TEMA 11: El Sexenio Revolucionario (1868-1874) I.- Introducción Se conoce como Sexenio Democrático o Sexenio Revolucionario al periodo de la historia contemporánea de España transcurrido desde el triunfo de la revolución de septiembre de 1868 que supuso la caída de Isabel II, hasta el pronunciamiento de diciembre de 1874, que supuso el inicio de la etapa conocida como Restauración borbónica. Durante este corto periodo de tiempo, España asistió a la instauración de varios regímenes políticos: monarquía democrática, una república de carácter federal y posteriormente unitaria que quedaría disuelta por el pronunciamiento del general Martínez Campos. El inicio de estos cambios políticos de deben buscar en la fase final del reinado de Isabel II, entre 1863 y 1868 se suceden varios gobiernos de tendencia cada vez más conservadora y autoritaria. La oposición al régimen se acentúa. Además el malestar social se acrecienta por la extensión de una grave crisis industrial, financiera y de subsistencias. El aumento de la corrupción y el progresivo desprestigio de la reina, sobre todo por su conducta privada y su continua injerencia en los asuntos de gobierno, los que va a facilitar el acuerdo de todos los partidos políticos, excepto el Moderado, que firmarán el Pacto de Ostende (agosto de 1866 reúne a progresistas, demócratas y republicanos y tras la muerte de O Donnell, también a los unionistas) Su objetivo era destronar a Isabel II y convocar unas Cortes Constituyentes. II.Desarrollo Finalmente la sublevación estalló en septiembre de 1868. Iniciada por el unionista almirante Topete en Cádiz, al pronunciamiento militar se le unieron rápidamente sublevaciones populares en diversas zonas del país. Isabel II huyó a Francia. La que los progresistas vinieron a denominar "Revolución Gloriosa" había triunfado con gran facilidad en el país. II.1.-El Gobierno provisional (1868-1871) Inmediatamente se estableció un gobierno presidido por Serrano, con el general Prim en el ministerio de Guerra. El nuevo gobierno convocó elecciones a Cortes Constituyentes por sufragio universal. La coalición gubernamental venció en unos comicios bastante limpios para lo normal en la época y marcaron con su ideología la nueva constitución que se aprobó al año siguiente. Los republicanos y los carlistas también obtuvieron diputados lo que evidencia el carácter democrático del proceso electoral. 1
La Constitución, ampliamente debatida, promulgada en junio de 1869 recogía el principio de soberanía nacional, establecía la división de poderes, el derecho de reunión y asociación y la libertad de cultos. La forma del estado era la monarquía democrática- el rey reina pero no gobierna- y se establecían cortes bicamerales que elegían sus miembros por sufragio universal masculino. Dentro del poder judicial destacar la implantación del sistema de oposición para el ingreso en la carrera judicial y se implantó el juicio por jurados. El nuevo texto constitucional significó un gran impulso democratizador para la sociedad española, adelantándose en bastantes aspectos al resto de Europa. CONSTITUCIÓN 1869 II.1.-La Monarquía democrática: Amadeo I (1871-1873) Tras aprobarse la Constitución en la que se establecía la monarquía como forma de gobierno, el general Serrano fue nombrado Regente y Prim pasó a presidir un nuevo gobierno. Desechada la opción de los Borbones, se inició la búsqueda de un candidato adecuado a la Corona entre las familias reales europeas. Finalmente las Cortes eligieron como nuevo rey a Amadeo de Saboya, hijo del Víctor Manuel II, rey de la recién unificada Italia, y perteneciente a una dinastía con fama de liberal. El mismo día de la llegada de Amadeo a España fue asesinado el general Prim. El general progresista era el principal apoyo del nuevo rey. Su ausencia debilitó grandemente la posición del nuevo monarca. Amadeo se encontró inmediatamente con un amplio frente de rechazo. Aquí estaban grupos variopintos y enfrentados: los carlistas, todavía activos en el País Vasco y Navarra; los "alfonsinos", partidarios de la vuelta de los Borbones en la figura de Alfonso, hijo de Isabel 2
II; y, finalmente, los republicanos, grupo procedente del Partido Demócrata que reclamaba reformas más radicales en lo político, económico y social y se destacaba por un fuerte anticlericalismo. Mientras la alianza formada por unionistas, progresistas y demócratas, que había aprobado la Constitución y llevado a Amadeo al trono, comenzó rápidamente a resquebrajarse. Los dos años que duró su reinado se caracterizaron por una enorme inestabilidad política, con disensiones cada vez más acusadas entre los partidos que habían apoyado la revolución. Después de repetidas elecciones generales y crisis de gobierno que nada solucionaron, Amadeo I abdica a principios de 1873 y regresa a Italia. Sin otra alternativa, era impensable iniciar una nueva búsqueda de un rey entre las dinastías europeas, las Cortes proclamaron la República el 11 de febrero de 1873 II.3.-La Primera República La República fue proclamada por unas Cortes en las que no había una mayoría de republicanos. Las ideas republicanas tenían escaso apoyo social y contaban con la oposición de los grupos sociales e instituciones más poderosos del país. La alta burguesía y los terratenientes, los altos mandos del ejército, la jerarquía eclesiástica eran contrarios al nuevo régimen. Este resultado no responde a la composición del parlamento, la mayoría de los representantes eran monárquicos (votan república en espera de que se deteriore y vuelva la monarquía en la familia Borbón) y por la desconfianza hacia Serrano que mostraba posturas dictatoriales Los escasos republicanos pertenecían a las clases medias urbanas, mientras las clases trabajadores optaron por dar su apoyo al incipiente movimiento obrero anarquista. La debilidad del régimen republicano provocó una enorme inestabilidad política. Cuatro presidentes de la República se sucedieron en el breve lapso de un año: Figueras, Pi y Margall, Salmerón y Castelar. En un primer momento se nombró a Estanislao Figueras como presidente de una república unitaria, pero inmediatamente chocó con los republicanos federales. Su principal cometido era convocar Cortes Constituyentes para promulgar una nueva Constitución. En este contexto de inestabilidad, los gobiernos republicanos emprendieron una serie de reformas bastante radicales que, en algunos casos, se volvieron contra el propio régimen republicano. Estas fueron las principales medidas adoptadas: Supresión impuesto de consumos. La abolición de este impuesto indirecto, reclamada por las clases más populares, agravó el déficit de Hacienda. Eliminación de las quintas. De nuevo una medida popular propició el debilitamiento del estado republicano frente a la insurrección carlista. Reducción edad de voto a los 21 años Separación de la Iglesia y el Estado. Este dejó de subvencionar a la Iglesia. Reglamentación del trabajo infantil. Prohibición de emplear a de menos de diez años en fábricas y minas. Abolición de la esclavitud en Cuba y Puerto Rico. Este programa reformista se intentó llevar a cabo en un contexto totalmente adverso. Los gobiernos republicanos tuvieron que hacer frente a varios desafíos bélicos: 3
La nueva guerra civil carlista. Carlos VII, nieto de Carlos María Isidro, encabezó una nueva insurrección carlista en el País Vasco y Navarra. Aprovechando el caos general, los carlistas llegaron a establecer un gobierno en Estella, Navarra. La guerra de Cuba En 1868 se inició en isla caribeña una insurrección anticolonial que derivó en lo que los cubanos denominan la Guerra Larga. Tuvieron que pasar diez años hasta que las autoridades españolas consiguieron pacificar la isla con la firma de la Paz de Zanjón en 1878. Sin embargo, el triunfo de los republicanos federales en las elecciones a Cortes llevó a la proclamación de la República Federal y fue propuesto como presidente el catalán Pi y Margall. Con el triunfo de los republicanos federales surgieron entre ellos discrepancias sobre los pasos que debían seguirse en la organización de la España federal. Unos los transigentes, que eran mayoría y liderados por Pi y Margall, primaban la construcción de la república desde arriba ; los intransigentes defendían que se debía comenzar la Caricatura sobre la pugna entre republicanos unitarios y federales. Y también sobre la pugna entre federales transigentes e intransigentes. 1873 construcción de la federación desde abajo. Ambos grupos presentaron a las Cortes sus propios proyectos de Constitución federal, pero el de los intransigentes fue rechazado. Así, los republicanos federales más extremistas se lanzaron a proclamar cantones, pequeños estados regionales cuasi independientes en Valencia, Murcia y Andalucía, sublevándose contra el gobierno republicano de Madrid. El ejército consiguió reprimir la insurrección. La resistencia del cantón de Cartagena le convirtió en el símbolo de este movimiento en el que las ideas republicano-federales y anarquistas se entremezclaron. Principales sublevaciones cantonalistas y Tercera Guerra Carlista 4
Pi y Margall, al no poder alcanzar la aprobación del proyecto de Constitución y viéndose desbordado por la revolución cantonal dimitió. Tras un breve mandato de Salmerón, que dimitió por problemas de conciencia al no querer firmar unas penas de muerte a los revolucionarios, fue nombrado nuevo presidente Emilio Castelar. Su programa tendió a restablecer el orden actuando contra los carlistas en el norte y también en el conflicto cubano. Pero entre los mandos del ejército se fue imponiendo la idea de la vuelta de los Borbones en la figura del hijo de Isabel II, Alfonso. Pronto empezaron las conspiraciones para un pronunciamiento militar. III. Conclusión La república del año 1874: el golpe del general Pavía y el camino a la Restauración. El 4 de enero de 1874, el general Pavía encabezó un golpe militar. Las Cortes republicanas fueron disueltas y se estableció un gobierno presidido por el general Serrano que suspendió la Constitución y los derechos y libertades. El régimen republicano se mantuvo nominalmente un año más, aunque la dictadura de Serrano fue un simple paso previa a la restauración de los Borbones que planeaban los alfonsinos con su líder Cánovas del Castillo. Los militares se van pasando al partido alfonsino, creado por Cánovas, porque necesitaban un rey que deslegitimase la causa carlista. Cánovas había preparado concienzudamente el regreso de los Borbones mediante una hábil política de prestigio, para lo cual era necesario eliminar la figura desacreditada de Isabel II. Consigue la abdicación de la reina. Redactó el Manifiesto de Sandhurst, por el cual el futuro rey prometía un gobierno constitucional y la ausencia de represalias a su vuelta. Mientras Cánovas prepara el regreso de los Borbones legalmente, convocando Cortes extraordinarias, y Serrano prepara la lucha contra los carlistas, Martínez Campos se pronuncia en Sagunto a favor de Alfonso XII, proclamando la Restauración borbónica. Serrano dimite y marcha al exilio. Cánovas nombrado regente mientras vuelve el futuro rey. Se iniciaba en España el período de la Restauración. 5