hoy se ha roto el sol está en reparaciones por fin el cielo está plomizo como si se hubiera roto el faro más grande del mundo; lo importante es la humedad y la presión que hacen que las alcantarillas apesten y lo monos bípedos sudan y su ánimo se vuelve plomizo como el cielo que los envuelve el reloj se durmió y dejó de marcar la hora yo creí que el tiempo se había detenido y empecé a cabilar en las cosas que podría hacer infinitamente porque siempre viviría en el presente pero no, y fue por una guerra de lindes entre dos fincas que vemos la escena la hazada en alto amenazante le dice a su contrincante: -si vuelves a pasarte un surco a mi finca y mueves el mojón te abro la cabeza al final la sutileza ganó a la razón la sangre no llegó a brotar y el mojón no volvió a moverse del sitio
resultó que el litio de las baterías se había agotado fue por la rajadura que empezó a manar el agua y las vírgenes de cristal no pueden ser mancilladas por vulgares seres humanos sólo pueden ser adoradas o destruidas y en el hotel de al lado la catarsis qué bonito es perder los papeles en la cincuentena luces negras y música brasileña y muchos combinados aderezándolo todo entre dos rocas de granito y a su paso iba dejando un torrente de vida en el pedregal en Blanes de vacaciones con relajación y tensión tratando de observar el rastro de Bolaño diez años después de su muerte y playa y cielo de zumo de manzana y miríadas de turistas y calor, pero menos; mi provisional cueva tiene aire acondicionado primer día primeras impresiones
nuestro monje del litio no conoce las raves y un haz de luces tridimensional dibujando figuras con láser hacía dibujos animados en el vacío y era el éxtasis fue en la lejana semana santa del 96 en Mallorca luego se volvió habitual otro día plomizo y repetitivo en un pueblo de la costa mediterránea pero con letras cirílicas. en mi habitación doble con poca intimidad para el acto de escribir los versos no surgen necesito estar aplastado en mi cueva la realidad es el dolor no el resto de rameras sensaciones pasajeras que se las lleva y desmonta el viento tan fácil como aparecieron y eso cuando sientes algo en mi planicie vacía hay que buscarse diversión porque sola no aparece y la temperatura es 0º en mi planicie y 99º en mis entrañas se me congelarán las entrañas o se prenderá fuego la planicie? desorden arquitectónico aunque sólo aparente zonas para turismo masivo y zonas para los habitantes habituales si exploras un poquito puedes llegar al raval del pueblo y subir unas escaleras imposibles
y llueve pero no en mi corazón que es un verso malísimo llueve en la calle en el paraíso playero y ya pienso que me voy a ir sin ponerme moreno y en estos tres días hemos paseado hemos ido a la playa un solitario día y hemos conocido Blanes un poco más y yo he leído bastante más de lo que me he dejado caer por la playa y mañana volvemos al infierno de hormigón y la manzana se convirtió en serpiente alvina qué haran los turistas, que en este momento se quieren matar; la otra opción beber como cosacos y literaturanova no va y no puedo subir rosetta si es que al final tiene ese título y la urgencia, la urgencia! y las niñas de Chagall sueñan con ciudades abigarradas sin saber el horror que esconden los muros de hormigón y las calles de adoquines los desengaños los destinos trágicos la locura el hambre y no sólo de espíritu las niñas de Chagall deberían soñar siempre
la urgencia de no tener un cigarro a mano y el otro día la luna se reflejaba en el mar un recordatorio para los hombres lobo luna llena luna plena plena noche hago gorgoritos con el locutorio que me quema la lengua y el paladar para qué los quiero? Si yo sólo como para no desmayarme o por ansiedad pero raramente disfruto del placer de la comida y volveré pero en invierno y me llevo a las niñas de Chagall y un bonsai y la saliva que me falta no la empleo en conversaciones superfluas la evapora el calor de mis entrañas soy una estufa del petróleo de todos los yacimientos del mundo los que ya se agotaron y los que están por descubrir me recorre el oro negro por los pulmones por las venas y me envuelve la humedad nocturna de Blanes por última noche y se despide de mí aquí he pasado buenos ratos y un bloqueo vuelvo al infierno de hormigón con la misma humedad pero a donde no llega la brisa marina donde te atragantas con el humo del gas-oil de los coches y las furgonetas y los autobuses viejos donde no refresca por la noche donde aprovechan estas fechas para asfaltar calles qué delicia el olor a alquitrán