SEGUNDO DOMINGO DE CUARESMA 24 DE FEBRERO DE Lectio: Lectura, Qué dice la Palabra de Dios?

Transcripción

1 SEGUNDO DOMINGO DE CUARESMA 24 DE FEBRERO DE 2013 Invocación del Espíritu Santo por medio de un canto, una oración que ayuden a entrar en un ambiente de recogimiento y reflexión. Empezar hacer la Lectio Divina por el Evangelio ayuda a comprender mejor el pensamiento que nos ofrece la Palabra de Dios en los textos bíblicos de cada domínica. No es el único, pero orienta hacer la lectura orante de la palabra desde el mismo Jesucristo, Verbo Divino. (Cfr. Preludio Evangelio de San Juan). Es necesario tener bien presente los cuatro pasos, si se comprende el sentido y significado de cada texto, se puede encontrar el mensaje que quiere dar el Señor hoy con esta Palabra. Las preguntas ayudan a descubrir las experiencias humanas y su relación con la experiencia de fe. 1. Lectio: Lectura, Qué dice la Palabra de Dios? Lectio o lectura: Escuchamos a Dios: Dios habla en la Sagrada Escritura. Nos fijamos en el mensaje que el texto bíblico contiene. Teniendo presente que este mensaje es palabra viva y eficaz, más cortante que una espada de dos filos que discierne los pensamientos y las intenciones del corazón (Hebreos 4,12) por eso, es el momento de la lectura atenta del texto bíblico. Pueden ayudarme preguntas como: Qué dice este pasaje bíblico? Quién habla? Qué temas o argumentos trata? Cuáles son los personajes allí implicados? Cuál es el contexto: persecución, sufrimiento, alegría, esperanza, desprendimiento, felicidad? Cuáles son los sentimientos y actitudes de los actores? Leer de una vez, e ir descubriendo el tema central de la Palabra: Primera lectura: Génesis 15, Salmo:27(26),1. 7-8a.8b-9abc Segunda lectura: Carta a los Filipenses 3, ó 3,17-4,1 Evangelio: Lucas 9,28b-36 Contexto bíblico: La Transfiguración tienen lugar en un momento clave en la vida servicial de Jesús; el ejercicio de su predicación, sanar, dar de comer, compadecerse de los humildes, 1

2 desvalidos, excluidos ha terminado en la tierra de Galilea; ahora cuando va a emprender el camino de Jesrusalén, el camino de la cruz. Qué vieron los discípulos? Un Jesús en su gloria en una montaña en medio de dos grandes personajes de Israel; uno, Moisés, el liberador y transmisor de la Tora y Elías, el profeta del Horeb. El texto: Cuáles son las personas que entran en acción? Cuántos escenarios encuentras en el texto del Evangelio? Cuáles son sus características? A qué escenas corresponden? Cuáles son las escenas principales: versículos que les corresponden. Qué titulo darías a cada escena? En cuál es el versículo se habla de la muerte de Jesús?. Confirmar la expresión: personajes. Verbos. Cuáles son los verbos de los versículos Cuál de estos verbos es el clave? Por qué? Qué sabemos sobre la oración? Cuáles son las expresiones? De quién? Cuál te impacta más? Cuáles son las actitudes de los discípulos? En qué momentos? Qué sabes decir del sentido o significado de la nube en la Biblia? Qué puedes resaltar del versículo35? (sujeto, verbos y acciones que generan? Qué relación encuentras con la fe? Qué resaltar de la primera lectura que tenga relación con el Evangelio? Buscar el versículo que más te ayuda de la segunda lectura de los filipenses. Por qué? San Lucas 9,28-36 Transfiguración de Jesús. El Evangelista, aunque como es lógico toma la fuente de San Marcos y lo combina con su propio estilo, enmarcando la Transfiguración de Jesús en una experiencia personal de Jesús, ocurrida durante una ardorosa transformadora oración. Cuáles son los elementos significativos en el texto? El texto resalta: la oración que transforma, la luz, la gloria de Jesús que dan razón de lo acontecido a Jesús; Él ha invitado a los discípulos a orar y sus efectos se hacen visibles: a) el cambio del aspecto de Jesús es obra de Dios, Él fue transformado, podría recordar el Éxodo 43,29, pero no, ya que la luz de Jesús proviene desde dentro; b) Jesús brilla con luz propia, mudó su aspecto externo del rostro de Jesús (Cfr. v.29); c) la manifestación 2

3 de la gloria (v.32b); esta gloria identifica la marca definitiva del mundo divino de Jesús (Lc. 2,8) y referencia además la majestad del Hijo del Hombre en plenitud del Reino (Lc 9,26 y 22,27); y d) Recibe luz del cielo sobre la partida (literalmente éxodo), es decir la muerte, (Cfr. Sabiduría 3,2;7,6; 2P1,15), que debe cumplirse en Jerusalén, justamente en la ciudad que mata los profetas. Esta partida está relacionada también con los eventos pascuales y el proceso que va a sufrir Jesús desde esta transfiguración hasta la Ascensión. La escena de ese sueño que abrumaba los discípulos, propio de Lucas, recuerda los hechos del Getsemaní (Lc. 22,45). Luis Alonso Schokel 1 resalta esta página del evangelio así: la transfiguración está completamente ligada al tema sobre la pasión, muerte y resurrección de Jesús, y al mismo tiempo hay una íntima relación entre la Escritura y el bautismo de Jesús. La relación con la Escritura y, en definitiva, con el plan salvífico del Padre está determinada por la presencia de Moisés (la Ley) y Elías (los Profetas) para decir que tanto la Ley como los Profetas atestiguan y aprueban la misión que Jesús está llevando a cabo. La relación con el bautismo de Jesús está dada en la voz que se escucha desde la nube; tal como sucedió en el Jordán (cfr. 3,21s), el Padre confirma, valida con su propia palabra la opción de Jesús. De manera que Jesús al elegir libremente el camino del dolor, del sufrimiento, recibe el respaldo del Padre quien ratifica no sólo a Jesús, sino a todo aquel que decida hacerse su discípulo. Contexto litúrgico: Hoy, igual que a los apóstoles, los cristianos tenemos grandes dificultades en el recorrido del camino de la fe. Ahora que vamos por este tiempo de la Cuaresma, es la oportunidad para salir de esos momentos que nos instalan, nos estatizan y poner todo lo que la Palabra nos regala para dinamizar nuestra experiencia de fe. Teniendo presente que la Cuaresma es un tiempo de ejercicio ascético (prácticas que conducen a la perfección en el recto actuar como el ayuno, limosna y oración); esto nos permite hacer oídos sordos a todo aquello que nos instala y no nos deja ver nuestras verdaderas necesidades como el perdón, la solidaridad, entre otras; por eso, la Palabra hoy, ante la promesa hecha a Abraham y cumplida en el nuevo pueblo de Dios, ahí estamos nosotros, pues somos ciudadanos del cielo que esperamos que Jesucristo nos transfigure cada día, él cuenta con tu y mi voluntad. La Palabra lleva al encuentro con el Señor, cambia la forma de pensar, de obrar, el corazón de 1 Biblia de Nuestro Pueblo, notas al Evangelio de San Lucas. 3

4 piedra en un corazón de carne, capaz de ubicarse en la cruda realidad del mundo de hoy, pero siempre con la esperanza que con el evangelio podemos cambiar el mundo. 2. Meditatio: Meditación. Qué me dice esta Palabra? Meditatio o la meditación: Dios habla para la vida: su mensaje nos interpela, nos ilumina nuestra vida y nos muestra el camino a seguir. La Palabra que encuentra en el texto bíblico penetra en el corazón. Qué me dice el texto bíblico? Aquí el orante profundiza. Interioriza el sentido de las palabras, las escenas, los personajes, la expresión más impactante, busca la expresión más diciente, la que toca la vida de fe. Relacionando así la vida de fe con las experiencias de las situaciones, realidades y personajes del texto bíblico. A qué invitó Jesús a sus discípulos a la montaña? Qué experiencia tuvo Jesús con la Transfiguración? Cómo me ayuda la experiencia de Jesús con la Transfiguración para mi experiencia de fe hoy? Cuándo y cómo me dejo transfigurar por Jesús? Estoy en disposición de pasar por el camino de la cruz para experimentar la resurrección? Busco de cada de estos textos de la Sagrada Escritura el que más me gusta, lo escribo y oro con él varios momentos del día. Qué experiencia voy adquiriendo con la oración? Qué invitación me hace el Señor en este tiempo de Cuaresma? 3. Oratio: Oración. Qué me hace decir esta Palabra? Oratio o el momento para la oración: incluye el momento en el cual se ora con el texto. Con la oración se responde a Dios, es un diálogo con Dios a su invitación a cambiar de actitud, de afianzar las actitudes evangélicas. Para orar lo mejor es responder a la pregunta Qué me hace decir este texto. Se expresan los sentimientos, las decisiones, la confrontación hecha por la palabra de Dios que se encuentra en el texto bíblico para mi mente y mi corazón. La vida se ofrece a Dios: desde la vida iluminada por la Palabra, dialogamos con Dios y como persona o comunidad orante, celebramos nuestra fe, alabando, bendiciendo, glorificando, dando gracias, pidiendo Cómo responde mi corazón al Señor? 4

5 Ponte en posición orante (por ejemplo: de rodillas, o con las manos abiertas hacia arriba sobre las rodillas ) lo imprescindible es sentir la presencia de Jesucristo. Señor aquí estoy ante tu presencia, Señor gracias por invitarme a experimentar tu transfiguración hoy. Gracias Señor Jesús porque me permites reconocerte como mi Señor, mi Salvador, como el Hijo amado de Dios. Con el salmista quiero decirte: El Señor es mi luz y mi salvación, a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, quién me hará temblar? Escúchame, Señor, que te llamo, ten piedad, respóndeme (dilo mucha veces y en voz baja). Oigo en mi corazón: Busquen mi rostro. Tu rostro buscaré, Señor (dilo mucha veces y en voz baja). No me escondas tu rostro, no rechaces con ira a tu siervo, que eres mi auxilio. Glorificado seas Señor! Alabado seas Señor! Padrenuestro. 4. Contemplación: Cómo me ayuda esta Palabra a encontrarme con Jesús? Qué actitudes y vivencias cristianas? Contemplatio o sea la contemplación: La Palabra se contempla para vivirla, es el momento del enamoramiento de la Palabra. Me permite llevar los ecos, las resonancias y las decisiones de la oración. Me ayudan preguntas como Qué decisión me sugiere el texto? Qué cambio necesito asumir? Qué acciones sugiere? Es necesario formular las vivencias y actitudes que despiertan este encuentro con el Señor y que me impulsan a revisar mi vida de fe, mi encuentro con Jesucristo. Por ejemplo, Cuáles actitudes voy a vivir durante la semana? Es dejarse permear por el pensamiento de Dios. Son las actitudes cristinas que suscitan este encuentro. Me impacta y causa profunda admiración: La Persona de Jesús que deja ver a los que suben con Él en la experiencia de la oración su rostro de luz, de gloria y de Hijo de Dios. Esta Palabra que me invita a tener cada día con más perseverancia la experiencia de la oración, para seguir el ejemplo de Jesús que oraba en los instantes cumbres de su ministerio; pues en su transfiguración se 5

6 Experiencia Grupo Bíblico Por el camino de Emaús Parroquia La Inmaculada. La llenó de luz, resplandor y de gloria. La oración siempre nos remonta al monte santo del diálogo, a sentir las consecuencias de la comunicación con el Señor como poder percibir la gloria, la misericordia, la benevolencia del Señor. La actitud de los discípulos invita a centrar la atención en Jesús para dejarse transfigurar por Él. Esto sólo se alcanza cuando se comprende el sentido y significado de su pasión, muerte y resurrección. Durante esta Cuaresma necesito tener el silencio y contemplación que tuvieron los discípulos por el camino, teniendo la reverencia ante el Hijo elegido de Dios, su Hijo Jesucristo, para sentir el gozo de las gracias pascuales. Sé que como los discípulos necesito experimentar este proceso de maduración espiritual para comprender el sentido y significado de pasar por la cruz y ser resucitada(o), transfigurada(o) como su discípula(o) misionera(o). Vivir el éxodo ayudada(o) con el ayuno 2, la solidaridad y la oración, que harán que mis oídos estén atentos a las enseñanzas, su Hijo Elegido, mi Maestro. Repetiré por eso: Este es mi Hijo, el escogido, escuchadle, con la convicción de que este escuchadle resuena en mis oídos como en los apóstoles, como el eco de fe recitada en el Shema Israel, escucha Israel, es el llamado a la confianza pase lo que pase. La Lectura orante de la Sagrada Escritura es mi apoyo. Y tú? 5. Escríbelo te ayuda bastante. 2 No sólo de alimentos como la carne, sino de todas aquellas actitudes que conducen a maltratar a las demás personas como las críticas, los insultos, las envidias, el odio. Abstención de todos estos comportamientos y conductas que aminoran la dignidad humana, sobre todo la de hijas e hijos de Dios. 6