Notas acerca de los resultados publicados del Censo de Población, 2005 y los cambios acaecidos con respecto al anterior (Censo de 1995).

Transcripción

1 Notas acerca de los resultados publicados del Censo de Población, 2005 y los cambios acaecidos con respecto al anterior (Censo de 1995). Algunas consideraciones previas La publicación de los datos (Cifras Oficiales, Censos Nacionales, 2005) se circunscribió a dar a conocer el volumen poblacional, y su distribución en el territorio (departamentos y municipios), con referencias adicionales con respecto a Vivienda y Hogar. Con la intención de facilitar la interpretación de los cuadros presentados, y que sean asequibles a un usuario promedio, se efectuaron comentarios simples, destacando lo más importante de su contenido, para ello se hizo uso de algunos indicadores. En esta oportunidad se retoman los resultados obtenidos presentados en las Cifras Oficiales y se procede a dar explicaciones de los mismos, comparando en algunos casos con los datos de los Censos Nacionales de i) Sobre la población censada El primer cuadro en esta presentación, corresponde al Cuadro 1 de la publicación, excluyendo la referencia al departamento de Managua; este cuadro al presentar las poblaciones obtenidas en los distintos censos permite historiar acerca de la evolución de la misma. Las cifras correspondientes a 1995 y 2005, reflejan el crecimiento poblacional en la década comprendida por los dos censos, un aumento de 785 mil personas.

2 Haciendo uso de las proyecciones de población vigentes actualmente 1 y comparando con los datos censales, se tienen los siguientes valores poblacionales: Población a Junio 2005 Censo: habitantes Proyección: habitantes La información censal pone en evidencia la necesidad de proceder a la revisión de las proyecciones de población actualmente vigentes. El censo y otras fuentes de información, en especial las Encuestas de Demografía y Salud (en este segundo semestre del 2006 el INEC, ejecutará la cuarta encuesta de este tipo), los registros de los hechos vitales del MINSA (nacimientos y defunciones), los registros de entradas y salidas de personas del territorio nacional, aportados por la Dirección de Migración y Extranjería del Ministerio de Gobernación, entre otros, permiten corroborar si los indicadores utilizados como insumos en la proyección, relativos a la fecundidad, mortalidad y saldos migratorios internacionales, desde el censo de 1995 al 2005, se comportaron como estaba previsto o tienen diferencias con los resultados del censo y las demás fuentes de información. El INEC se abocará a la brevedad a la revisión de las estimaciones y proyecciones de población, sin embargo, previo a esta tarea se debe proceder a evaluar la cobertura de la estadística censal. Aunque por definición el censo es universal, se debe contar a toda la población, sin embargo por distintas razones, los censos acusan en mayor o menor medida, cierto grado de omisión, o de falta de cobertura de la población, como se muestra en el cuadro presentado, con referencias a la omisión censal en distintos países de la región. Omisiones censales en países de la región País Década Costa Rica n/d 2.9 El Salvador 4.4 n/d Guatemala México Nicaragua 3.5 n/d Panamá República Dominicana 6.3 n/d Venezuela Fuente: CELADE - División de Población de la CEPAl, evaluaciones indirectas. Revisión INEC - NICARAGUA. Estimaciones y Proyecciones de Población Nacional. Período Managua, Octubre 2004.

3 Contando con una nueva versión de las estimaciones y proyecciones de población, se tendrá una población para el 2005, inferior al dato que tienen las proyecciones actuales y superior al dato censal, dado que este presenta cierta omisión, o sea un valor poblacional intermedio a los presentados anteriormente, como se puede ver en el gráfico (línea de trazos), donde se hace la comparación entre los datos de población provenientes de la proyección vigente actualmente y los datos aportados por los censos desde 1950 a la fecha. Comparación de estimaciones y proyecciones de población vigentes actualmente, con los censos nacionales. ii) Sobre las tasas de crecimiento intercensales En el primer cuadro, junto a los datos de población, se tiene los diferentes crecimientos experimentados por la población, a partir de las tasas de crecimiento intercensales; allí se evidencia el aumento de las tasas a partir de los primeros censos, y el descenso de importancia que presenta la última tasa (período ), con respecto a la anterior ( ), la tasa se redujo a la mitad, evidenciando un crecimiento más lento de la población en la década Anteriormente se indicó que los censos no tienen una cobertura total de la población, y que presentan omisiones de mayor o menor importancia, con respecto a los censos realizados a partir de 1950, el censo de 1971 es el que tuvo la mayor omisión (superior al 10 por ciento), eso se pone de manifiesto en el gráfico anterior, donde se muestra la evolución de la población de acuerdo con la versión actual de las estimaciones y proyecciones de población, se observa que el valor correspondiente a 1971 es el más alejado de la trayectoria que presentan los datos de la proyección. Todas las

4 estimaciones de la población se encuentran por encima de los valores censales, justamente corrigiendo estos valores por la omisión que afecta a esta estadística. Al tener el censo de 1971 la omisión mayor, la tasa de crecimiento (2.5%), es menor a la real, y la correspondiente al período (3.5%), resulta más elevada. Con los datos estimados para 1970 y 1995 ( y habitantes, respectivamente), se obtiene una tasa de crecimiento para el período de 2.8%, bastante menor al 3.5%. Por otro lado, las mismas estimaciones y proyecciones de población, tienen tasas de crecimiento para y de 2% en cada quinquenio, valores no tan alejados a la tasa intercensal del período : 1.7%. Tasas de Crecimiento (por cien) Intercensales Proyecciones de Población Periodo Tasa Quinquenio Tasa / / / / Sin embargo aunque se evidencia un crecimiento poblacional menor en el último periodo intercensal, la población nicaragüense presenta todavía un crecimiento importante, por ejemplo, si se mantuviera constante la tasa de crecimiento de 1.7%, la población se duplicaría en poco más de 40 años, un crecimiento elevado, que está por encima aún, del promedio de América Latina (1.5%). Además haciendo uso de la ENDESA-2001, se estiman unos 140 mil nacimientos anuales o poco más, y de acuerdo con las proyecciones de población se tiene algo menos de 30 mil defunciones anuales, es decir hay casi 5 nacimientos por cada defunción, un crecimiento natural anual superior a las 100 mil personas, pero dado que el país presenta un saldo migratorio negativo, el crecimiento total anual, resulta inferior a este crecimiento natural. iii) Cambios en la estructura por edades de la población

5 Sin embargo el descenso en las tasas de crecimiento, que trae aparejado un crecimiento de la población nicaragüense más lento, impacta también a la estructura por edades de la población. Esto queda reflejado en las pirámides poblacionales graficadas: en 1971 se tiene una población extremadamente joven, conserva esa característica en 1995, pero se observa un ligero engrosamiento de la pirámide en edades intermedias, para el 2005 es claro el cambio, viendo la reducción de la base; los sobrevivientes de la población menor de 5 años en 1995, tienen años en el 2005 y esta población presenta más efectivos que la de años y esta a su vez, es mayor que los menores de 5 años. Para visualizar este cambio en la estructura de la población por edades, es conveniente considerar tres grandes grupos de edades: los menores de 15 años, la población de y los de 65 años y más. A continuación se presentan los porcentajes de estos grupos de edad, a partir de los últimos censos, con el adicional de la encuesta sociodemográfica (ESDENIC-85) y de las encuestas de demografía y salud (ENDESA-98 y ENDESA-2001), se vislumbra que la disminución en el peso de los menores de 15 años comenzó hace unos 20 años o algo más, y que ese proceso se ha acelerado en la década Con estos porcentajes, se obtiene un indicador demográfico que sintetiza los cambios en la estructura de la población por edades, en un solo valor: la Razón o Relación de

6 Dependencia de la Edad (RDE), que vincula a la población teóricamente dependiente (menores de 15 años, a los que se suman las personas de 65 años y más, con respecto a la población en edades activas, años; este cociente se multiplica por 100 y expresa cuántas personas dependientes hay por cada 100 en edades activas). El cuadro siguientes muestra el comportamiento de la Relación de Dependencia de la Edad (RDE), mientras que en 1971 y 1985 hay más población en edades dependientes que en edades activas (RDE > 100), en las demás fuentes de información hay un descenso claro de esta relación hasta el 2005, en que se tiene poco más de 70 personas dependientes, por cada 100 en edades activas. Esta circunstancia, descenso de la RDE, se puede considerar, como algo positivo, se habla del bono demográfico, es decir disminución del peso de los menores de 15 años, aumento claro del porcentaje de personas en años y lento aumento del peso de las personas de 65 años y más; esta coyuntura demográfica favorable, seguiría operando en las próximas dos o tres décadas, a partir de las cuales aumentaría en forma significativa el peso de las personas adultas mayores. Las pirámides y las estructuras poblacionales por grandes grupos de edades, son demostrativas de que la población del país ha comenzado a transitar por un proceso de envejecimiento que, dependiendo de la evolución de la natalidad, puede ser más o menos intenso, pero que ya tiene clara presencia. iv) Descenso de los niveles de la fecundidad Los cambios en la estructura de la población por edades, proceso descrito en el punto anterior, tienen relación estrecha con el descenso de la fecundidad, este descenso queda demostrado considerando las fuentes presentadas anteriormente, a las cuales se agrega la primera investigación en Nicaragua, de las mujeres en edades reproductivas (15-49 años), se trata de la Encuesta sobre Salud Familiar 92/93. Se hace uso de una medida

7 precisa de la fecundidad: la Tasa Global de Fecundidad (TGF), o sea el número medio de hijos por mujer. Este indicador presenta el siguiente comportamiento: Fuente de Datos TGF % de mujeres de años que hacen uso de métodos anticonceptivos Censo de ESDENIC Censo de Salud Familiar 92/ ENDESA ENDESA Censo De los 7 hijos en promedio de los 70, se pasó a poco más de 3 después del 2000, un descenso de más del 50% en poco más de 30 años. Las encuestas de salud familiar y de demografía y salud, dirigidas a las mujeres de años permiten obtener medidas muy precisas acerca de la fecundidad, también acerca del uso de métodos anticonceptivos, entre otros indicadores. Se observa que entre 1992/93 y 1998 en unos 5 años, el promedio de hijos por mujer descendió en un hijo, y entre 1998 y 2001, casi medio hijo adicional; este descenso de los niveles de la fecundidad está asociado a su vez, a un aumento importante en el uso de métodos anticonceptivos por parte de las mujeres de años, se pasó de algo menos del 50% a casi el 70%, 20 puntos porcentuales de aumento, en menos de una década. Hay otros elementos que explican estos comportamientos en las Encuestas de Demografía y Salud, por ejemplo en el número ideal de hijos por parte de las mujeres, es clara la preferencia por 3; además un 99% de las mujeres (ENDESA-2001), dice conocer de métodos anticonceptivos, aún un 97% de las mujeres sin educación conocen de métodos. v) Comportamiento de la fecundidad por edades de las mujeres Finalmente en la presentación se muestra un gráfico con las tasas de fecundidad por edades (15-19, hasta años), según la ENDESA 2001 y el Censo 2005, se observa que no hay grandes diferencias entre los conjuntos de tasas provenientes de estas fuentes de datos; esto es importante porque pone de manifiesto la calidad de los datos censales, comparando con una encuesta específica para investigar aspectos de la reproducción humana.

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