1er. INFORME DE ACTIVIDAD DE CÁRITAS ESPAÑOLA ANTE LA EMERGENCIA DE LOS CICLONES «GUSTAV» E «IKE» EN CUBA Madrid, 10 de octubre de 2008 1. INTRODUCCIÓN En un lapso de una semana la Isla de Cuba sufrió a principios de septiembre el paso de dos huracanes de gran intensidad, cuyos efectos han causado profundos daños en todo el país. El huracán Gustav, después de dejar Jamaica, atravesó el Estrecho de Colón y siguió su trayectoria al sur de la isla, provocando lluvias fuertes y localmente intensas desde Ciego de Ávila, así como inundaciones costeras en -1-
las zonas bajas de la costa sur desde Cienfuegos hasta Pinar del Río. Al mismo tiempo ganaba en intensidad, hasta alcanzar la categoría 4 en la escala Saffir-Simpson con vientos máximos sostenidos de 230 Km/h. Penetró en la Isla de la Juventud en la tarde del 30 de agosto. Sumado a la fuerza del viento, se produjeron fuertes lluvias, que provocaron el desbordamiento del río Las Casas y la inundación de las viviendas de las zonas ribereñeas hasta casi la altura del techo. El viento originó olas de más de 4 metros de altura en la costa sur de la isla y arrasó casi la totalidad de las cubiertas ligeras del sector residencial y estatal. La combinación de los vientos, inundaciones por lluvias y las penetraciones del mar provocaron un efecto devastador. El huracán Ike tocó Punta Lucrecia, en la provincia de Holguín, en el noreste de Cuba, el 8 de septiembre, con vientos sostenidos de 200 kilómetros por hora. Desde su acercamiento a Cuba provocó abundantes y fuertes lluvias y severas penetraciones del mar en la costa norte de Guantánamo, con un importante saldo de destrucción en la ciudad de Baracoa y sus alrededores. Las provincias de Holguín y Las Tunas recibieron los embates del huracán categoría 4 con fuertes vientos, abundantes lluvias y penetraciones del mar, que ocasionaron innumerables daños en viviendas y edificios públicos, así como en los servicios eléctricos, de agua y de comunicaciones. Quedaron aisladas muchas localidades debido a la interrupción de las carreteras por árboles y postes del tendido eléctrico y telefónico así como por inundaciones provocadas por el desbordamiento de ríos, lagunas, arroyos y cañadas. El huracán Ike atravesó la provincia de Camagüey de norte a sur, provocando también fuertes penetraciones del mar en la costa norte. Una importante zona de la ciudad quedó inundada por el desbordamiento de los ríos Tinima y Hatibonico. Luego Ike siguió su trayecto muy próximo a la costa sur en dirección a Isla de la Juventud, causando estragos por sus fuertes vientos y abundantes lluvias. Aunque ya con categoría 2, este huracán tuvo un radio de acción mucho más amplio que Gustav y lluvias más abundantes, con una velocidad de traslación mucho menor. Su centro volvió a tocar tierra cubana por el municipio pinareño de Los Palacios y salió a la costa norte por el municipio de La Palma para adentrarse en el Golfo de México, como también lo había hecho unos días antes el Gustav, lo que acentuó los profundos daños ya causados por éste en la Isla de la Juventud y Pinar del Río, donde la población tuvo que abandonar las acciones de recuperación que habían comenzado a poner en marcha y volver a la alarma ciclónica. En todo el país se evacuaron 2 millones de personas. Más del 50 por ciento de los desplazados fueron acogidos en casas de familiares y vecinos, y en su mayoría no han podido regresar a sus hogares, ya sea porque los hyan perdido tras los huracanes, porque están destruidos parcialmente o porque aún están incomunicados. Hay localidades afectadas en todo el país. En la tabla adjunta se señalan las más afectadas. -2-
Diócesis Localidades mas afectadas Guantánamo Holguín (abarca las provincias de Holguín y Las Tunas) Camagüey La Habana Pinar del Río Total diócesis afectadas: 5 de 11 Ciudad de Baracoa y sus alrededores Banes, Antilla, Velazco, Freire, Gibara, Puerto Padre, Ciudad de Holguín Nuevitas, Sierra de Cubita, Guaímaro, Céspedes, Sibanicú, Vertientes, Ciudad de Camagüey Municipio especial Isla de la Juventud San Cristóbal, Los Palacios, La Palma, Bahia Honda, Candelaria, Consolación, Viñales. Total: 24 municipios con daños graves 2. SITUACIÓN Aunque los huracanes Gustav e Ike afectaron la totalidad del territorio nacional y por tanto las 11 diócesis, el plan de emergencia y reconstrucción puesto a punto por Cáritas Cubana abarca las localidades más dañadas de las diócesis de Holguín, Camagüey, Pinar del Río, La Habana (Isla de la Juventud) y Guantánamo (Baracoa). Cáritas Cubana está tratando de llegar al mayor número de familias posible a través de varias modalidades de intervención, con el apoyo de Cáritas hermanas y otras instancias solidarias. La magnitud del desastre no tiene precedentes en Cuba. Si se tiene en cuenta que han quedado seriamente dañadas un total de 444.000 viviendas, la mayoría con pérdidas parciales o totales de techumbre, se puede estimar que han quedado afectadas unos 2 millones de personas. De estos damnificados se estima que unos 200.000 han perdido sus hogares, dado que 63.249 viviendas sufrieron derrumbe total. Los daños en la agricultura han sido gravísimos, lo que ha creado una situación de seria amenaza a la seguridad alimentaria de la isla. Asimismo, los importantes daños en las infraestructuras han contribuido a generar situaciones de insalubridad que aumentan el riesgo de epidemias. El plan de intervención de Cáritas Cuba está pensado para unas 5.000 familias, lo que representa aproximadamente 25.000 damnificados en situación especialmente vulnerable. -3-
3. PRIMERA RESPUESTA Inmediatamente después de la emergencia, Cáritas Cuba demandó el apoyo de Cáritas Internationalis para coordinar la acción conjunta de solidaridad de todas las Cáritas donantes. Con ese objetivo se lanzó el 25 de septiembre un llamamiento especial de ayuda para definir el marco de respuesta de la red internacional de Cáritas a la emergencia en Cuba. El plan de respuesta se ha dirigido de forma prioritaria, hasta el momento, a paliar las necesidades básicas de miles de familias damnificadas en la zona nororiental de la isla y en la región más occidental. Isla de la Juventud y Pinar del Río, que fueron golpeadas por ambos huracanes. La labor de respuesta a la emergencia se ha centrado en la distribución de alimentos y artículos de higiene personal, así como de materiales de construcción para la reparación de los tejados de las viviendas dañadas: Los lotes distribuidos están dotados de los siguientes artículos: - Alimentos: arroz, frijoles y azúcar, además de lotes de enseres de cocina para 5.000 familias. - Higiene personal: Toallas, implementos dentales, toallas femeninas, jabones, baldes y cloro para 2.500 familias. - Material de construcción: planchas de zinc galvanizado con sus correspondientes herrajes para 350 familias (cada vivienda necesita entre 12 y 15 planchas). 4. ÚLTIMA HORA DE LA INTERVENCIÓN Hasta la fecha, Cáritas Cubana ha entregado a los damnificados la siguiente ayuda de emergencia: - Lotes de alimentos, material de higiene y ropa, adquiridos en el mercado minorista y donados por particulares a través de colectas en todas las diócesis de Cuba. - Apoyo financiero a familias de muy bajos ingresos para adquirir materiales de construcción facilitados por el Estado. Las diócesis menos afectadas han prestado apoyo logístico y material a las más afectadas, lo que ha permitido canalizar ayuda de emergencia directamente a miles de familias damnificadas. - Entrada de ayuda alimentaria desde Estados Unidos, gracias al trabajo coordinado de las Hijas de la Caridad, la Cáritas Diocesana de Miami (Catholic Charities) y la Cáritas Norteamericana (CRS). Hasta el momento se han transportado hasta las diócesis afectadas 12 contenedores de ayuda. - Se ha puesto en marcha un plan de reconstrucción de viviendas conjuntamente con los organismos gubernamentales, comenzando por la diócesis de Holguín (Holguín y Las Tunas), donde se pretende llegar a unas 600 familias. De igual forma se procederá en breve en Pinar del Río. -4-
- Asimismo, se han adquirido en el mercado minorista diversas partidas de colchones, sábanas y toallas, para su entrega directa a las familias damnificadas. Cáritas Cuba está gestionando actualmente la importación de 2.400 colchones para su entrega directa a damnificados en la Isla de la Juventud y Pinar del Río, dentro de un plan coordinado con los gobiernos locales de esas localidades. 5. RESPUESTA DE CÁRITAS ESPAÑOLA Cáritas Española brindó su apoyó financiero y técnico desde el primer momento a Cáritas Cubana. Hasta la fecha se han transferido 100.000 euros destinados a la compra y distribución del material de primera necesidad. Las once diócesis católicas de Cuba realizan una intensa labor social que desde hace algunos años cuenta con el apoyo de Cáritas Española. Destaca un programa de ayuda a 6.746 ancianos con escasos recursos, a los que la Iglesia cubana ayuda con comedores, residencias, servicios de lavandería y talleres ocupacionales. Esta y otras actividades refuerzan los servicios públicos sociales del Gobierno cubano. Con la emergencia, todos estos centros han servido para atender no solo a los ancianos sino a muchos otros afectados por los huracanes. Al mismo tiempo, y con el nombre de Cáritas con el Caribe, Cáritas Española abrió en los primeros días de la emergencia una campaña de solidaridad para canalizar las aportaciones de los donantes españoles hacia los programas de ayuda de Cáritas Cuba a favor de los damnificados. -5-