha escrito su historia y le pide que sea el depositario de los manuscritos que constituyen el cuerpo del relato. Esta carta funciona como prólogo que justifica la existencia de la narración. La forma de memorias implica una visión temporal selectiva sobre los hechos vividos: el narrador escoge aquellos episodios que han dejado huella 2

3 en él. Pascual Duarte cuenta acontecimientos fundamentalmente negativos, ya que su objetivo es demostrar que él no es malo, sino que la vida lo ha llevado a cometer actos terribles. En la novela aparecen dos narradores: Pascual Duarte, que relata su vida en primera, y el transcriptor, que dice haber encontrado los manuscritos en una farmacia de Almendralejo. Además, intervienen un sacerdote, que cuenta los últimos instantes de Pascual Duarte, y un cabo de la Guardia Civil, que añade datos sobre la vida del protagonista en la cárcel. El autor cuenta los hechos y deja que el lector extraiga sus propias conclusiones; por eso, no critica los delitos de Pascual, a quien presenta más como víctima que como culpable. El autor utiliza un lenguaje duro y de gran carga dramática. La colmena. Con La colmena (1951), Cela marcó el camino por el que discurrían la novela de los años cincuenta. Esta obra presenta al hombre corriente en un ambiente cotidiano. La novela, cargada de pesimismo, refleja la vida del Madrid de 1942, con sus miserias económicas y morales. El argumento se reduce al mínimo y los personajes se mueven por dos constantes: el sexo y el hambre. En la obra aparecen casi trescientos personajes que representan a todas las clases sociales, aunque abundan los pertenecientes a la clase media empobrecida por la guerra. Todos ellos viven hundidos en el caos y el fracaso. La acción transcurre en poco más de dos días de un invierno de posguerra. El espacio se limita a Madrid y al café de doña Rosa, punto de encuentro de muchos personajes de la novela. La obra se estructura en seis capítulos y en un final. Los capítulos narran múltiples historias que describen una problemática colectiva. Se utiliza la técnica caleidoscópica, es decir, la acumulación de fragmentos narrados con puntos de vista diferentes, sin aparente conexión entre ellos. El final permanece abierto, ya que el lector no sabe cómo termina la peripecia vital de los personajes. La técnica narrativa predominante es el diálogo, que hace avanzar el relato y muestra las características individuales de los personajes: sus reacciones, actitudes y emociones. El narrador es un narrador omnisciente en tercera persona, que adopta la perspectiva de cámara cinematográfica: se limita a reflejar lo que hacen o dicen los personajes. En ocasiones, se inmiscuye en el relato y opina sobre la situación con el propósito de ironizar y deformar la realidad La novela del exilio. Los autores que tuvieron que abandonar España al finalizar la Guerra Civil continuaron su labor literaria en otros países. Cada uno de ellos evolucionó de manera personal, a veces adoptando características de la literatura de los países que los acogieron. Sin embargo, todos hablaron en sus obras de la experiencia de la guerra y la nostalgia de la patria. Loa autores del exilio son: Francisco Ayala, Max Aub, Arturo Barea, Rosa Chacel, Ramón J. Sender, Manuel Andújar, Mª Teresa León. 3.- LA NOVELA EN LOS AÑOS CINCUENTA 3

4 La novela de los cincuenta continuó la tradición del realismo de los cuarenta y nació bajo la influencia de La colmena y de la lectura de autores norteamericanos y franceses. En estos años de profundas trasformaciones sociales, la literatura debía cumplir la función de informar al lector de aquello que no aparecía en los medios de comunicación y sensibilizarlo. Aunque la censura seguirá vigente, los autores de los cincuenta intentaron reflejar en sus novelas la situación que vivían los españoles de la época. Los rasgos básicos de la novela de estos años son: 1. Los temas que predominan son la soledad del ser humano y las repercusiones de la Guerra Civil. 2. La estructura del relato es lineal y mantiene el orden temporal, sin saltos al pasado ni anticipaciones del porvenir. 3. Pretensión de que la figura del narrador se reduzca lo máximo. Emplea la tercera persona con perspectiva de cámara cinematográfica. 4. El tiempo y el espacio se inmovilizan: la acción es de corta duración y los lugares suelen ser únicos o cambiar poco. 5. Protagonistas individuales representantes de una clase social. 6. Predominio del diálogo. Los personajes quedan caracterizados por sus hechos, palabras y actitudes externas por lo que se evita bucear en su interior. 7. Emplean un lenguaje claro y sencillo que reproduce fielmente el habla común. Se dan dos corrientes: a) El realismo objetivista. El narrador muestra la realidad tal cual es, sin implicarse en ella. Los personajes se definen sólo por lo que ellos mismos hacen o dicen. Autores de esta corriente son: Ignacio Aldecoa, Carmen Martín Gaite, Ana Mª Matute, Jesús Fernández Santos y Rafael Sánchez Ferlosio. b) El realismo crítico. El autor participa en lo que está narrando y realiza una crítica que deja ver su ideología, generalmente de izquierdas. Los personajes representan casi siempre a las clases sociales más desfavorecidas. Los autores más representativos son: José Manuel Caballero Bonald, Alfonso Grosso, Juan García Hortelano, Juan Goytisolo, Juan Marsé... Autores: 3.1. Rafael Sánchez Ferlosio. (1927) Su novela El Jarama se convirtió en la obra de más repercusión del realismo objetivista. La obra relata la forma que tienen de aprovechar su tiempo libre unos personajes cuyas vidas durante la semana se centran en el trabajo. Los personajes aceptan lo que ocurre como inevitable y son incapaces de rebelarse contra un futuro que parece predeterminado. El tedio vital se ve interrumpido en la novela por la inesperada muerte de una de las chicas ahogada en el río. Antes de El Jarama había publicado Industrias y andanzas de Alfanhuí libro fantástico y maravilloso cuyo protagonista es un niño Ignacio Aldecoa. ( ) Su producción se compone de algunas novelas y numerosos cuentos. Con sus novelas: El fulgor y la sangre; Con el viento solano el autor pretendía realizar una pintura de los distintos sectores sociales: guardias civiles, 4

5 gitanos, pescadores... En los cuentos se observan la presencia de ciertas constantes, como los oficios, la emigración, la clase media, etc. De esta manera, la obra de Aldecoa constituye un testimonio de la España de posguerra Juan García Hortelano. ( ) Es autor de dos novelas de carácter objetivista: Nuevas amistades y Tormenta de verano. La primera describe la vida sin inquietudes de unos jóvenes universitarios y la segunda muestra la vida insípida de unos veraneantes burgueses Jesús Fernández Santos. ( ) En su primera novela Los bravos describe la vida difícil de un pequeño pueblo leonés donde reina el caciquismo, la incultura y la violencia. Cultivará el realismo objetivista en su obra La hoguera. Y sus novelas posteriores adoptarán direcciones distintas. En toda su obra narrativa destacan: un lenguaje sencillo, un desarrollo lento de la acción y la influencia de técnicas cinematográficas Carmen Martín Gaite. ( ) Obtuvo el Premio Nadal con su obra Entre visillos, retrato de la vida provinciana de unas jóvenes cuya única perspectiva es el matrimonio o la soltería. Sus novelas posteriores insisten en temas como la soledad, la incomunicación, los problemas de pareja: Retahílas, Caperucita en Manhattan José Manuel Caballero Bonald. (1926) Escribió novela social en Dos días de septiembre sobre el trabajo en los viñedos andaluces y los conflictos entre trabajadores, bodegueros y terratenientes. Sus novelas posteriores siguen el camino de la experimentación Alfonso Grosso. ( ) Es autor de numerosas novelas, muchas de ellas con una abierta intención social: La zanja, Un cielo difícilmente azul, etc. En todas ellas muestra una gran preocupación por el estilo. 4.- LA NOVELA EN LOS AÑOS SESENTA En los años sesenta se produce el agotamiento de la novela social. La publicación en 1962 de Tiempo de silencio, de Luis Martín Santos, inicia una nueva etapa en la narrativa española. Sin perder la capacidad crítica, se intenta renovar el género, mediante la experimentación. Se lee a autores europeos como Proust, Kafka, Joyce y también a autores norteamericanos: William Faulkner, Hemingway, etc. Además se produce el boom de la novela latinoamericana: Vargas Llosa, Cortázar, García Márquez. Todos ellos influirán en la narrativa española y se buscan nuevos rumbos al relato. Los rasgos principales de la novela de los sesenta son: 1. Desaparición del argumento. A veces la trama es una excusa para que el narrador introduzca digresiones (divagaciones) y opiniones diversas que rompen la coherencia del texto. Se mezclan textos distintos a la manera de un collage. 2. Presencia de personajes con problemas de identidad, que intentan encontrarse y buscar las razones de su angustia existencial. 3. Ruptura lineal del tiempo. Existe cierto desorden en la cronología, pues se producen constantes saltos del pasado al futuro. Es habitual la técnica 5

6 del flash-back (retroceso a un tiempo anterior). El espacio suele ser indefinido. 4. Dificultad estructural: el relato se organiza de forma compleja; se eliminan los capítulos y se sustituyen por secuencias, generalmente sin numeración y separadas por un espacio en blanco. Las novelas suelen ser de estructura abierta sin final determinado. 5. Perspectiva narrativa. Se manifiesta en el empleo flexible de las personas narrativas y en la inclusión de distintos puntos de vista sobre un mismo hecho. Se utilizan alternativamente la primera y tercera persona, y, con frecuencia, la segunda que convierte al narrador o al propio personaje en destinatario del relato. 6. El diálogo es poco habitual, se sustituye por el estilo indirecto libre y por el monólogo interior, que intenta reflejar el fluir libre y caótico del pensamiento de los personajes. Ello origina una falta de orden y lógica que se pone de manifiesto mediante una sintaxis desorganizada y la ausencia de signos de puntuación. 7. Renovación del lenguaje literario. Se introducen neologismos, extranjerismos, cultismos y coloquialismos. La frase se alarga, se elimina la puntuación y se mezclan diversos niveles de lengua. Autores: 4.1. Luis Martín Santos. ( ) Luis Martín Santos poseía una gran cultura humanística y científica. Conocía las corrientes filosóficas modernas como el existencialismo y el marxismo y las innovaciones narrativas de los grandes escritores europeos: Kafka, Joyce... Además de Tiempo de silencio, su producción narrativa abarca un libro póstumo de cuentos, Apólogos y una novela inconclusa, Tiempo de destrucción. Tiempo de silencio parte de un argumento tradicional, Pedro un médico becado para investigar sobre el cáncer en Madrid, entra en contacto con el mundo de las chabolas, con el propósito de conseguir ratones para su trabajo científico. En ese entorno, se ve implicado contra su voluntad en un aborto clandestino. Le detienen y, aunque consigue demostrar su inocencia, su vida quedará marcada a partir de entonces por circunstancias trágicas que le llevan a abandonar Madrid y hacerse médico rural. El argumento sirve para realizar una radiografía de los diferentes grupos sociales del Madrid de los años cuarenta: la alta burguesía, los intelectuales de clase media y los grupos marginales. Martín Santos utiliza el monólogo interior, un narrador omnisciente y la segunda persona. El lenguaje es culto y de elaboración literaria, con palabras coloquiales, tecnicismos médicos, neologismos, etc Miguel Delibes. (1920) Nació en Valladolid. Estudió Derecho y Comercio. Su labor literaria ha merecido numerosos premios, el Príncipe de Asturias, el Cervantes, etc. Delibes es un autor fundamental en la narrativa de los últimos cincuenta años. Su obra puede dividirse en tres etapas: -Primera etapa. (De 1947 a los primeros años sesenta) Constituida por obras de corte tradicional, centradas en el hombre y su entorno. La sombra del ciprés es alargada, El camino, Las ratas... 6

7 -Segunda etapa. (De 1966 a comienzos de los setenta) Se adscribe a la narrativa experimental. Cinco horas con Mario y Parábola de un náufrago. -Tercera etapa. (De comienzos de los setenta hasta la actualidad). Es una fusión de todos los elementos que componen su obra. El autor se sumerge en diferentes géneros narrativos, algunos títulos son: El príncipe destronado, Los santos inocentes. Miguel Delibes critica en sus obras la deshumanización de la vida moderna y la falta de valores éticos de una sociedad obsesionada por el progreso. Sus temas son: la separación entre el hombre moderno y la naturaleza, la hipocresía y la falta de solidaridad, la justicia social, la muerte... Delibes es un gran creador de personajes. Utiliza un lenguaje realista y sencillo que destaca por la adaptación del registro lingüístico de los personajes. Cinco horas con Mario constituye uno de sus mayores logros novelísticos. En esta obra, Carmen recuerda su vida anterior en una especie de diálogo / monólogo con su marido, Mario, que acaba de morir y al que está velando. Durante el relato, Carmen realiza constantes reproches que reflejan su pensamiento y que contrastan con el de Mario. El autor se sirve del monólogo de Carmen para criticar una España tradicional y atrasada. A Carmen, elemental, intolerante y clasista, se opone Mario, hombre culto y liberal. Ambos representan la incomprensión entre las dos Españas (la reaccionaria y la progresista.) La importancia de Cinco horas con Mario se encuentra en el tema y en el lenguaje utilizado en la obra, Delibes intenta reflejar la lengua coloquial con toda su riqueza e intensidad Gonzalo Torrente Ballester ( ) Su primera obra narrativa fue Javier Mariño dentro de la novela nacionalista, prosigue con una obra de temática hispanoamericana y con su obra Los gozos y las sombras recibirá el reconocimiento público de su labor literaria. En La saga /fuga de J.B utiliza el monólogo interior; otras obras suyas son: La isla de los jacintos cortados, Crónica del rey pasmado Juan Marsé. (1933) Sus primeras obras se inscriben en el realismo social como Encerrados en un solo juguete. Se incorpora a las nuevas corrientes renovadoras con Últimas tardes con Teresa, sátira de la burguesía progresista de esos años. En ella aparece un narrador omnisciente, monólogos interiores y la crítica social se hace desde una perspectiva humorística e irónica. Otras obras del autor: La oscura historia de la prima Montse, Si te dicen que caí, El amante bilingüe Juan Goytisolo. (1931) Las primeras novelas de Juan Goytisolo, Juegos de manos y Duelo en el paraíso, que se encuadran en el realismo social, presentan una constante búsqueda formal. Posteriormente sus obras se centran en el objetivismo y en ellas hace una crítica social de la burguesía. En Señas de identidad cuenta la historia de Álvaro Mendiola un exiliado que regresa a España en un intento de buscar sus raíces. 7

8 La obra se vuelca en el subjetivismo y en las renovaciones formales de la novela moderna. Se utiliza la segunda persona y la tercera; no hay linealidad temporal, hay narración, monólogo y diálogo. Otras novelas suyas son: Reivindicación del conde don Julián, Makbara LA NOVELA A PARTIR DE 1975 Con la muerte de Franco y la llegada de la democracia, la vida de nuestro país cambia sustancialmente. La novela española de la época prosigue su evolución sin que los acontecimientos políticos le influyan. Conviven en este período: autores de posguerra (Cela, Delibes...); novelistas de los sesenta, setenta y ochenta ( Juan Marsé, Juan Goytisolo...) y escritores de la última promoción. Características de la novela a partir de 1975: 1. Se vuelve al relato tradicional y se da importancia al argumento. 2. Complacencia en lo personal. No se realiza un análisis complejo del mundo, ni hay personajes de envergadura. 3. Influencia de los medios de comunicación y de la cultura de masas. 4. El estilo es realista y tradicional y se utiliza la frase corta. 5. Los espacios oscilan entre lo conocido y lo cosmopolita y exótico. 6. Tratan gran variedad de temas. Autores: 5.1. Eduardo Mendoza. (1943) Nació en Barcelona. Durante varios años vivió en Estados Unidos trabajando como traductor, hasta que, a mediados de los ochenta, pudo dedicarse plenamente a la literatura y regresó a su ciudad natal. Sus temas preferidos son: el poder, la obsesión por el progreso y el caos de un mundo extraño en el que todo puede suceder. La estructura de sus obras suele ser circular, ya que los personajes, generalmente de orígenes humildes y ansiosos por medrar, vuelven siempre al sitio de donde salieron. Eduardo Mendoza ubica sus obras en Barcelona y mezcla géneros narrativos como el histórico y el policíaco. Se dio a conocer con La verdad sobre el caso Savolta, libro que mezcla lo tradicional y lo experimental. Ha escrito otras novelas como: La ciudad de los prodigios, El misterio de la cripta embrujada, La isla inaudita... La verdad sobre el caso Savolta. Esta novela refleja de manera irónica el proceso en el que se ve envuelto Javier Miranda, el protagonista de la novela por el asesinato del industrial Savolta. La acción, situada en la Barcelona de , recrea los conflictos de una ciudad cercada por las protestas obreras y los atentados terroristas. La narración se sitúa en 1928, fecha en la que se inicia el juicio, aunque los hechos se han producido años atrás. La estructura de la obra es muy compleja, pues el autor utiliza tres puntos de vista: el del protagonista, Javier Miranda, que narra la historia en primera persona y desde un punto de vista subjetivo; el de un narrador omnisciente que cuenta los hechos en tercera persona; y la información que aportan los documentos que se utilizan como pruebas. De este modo existen varias versiones de los acontecimientos. 8

9 5.2. Manuel Vázquez Montalbán. ( ) Ha escrito numerosas novelas que van desde lo policíaco hasta la novela histórica. En todas sus obras muestra el autor sus sobresalientes dotes de narrador y una mirada crítica hacia la España de la época. Algunos títulos de sus novelas son: Los mares del sur, Asesinato en el Comité Central, El pianista Javier Marías (1951) Es probablemente el escritor español actual que ha alcanzado un mayor reconocimiento internacional. Algunas de sus obras son: Todas las almas, Mañana en la batalla piensa en mí, etc. En sus novelas se dan cita el vanguardismo de los sesenta, el gusto por contar historias de las décadas posteriores y el desarrollo de unos personajes de rica vida interior. Recurre habitualmente a la mezcla de narración y reflexión y a un narrador protagonista que relata los hechos en primera persona 5.4. Julio Llamazares. (1955) Sus relatos se caracterizan por una prosa poética que sirve de cauce expresivo de la soledad del hombre en la civilización moderna. Algunas de sus novelas son: Luna de lobos, La lluvia amarilla Antonio Muñoz Molina (1956) Es uno de los escritores actuales más conocidos. En sus obras la intriga y la hábil construcción del relato son dos componentes fundamentales. Se muestra deudor de la novela policíaca y de la novela y el cine negros. Características comunes de sus novelas son su preferencia por el relato en primera persona, el contraste de varias intrigas simultáneas, la estética realista... Algunos de sus títulos son: Beatus ille, El jinete polaco, Beltenebros, Plenilunio... Otros novelistas actuales son: Arturo Pérez Reverte, Lourdes Ortiz, Almudena Grandes, Juan Madrid... 9