Alfarda izquierda de la. escalera central de la Pirámide de Quetzalcóatl. Alfarda derecha de la. escalera central de la Pirámide de Quetzalcóatl.

Transcripción

1 Alfarda derecha de la escalera central de la Pirámide de Quetzalcóatl. Alfarda izquierda de la escalera central de la Pirámide de Quetzalcóatl.

2 Cabezas de serpiente surgiendo de los pétalos de una flor decoran las alfardas de la Pirámide de Quetzalcóatl.

3 . todas y cada una de las cuales son diferentes, algunas han perdido partes de su cuerpo (arriba) y otras parecen melancólicas (abajo)

4 .. o vigilan desde las alturas, (arriba), mientras otras esperan pacientes a ocupar su antiguo lugar (abajo).

5 Curiosamente existe una segunda placa informativa sobre el monumento, claramente posterior a la ya comentada, cuyo texto difiere en parte y que por su interés, como en casos anteriores, vamos a reproducir. Segunda placa informativa del Templo de la Serpiente Emplumada de la Ciudadela de Teotihuacán. El llamado Templo de Quetzalcóatl o de la Serpiente Emplumada fue construido entre los años d.c. Es uno de los edificios con una de las decoraciones más bellas y complejas de época prehispánica, y seguramente en el pasado se veía más impresionante, pues estuvo pintado de colores intensos. Presenta serpientes emplumadas que parecen moverse entre múltiples figuras de conchas y caracoles marinos, es decir, en un ambiente acuático. Hay también un monstruo con grandes colmillos sin quijada, con dos círculos en la frente, dos círculos laterales (ojos), y textura cuadriculada, pero al parecer no es un dios, sino un adorno o tocado que la serpiente lleva puesto. La figura de la serpiente emplumada es una idea que se conservó hasta la llegada de los españoles y es conocida como Quetzalcóatl, dios al que se considera iniciador de las actividades del hombre en la tierra, el que brinda los bienes y el creador de las divisiones calendáricas. Por ello se cree que este templo fue dedicado a la creación del tiempo. Alrededor del 350 d.c. fue cubierto por otra estructura (plataforma adosada), pero a inicios del siglo XX salió nuevamente a la luz tras las excavaciones y restauraciones hechas por Ignacio Marquina y Manuel Gamio. Conforme a la interpretación de haber estado pintado de vivos colores es la recreación que exhibe el Museo Nacional de Antropología de México.

6 Recreación del Museo Nacional de Antropología del aspecto que se supone tenía originalmente la Pirámide de la Serpiente Emplumada de Teotihuacán.

7 Recreación del Museo Nacional de Antropología de la máscara de Quetzalcóatl de la Pirámide de la Serpiente Emplumada de Teotihuacán.

8 Recreación del Museo Nacional de Antropología de las máscaras de Quetzalcóatl (arriba) y Tláloc? (abajo) de la Pirámide de la Serpiente Emplumada de Teotihuacán.

9 Recreación del Museo Nacional de Antropología de la máscara de Tláloc? de la Pirámide de la Serpiente Emplumada de Teotihuacán.

10 Antes de descender la escalinata de la Plataforma Adosada, lugar desde el que se obtiene una visión del recinto interior de la Ciudadela que nos permite hacernos una somera idea de la que debían tener las personas que ascendieran hasta lo más alto del Templo de Quetzalcóatl, para dejar atrás esa maravilla, debemos hacer un par de comentarios adicionales. El primero es referente al hecho de la existencia de dos conjuntos de tipo habitacional, uno a cada lado de la Pirámide, que según los estudiosos estaban destinados a alojar a los miembros de las élites teotihuacanas. El segundo está relacionado con el descubrimiento de manera accidental en el año 2003 d.c. de la entrada de un túnel situado al pie de la Plataforma Adosada que penetraba bajo la Pirámide. Su exploración permitió localizar a mitad del mismo dos cámaras intermedias de cuyo interior se recuperó un conjunto de esferas de arcilla recubiertas de pirita que los investigadores asocian con una representación del cielo estrellado del inframundo, mientras que al final de los cerca de 120 metros de longitud explorados se abren tres cámaras que se suponen podrían ser los enterramientos de altos personajes de la clase dominante de la ciudad. Conjunto habitacional ubicado a la derecha del Templo de Quetzalcóatl.

11 Conjunto habitacional ubicado a la izquierda del Templo de Quetzalcóatl (arriba) y del Edificio Sur (abajo) ambos en fase de estudio y excavación.

12 La Pirámide del Sol vista desde la Plataforma Adosada (arriba) y entrada al túnel bajo la Pirámide de Quetzalcóatl (abajo) cubierta por una tienda de campaña.

13 Hemos comentado de pasada el hallazgo bajo los cimientos del Templo de Quetzalcóatl de una serie de enterramientos rituales de los que, como en casos anteriores, contamos con la información proporcionada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia INAH-, cuyo texto reproducimos. Placa informativa de los Entierros con ofrendas del Templo de la Serpiente Emplumada de la Ciudadela de Teotihuacán. Al interior y exterior de este templo, en fosas excavadas en el suelo de tierra endurecida, o tepetate, se localizaron los restos de alrededor de 260 individuos. Es posible que su significado este asociado con los dos tipos de calendarios prehispánico, el solar (xiulpohualli) de 365 días y el ritual (tonalpohuali) de 260 días. Los individuos fueron encontrados en una posición semiflexionada con las manos atadas a la espalda, por lo que se cree fueron sacrificados y ofrendados al inicio de la construcción del templo alrededor de los años d.c. En su mayoría eran varones de entre 15 y 55 años; algunos presentaban deformación intencional del cráneo, tenían los dientes limados y con incrustaciones, lo que refleja su status, pues entre los grupos prehispánicos mesoamericanos esto mostraba la jerarquía del individuo. La indumentaria y la ofrenda encontradas consistían en grandes collares formados tanto por piezas verdaderas de maxilares humanos y de perros y/o coyotes, como imitaciones de dientes hechos en concha. También, había, navajillas, cuchillos y puntas de proyectil de obsidiana (vidrio natural de origen volcánico); conchas y caracoles marinos; orejeras y discos en concha; discos de pizarra (texcacuitlapillis) que eran colocados en la parte posterior de la cintura y figurillas, collares, orejeras y narigueras en piedra verde.

14 En el Museo de la Cultura Teotihuacana, ubicado en las cercanías de la Pirámide del Sol, se muestran distribuidas en ocho salas algunas de las piezas arqueológicas recuperadas en este lugar a lo largo de las diferentes campañas llevadas a cabo desde principios del siglo XX d.c. Este espacio expositivo permite hacer un recorrido por la historia de la ciudad y sus habitantes desde sus orígenes allá en el siglo II a.c. y su abandono en el siglo VII d.c. a través de varios centenares de objetos elaborados en materiales tan diversos como concha, hueso, textil, madera, etc., destacando las piezas de alfarería como los grandes braseros denominados de teatro, en cuya parte central aparece el rostro de un personaje, dios/diosa, sacerdotisa, matriarca, y cuya función se considera era propiciatoria ante el dios de la lluvia, Tláloc, para que las mismas llegaran en su momento y se obtuviera una abundante cosecha.. Brasero tipo teatro expuesto en el Museo de la Cultura Teotihuacana. En nuestro caso nos interesa la Sala 5, dedicada al Mundo de los Muertos, en la que se muestran los distintos tipos de enterramientos del pueblo teotihuacano junto a la recreación de algunos de los localizados tanto en el Templo de Quetzalcóatl como en las Pirámides del Sol y la Luna.

15 ARRIBA : Enterramientos rituales con vasijas y otros objetos cotidianos. DERECHA : Cuerpos en posición fetal con las manos atadas a la espalda.

16 IZQUIERDA : Cuerpos con las manos atadas a la espalda. ABAJO : Enterramiento ritual de personas con el cráneo deformado (arriba a la izquierda) y rodeado de maxilares inferiores.

17 Enterramiento ritual localizado bajo los cimientos de la Pirámide de la Serpiente Emplumada. Y en este punto dejamos la Ciudad en la que fueron creados los dioses, eso sí, bajo la amenaza de dedicarle en breve a este lugar una nueva entrega pues monumentos y motivos no le faltan. Colonia Lindavista Estado de México, a 29 de junio de 2015, festividad de san Casio, obispo, y cumpleaños de mi hija Elena, mi princesita. José María Duchel de Mumbert.