TEMA INTRODUCTORIO LA CIVILIZACIÓN ROMANA

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1 TEMA INTRODUCTORIO LA CIVILIZACIÓN ROMANA La ciudad de Roma, que se sitúa en el centro de la península Itálica, creó uno de los mayores imperios de la Antigüedad. Los romanos conquistaron los territorios que rodean el mar Mediterráneo, y también extendieron su influencia desde los desiertos de África hasta el norte de Europa y las islas Británicas. Los pueblos que habitaron esas regiones quedaron integrados en una civilización común, y su legado todavía perdura en muchos de ellos. ETAPAS DE LA HISTORIA DE ROMA La Roma antigua tiene una cronología que abarca más de mil años de Historia desde su fundación a orillas del río Tíber en el siglo VIII antes de Cristo, hasta la caída del Imperio Romano de Occidente en el año 476. A lo largo de ese período de tiempo se diferencian las siguientes etapas: - Monarquía (siglos VIII-VI a. C.): En este período Roma estuvo gobernada por reyes de origen latino y etrusco. Fue también el momento en el que Roma se convirtió en la ciudad más poderosa de su región, el Lacio. - República (siglos VI-I a. C.): El Gobierno queda en manos de gobernantes elegidos por los ciudadanos. Es también el momento en el que se produce la expansión de Roma por el mar Mediterráneo, llegando desde la península Ibérica hasta Oriente Próximo. - Imperio (siglos I a. C. - V d. C.): En esta etapa Roma alcanza su máxima expansión territorial, pero a partir del siglo III d. C. se inicia el proceso de decadencia del Imperio. LA FUNDACIÓN DE LA CIUDAD En los orígenes de Roma se mezcla lo legendario con lo real: - La leyenda dice que Roma fue fundada por dos hermanos, Rómulo y Remo, que ya adultos se habrían enfrentado, resultando vencedor Rómulo, que sería el fundador de Roma. - Desde el punto de vista histórico (real), la ciudad habría sido fundada por etruscos y latinos, que habrían situado la ciudad en un punto estratégico cercano al mar, con el río Tíber cerca, y rodeado de colinas que facilitaban la defensa. Además, la 1

2 ciudad estaría en un lugar de paso de las rutas comerciales que unían el norte y el sur de la península Itálica. LA MONARQUÍA Y LA REPÚBLICA La etapa monárquica El primer sistema de Gobierno que tuvo Roma fue la monarquía, es decir, el Gobierno de reyes, y este sistema duró desde la fundación de la ciudad hasta el siglo VI a. C. Según la tradición, en Roma hubo siete reyes (Rómulo y otros seis). Los tres primeros después de Rómulo serían de origen sabino. Los sabinos eran un pueblo ganadero de las colinas cercanas a la ciudad. Después de estos, los tres siguientes serían de origen etrusco. El rey era la máxima autoridad tanto política como religiosa como militar. A la hora de tomar decisiones, los reyes se apoyaban en el Senado, una asamblea formada por los jefes de las familias más poderosas de Roma. Además había otra asamblea llamada comicio, que estaba formada por el resto de los ciudadanos, y en la que se representaban los tres pueblos que habitaban la ciudad: latinos, etruscos y sabinos. Los integrantes de esta asamblea votaban para elegir al monarca y a los senadores. Durante la época monárquica, Roma se convirtió en una ciudad-estado, hasta llegar a ser la más importante del Lacio. El último rey, Lucio Tarquino el Soberbio, ejerció el poder de manera muy autoritaria, de manera que los romanos, descontentos con él, lo expulsaron y proclamaron la República. La República romana El sistema republicano duró alrededor de cinco siglos. Después de la expulsión del último rey, el poder quedó en manos de los patricios, que eran los jefes de las familias más importantes y descendientes de los fundadores de la ciudad. El resto de la población eran los plebeyos, que pagaban impuestos y acudían al ejército cuando era necesario. Para evitar que una sola persona concentrara todo el poder, como había pasado en la etapa anterior, los romanos repartieron las funciones políticas y judiciales entre varias instituciones: 2

3 - Las magistraturas eran el principal órgano de Gobierno, y los magistrados eran elegidos cada año, salvo excepciones. Los patricios eran los únicos que podían ser magistrados, lo que hizo que los plebeyos se sintieran apartados de las funciones de Gobierno, así que para defender los derechos de los plebeyos se creó la magistratura de los tribunos de la plebe. El resto de los magistrados principales eran: o Los cónsules: Eran dos y se elegían cada año. Ejecutaban las leyes y dirigían al ejército en tiempo de guerra. o Los pretores: Impartían justicia. o Los cuestores se encargaban de las cuentas públicas con ayuda de los cónsules. o Los ediles se encargaban de la vida pública, teniendo una función parecida a la que tienen los alcaldes actuales. o Los censores realizaban el censo de los ciudadanos, y los ordenaban en grupos dependiendo de su riqueza. - El Senado era la institución más importante durante la República, ya que en él se tomaban las principales decisiones políticas. Asesoraba a los magistrados y dirigía la política exterior y al ejército, además de que tenía funciones religiosas. Estaba formado por 300 antiguos magistrados cuyo cargo era vitalicio. - Los comicios, integrados por ciudadanos libres, se organizaban en función de la riqueza y la procedencia de sus componentes. Elegían a los magistrados y proponían nuevas leyes, que luego debían ser ratificadas por el Senado. LA EXPANSIÓN POR EL MEDITERRÁNEO Las conquistas durante la República Con la instauración de la República, Roma empezó un proceso de expansión territorial a través de las conquistas militares de su ejército y de las alianzas con otros pueblos. Tras dominar toda la península Itálica, Roma se expandió por todo el Mediterráneo. Entre los siglos V y III a. C., Roma derrotó al resto de los pueblos que habitaban la península Itálica: etruscos y samnitas en el centro, y colonos griegos en el sur. Además, desde el norte llegaron a Roma los galos, y los romanos tuvieron que enfrentarse a ellos también. 3

4 Una vez controlados los territorios peninsulares, Roma inició la conquista del Mediterráneo occidental, lo que les llevó a enfrentarse a Cartago, la otra gran potencia mediterránea del momento, en las Guerras Púnicas. Durante los siglos III y II a. C., romanos y cartagineses se enfrentaron en tres guerras que terminaron con la derrota cartaginesa y la conquista por parte de Roma de Sicilia, Córcega, el norte de África y la mayor parte de la península Ibérica. Una vez controlado el Mediterráneo occidental, se inició la expansión hacia oriente, derrotando a los griegos y los macedonios. Después se anexionaron Siria y Egipto, y así el Mediterráneo pasó a ser el Mare Nostrum romano. Por último, durante el siglo I a. C., los romanos conquistaron otras zonas de Europa, como la Galia (la actual Francia), el sur de la actual Gran Bretaña y parte de Europa central. DE LA REPÚBLICA AL IMPERIO Las consecuencias de la expansión Las conquistas por el Mediterráneo aportaron a los romanos dinero, esclavos y tierras, pero también dieron lugar a una gran inestabilidad en la República, porque los beneficios se repartían de manera muy desigual entre la población. Los ricos fueron los que más se beneficiaron de las conquistas, mientras que los campesinos, arruinados por el hecho de que debían pasar mucho tiempo en el ejército, comenzaron a exigir más tierras y una mayor participación en la política. Eso dio lugar a varias revueltas sociales, siendo las más importantes la revuelta de los plebeyos (siglo II a. C.), que pedía reformas para ayudar a los más desfavorecidos, y la rebelión de los esclavos, comandada por el gladiador Espartaco, que intentó terminar con la esclavitud. La inestabilidad social aumentó la influencia del ejército y de sus generales, y eso dio lugar a un período de guerras civiles. La crisis del siglo I a. C. La debilidad de la República hizo que se formaran los triunviratos, alianzas entre generales que pretendían restaurar la calma y, de paso, ver cumplidas sus ambiciones personales. - El primer triunvirato estuvo formado por Pompeyo, Julio César y Craso. Muy pronto se iniciaron las diferencias entre ellos y se enfrentaron, resultando vencedor Julio César. Fue nombrado dictador perpetuo, pero fue asesinado en el Senado en el 44 a. C. 4

5 - El segundo triunvirato fue el formado por Octavio, Marco Antonio y Lépido. También se enfrentaron, y su enfrentamiento terminó con la victoria de Octavio, que concentró todos los poderes y se proclamó emperador, poniendo fin a la República y dando inicio a la etapa imperial. La Pax romana El período de la Historia de Roma que abarca los siglos I y II d. C. se llama Pax romana. Es la fase en la que se vivió una etapa de paz y estabilidad, y también el momento en el que se consigue su máxima expansión territorial. Los extensos territorios que comprendía fueron organizados en provincias, cada una de ellas dirigida por un gobernador, ayudado por funcionarios y militares. Las fronteras (o limes) se protegieron con un sistema de fortificaciones, que servían para detener las invasiones de los pueblos que vivían fuera, los bárbaros. Los romanos fueron implantando sus costumbres, su religión, sus leyes, su lengua y su modo de vida en los territorios que conquistaban, en un proceso llamado romanización. Por último, en el año 212, el emperador Caracalla concedió la ciudadanía romana a todos los habitantes libres del Imperio, que para entonces ya habían adoptado las leyes y la cultura de Roma. LA DECADENCIA DEL IMPERIO Tras la Pax romana, la estabilidad del Imperio comenzó a romperse en el siglo III, cuando roma tuvo que hacer frente a una serie de problemas militares, políticos, económicos y sociales. La crisis del siglo III Gran parte de la prosperidad romana se debía a su expansión territorial, porque con sus conquistas Roma se había apropiado de las riquezas de los territorios que conquistaba. Sin embargo, a partir del siglo II las fronteras se estabilizan (es decir, se deja de conquistar), y una frontera tan extensa obliga a un gasto muy grande para defenderlo de los ataques de los bárbaros. Empieza a disminuir la cantidad de mano de obra esclava, lo que llevó a que hubiera menos producción en la agricultura, la artesanía, la minería y el comercio. Para aumentar los ingresos hizo falta aumentar los impuestos, lo que empeoró mucho más la situación económica. 5

6 Ante la crisis, muchos ciudadanos libres de las ciudades se fueron a trabajar como colonos en las villas que los grandes terratenientes romanos tenían en el campo. Las ciudades perdieron importancia y se hicieron más inseguras. La crisis afectó también a la política, ya que al no haber un sistema de sucesión estable para la elección de los emperadores, muchos generales lucharon para hacerse con el poder, lo que provocó el asesinato de emperadores y el estallido de guerras civiles. La llegada de los pueblos bárbaros La inestabilidad del Imperio facilitó la penetración de los pueblos bárbaros dentro del limes. Así, diversos pueblos germánicos atravesaron la frontera de los ríos Rin y Danubio para ocupar tierras aprovechando la debilidad del ejército. Por eso, los emperadores tuvieron que firmar pactos con algunos de estos pueblos y cederles territorios a cambio de que cooperasen en la defensa de las fronteras contra otros pueblos bárbaros. Así, los pueblos germánicos tuvieron cada vez más presencia en el Imperio. La división del Imperio y la caída de Roma Ante la situación de crisis política, económica e institucional, el emperador Teodosio decidió dividir el Imperio entre sus dos hijos en el año 395: - Honorio recibió la zona occidental, con capital en Roma. - Arcadio recibió la zona oriental, con capital en Constantinopla (la actual Estambul). Sin embargo, la situación no mejoró la situación en la zona occidental del Imperio, y en 410 los visigodos penetraron y saquearon Roma. Finalmente, en el año 476 el último emperador romano de occidente, Rómulo Augústulo, fue derrocado, en el acontecimiento que, para muchos, supone el final de la Edad Antigua y el principio de la Edad Media. LA SOCIEDAD ROMANA La evolución social Desde la época monárquica, la sociedad romana fue muy desigual. En este momento existían cuatro grupos sociales bien diferenciados: 6

7 - Los patricios descendían de las familias fundadoras de Roma. Controlaban la política de la ciudad y poseían la mayor parte de la tierra (y de la riqueza). - Los plebeyos eran ciudadanos libres, pero tenían menos participación política. Pagaban impuestos y se alistaban en el ejército. - Los semilibres podían ser clientes, que estaban al servicio de los patricios a cambio de un sueldo, o libertos, antiguos esclavos a los que se había concedido la libertad. - Los esclavos eran prisioneros de guerra o hijos de otros esclavos. No eran libres y trabajaban en el campo y las viviendas de los patricios. La expansión territorial en época republicana provocó cambios sociales. Con la conquista de territorios aumentó el número de esclavos, y surgieron otros grupos sociales, como el de los caballeros (o equites), que eran de origen plebeyo pero que se habían enriquecido gracias a las conquistas, adquiriendo gran poder económico. En la época imperial se acentuaron las diferencias entre los que tenían la ciudadanía romana y el resto: - El primer grupo estaba formada por la nobilitas (clase rica y dirigente), los caballeros y la plebe (que estaba formada por soldados, campesinos y artesanos asalariados). - Los esclavos y libertos no eran ciudadanos. Los esclavos fueron muy numerosos durante la Pax romana, aunque su número fue descendiendo a partir del siglo III, lo que hizo que se revalorizaran y se convirtieran en un bien cada vez más preciado. LA ECONOMÍA ROMANA Roma, una potencia económica Roma tenía una economía muy próspera: - La agricultura era la actividad más importante. Había pequeñas propiedades de campesinos, pero lo más habitual eran las grandes explotaciones trabajadas por esclavos, en las que se cultivaban cereales, vides, hortalizas y frutas. Roma llevaba a cabo la explotación de los lugares que conquistaba, y cada región se especializaba en un tipo de producto, como el aceite de oliva de la Bética (sur de la península Ibérica), el vino de la Galia o el trigo egipcio. - La ganadería tenía también mucha importancia. Además de criar vacas y ovejas, también criaban caballos, muy demandados por el ejército. 7

8 - La minería fue una de las actividades más importantes durante el Imperio. Cuando se descubría una mina, esta pasaba a ser propiedad del Estado romano, que la arrendaba (alquilaba) a particulares que la explotaban con esclavos. - La artesanía también tuvo mucha importancia, con talleres a cargo de hombres libre y con mano de obra esclava. - El comercio también se desarrolló mucho, especialmente durante el período de la Pax romana, momento en el que se abrieron las rutas marítimas y se construyó una extensa red de calzadas. LA RELIGIÓN Y LA CULTURA ROMANA A lo largo de su Historia, los romanos tuvieron primero una religión politeísta, es decir, que adoraban a varios dioses, pero posteriormente, ya a finales del siglo IV d. C., adoptaron una religión monoteísta, el cristianismo. La vida religiosa en Roma Desde la fundación de la ciudad, los romanos adoptaron las divinidades griegas, a las que dieron nombres latinos. Pero la conquista de nuevos territorios permitió que entraran en contacto con otros pueblos, y así adoptaron también sus divinidades. Nacimiento y evolución del cristianismo En una provincia del sur del Imperio, Palestina, surgió el cristianismo en el siglo I d. C. Esta nueva religión afirmaba que existía un único Dios, y defendía también la igualdad entre todos los seres humanos. Durante dos siglos, los cristianos fueron perseguidos y muchos murieron. Sin embargo, el número de fieles aumentó, de modo que en el año 313, el emperador Constantino permitió que se practicara el cristianismo (y cualquier otra religión). Finalmente, en el año 380, el emperador Teodosio proclamó el cristianismo la religión oficial del Imperio. A partir de este momento, los que seguían adorando a los antiguos dioses se les llamó paganos. El legado cultural romano La cultura romana, surgida a partir de la influencia de otros pueblos como los griegos y los etruscos, se difundió por el Mediterráneo a medida que Roma fue conquistando nuevos territorios. Más de dos mil años después, todavía conservamos parte de este legado cultural: 8

9 - El derecho: Los romanos redactaron leyes que establecían derechos y deberes de los ciudadanos, y que regulaban su relación con el Estado. El derecho romano es la base de nuestro derecho actual. - El latín: La lengua latina fue fundamental en el proceso de romanización por el Mediterráneo, y así muchos idiomas actuales derivan de él, como el castellano, el asturiano, el italiano, el portugués, el francés o el rumano, entre otros. - El urbanismo: Los romanos diseñaban sus ciudades con una estructura en cuadrícula, y muchos arquitectos actuales proyectan los nuevos barrios siguiendo ese modelo. LA ARQUITECTURA Y EL ARTE DE ROMA El arte romano recibió la influencia de distintas civilizaciones, como la etrusca o la griega. La arquitectura romana A diferencia de los griegos, cuyas edificaciones tenían una escala humana, los romanos levantaron construcciones monumentales, pero también edificios de carácter práctico, como las termas, los acueductos o los teatros. También construyeron otros con intención propagandística, como los arcos de triunfo. Los romanos emplearon nuevos materiales de construcción, e introdujeron innovaciones técnicas que dieron lugar a la arquitectura abovedada. - Usaron cemento, que da más resistencia a los muros. - Desarrollaron el arco semicircular o de medio punto, que usaron para construir puentes, anfiteatros, circos o acueductos. - La bóveda de cañón es un sistema de cubierta que resulta de la sucesión de arcos de medio punto. Permitió construir edificios de grandes dimensiones. - También crearon la cúpula o bóveda circular. La escultura romana La escultura romana es muy realista y expresiva. Los retratos de personajes ilustres nos permiten saber cómo eran, por el realismo con el que los representaban. Por influencia griega los romanos dejaron de lado el uso del barro y el bronce y se sirvieron del mármol. Los escultores realizaban obras de diferentes tipos: - Relieves históricos, que narraban acontecimientos de la Historia de Roma y situaciones de la vida cotidiana. Con ellos se decoraban las paredes de los palacios. 9

10 - Bustos, que eran esculturas de medio cuerpo. Destacan los retratos de los personajes con cargos importantes, que pertenecían a las grandes familias patricias. - Las estatuas de los emperadores y de los principales cargos políticos tenían una función propagandística, y por eso, en vez de ser realistas, idealizaban al personaje representado. Se hacían de bronce y de mármol. - Las estatuas ecuestres se hacían para honrar a los personajes importantes, como emperadores y líderes militares. Estaban hechas de bronce. La pintura y el mosaico Los romanos usaron la pintura y el mosaico para decorar las paredes y suelos de palacios y villas. En estas obras se representaban escenas cotidianas y mitológicas, o también figuras geométricas, entre otras. - La pintura se adaptaba al espacio arquitectónico donde se ponía, para lograr una sensación de perspectiva. Igual que los griegos, los romanos usaron la pintura al fresco. - Los mosaicos se usaban para decorar los suelos. Estaban compuestos por conjuntos de teselas, pequeños cubos de piedra de colores que, al juntarse, componían figuras. 10