El SIGLO XVIII El siglo XVIII comienza para los reinos hispánicos en general y para REQUENA en particular con una cruenta guerra civil. LA GUERRA DE SUCESIÓN
La guerra de Sucesión Tras la muerte sin descendencia de Carlos II, dos candidatos se disputan el trono español: Felipe de Borbón y el Archiduque Carlos de Austria.
LA GUERRA DE SUCESIÓN. El candidato francés, Felipe de borbón fue apoyado por Castilla y Francia, mientras el pretendiente austriaco fue apoyado por la Corona de Aragón, Austria, Holanda e Inglaterra.
La guerra de sucesión REQUENA como villa castellana, apoyó la causa borbónica. Los austracistas intentaron tomar Madrid en un movimiento sincronizado desde Portugal y Valencia.
LA GUERRA DE SUCESIÓN REQUENA es cercada por las tropas austracistas para asegurar su avance hacia Madrid, pero resiste el fuego de artillería durante 18 días. Finalmente, ante el temor de que el enemigo vuele el Castillo, los requenense se entregan por mediación del sacerdote Domínguez de la Coba.
LA GUERRA DE SUCESIÓN El panorama que encontrarían las tropas austracistas al entrar en Requena,, sería el de una ciudad en ruinas y despoblada. Las tropas, formadas por ingleses, holandeses y campesinos valencianos, saqueó conventos y destruyó las cosechas de la ciudad.
EL duque de Orleans La derrota de los austracistas en la Batalla de Almansa precipitó la caída de REQUENA en manos de los franceses comandados por el Duque de Orleans.. Felipe V reconoce el heroico esfuerzo de la ciudad y le concede el Título de Noble y fiel ciudad de REQUENA.
FINAL DE LA FONTERA Una de las primeras acciones que como rey llevó a cabo Felipe V fue la abolición de los privilegios y leyes propias de los reinos de Aragón. La uniformidad administrativa en todos sus territorios marca el nacimiento de España.
FINAL DE FRONTERA REQUENA NO ERA YA TERRITORIO DE FRONTERA, DEJANDO DE PERCIBIR LOS BENEFICIOS DE LOS IMPUESTOS ADUANEROS
MAL COMIENZO NADIE IMAGINABA EL SIGLO DE PROSPERIDAD QUE LE ESPERABA A REQUENA. La ya existente industria lanar adapta sus procedimientos a un nuevo material: la seda.
LA SEDA La seda era un producto de lujo muy demandado sobretodo en Hispanoamérica, donde se vive un periodo de prosperidad y renace una burguesía criolla de alto poder adquisitivo.
LA SEDA A finales de siglo REQUENA contaba más de 700 telares, siendo el cuarto centro sedero del país y casi cuadruplicando la población. Por primera y única vez, REQUENA es una ciudad industrializada.
El crecimiento urbano LA CIUDAD CRECE NOTABLEMENTE Y SE ABREN CALLES QUE COMUNICAN LAS PEÑAS Y EL RESTO DE LA CIUDAD.
EL ARTE DEL XVIII La época de prosperidad económica se traduce en un volumen de arte y patrimonio enorme. Mansiones, palacios, remodelaciones de iglesias, construcción de ermitas Siguiendo siempre el estilo artístico imperante: el neoclásico.
Cómo es el Neo-clásico? El neoclásico es un estilo que se inspira incluso imita el arte clásico: Grecia y Roma.
EL PANTEÓN
Uso del frontón triangular Uso de la cúpula de media naranja Uso del arquitrabe y la pilastra. Arco de medio punto Azulejería
Neoclásico Las iglesias y ermitas se remodelan, normalmente enmascarando mediante yeserías el interior gótico. Bóvedas de medio cañón enlucidas, arcos de medio punto, azulejerías, arcos acasetonados
PROCLAMACIÓN CARLOS IV Se dirigió a las casas consistoriales, donde estaba formado el resto del Ayuntamiento, y tomando el Real pendón, salió la comitiva, y ocupando su espacioso balcón, en cuya fachada estaban colocados los retratos de SS.MM. baxo un rico dosel, y adornada toda ella con damascos, lumbreras, cornucopias y arañas de cristal, por primera vez según costumbre, pronunciando los quatro Reyes de Armas las voces acostumbradas y el alférez mayor las de Castilla, Castilla, Castilla, Requena por el señor Rey D. Carlos IV descubriéndose a este tiempo los Reales retratos, sin intermisión empezó el repique general de campanas, toque de timbales y clarines con la orquesta de música, a que el mucho concurso de gentes, manifestando el lleno de su interior y exterior regocijo, repitió los vivas, y en este acto, por los reyes de armas se arrojó considerable porción de moneda de todas