Pascua 2014 AMBIENTACIÓN Hoy sentimos el gozo de ser discípulos de Jesús, sentimos la alegría inmensa de vivir una vida apoyada y transformada por la presencia viva de Jesús. Hoy sentimos que el egoísmo, el dolor y la muerte no tienen la última palabra de nuestra existencia. La última palabra es la vida de Jesús en nosotros, el hombre nuevo que continuamente nace y crece, abriéndonos a la esperanza, a la fraternidad, a una vida plena y verdadera. CRISTO VIVE, HA RESUCITADO! ALÉGRATE! No tengas miedo, cree. Confía humildemente en Él Sé testigo de tu fe y de tu amor entrañable a Jesús. Vívelo y anúnciale a todos el secreto de tu vida: CRISTO HA RESUCITADO EN NUESTRA VIDA. LECTURA Por la mañana, Mª Magdalena y algunas mujeres fueron al sepulcro y estaba abierto. Los guardias que vigilaban se habían quedado dormidos. Las mujeres quedaron muy sorprendidas al ver que el cuerpo de Jesús no estaba. Un ángel eles dijo: Buscáis a Jesús? No está aquí; ha resucitado. Id y contadlo a sus discípulos. NARRACIÓN Compararemos esta narración con la alegría que sentimos cuando tenemos alguna sorpresa y como rápidamente vamos a contársela a los demás. Para ello leeremos el texto de El baúl de la Alegría. Esta tarde estábamos aburridos y un poco tristes porque nuestra amiga Andrea se ha ido. Mamá nos ha propuesto ordenar el cobertizo. Cuantos trastos! No sabíamos por donde empezar. Ven, Gerardo, mira lo que he descubierto! Mi hermana ha encontrado un enorme baúl. Está lleno de disfraces y juguetes. Oh, qué maravilla! Qué guai! Hay muchísimos disfraces! Niños, ha salido el sol- dice mamá al entrar en el cobertizo. Veo que estáis muy contentos. Hemos descubierto un baúl lleno de sorpresas y queremos enseñárselo a nuestros amigos del parque. Mi hermana y yo hemos ido a todo correr a buscar a nuestros amigos. Oye Gerardo, te doy las gracias por haber compartido este tesoro conmigo- me ha dicho mi amiga Ana mientras nos esforzábamos los dos por abrocharle el disfraz a Dani. Qué alegría! Podemos hablar sobre las buenas noticias que nos gusta dar a los demás. COMPARTE TU ALEGRÍA. Forramos una caja con papel de regalo y dentro de ella estarán los frutos del Espíritu Santo que Dios nos va a regalar: ALEGRÍA, AMABILIDAD, PACIENCIA, BONDAD, AMOR, TOLERANCIA, FE, MANSEDUMBRE, HUMILDAD Y DOMINIO PROPIO (GAL 5,22) Se les presenta la caja, generando expectativas de asombro, maravilla, ilusión...por descubrir qué hay dentro de ella. Comentamos que a Jesús Resucitado podemos reconocerlo a través de estos y otros signos cuando logramos llevarlos a nuestra realidad.
Cada uno elegirá un signo con el cual quiera comprometerse para pedirlo en oración y concretarlo en la vida. De forma personal cada uno elegirá su compromiso. ORACIÓN COMÚN: Por los que se encuentran solos, por los que te necesitan, por los que piensan que no te necesitan: Roguemos al Señor. Te rogamos, óyenos. Por los que sufren en su corazón, por los que pasan inadvertidos, por los que esperan palabras amigas y nunca las reciben, por los que no se sienten acogidos entre nosotros: Roguemos al Señor. Te rogamos, óyenos. Por los que viven desorientados en la vida, por los que ya están decepcionados, por los que no se dejan guiar por nadie: Roguemos al Señor. Te rogamos, óyenos. Por los que no tienen amigos, por los que viven en una familia que parece un infierno, por los que invitan a otros a ir por mal camino: Roguemos al Señor. Te rogamos, óyenos. PASCUA ES... Pascua es ser capaz de cambiar, es compartir la vida con esperanza, es luchar para vencer toda suerte de sufrimiento. Pascua es decir sí al amor y a la vida, es invertir en la fraternidad, es luchar por un mundo mejor, es vivir con solidaridad. Pascua es ayudar a más gente a ser gente, es vivir en constante liberación, es creer en que la vida vence a la muerte. Pascua es renacimiento, es recomienzo, es una nueva oportunidad para mejorar las cosas que no nos gustan de nosotros. Para ser más felices por conocernos a nosotros mismos un poquito más y ver que hoy podemos ser mejores de lo que fuimos ayer. MONICIÓN FINAL. CRISTO HA RESUCITADO! Y resucita cada vez que alguien lo vive. Cristo no sólo vence a la muerte, sino también a la desesperanza, a la falta de ilusiones, al desengaño, a la desconfianza, Cristo ha resucitado una vez más, un día más, porque el amor no le puede nada ni nadie. Gritad de esquina en esquina que Cristo está vivo, que su mensaje es la mejor receta para ser feliz. Alegraos conmigo que hoy le he visto resucitar, en el niño que encontró un hogar, en la cara de los que me quieren, en la mano que me prestó ayuda, en el grupo donde compartí. Un Cristo sin rencor, que perdona a los que le hemos ido clavando en la cruz y nos llama amigos. Le veo resucitar cada vez que alguien da amor, da su mano a quien la necesita. Cristo vive hoy, y grita que hay mucho que cambiar. Hermanos: CRISTO VIVE! AHORA NOS TOCA A NOSOTROS VIVIRLO.