Disturbio antropogénico en los paisajes regionales de la Península de Baja California

Transcripción

1 Disturbio antropogénico en los paisajes regionales de la Península de Baja California Doctorado Nombre del alumno: Rigel Alfonso Zaragoza Álvarez Nombre del tutor: Edward Michael Peters Recagno Semestre que cursa: Séptimo Introducción Los seres humanos en las últimas cinco décadas han intensificado el uso, transformado, perturbado y degradado a los ecosistemas globales, como en ningún otro periodo de la historia humana (Millennium Ecosystem Assessment 2005), lo que ha generado la reducción y extinción acelerada de la diversidad de especies, dentro de muchos hábitats en todo el mundo (Tilman 2000) y ha sido uno de los principales factores que influyen en la dinámica del paisaje (Rykiel et al. 1988). Estos cambios en la biodiversidad están teniendo consecuencias directas en los servicios de los ecosistemas, y un impacto en las actividades económicas y sociales del hombre (Chapin et al. 2000). Este trabajo mide el disturbio antropogénico, a nivel regional utilizando indicadores de disturbio de la actividad humana a partir de un análisis multivariado, teniendo como unidades espaciales los paisajes físico-geográficos (Zaragoza et al. 2013). Métodos La Península de Baja California, México, se localiza en la parte Noroeste de la República Mexicana, limita con la frontera de Estados Unidos, en los 32 38' de latitud norte y en la parte sur, con Cabo San Lucas, en los 22 52' norte. La Península está rodeada por aguas del Océano Pacífico y Golfo de California. Cuenta con una extensión de alrededor de 145, 000 km². Su longitud es de 1,200 kilómetros. La Península se encuentra divida en tres provincias climáticas: 1) Noroeste, en la que se registran los climas secos o muy secos y subhúmedos; 2) Golfo de California, donde predominan los climas muy secos y semisecos; y 3) Pacífico Central, allí, prevalecen los climas muy secos, semisecos y cálidos húmedos (Vidal 2005). En la península de Baja California predomina un sistema montañoso, heterogéneo en su constitución litológica y morfología, y que se encuentra dividida en tres subsistemas principales: septentrional, centromeridional y meridional. A estos subsistemas se le asocian numerosas depresiones menores, transversales y paralelas (Lugo 1990). El disturbio antropogénico, se midió teniendo como base la cartografía de los paisajes físico-geográficos de la península de Baja California, y se recurrió a la unidad taxonómica de Región físico-geográfica (Zaragoza et al. 2013).

2 Para medir el disturbio antropogénico se registraron trece variables, obtenidas de la carta topográfica, escala 1: (INEGI, 2008); de la carta de uso del suelo y vegetación, escala 1:250, 000 Serie IV (INEGI, ); del Censo de Población y Vivienda 2010 (INEGI, 2011); del Censo Agrícola, Ganadero y Forestal 2007, por área geoestadística básica rural (INEGI, 2012) y, por último se utilizó la Carta de Degradación del suelo causada por el hombre, escala 1:250,000 (SEMARNAT, 2004). Dichas variables son: (1) Vegetación inducida (VEGI), (2) Agroecosistema (AGRO), (3) Asentamientos humanos (ASET), (4) Población (PERS), (5) Acueducto (ACUE), (6) Bordo (BORD), (7) Minas (MINA), (8) Ganado bovino (GBOV), (9) Ganado menor (GMEN), (10) Longitud de caminos (CAMI), (11) Longitud de carreteras (CARR), (12) Longitud línea de transmisión (TRAN), y (13) Erosión (EROS). Se realizaron cortes en el sistema de información geográfica (ArcInfo Workstation 10), por cada una de las trece variables, y, por cada una de las cien regiones físico-geográficas. Los datos obtenidos fueron normalizados y combinados en un solo índice (Martorell y Peters 2005), a través de un análisis de componentes principales (ACP), realizado en R (Core Team 2012) con la función princomp. Resultados El puntaje del ACP para una región, es una combinación de los valores registrados para cada indicador, y refleja las diferentes formas del disturbio en esa región, lo que permite realizar una clasificación del grado de disturbio a partir de una estandarización de 0 a 10 de los scores de las regiones físico-geográficas, y así poder mostrarlas cartográficamente. Los componentes principales uno y dos representan el 45 % y el 10 %, respectivamente, de la varianza total y fueron significativos. El componente principal uno cuenta con loadings, que en la mayoría de las variables son negativas, con excepción de MINA y EROS, que cuentan con valores cero. Los loadings del segundo componente son positivos, negativos, y con valores cero; los positivos son ACUE, GBOV, GMEN, CAMI Y EROS; los negativos VEGI, AGRO, ASET, BORD y MINA; y con valores cero PERS, TRAN y CARR (Tabla 1). En ambos componentes principales se distribuyeron uniformemente los puntajes de las regiones, sin ninguna discontinuidad fuerte o agrupación (Figura 1). Con la estandarización realizada a los puntajes se representa cartográficamente el disturbio antropogénico, en las regiones físico-geográficas. La región con mayor disturbio se ubica en la parte norte del área de estudio, y las de muy bajo disturbio, se distribuyen en el norte, centro y sur (Figura 2). El muy alto disturbio comprende un área de 5,609.2 km2 y 4.3 % del área de estudio. El alto abarca 8,263.8 km2 y 6.3 %. El medio, con 15,031 km2 y 11.5%. El bajo, 29,551.3 km2 y 22.7 %. Y muy bajo disturbio se distribuye en un área de 71, km2 y con 55.1 % del área de estudio.

3 Discusión Los loadings del primer componente principal son en su mayoría negativos y presumiblemente significativos según (Hair et al 1987), lo que indica que en este eje la mayoría de las variables generan presión antropogénica alta. Mientras más grandes son los puntajes, se espera que el disturbio aumente, y ordenándolos se puede tener un gradiente con regiones que van de menor a mayor disturbio. Los loadings significativos corresponden a PERS, TRAN, GBOV, GMEN, CARR, ASET y AGRO, mismos que representa los principales agentes del disturbio antropogénico en los paisajes regionales de la península de Baja California. Con lo que respecta a MINA y EROS, estos contienen loadings nulos por su bajo impacto antropogénico en los paisajes a nivel regional. En lo que respecta al segundo componente principal pareciera estar relacionado cualitativamente en lugar de cuantitativamente con el disturbio. Como se puede ver en los signos de los loadings, los valores negativos están relacionados con el disturbio antrópico, mientras los positivos los podemos relacionar con la ganadería. Referencias Chapin, F.S. III, Zavaleta, E.S., Eviner, V.T., Naylor, R.L., Vitousek, P.M., Reynolds, H.L. et al. (2002). Consequences of changing biodiversity. Nature, 405, Lugo H. J. (1990). El relieve de la República Mexicana. Revista del Instituto de Geología 1(9), pp Martorell, C. y Peters, E.M., (2005). The measurement of chronic disturbance and its effects on the threatened cactus Mammillaria pectinifera. Biological Conservation, 124(2), pp Millennium Ecosystem Assessment (2005). Ecosystems and Human Well-Being: Synthesis, Washington D.C, Island Press. R Core Team (2012). R: A language and environment for statistical computing. R Foundation for Statistical Computing, Vienna, Austria. ISBN , URL Rykiel, E.J. Jr, Coulson, R.N., Sharpe, P.J.H., Allen, T.F.H. & Flamm, R.O. (1988) Disturbance propagation by bark beetles as an episodic landscape phenomenon. Landscape Ecology, 1, pp Tilman, D. (2000). Causes, Consequences and Ethics of Biodiversity. Nature 405, pp

4 Vidal, R Las Regiones Climáticas de México. México: Instituto de Geografía, Universidad Nacional Autónoma de México. Zaragoza, R., Peters, E. M., Bollo, M. y Herández, J. (2013). Áreas Prioritarias de Geoconservación de la biodiversidad en la Península de Baja California, México Áreas Prioritarias de Geo-conservación de la biodiversidad en la Península de Baja California, México. Journal of Latin American Geography, 12(3), pp.7 31.

5 Anexos: Tablas, figuras y mapas. Tabla 1. Loadings de los dos primeros componentes Figura 1. Gráfico de los dos primeros componentes Comp.1 Comp.2 VEGI AGRO ASET PERS ACUE BORD MINA GBOV GMEN TRAN CAMI CARR EROS

6 Figura 2. Mapa de disturbio antropogénico por región físico-geográfica.