La monarquía autoritaria: los Reyes Católicos 1. La Europa del siglo XV 2. La monarquía de los Reyes Católicos 3. La articulación de la nueva monarquía 4. La organización económica y social 5. Humanismo y Renacimiento en España 6. Escultura y pintura renacentistas en España
Introducción En el siglo XV, se inició una recuperación económica que permitió un aumento de la población. Los intercambios comerciales favorecieron el desarrollo de la producción artesanal y la circulación de la moneda. Todo ello configuró el capitalismo comercial. Los monarcas se beneficiaron del ascenso económico de la burguesía y se impusieron sobre la nobleza. La monarquía feudal dio paso a la autoritaria. En la Península Ibérica, los Reyes Católicos originaron el Estado moderno en los reinos hispánicos.
1. La Europa del siglo XV 1.1. El crecimiento demográfico y económico 1.2. El ascenso de la burguesía 1.3. El fortalecimiento de la monarquía
1.1. El crecimiento demográfico y económico La desaparición de las grandes epidemias del siglo XIV y la recuperación de los campos y los cultivos permitieron un crecimiento continuo de la población. Una mayor demanda impulsó el aumento de la producción agrícola. Paralelamente, las rutas marítimas volvieron a retomar su actividad. El desarrollo del comercio llevó a un aumento de la producción artesana y el crecimiento de las ciudades que eran centros comerciales o puertos importantes.
1.2. El ascenso de la burguesía La consecuencia del crecimiento del comercio y de las actividades manufactureras fue la acumulación de grandes beneficios en manos de la burguesía. El poder económico de la burguesía se basaba en la posesión de capital, que invertía en actividades productivas. De esta manera se inició el capitalismo comercial.
1.3. El fortalecimiento de la monarquía La monarquía medieval tenía limitado su poder por el de la nobleza y el de los burgueses de las ciudades. Durante el siglo XV, en diversos países europeos, los reyes se propusieron imponer su autoridad sobre todos sus súbditos. Se consolidó un nuevo modelo de organización del poder: la monarquía autoritaria.
2. La monarquía de los Reyes Católicos 2.1. La unión de Castilla y Aragón 2.2. La expansión territorial La expansión territorial de la monarquía (mapa) 2.3. La política exterior
2.1. La unión de Castilla y Aragón En 1469 se produjo la unión matrimonial entre el príncipe Fernando de Aragón y la princesa Isabel, hermana de Enrique IV, rey de Castilla. Fernando se convirtió en 1479 en rey de la Corona de Aragón. Ese año, Isabel se impuso como reina de Castilla. La unión de los territorios castellano y aragonés no comportó su unificación en un único reino, sino que fue sólo una unión dinástica. En sus relaciones con los otros Estados, los Reyes Católicos actuaron siempre conjuntamente en nombre de sus dos reinos.
2.2. La expansión territorial Los Reyes Católicos quisieron unir el resto de los territorios peninsulares bajo su corona y para eso llevaron a cabo la siguiente política de expansión territorial: Conquistaron el reino nazarí de Granada, último reducto musulmán en la Península. El reino de Navarra fue invadido por un ejército castellano. En 1515 quedó incorporado a Castilla pero conservando sus leyes e instituciones. Los Reyes Católicos desarrollaron una política de enlaces matrimoniales con Portugal.
La expansión territorial de la monarquía
2.3. La política exterior Los Reyes Católicos también desarrollaron un importante papel en la política europea y orientaron su política internacional en dos direcciones: La primera fue la conquista del reino de Nápoles. Así se pretendía frenar las ambiciones expansionistas francesas. También se ocuparon plazas del Norte de África para frenar a los berberiscos. La segunda se orientaba hacia el Atlántico y sentó las bases del futuro Imperio castellano. La expansión atlántica se inició con la consolidación de su soberanía sobre las islas Canarias.
3. La articulación de la nueva monarquía 3.1. La consolidación del poder real 3.2. La monarquía autoritaria en Castilla 3.3. La uniformidad religiosa
3.1. La consolidación del poder real El reinado de los Reyes Católicos (1479-1516) significó la imposición del nuevo modelo de monarquía autoritaria, sobre todo en Castilla. Fernando e Isabel se propusieron imponer en sus Estados la autoridad del rey por encima de cualquier otro poder. En la Corona de Aragón, las instituciones medievales siguieron vigentes, pero se instituyó la figura del virrey, representante del monarca en cada uno de los territorios de la Corona. En Castilla la monarquía consiguió, realmente, imponer su poder y llevar a cabo una profunda reforma de las instituciones.
3.2. La monarquía autoritaria en Castilla Cuando Isabel subió al trono de Castilla, en el reino existía una situación de anarquía y desorden. Para poner fin a esta situación, se creó la Santa Hermandad (1476), un cuerpo armado encargado de perseguir a malhechores y criminales. Las Cortes mantuvieron su carácter consultivo. Se crearon un sistema de Consejos, formados por juristas escogidos y pagados por el rey. También se creó un ejército profesional y permanente. Se creó la Real Audiencia y se instituyó la Contaduría Real de Hacienda.
3.3. La uniformidad religiosa La uniformidad religiosa se convirtió también en un objetivo de la nueva monarquía de los Reyes Católicos. Se instó a los judíos a convertirse, y los que no lo hicieron fueron perseguidos y expulsados de España en 1492. Tras la conquista de Granada, se garantizó a los musulmanes el mantenimiento de su religión y de sus costumbres. Pero a partir de 1499, el cardenal Cisneros puso fin a la tolerancia e impulsó bautismos obligatorios, lo que dio lugar a la aparición de los moriscos (musulmanes bautizados). Para controlar el mantenimiento de la ortodoxia católica y vigilar a los conversos, los Reyes Católicos instituyeron de nuevo el Tribunal de la Inquisición (1478).
4. La organización económica y social 4.1. Castilla: una economía ganadera 4.2. La lenta recuperación de la Corona de Aragón 4.3. Los grupos sociales
4.1. Castilla: una economía ganadera Durante el reinado de los Reyes Católicos, la economía castellana siguió orientada hacia la ganadería, fundamentalmente ovina. La lana castellana continuó siendo el principal producto de exportación. La monarquía protegió los intereses ganaderos, por lo que se promulgaron leyes que protegían a la poderosa Mesta, la organización que agrupaba a los ganaderos castellanos. La economía castellana recibió su mayor impulso a partir de la colonización de América.
4.2. La lenta recuperación de la Corona de Aragón La crisis de la Baja Edad Media diezmó la población de la Corona de Aragón y debilitó su economía. Para paliar la crisis, el rey Fernando propició una serie de medidas para revitalizar la economía de sus reinos. Quiso poner fin a la conflictividad campesina en Cataluña, decretando la Sentencia Arbitral de Guadalupe (1486), que abolió algunos derechos feudales en el campo. En Cataluña se promulgaron leyes para favorecer el comercio, la navegación y las manufacturas. En Aragón continuó el predominio de la agricultura y se reforzó el régimen señorial.
4.3. Los grupos sociales La nobleza y el clero constituían las clases privilegiadas y poseían la mayor parte de la tierra y de los rebaños. La nobleza aumentó su poder económico gracias a la institución del mayorazgo, que prohibía la venta del patrimonio familiar y obligaba a dejarlo en herencia al primogénito. La mayoría de la población la integraban campesinos sin tierras. En las ciudades se desarrolló una burguesía dedicada a actividades comerciales y artesanales.
5. Humanismo y Renacimiento en España 5.1. El Humanismo español 5.2. Los estilos arquitectónicos
5.1. El Humanismo español La llegada de la imprenta a España tuvo lugar a finales del siglo XV. El espíritu humanista estuvo representado en España por figuras como el gramático Antonio de Nebrija, que renovó los métodos de enseñanza de las lenguas clásicas.
5.2. Los estilos arquitectónicos La arquitectura del Renacimiento español, que se inició a principios del siglo XVI, se desarrolló en tres fases: Estilo plateresco. Se basaba en la introducción de nuevos elementos decorativos en edificios góticos. Estilo clasicista. Introdujo los modelos arquitectónicos clásicos, como columnas, dinteles y frontones. Estilo herreriano. Se caracterizaba por la ausencia decorativa, las líneas rectas y los volúmenes cúbicos, dando lugar a una arquitectura desnuda, sobria y geométrica.
6. Escultura y pintura renacentistas en España 6.1. Una escultura espiritualista 6.2. La pintura 6.3. El Greco
6.1. Una escultura espiritualista Los escultores españoles destacaron por la intensidad con que plasmaron los sentimientos religiosos, buscando la representación de la espiritualidad más que la belleza. Los escultores trabajaron sobre todo los retablos, los monumentos funerarios y las imágenes religiosas.
6.2. La pintura La pintura española estaba profundamente orientada hacia la religiosidad, y los temas profanos y mitológicos resultaban escasos. El primer pintor castellano que mostró influencias renacentistas italianas fue Pedro Berruguete (siglo XV). En el siglo XVI surgieron pintores como Luis de Morales y Alonso Sánchez Coello, influidos por el italiano Rafael.
6.3. El Greco El gran genio de la pintura renacentista en España fue Doménikos Theotokópoulos, llamado El Greco. En su obra mostró unas figuras tortuosamente alargadas y de apariencia fantasmagórica. Su estilo era dramático y buscaba la expresión de sentimientos, que se evidenciaba en la utilización de colores fríos y en la complejidad de las composiciones.