ACUERDO # 120 LA HONORABLE QUINCUAGÉSIMA OCTAVA DEL ESTADO LIBRE Y SOBERANO DE. RESULTANDO ÚNICO.- Que en la Sesión del Pleno del día 22 de Junio de dos mil seis, los Ciudadanos Diputados HUMBERTO CRUZ ARTEAGA, SAMUEL HERRERA CHÁVEZ, AÍDA ALICIA LUGO DÁVILA, JOSÉ LUIS ORTIZ MARTÍNEZ, SARA GUADALUPE BUERBA SAURI, JOSÉ CHÁVEZ SÁNCHEZ, GERARDO OLIVA BARRÓN, MARTHA ANGÉLICA ZAMUDIO MACIAS, JESÚS PADILLA ESTRADA, RUTH ARACELI RÍOS MONCADA, PEDRO GOYTIA ROBLES, MARTINA RODRÍGUEZ GARCÍA, MANUEL DE JESÚS DE LA CRUZ RAMÍREZ, VÍCTOR CARLOS ARMAS ZAGOYA, JUAN CARLOS LOZANO MARTÍNEZ, HILARIO TORRES JUÁREZ, VICENTE MÁRQUEZ SÁNCHEZ, CARLOS ALVARADO CAMPA, JOSÉ MARTÍN REYES SÁNCHEZ, ROMÁN CABRAL BAÑUELOS, ADÁN GONZÁLEZ ACOSTA, CONSTANTINO CASTAÑEDA MUÑOZ, LIDIA VÁZQUEZ LUJAN, JUAN FRANCISCO AMBRIZ VALDEZ y OCTAVIO MONREAL MARTÍNEZ, en ejercicio de las facultades que les confieren los artículos 24 y 25 del
Reglamento General, sometieron a la consideración del Pleno una Iniciativa de Punto de Acuerdo, dirigido a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, para que solicite a Auditoría Superior de la Federación, audite el manejo de los recursos públicos provenientes del excedente de la venta de recursos petroleros. CONSIDERANDO Los recursos de la nación pertenecen a todos los mexicanos, ya sea los que recaudan a través de impuestos o los excedentes de la venta del petróleo, y como tales, deben destinarse a obras que beneficien a la población; sin embargo, cuando estos recursos se administran a través de fideicomisos, no hay seguridad de que realmente se apliquen en beneficio de la sociedad. La razón es simple e indignante: la Secretaría de Hacienda y Crédito Público que maneja estos fideicomisos, no quiere informar en qué gasta el dinero que nos pertenece como nación. Sin embargo, los fideicomisos en que participan las dependencias del gobierno son públicos, por tanto, sujetos de la Ley de Fiscalización Superior, de la que se desprende que cualquier ente que recaude, administre, maneje o ejerza recursos públicos, será sujeto de fiscalización, pues se financian de los impuestos de los ciudadanos y, es el caso de los excedentes de la venta del petróleo. Es decir, los mexicanos le damos nuestro
dinero al gobierno para que éste lo administre y lo aplique en obras que necesita nuestro país. Un principio elemental en un estado democrático y de derecho, es que las dependencias del gobierno informen a la población de manera puntual, el destino de los recursos que administran, sin embargo, contra toda lógica han aplicado el secreto fiduciario para no rendir cuentas, como si fuera dinero de las dependencias y no de los mexicanos. El secreto es conveniente entre intereses privados, más no cuando se refiere a los recursos que pertenecen a un país entero pues provienen de la explotación de sus recursos petroleros. En ese sentido, el precio del petróleo es un pronóstico en los presupuestos de gasto de la federación; no se sabe si el precio va a ser más alto o más bajo que las estimaciones que fija el Congreso y, en este caso, en el año que cursa el precio del petróleo ha subido mucho más de lo programado. Se estima que del año 2001 a mayo del 2005, han entrado 153 mil 298 millones de pesos por los excedentes, una ganancia enorme que no estaba contemplada. Esta suma es tan importante que equivale a casi 5 veces el presupuesto de la Secretaría de Salud; con estos recursos, se podrían construir 153 hospitales generales de primer nivel. Así es que, sin duda, los excedentes petroleros representan una muy buena noticia pero no se sabe para quién, porque estos recursos van a parar a una especie de hoyo negro que maneja la Secretaría de Hacienda, y que reparte sin claridad ni transparencia. Además, ni siquiera Pemex se beneficia de los excedentes del petróleo, porque prácticamente todo su
ingreso bruto se lo entrega a Hacienda como si fuera un contribuyente cautivo y se queda sin recursos para perforar nuevos pozos, encontrar nuevas reservas o dar mantenimiento a sus instalaciones para crecer y consolidar áreas estratégicas. Sin rendición de cuentas, el fideicomiso de los excedentes petroleros es como una partida secreta; es decir, recursos que nadie sabe dónde andan ni para qué se usan. La partida secreta evolucionó, no desapareció, está en todos los rubros donde hay discrecionalidad. Así, un pequeño grupo trata a los mexicanos, que son los dueños de los recursos, como menores de edad a quienes se les oculta cuánto tienen y en qué se invierten sus recursos. Esta secrecía despierta desconfianza y provoca la reacción de la gente, como el no querer pagar impuestos, entre otros métodos de rebelación y evasión fiscal. Situación que levanta una gran suspicacia en tiempos electorales, como los actuales, recordemos la millonaria aportación del sindicato de PEMEX a un candidato presidencia en la contienda del 2000. Con la entrada en vigor de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, que prevé a que a partir del próximo año se establezcan reglas claras sobre el uso de los recursos excedentes, hará posible que los mexicanos tengamos certeza de la aplicación de los recursos públicos. Sin embargo, la amplia brecha temporal que existe desde ahora hasta entonces, es susceptible a que en la aplicación de recursos provenientes de los excedentes del petróleo, no se observe una estricta disciplina financiera.
Por lo anteriormente expuesto y con fundamento además en los artículos 86 y 89 y relativos del Reglamento General del Poder Legislativo del Estado, es de Acordarse y se Acuerda: ÚNICO.- Se solicita a la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión, que a través del Órgano Superior de Fiscalización de la Federación se auditen los recursos públicos provenientes de los excedentes de la venta de petróleo, a fin de evitar el desequilibrio presupuestal y una supuesta incorrecta aplicación de los mismos con motivo del proceso de renovación del Poder Ejecutivo Federal. Dado en la Sala de Sesiones de la Quincuagésima Octava Legislatura del Estado, a los veintidós días del mes de Junio del año dos mil seis. PRESIDENTE DIP. PEDRO GOYTIA ROBLES SECRETARIA SECRETARIA DIP. LIDIA VÁZQUEZ LUJÁN DIP. SONIA DE LA TORRE BARRIENTOS