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Transcripción

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2 En la punta de la Isla del Norte... En un país llamado Nueva Zelanda... En el continente de Oceanía... Los kiwis están muy preocupados por la salud de su amigo Tane Mahuta, un árbol de años de existencia. Su desaparición significaría un fuerte golpe para la historia de estas islas!

3 Este árbol nació ocho siglos antes de que llegaran los primeros habitantes de Nueva Zelanda. Pasó la mitad de su vida rodeado de hermosa naturaleza y especies animales propias de esa zona del mundo. Año tras año su tronco creció y creció, hasta que un día su estatura superó la de los otros árboles del Bosque Waipoua y pudo ver, sobre sus copas, las maravillas del país donde había tenido la fortuna de nacer. 4

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5 Nueva Zelanda es excepcional y ofrece todo tipo de experiencias a sus nativos y visitantes. Tiene dos islas principales: la Isla del Norte y la Isla del Sur, además de otras más pequeñas. La primera es cálida, volcánica y llena de bosques, a diferencia de la segunda, un poco más fría por su cercanía al Polo. Esta última está dividida, de arriba abajo, por una gran cadena montañosa llamada los Alpes del Sur. A un lado de estas montañas llueve mucho y hay bosques, lagos y glaciares, mientras que el otro es seco y deforestado. 6

6 Mahuta como llaman los kiwis cariñosamente al árbol les enseñó todo lo que sabía a estos pájaros oriundos de los calentitos bosques del norte. Tenía muchas historias por contar, pues desde las alturas había presenciado cómo el país se había poblado hacía más de siete siglos con navegantes polinesios que llegaron en elaboradas canoas. Estos se habían guiado por una larga y linda nube, indicio de que bajo ella encontrarían tierra; por este motivo llamaron Aotearoa a Nueva Zelanda, nombre que en maorí idioma de sus indígenas significa: La tierra de la gran nube blanca. 7

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8 Pero con el pasar de los años los kiwis se percataron de que Mahuta comenzaba a olvidar la historia de los maorís, quienes habían sido sus amigos durante tantos años. Ya no recordaba cómo eran sus lindas ceremonias, cómo se tatuaban y cómo bailaban el Poi y el Haka! Los pájaros sabían que, a pesar de los múltiples dolores causados por el paso del tiempo, lo que realmente entristecía al árbol era su pérdida gradual de memoria y de visión. 9

9 Mientras esto sucedía en las lejanas islas, el EQUIS, el investigador ardilla, comenzó la opi re ed pr ad od d uc e E ci l ón G to lob ta o l o de pa An rc to ia ni l d a. e es te a titilar. Lo anterior significaba que había lib ro. bombillo rojo de alerta del computador de llegado nueva información sobre un misterio por resolver en algún rincón del mundo. Entró a la página principal de su proveedor de misterios y leyó: Pr cia Sabio en apuros! 28 de octubre. agen Pr oh ib id a Nueva Zelanda corre peligro. La vida del habitante más anciano de efectiva, puede desaparecer Si no hay una intervención rápida y sabiduría de sus la sin a rr Tie ta ne pla el ar dej y por siempre upere el ánimo y la energía años de vida. Hay que lograr que rec eza! pues de lo contrario morirá de trist 10

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11 La ardilla solicitó información adicional, pues le pareció inaudito que alguien siguiera vivo años después, y al recibirla comprendió que el mensaje no se refería a un ser humano sino a un árbol. A pesar de esto, el investigador se sintió totalmente identificado con la situación de Tane Mahuta y con la preocupación de los kiwis. Su abuelo, a quien consideraba un sabio por todas las cosas interesantes e importantes que le había enseñado, ya superaba los 90 años y también estaba perdiendo la memoria y la visión. EQUIS, así como los pájaros neozelandeses, daría lo que fuera para que su abuelo las recuperara! 12