Fórum Europa Tribuna Catalunya Barcelona (España), 24 de marzo de 2014 El turismo en la nueva «Nueva Economía» Secretario General de la OMT, Taleb Rifai Muchas gracias Teniente de Alcalde Señor Joaquim Forn, por su amable introducción. Muchas gracias a la organización, es un placer estar en Barcelona. Señoras y señores, queridos amigos, Muchas gracias a todos por su asistencia. Señoras y señores: El nuevo año nos saludó con noticias muy alentadoras para el sector turístico. A pesar de los retos que afrontaba aún la economía mundial, y que afectaban especialmente a Europa, a pesar de los cambios geopolíticos, y superando las iniciativas iniciales de la OMT, el turismo internacional registró en 2013 un sorprendente crecimiento del 5%. Con 52 millones más de turistas viajando por el mundo, el número total de turistas internacionales se elevó en 2013 a la impactante cifra de 1.087 millones. Eso significa que más de mil millones de
personas visitaron otro país, por motivos de trabajo o de ocio, en 2013. Es más, gran parte del crecimiento turístico del pasado año obedece a los buenos resultados de Europa, una región en la que las llegadas de turistas internacionales se incrementaron en un sólido 5%. En los países de la Europa Meridional, como España, el turismo ha ido creciendo constantemente con los años, a pesar de las limitaciones económicas de la eurozona. Y todo apunta a que el turismo internacional mantendrá su pujanza: la OMT prevé que el número de turistas internacionales crecerá entre un 4% y un 4,5% en 2014 y seguirá creciendo hasta alcanzar los 1.800 millones en 2030. De hecho, el turismo se ha convertido en uno de los sectores económicos de más rápido crecimiento de nuestros tiempos, un sector que impulsa el crecimiento y el desarrollo a escala mundial, que crea millones de puestos de trabajo, que incentiva las exportaciones y las inversiones y que transforma la vida de las personas. Hoy, estoy aquí para argumentar que, a pesar de los difíciles tiempos en que nos encontramos, hay fuerzas que trabajan a nuestro favor y que, si las aprovechamos adecuadamente, pueden transformar este panorama mundial y configurar un mundo mejor. Y entre estas fuerzas se encuentran los viajes y el turismo. 2
Señoras y señores: Nuestro mundo se ha transformado radicalmente en las últimas décadas. Es un lugar común decir que vivimos en un mundo globalizado, una red compleja, interconectada e interdependiente a través de la cual fluyen con mayor rapidez que nunca los bienes, el capital, las ideas, la información y ahora también las personas. Este proceso de globalización tiene detrás diversas fuerzas que no son simplemente el efecto de un mundo más globalizado, sino sus propios impulsores. Primera: la tecnología de la información y las telecomunicaciones. La revolución de las tecnologías de la información nos ha permitido comunicarnos y procesar la información en formato digital y en tiempo real, algo que nunca antes había sido posible, transformando, simplemente, nuestras vidas. Segunda: las tendencias migratorias. La «era de los desplazamientos» ha sido testigo de los desplazamientos de millones de personas en sus propios países y allende fronteras en búsqueda de una oportunidad. El mundo se urbaniza con rapidez y más de la mitad de la población mundial vive hoy en áreas metropolitanas. Para el año 2030, este número ascenderá a casi 5.000 millones. 3
Sin embargo, hay otra poderosa «megatendencia» de la globalización en juego que a menudo pasa desapercibida, a pesar de que implica a miles de millones de personas y que, si se interrumpe, hace que nuestro mundo se frene de golpe: los viajes y el turismo. Señoras y señores: Al igual que la tecnología y la movilidad, el turismo es un motor importante de nuestro nuevo modelo socioeconómico. En 1950, hubo 25 millones de turistas internacionales. En 2012, alcanzamos la cota histórica de los mil millones: mil millones de turistas internacionales que viajaron por el mundo en un solo año. Y otros 5.000 millones más aproximadamente viajan cada año dentro de sus propios países. Nunca antes tantas personas habían viajado a tantos lugares. Son pocos los lugares del planeta que han escapado a la curiosidad de los viajeros y muy pocos son hoy inalcanzables. Estos turistas generan más 1,3 billones de dólares de los EE.UU. en exportaciones para los países que visitan, cerca del 6% de las exportaciones mundiales de bienes y servicios y el 30% de las exportaciones si hablamos de servicios nada más. En términos mundiales, uno de cada 11 puestos de trabajo está relacionado con el sector turístico. 4
Son grandes cifras, pero mucho más importante es la incidencia del turismo en la vida real. El turismo significa empleo, oportunidades de negocio para pequeñas y medianas empresas, la renovación de áreas urbanas y rurales y, si se gestiona debidamente, la conservación y la promoción del patrimonio natural y cultural de un país. Y algo que es esencial, el turismo significa reducir la pobreza. Una de las tendencias más importantes del desarrollo del turismo internacional de la última década ha sido el crecimiento de los destinos de las economías emergentes. Hoy en día, casi la mitad de los mil millones de llegadas de turistas internacionales se registra en economías emergentes o en desarrollo, donde crean y mantienen puestos de trabajo e ingresos para quienes más lo necesitan. Y la OMT prevé que las economías emergentes crecerán a un ritmo doblemente superior al de las economías avanzadas en los próximos 20 años (el 4,4% frente al 2,2%). A este ritmo, las economías emergentes para 2030 recibirán más de mil millones de llegadas. El turismo es, por lo tanto, un pilar fundamental del progreso socioeconómico actual y futuro tanto de las economías desarrolladas, como de las emergentes, como de aquellas que están en desarrollo. 5
En este contexto, les pido hoy que se pregunten conmigo qué puede hacer esta fuerza mundial, el turismo, para ayudarnos a navegar por los desafíos actuales. Permítanme hacer hincapié en cinco razones clave por las que el turismo ha de ser un pilar estratégico de cualquier futuro económico verdaderamente sostenible. 1. El turismo crea empleo con mayor rapidez que otros muchos sectores. Todos sabemos que el turismo es uno de los sectores que más mano de obra emplean, pero además es uno de los que crea puestos de trabajo a un ritmo comparativamente superior. Los datos demuestran que en la Unión Europea, en la última década, el ritmo de crecimiento anual del empleo en el sector turístico ha sido casi siempre superior al ritmo de crecimiento del empleo total. Además, el turismo crea riqueza y puestos de trabajo no solo en el turismo, sino también en otros sectores. En una época en la que muchas economías afrontan una contracción del consumo interno, el turismo internacional no solo aporta ingresos directos por exportación, sino que tiene también un efecto indirecto significativo a lo largo de su extensa cadena de valor. Cuando llegan a sus destinos, los turistas utilizan autobuses o taxis, prueban la gastronomía y los vinos de la tierra, compran productos locales que mantienen el empleo y duermen en hoteles que compran sábanas y toallas a las fábricas del país. 6
2. El turismo es uno de los sectores económicos más resistentes. Si hay una cualidad que es crítica para afrontar los retos actuales, es la resistencia: la flexibilidad y la capacidad para adaptarse a condiciones cambiantes y para recuperarse de los contratiempos. Sin duda, si volvemos la vista a las últimas décadas, observamos que el turismo internacional decreció únicamente en tres ocasiones: en 2001 (-0,4%), después del 11 de septiembre, en 2003 (-1,6%) debido al síndrome respiratorio agudo severo, y en 2009 (-3,8%) en medio de una de las peores crisis económicas mundiales de nuestro tiempo. Pero lo más importante es que la demanda de turismo internacional ha salido reforzada cada vez con ritmos de crecimiento muy superiores a la media. Si el turismo es importante en tiempos de bonanza, durante una crisis es vital. 3. El turismo reduce la pobreza y contribuye al desarrollo: El turismo representa el 45% de las exportaciones de los países en desarrollo y es a menudo uno de los sectores en los que los países en desarrollo gozan de una ventaja competitiva debido a sus abundantes recursos naturales. En este sentido, el turismo es una herramienta cada vez más importante y eficaz de la ayuda al desarrollo y en la OMT trabajamos sin descanso para cerciorarnos de que el sector reciba la prioridad que merece en la agenda del desarrollo. 7
4. El turismo es uno de los principales elementos que pueden contribuir a una economía sostenible desde el punto de vista medioambiental. Un informe reciente de las Naciones Unidas señaló que el turismo era uno de los once sectores vitales para «reverdecer» la economía mundial. Con una inversión adecuada, el turismo puede ser un agente de cambio primordial de la economía verde, ya que promueve el crecimiento económico y la creación de empleo, a la vez que mejora la eficiencia en el uso de los recursos, minimiza la degradación del medio ambiente y contribuye a la sensibilización ambiental de los viajeros. Y este es un aspecto competitivo clave para numerosos destinos. Quisiera aprovechar esta oportunidad para reconocer el compromiso de Barcelona con los principios de la sostenibilidad. El posicionamiento de Barcelona como ciudad verde beneficia a sus ciudadanos y beneficia a sus visitantes. 5. El turismo puede contribuir a la paz y al entendimiento entre las naciones. Citando a un periodista español: «viajar nos hace mejores personas». El turismo reúne a personas de todo origen y condición y tiene un inmenso potencial para la prevención de conflictos y la resolución de crisis. Al mismo tiempo, puede ser esencial para llevar de nuevo a los países a la economía internacional después de un conflicto y garantizar así su estabilidad y su prosperidad. 8
Un mayor reconocimiento político es condición básica para aprovechar el potencial del turismo de estimular el crecimiento Dado que las cifras del turismo no cesan de aumentar, con su consiguiente repercusión en el empleo, el comercio y el desarrollo, el turismo está obteniendo un reconocimiento cada vez mayor a nivel nacional e internacional. Este reconocimiento se observa crecientemente en la escena internacional, donde el turismo gana protagonismo en la agenda internacional del desarrollo. Los líderes mundiales, reunidos en dos grandes cumbres en 2012, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20) y la Cumbre del G20, convinieron en que el turismo puede tener un papel importante en muchos de los más apremiantes retos mundiales. En la Conferencia de Río+20, la importante conferencia mundial decenal sobre desarrollo sostenible, los líderes mundiales afirmaron que el turismo «puede hacer una contribución importante a las tres dimensiones del desarrollo sostenible, tiene vínculos estrechos con otros sectores y puede crear empleo decente y generar oportunidades comerciales». En el mismo mes, las principales potencias económicas mundiales se reunieron en México en la Cumbre del G20 para trazar el camino de la recuperación mundial. En su declaración final, estos líderes 9
reconocieron, por primera vez en los trece años de historia del G20, «el papel de los viajes y el turismo como instrumento para la generación de empleos, el crecimiento y el desarrollo económicos». El turismo está recibiendo poco a poco el reconocimiento que merece por parte de quienes trazan el camino hacia una recuperación sostenida y justa y está convirtiéndose en una política transversal. Señoras y señores, El término «nueva economía» fue acuñado, como ustedes saben, en la década de 1990, para describir la evolución desde la economía basada en las manufacturas a la economía basada en los servicios. Hoy, vivimos en una nueva versión de la «nueva economía» en la que está aflorando una nueva oleada de servicios y actividades humanas que no encaja ya en la definición común de la economía basada en los servicios. El turismo, la cultura, el deporte, las actividades creativas y la tecnología. Esos son los servicios de la nueva «nueva economía» y serán algunos de los más dinámicos y más significativos desde el punto de vista económico de esta década. Así ocurre especialmente en economías como la de España, en la que el turismo contribuye significativamente a su PIB, a su empleo y a sus exportaciones. Una contribución que no se limita al sector, 10
sino que se multiplica, y eso es aún más importante, a través de la cadena de valor, en otros muchos sectores, desde el comercio minorista hasta la agricultura, desde la banca hasta la construcción. Señoras y señores, A pesar de su inmensa expansión, sigue habiendo naturalmente obstáculos para el crecimiento sostenido del turismo. Unos procedimientos complicados para la tramitación de los visados obstaculizan aún los viajes de millones de personas, los aumentos de los impuestos al turismo son demasiado frecuentes y las actuales circunstancias financieras limitan aún la capacidad de inversión tanto del sector público como del privado. Sin embargo, estos obstáculos en modo alguno disminuyen el poder extraordinario del turismo para transformar el actual escenario económico si los responsables públicos lo convierten en un pilar estratégico y se adoptan las políticas transversales necesarias. Con más de mil millones de personas viajando por el mundo cada año, 5.000 millones de turistas internos y cientos de millones de personas trabajando en el sector, no podemos hablar de un nuevo modelo de desarrollo, cualquiera que sea la forma que este adopte, sin hablar del turismo. Muchas gracias. 11