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CURSO FLUVIAL RÍOS DE ESPAÑA VERTIENTE ATLÁNTICA Tambre Ulla MIÑO DUERO TAJO GUADIANA Odiel Tinto GUADALQUIVIR VERTIENTE CANTÁBRICA Bidasoa Nervión Nalón Navia EO VERTIENTE MEDITERRÁNEA Ter Llobregat EBRO TURIA JÚCAR SEGURA
CUENCA HIDROGRÁFICA
REGÍMENES FLUVIALES Las fluctuaciones estacionales del caudal conforman el régimen hidrográfico de un río, variaciones que se deben al relieve, al clima, a la vegetación y a la permeabilidad del sustrato rocoso. Las precipitaciones y su forma, agua de lluvia o nieve, definen los siguientes regímenes fluviales o hidrográficos: El régimen nival, propio de zonas de alta montaña, provoca un aumento de caudal a finales de la primavera o en el verano cuando sucede el deshielo; el descenso de caudal o estiaje ocurre en invierno porque las aguas de las nevadas quedan retenidas en forma de nieve. El régimen pluvial afecta a la mayoría de los ríos peninsulares, el caudal depende de las lluvias, de manera que el estiaje veraniego es frecuente, así como el incremento en primavera y otoño, las estaciones húmedas. En el régimen nivo pluvial predominan las nieves en el aporte hídrico, con máximos caudales en mayo, en pleno deshielo, también las lluvias otoñales aumentan el caudal en octubre. Cuando la mayor aportación de caudal proviene de las lluvias primaverales, con ayudas de la fusión de las nieves, hablamos de régimen pluvio nival.
VERTIENTES HIDROGRÁFICAS Una cuenca hidrográfica se extiende por el territorio cuyas aguas vierten en un río principal y sus afluentes; todas las cuencas que vierten sus aguas en un mar se denominan vertiente hidrográfica, tres son las vertientes de la red fluvial peninsular: cantábrica, atlántica y mediterránea. VERTIENTE MEDITERRÁNEA En la vertiente mediterránea los ríos son cortos y poco caudalosos porque nacen en zonas de poca altura y en montañas cercanas al litoral, en un clima de pocas lluvias. Presentan un régimen muy irregular, con periodos de estiaje veraniego seguidos de grandes crecidas del caudal producidas por las lluvias torrenciales y los episodios de gota fría. La gran aridez estival suele provocar fuertes estiajes que, incluso, pueden dejar el cauce seco. Son típicas las ramblas, cauces fluviales secos la mayor parte del año que, sin embargo, en época de lluvias recuperan su función y recogen las aguas pluviales. En las cuencas hidrográficas mediterráneas se distinguen el Pirineo oriental, Ebro, Júcar o Levante, Segura y el sur andaluz. En el Pirineo oriental los ríos como el Ter, el Besós y el Llobregat tienen un régimen nivo pluvial en cabecera y pluvial mediterráneo en el resto. El río Ebro es la segunda cuenca más extensa de la península. Sus afluentes llegan de los Pirineos, como sucede con el Gallego, el Cinca y el Segre, y del Sistema Ibérico con el Jalón. El Ebro nace en Fontibre (Cantabria), en plena Cordillera Cantábrica y desemboca en Tortosa donde crea un gran delta. Los ríos levantinos destacan por la elevada pendiente de sus cauces y los fuertes desniveles que deben salvar para llegar al mar, rasgos que favorecen las grandes avenidas de agua en los momentos de lluvias torrenciales. El Mijares, el Turia, el Júcar y su afluente Cabriel, nacen en el Sistema Ibérico con un régimen pluvio nival de máximo caudal y frecuentes crecidas en otoño y primavera. La cuenca del río Segura, con sus afluentes, Guadalentín y Mundo, nace en las Cordilleras Béticas, transcurre por una zona en la que la aridez y los regadíos en las vegas murciana y oriolana reducen el caudal hasta unos escasos 5 m3/s. Recibe aportes de agua en verano a través del trasvase Tajo Segura. En la cuenca meridional andaluza los ríos son en realidad casi ramblas, con fuertes estiajes de tres o cuatro meses, y con un escaso caudal debido al régimen pluvial casi subtropical. Destaca el río Guadalhorce. VERTIENTE ATLÁNTICA En la vertiente atlántica, de la Punta de Estaca de Bares, al norte, a la Punta de Tarifa, al sur, los ríos vierten sus aguas en el océano Atlántico. En el sector gallego, los cursos fluviales del Tambre y del Ulla son cortos y muy caudalosos porque nacen en relieves de baja altura, cercanos a la costa, en un clima oceánico muy lluvioso; el Miño, y su afluente el Sil, son de mayor longitud y caudal al nacer en montañas de elevada altitud y su régimen hidrográfico es pluvio nival; todos desembocan formando rías. Los grandes colectores peninsulares son los ríos Tajo, Duero, Guadiana y Guadalquivir, largos de recorrido y caudalosos porque recogen aguas de los grandes relieves meseteños. El río Duero drena la submeseta norte, entre el Sistema Ibérico donde nace y el estuario de Oporto en que desemboca; recoge aguas de la Cordillera Cantábrica y del Sistema Central a lo largo de un curso tranquilo, excepto en los arribes donde se encaja en las rocas y forma un gran desfiladero. Afluentes destacados son el Pisuerga, el Esla y el Tormes. El Tajo, que nace en la Sierra de Albarracín (Sistema Ibérico) y desemboca en el estuario de Lisboa, es el más largo de los ríos peninsulares con 1.202 km de longitud, recoge un importante caudal por el régimen pluvio nival de la cabecera, transformado en pluvial en su recorrido, y por la impermeabilidad de los suelos silíceos que atraviesa. Algunos de sus afluentes son el Jarama, el Alberche, el Tiétar, el Alagón y el Zezere. El Guadiana que nace del afloramiento de aguas subterráneas en los Ojos del Guadiana, atraviesa la llanura manchega, con zonas en las que drena más aguas
del subsuelo las Tablas de Daimiel, se convierte en una vega amplia y regada en Extremadura, y desemboca formando un estuario en Ayamonte (Huelva). Su caudal es escaso debido a las reducidas precipitaciones de la zona y a la baja altitud de su nacimiento y del terreno que atraviesa. Las marismas recuerdan que la cuenca del Guadalquivir estuvo abierta al mar y se colmató con los sedimentos depositados a los pies de Sierra Morena y los Sistemas Béticos. Nace en la Sierra de Cazorla y desemboca en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), con un régimen pluvial mediterráneo, excepto en el afluente del Genil que tiene un régimen nival en cabecera, debido a su nacimiento en Sierra Nevada, a 3000 metros de altura. Además del Guadalquivir, otros ríos recorren la depresión: el Tinto, el Odiel y el Guadalete. VERTIENTE CANTÁBRICA La vertiente cantábrica. Los ríos que vierten sus aguas al mar Cantábrico nacen en montañas cercanas al litoral, de ahí que su curso sea corto y de fuertes pendientes que favorecen la formación de hoces profundas y estrechas que cortan los relieves. Las precipitaciones del clima oceánico aportan un caudal abundante y regular todo el año. Las cabeceras, situadas en alta montaña, recogen el deshielo primaveral, en el resto del trayecto el régimen es pluvial. Destacan los ríos Narcea Nalón, Bidasoa, Nervión, Besaya, Saja, Sella, Navia y Eo. CUESTIONES Responde las siguientes preguntas: 1. Define el concepto de vertiente hidrográfica. 2. Indica los ríos de cada vertiente peninsular. 3. Qué cadenas montañosas separan las vertientes? 4. Razona cómo influyen el clima y el relieve en el régimen fluvial, el trazado y el caudal de las diferentes cuencas hidrográficas.
PRÁCTICAS DE GEOGRAFÍA Precipitaciones y cuencas hidrográficas. Este ejercicio pertenece a la Prueba de Acceso a la Universidad del Sistema Universitario Valenciano. Convocatoria de septiembre de 2009. 1. Representa mediante coropletas en el mapa adjunto* los datos de precipitación media por cuenca hidrográfica registrados entre 1995 y 2005 (Documento 1). * Consulta y descarga la práctica Cómo elaborar un mapa de coropletas en bit.ly/geografia2bat 2. Cada una de las cuencas hidrográficas señaladas está enmarcada por las grandes cordilleras que definen el relieve peninsular. Diga qué cordilleras enmarcan los límites de las siguientes cuencas hidrográficas: Cuenca del Ebro Cuenca del Tajo Cuenca del Guadalquivir
Cuenca del Júcar Cuenca del Duero 3. Tras el análisis del Documento 2, describa las diferencias que se observan entre las dos cuencas e indique qué factores meteorológicos y geográficos explican estas diferencias. 4. Elabore un INFORME sobre los principales problemas y riesgos hídricos que se asocian a las variaciones temporales de las precipitaciones en la España peninsular. Fuente: este ejercicio pertenece a la Prueba de Acceso a la Universidad del Sistema Universitario Valenciano. Convocatoria de septiembre de 2009. Más prácticas y contenidos de Geografía segundo curso de bachillerato en: bitly.com/geografia2bat Descarga la ficha de trabajo en formato pdf en este enlace.
ACUÍFEROS Son embolsamientos de agua subterránea que se forman cuando las aguas de las precipitaciones se infiltran, encuentran un estrato impermeable y se acumulan sobre él. Se calcula que estas corrientes del subsuelo discurren a lo largo del 40% de la superficie peninsular, afloran en ríos, manantiales o directamente, vierten en el mar sin salir a la superficie. Desde la antigüedad se han abierto pozos para extraer agua y utilizarla en viviendas y en el riego En la actualidad muchos acuíferos de La Mancha y la costa mediterránea están sobreexplotados y agotados porque los regadíos han secado las aguas subterráneas; también muchos acuíferos están contaminados por la infiltración de los abonos químicos agrícolas.
PROBLEMA DEL AGUA La escasez de agua en la vertiente mediterránea contrasta con el excedente de las vertientes cantábrica y atlántica. En la región mediterránea, a pesar de la poca disponibilidad hídrica, la demanda crece sin cesar por la concentración de una parte importante de la población, de las actividades económicas industriales y terciarias, además de la expansión reciente del regadío. Las demandas de agua Las actividades económicas y la vida urbana consumen gran parte de los recursos hídricos. La agricultura absorbe el 80\% de la demanda de agua, la industria el 12\% y la ciudad el 8\%. En la agricultura la demanda se incrementa de manera proporcional a la extensión de los regadíos que ocupan el 14\% de la superficie cultivada. Para reducir el consumo de agua se fomentan las modernas técnicas de riego por aspersión y por goteo, que sustituyen el tradicional método de canales y acequias. El agua en la industria es un recurso necesario en algunos sectores como la fabricación de papel y la industria del cuero, también se utiliza en los sistemas de refrigeración de la maquinaria y para la eliminación de residuos. Las ciudades utilizan agua que proviene de ríos y acuíferos. El crecimiento de la población urbana en España durante las últimas décadas ha incrementado la demanda de agua, en especial, en las zonas turísticas del litoral mediterráneo que necesitan grandes recursos en verano, época de sequía y en un clima de escasas precipitaciones anuales. El uso y la regulación del agua La legislación en materia de aguas se remonta al Plan Nacional de Obras Hidráulicas de 1933, en el que se analizaba la escasez de caudales en la vertiente mediterránea para una demanda creciente, proporción que ha ido aumentando con el transcurso del tiempo, a pesar de la construcción de embalses y de los trasvases entre cuencas hidrográficas. Durante el régimen franquista se desarrolló una política hidráulica de construcción de embalses en las cabeceras de los ríos con el fin de regular el curso fluvial y aportar aguas para la agricultura de regadío. No han solucionado el déficit hídrico mediterráneo debido a que las precipitaciones son escasas, los consumos de agua en usos agrarios, urbanos e industriales han crecido por encima de la capacidad de suministro, y los pantanos han reducido su capacidad de embalse por la sedimentación de limos en su lecho. La Ley de Aguas de 1985 transfirió las competencias en la gestión del agua a las Confederaciones Hidrográficas, promovió la elaboración de planes hidrológicos de cuenca e impulsó la elaboración de un Plan Hidrológico Nacional cuya redacción continua todavía en marcha, con varios borradores que no han sido aprobados a causa de las disputas políticas y territoriales motivadas por los trasvases de aguas previstos entre cuencas hidrográficas. Diversas políticas públicas intentan asegurar el suministro de agua a la población y a las actividades económicas. Por una parte, los trasvases entre cuencas hidrográficas como el Tajo Segura, que todavía funciona, o el derogado proyecto del Ebro. Por otra, se construyen plantas desalinizadoras en las costas mediterráneas, pero los costes energéticos y los residuos que generan (salmuera) reducen las ventajas de esta opción.
Demandas y usos de agua Demanda y usos del agua Fuente: Instituto Geográfico Nacional (IGN)
Descargar mapa (Ventana nueva) Actividad de lectura Analiza los diferentes documentos a partir del siguiente cuestionario: Qué usos y demandas tiene el agua? Cuál es la demanda más importante en España? Qué cuencas presentan excedentes de agua? Relaciona la respuesta con el clima. Qué cuencas hidrográficas tienen déficit?
Conclusiones. Soluciones?
Actividad de lectura Informe Redacta un informe sobre el problema del agua en España: define en qué consiste el problema, las causas climáticas y humanas (demandas para el consumo) y las posibles soluciones.