Bioseguridad Integral, S.L info@biosintel.com www.biosintel.com Biokker y la Sanidad
Tecnología y funcionamiento del Sistema Biokker Biokker es un sistema de purificación de aire interior, que se emplea para eliminar todo compuesto y partícula orgánica, viva o inerte, presente en el aire de un recinto de cualquier edificio. El sistema de purificación empleado por Biokker está fundamentado en un avanzado proceso de fotocatálisis oxidativa encuadrado en las llamadas AOTs (Advanced Oxidation Technologies) con capacidad para eliminar contaminantes en la fase gaseosa mediante energía UV o energía solar. En Biokker toda la actividad tiene lugar en la cámara de reacción que se encuentra precintada en el interior del equipo. El aire que deseamos tratar en un recinto cerrado es forzado a pasar a través del fotocatalizador del Biokker, donde es foto-oxidado completamente hasta quedar CO 2 y H 2 O. El mecanismo de acción del catalizador interno del sistema Biokker está diseñado para eliminar cualquier material orgánico disuelto en el aire que atraviesa la cámara de Fotocatálisis: desde compuestos orgánicos volátiles (COVs), hasta células procariotas provistas de paredes celulares alcanzando así a todos de microorganismos presentes en el aire: virus, mohos y levaduras, bacterias, hongos y sus productos (micotoxinas, alérgenos ). Además esta tecnología encuentra otra aplicación importante en la eliminación de compuestos tóxicos causantes de malos olores que generalmente contienen N o S (sulfuro de hidrógeno, formaldehido, mercaptanos ).
La nueva generación de la tecnología de oxidación foto-catalítica Mejora la calidad del aire en interiores Bajo consumo energético No genera ozono Tecnología única y verde Requiere un solo mantenimiento anual No genera subproductos nocivos La activación es fotónica y puede realizarse mediante lámparas de baja potencia Los únicos compuestos químicos que requiere son TiO 2, Zr O 2 y el O 2 presentes en el aire Elimina los COVs, (Compuestos Orgánicos Volátiles) No cambia de fase el contaminante, lo elimina Opera a temperatura ambiente y presión atmosférica Tiene alto poder oxidativo y baja selectividad, lo que le permite degradar multitud de compuestos y mezclas No es un filtro: no recoge ni almacena patógenos o alérgenos, los destruye Tecnología de fácil adaptación a condiciones operativas variables, dentro del rango adecuado para el tratamiento foto-catalítico
Biokker y la Sanidad Los patógenos de transmisión aérea contagiosos para los humanos representan partículas menores a un micrón, más difíciles de eliminar y constituyen el 99% del número total de partículas del aire. Estas partículas tienen una gran capacidad de penetrar profundamente en los pulmones durante la respiración (0,001 µm en los rinovirus causantes de resfriados; 0,02 µm Togavirus, Rubeola; 0,063 µm Influenza aviar; 0,1 Neumonía respiratoria; 0,22 Varicela; 0,23 Bordetella, Tos ferina; 0,25 por Chlamydia Neumonia, bronquitis; 0,3 Meningitis por Haemophilus Influenza; 0,43 Legionella ; 0,8 Mycobacterium Tuberculosis; 0,86 Streptococcus, etc). contaminación cruzada, tuberculosis, legionella, el resfriado común y otras enfermedades respiratorias contagiosas Como ya es sabido, la mayoría de los microorganismos implicados en la transmisión de enfermedades nosocomiales por vía aérea requieren una cierta proximidad entre fuente y receptor. Pero existen otros muchos, tales como los patógenos de la tuberculosis y la difteria, los virus de la gripe o las esporas bacterianas y fúngicas, que presentan una mayor resistencia o tienden a vehiculizarse por el polvo, alcanzando así grandes distancias de transmisión. En los hospitales es importante tener en cuenta que hay una alta población de pacientes inmuno-comprometidos. Estos pacientes susceptibles a la infección incluyen los pacientes con SIDA, geriátricos, pacientes recién nacidos, pacientes con cirugía reciente (especialmente en receptores de trasplante de órganos), pacientes de radioterapia y quimioterapia, diabéticos, así como los enfermos crónicos y otros cuyo sistema inmune está suprimido o bajo estrés. Para estas personas, incluso niveles bajos de esporas de patógenos pueden ser potencialmente fatales.
Biokker en el ámbito Hospitalario Las zonas hospitalarias de alto riesgo de micosis oportunista de origen ambiental se presenta en quirófanos con cirugía cardíaca y vascular, neurocirugía, trasplante de órganos y cirugías con implantes, en las unidades de aislamiento protector, de trasplante de médula ósea, de trasplante de órganos y salas de curas. En determinadas zonas como son los laboratorios de reproducción humana, zona quirúrgica especial tipo II y quirófanos tipo I, aunque tengan tres niveles de filtración, se hace imprescindible mantener un ambiente controlado de especies microbiológicas y de compuestos orgánicos volátiles (COVs), lo que a veces se hace complicado ya que estos compuestos aparecen en el aire de recirculación procedente de los laboratorios y de otras zonas productoras, logrando atravesar cualquier tipo de filtro. La mejor medida preventiva ante la contaminación ambiental es evitar la presencia de contaminantes en el aire, disminuir esa concentración de contaminantes hasta unos niveles de aceptabilidad y controlar dichos niveles.
Biokker y los Alérgenos La manifestación clínica de la acción de los alérgenos sobre la salud humana es la que se produce a nivel pulmonar, bien por la disminución del flujo aéreo, característica del asma, bien por reacciones de hipersensibilidad del parénquima pulmonar, causa de la neumonitis. El asma se caracteriza por una obstrucción difusa, intermitente y reversible de las vías aéreas causada por la inhalación de partículas o compuestos volátiles procedentes de diversas fuentes del ambiente, incluyendo el hogar y los diversos procesos industriales. Todas las sustancias con capacidad de generar asma tienen propiedades irritantes o alérgicas. Otras manifestaciones por inhalación de alérgenos y otras sustancias químicas son las neumonitis, bisinosis y la fiebre del humo de los polímeros. Biokker en Clínicas Dentales El uso común de eugenol, reveladores de rayos-x, productos de esterilización y diversos gases que contienen Compuestos Orgánicos Volátiles (COVs) crean una atmósfera contaminada y pesada en las consultas, así como el carácterístico olor a dentista. Los odontólogos están familiarizados con los típicos y molestos síntomas relacionados con su práctica profesional: escozor, picor y enrojecimiento de los ojos, dolor de garganta, irritación de mucosas, alergias, etc.
Biokker en Laboratorios En los laboratorios es práctica común y necesaria trabajar con compuestos volátiles tóxicos. Biokker destruye el xileno y el formaldehido al descomponerlos en moléculas inocuas. Al instalar Biokker Ud. provee a su laboratorio o área de producción de aire limpio y de un ambiente seguro, lo cual está comprobado, reduce notablemente el absentismo laboral por enfermedad. Los filtros de carbón dentro de las campanas sólo atrapan una cierta cantidad de xileno y otros productos químicos, pero una vez saturados sus filtros, los compuestos volátiles tóxicos presentes en el aire fluyen libremente a su través y retornan al ambiente interior. Biokker se hace imprescindible para garantizar un correcto ambiente en los laboratorios de embriología, de cultivos celulares y de anatomía patológica y sin introducir ningún elemento químico al tratarse de un tratamiento puramente físico. La actuación del sistema de foto-catálisis Biokker no interfiere en el desarrollo normal de las actividades laborales, ni genera subproductos de ningún tipo, a la vez que produce un ambiente más limpio y saneado.
Biokker en Guarderías, Colegios y otros Centros Académicos Uno de cada cuatro niños tiene asma o alergias. La exposición a alérgenos y otros contaminantes del aire interior es un tema muy importante por los potenciales riesgos que encierra, especialmente en los niños que pasan un tercio de su tiempo en las escuelas. La calidad del aire interior en colegios y guarderías es la causa fundamental del absentismo infantil y las consecuencias sociales y económicas que esto conlleva son muy elevadas. Tanto la salud de los niños como el propio rendimiento académico se ven interferidos por una calidad del aire inadecuada. La propia experiencia nos muestra que un ambiente interior mal gestionado no sólo deteriora el confort sino que, con el paso del tiempo, termina generando problemas de salud tanto en alumnos como en profesores. El ambiente interior de estos recintos es propicio para la incubación y contaminación cruzada de todo tipo de virus y bacterias porque básicamente, presentan una baja tasa de ventilación, así como calor y humedad generados por la transpiración y potenciados por la propia aglomeración de personas. La preocupación por la calidad del aire interior en estos centros debería ser mayor, no sólo porque nuestros hijos pasan allí una buena parte de su tiempo, además del hecho generalizado de ser las guarderías recintos relativamente pequeños con una alta concentración de niños, sino por otra serie de razones que deben de ser tenidas en cuenta: Los niños respiran más que un adulto; en peso, un 50% más, debido a su elevado metabolismo. Su sistema inmune no está maduro. Si bien es cierto que necesitan entrenarlo, eso no significa que sea bueno sobrecargar su capacidad de respuesta al contacto con los microorganismos. Con estas premisas es fácil comprender que se haya cuantificado la contaminación interior en guarderías hasta en cinco veces superior al exterior, llegándose en determinadas actividades hasta 100 veces mayor.
Biokker en Oficinas Pasamos entre el 80 y el 90% de nuestro tiempo en el interior de los edificios. Calidad de aire interior es un término que se utiliza para definir la calidad del aire existente dentro los mismos. La sociedad ya es conocedora de los riesgos de la contaminación del aire, sin embargo, todavía no es plenamente consciente de que la calidad del aire en el interior de los edificios puede ser hasta 90 veces más tóxica que en la calle. Las nuevas tecnologías en la construcción, con mejoras en el aislamiento térmico y en los sistemas de ventilación y climatización de los edificios en los países industrializados han supuesto un gran avance en las condiciones térmico-higrométricas, de confort acústico y de iluminación para el personal que los ocupa. Sin embargo, la propia hermeticidad de estos edificios inteligentes ha sido la causa de la aparición de nuevos problemas que han contribuido a crear una serie de síntomas asociados al denominado Síndrome del Edificio Enfermo (S.E.E). El S.E.E fue reconocido como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) en 1982, comprendiendo los edificios en los que un porcentaje del más del 20% de personas experimenta efectos agudos sobre la salud y el bienestar. Contaminantes ambientales detectados en edificios de oficinas: Olores, contaminación biológica, limpieza de conductos, partículas en suspensión, polen, alérgenos, polvo y fibras, moquetas, monóxido de carbono, dióxido de carbono, óxido de nitrógeno, formaldehido, tolueno, ozono, compuestos orgánicos volátiles (COVs) y un largo etc. Biokker elimina, mediante el mismo proceso foto-catalítico, todos los compuestos orgánicos volátiles presentes hasta su descomposición total, sin producir subproductos de ningún tipo por lo que su uso es inocuo para la salud, al contrario que otros sistemas del mercado
Biokker, el Deporte y el Bienestar En una instalación deportiva es muy importante mantener un ambiente libre de olores y gérmenes. Entre los olores generados en este tipo de instalaciones se encuentran, entre otros, los compuestos nitrogenados que pasan al aire y proceden del sudor (urea, amoníaco y ácido láctico). A su vez, se generan decenas de compuestos orgánicos volátiles que tienen su origen en la proliferación de bacterias, levaduras y hongos de la piel a expensas del sudor y la hiperventilación, especialmente los compuestos sulfúricos volátiles (sulfuro de hidrógeno, mercaptano de metilo, sulfuro de metilo) y otras sustancias químicas, aminas biógenas y derivados (putrescina, diaminas fétidas, etc), hasta 400 compuestos volátiles detectados en boca y expelidos durante la respiración causados fundamentalmente por las aproximadamente 300 especies de bacterias que tapizan las mucosas de la boca, a las que hay que añadir otra sustancias que se generan en condiciones patológicas o como consecuencia del ayuno (acetona, cuerpos cetónicos). Estos ambientes cargados causan no sólo malestar respiratorio sino también numerosas enfermedades como la gripe, neumonía, faringitis, meningitis, varicela, tuberculosis, etc. como consecuencia de un aire viciado, caliente y húmedo que incuba un amplio abanico de virus, bacterias y mohos. La descontaminación de estos ambientes interiores viene de la mano del sistema Biokker, que reduce eficazmente el riesgo de contagios y de contaminaciones cruzadas además de eliminar los compuestos orgánicos volátiles descritos (COVs) y por ende, los olores. Biokker no solo elimina del aire interior las sustancias orgánicas aerotransportadas, sino que contribuye al ahorro energético reduciendo las necesidades de renovación del aire interior viciado.
La tecnología que aporta eficientemente y de forma inmediata los siguientes beneficios Control de infecciones (nosocomiales) Reducción de moho Eliminación de compuestos orgánicos volátiles Protección contra bio-agentes aéreos Reducción de malos olores Reducción de contaminación cruzada, tuberculosis, legionella, el resfriado común y otras enfermedades respiratorias contagiosas Eliminación de alérgenos, virus y bacterias APLICACIONES Hospitales, Centros de Salud, Quirófanos, Clínicas, Salas de Espera, Consultas Médicas y Dentales Farmacias, Laboratorios e Industrias Farmacéuticas y Cosméticas Centros Veterinarios, Residencias de Mayores, Hogares Guarderías, Colegios, Centros Deportivos y del Bienestar Edificios de Oficinas, Centros de Ocio
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