EN EL DESIERTO SE DESCUBRE LO ESENCIAL PARA VIVIR (Benedicto XVI)

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3 EN EL DESIERTO SE DESCUBRE LO ESENCIAL PARA VIVIR (Benedicto XVI) Con esta frase, que hemos elegido como lema para este curso pastoral, queremos recoger y expresar el momento que vivimos y lo que pretendemos conseguir este curso pastoral. Estamos pasando por momentos nuevos y difíciles, que nos cuestionan lo que somos, lo que hacemos y lo que tenemos. Avanzar por el desierto, siempre con la esperanza de encontrar el oasis, es una oportunidad para re exionar y descubrir así el verdadero valor de aquellas cosas que son esenciales para vivir. Nuestra Iglesia Diocesana, aunque lleva muchos años evangelizando, experimenta la di cultad de no saber cómo anunciar hoy a Jesucristo en medio de la sociedad que le ha tocado vivir, o de no encontrar la audacia de hacerlo como conviene. Esa preocupación constante para que el Evangelio dé respuesta a la realidad personal y social, nos debe estimular a buscar caminos nuevos de evangelización. Las palabras de los Obispos en el Mensaje al mundo con motivo del último Sínodo sobre La Nueva Evangelización para la transmisión de la fe cristiana son de gran actualidad para todos nosotros: Conducir a los hombres y las mujeres de nuestro tiempo hacia Jesús, al encuentro con Él, es una urgencia que afecta a todas las regiones del mundo, tanto las de antigua como las de reciente evangelización. En todos los lugares se siente la necesidad de reavivar una fe que corre el riesgo de apagarse en contextos culturales que obstaculizan su enraizamiento personal, su presencia social, la claridad de sus contenidos y sus frutos coherentes Este momento decisivo de crisis es al mismo tiempo providencial. Esta oportunidad de revisar lo que somos, lo que 1

4 hacemos y lo que tenemos, nos exige un esfuerzo muy grande para observar la realidad dentro y fuera de la Iglesia, escuchar a las personas que están trabajando directamente en el campo pastoral, discernir los signos de los tiempos y proponer líneas conjuntas de acción pastoral. Hoy es necesario escuchar a nuestra Iglesia y escuchar a Jesús para que nos diga hacia dónde tenemos que echar las redes de nuevo; y eso signi ca buscar nuevos caminos, nuevos medios y nuevos espacios. Él es el único que puede cambiar nuestra actitud e ilusionarnos de nuevo en la tarea, como le pasó a los discípulos en el lago cuando reconocieron: Es el Señor. Deseamos que el trabajo del curso ayude a poner las bases para afrontar juntos la hermosa tarea de la Nueva Evangelización de las personas de nuestras islas, conscientes de que el Señor es el que lleva esta barca y que todos somos necesarios para seguir remando en el mar de la historia que nos ha tocado vivir. Por eso consideramos necesario que todas las estructuras de la Diócesis y todos los agentes pastorales nos revisemos y tomemos conciencia de nuestra identidad, nuestra vocación y nuestra misión corresponsable. Es muy importante ser realistas en estos análisis, valorando todo lo positivo que se ha hecho y se ha ido consiguiendo, y reconociendo igualmente las limitaciones y fallos encontrados. Toda esta revisión nos tiene que llevar a proponer alternativas y optar por propuestas de futuro que hagan posible el desarrollo de la Nueva Evangelización. Para llevar a cabo el objetivo de este curso es fundamental que todos los organismos de corresponsabilidad diocesana asuman el papel que les corresponde y se hagan responsables de dinamizar todo lo que entra dentro de sus funciones: Consejo Episcopal, Consejo Pastoral Diocesano, Consejo Presbiteral, Colegio de Arciprestes, Coordinadora de Delegaciones y Secretariados, Consejos Pastorales Arciprestales y Consejos Pastorales Parroquiales. 2

5 Ante el reto de la Nueva Evangelización tenemos como meta revitalizar y rejuvenecer las estructuras pastorales de nuestra Diócesis, nuestras comunidades cristianas y nuestros agentes pastorales. Por todo esto nos trazamos para el curso los dos OBJETIVOS siguientes: 1.- REVISAR LA DIÓCESIS. En los meses de noviembre y diciembre queremos que el Plan Pastoral se centre en revisar la realidad pastoral de la Diócesis desde la perspectiva de la Nueva Evangelización. Se trata de revisar: a) El Plan Diocesano en sí mismo. En cuanto al Objetivo (general y de cada año), el contenido, su formato, la metodología, los materiales, las catequesis, la dinámica de trabajar por objetivos b) La aplicación y el desarrollo del mismo, la repercusión que ha tenido en nuestra vida personal, en las parroquias, movimientos, en la realidad Diocesana en general. c) Las estructuras y organismos de corresponsabilidad pastoral: Parroquias, Arciprestazgos, Delegaciones y Secretariados, Colegio Arciprestal, Consejo presbiteral, Consejo Pastoral Diocesano, Movimientos y Asociaciones. Para conseguir todo esto consideramos que es fundamental escuchar y tomar conciencia de la situación que viven en estos momentos los agentes de la pastoral: sacerdotes, vida consagrada y laicos 3

6 2.- ELABORAR UN FUTURO PLAN PASTORAL Entre los meses de enero y junio centraríamos el trabajo en hacer propuestas para el Plan Diocesano de los próximos años, y para ellos nos serviremos de estos tres elementos: a) de las conclusiones que se obtengan al revisar el Plan Diocesano de Pastoral de estos años b) de las necesidades que se vayan descubriendo al revisar las estructuras pastorales de la Diócesis c) de los planteamientos que ha hecho el Sínodo Diocesano y el Sínodo de los Obispos sobre la Nueva Evangelización. Para conseguir estos objetivos proponemos el siguiente CALENDARIO: OCTUBRE: dos actividades importantes: 1) Asamblea del Clero de inicio de curso. Ya se está preparando para el 31 de Octubre como prevé la Agenda Diocesana, teniendo en cuenta también los trabajos que ya se iniciaron a lo largo del último Curso. En los días previos se celebrarán los Retiros Sacerdotales de principio de curso como de costumbre: 15 de Octubre en Fuerteventura, 17 en Gran Canaria, y 18 en Lanzarote. 2) Presentación del Plan Diocesano de Pastoral a toda la Diócesis según el calendario establecido en la Agenda Diocesana para informar sobre las líneas fundamentales del trabajo, animar la implicación de todos y la conciencia de la corresponsabilidad y presentar las pautas de trabajo. NOVIEMBRE DICIEMBRE: Estos meses se dedicarán a revisar el Plan Pastoral que se ha trabajado estos seis años y las estructuras pastorales, haciendo un serio esfuerzo para detectar la situación personal de los agentes pastorales. 4

7 Se ofrecerá a todos un esquema de trabajo y las fechas en que deberán ser enviadas a la Vicaría General o a la Secretaría General de Pastoral las distintas aportaciones y re exiones. ENERO-MARZO: Estos meses se dedicarán a hacer propuestas para elaborar el Plan Diocesano de los próximos cursos a partir de las conclusiones que se recojan en la revisión hecha en el primer trimestre, y de las propuestas del Sínodo Diocesano y del Sínodo de los Obispos. Para ello se ofrecerá a toda la Diócesis un esquema de trabajo. Las sugerencias y propuestas que se hagan deberán ser enviadas antes del 31 de marzo a la Vicaría General o a la Secretaría General de Pastoral. ABRIL JUNIO: En mayo está previsto celebrar la Asamblea del Clero de nuevo, y un Encuentro Diocesano. Las fechas se concretarán en función del calendario de la Bajada de la Virgen del Pino a Las Palmas de Gran Canaria. En este Encuentro se trabajarán las sugerencias y propuestas enviadas previamente para el Plan Pastoral de los próximos años. Se nombrará una Comisión que recoja las líneas de acción pastoral que se propongan y las transformen en un futuro Plan Pastoral Coincidiendo con el tiempo de Pentecostés se propone realizar por Parroquias o Arciprestazgos espacios de oración para pedir que el Espíritu Santo ilumine y acompañe a la Diócesis ante los retos pastorales que le plantea la Nueva Evangelización. SEPTIEMBRE - OCTUBRE 2014: Se presentará en toda la Diócesis el nuevo Plan Diocesano de Pastoral con sus objetivos, las acciones a realizar y los materiales necesarios para ello. 5

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