CAPÍTULO IV DISCUSIÓN DE RESULTADOS

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1 CAPÍTULO IV DISCUSIÓN DE RESULTADOS Los alumnos valorados fueron 488 que corresponde al 93.8% del total de alumnos del turno matutino; de éstos 215 son hombres y 273 mujeres. La mayoría de ellos, 84% se encuentran en la etapa de la adolescencia media que comprende de los 15 a 18 años, el resto de la población está entre 19 a los 21 años en un 16% (Ver gráfica No.1 y 2), en las diferentes etapas se marca un crecimiento continuo en las áreas psicomotoras, afectivas, sociales y cognoscitivas. Referente al estado civil 1% se encuentran casados, 2% en unión libre y el resto 97% son solteros, (Ver gráfica No.3). Esta situación requiere intervenciones de valoración específica para la salud reproductiva, no solo de prevención de riesgos de enfermedades de trasmisión sexual, sino ya focalizadas a maternidad y paternidad responsable, prevención de neoplasias propias de órganos reproductores, cuidado y crianza de los hijos, etc. Se les cuestionó acerca de la percepción que tienen de su estado de salud, a lo que 68% la consideran buena, 30% regular y 2% mala, (Ver gráfica No.4). La mayoría percibe su salud en base a los hábitos y conductas adquiridas en sus redes sociales primarias, siendo esta la que marca la conducta en esta etapa. Los principales procesos mórbidos que enfrentan son los relacionados a las adicciones (alcoholismo 33%, tabaquismo 21% y drogas 6%), siguiéndoles en importancia los problemas con hábitos alimenticios (sobrepeso 9%, Obesidad I, II y III 14% y desnutrición 6%), éstos últimos propiciados por la falta de horarios establecidos para comer y consumo de alimentos de alto contenido calórico con poco valor nutritivo. Se encontraron dos casos de anorexia y bulimia. También se detectaron casos de hipertensión inicial en el 7% de los jóvenes valorados. Referente a ETS se encontraron dos casos diagnosticados como virus del papiloma humano, los cuales están bajo tratamiento médico; esto ocasionado por diversos factores como múltiples parejas sexuales, uso incorrecto del

2 método de barrera y abuso de sustancias. Se presentó 1% de casos de violencia intrafamiliar y 1% de alumnos con depresión, canalizándolos a las instituciones correspondientes. (Ver gráfica No.5). En cuanto a los antecedentes heredo familiares aparecen las enfermedades crónico degenerativas como principales patologías, diabetes mellitus tipo II (48%); hipertensión arterial (33%) y cáncer (16%); éstas son enfermedades que hoy predominan y que van en aumento, por lo tanto es importante concientizar a la población estudiantil sobre los riesgos y complicaciones que existen y así adoptar hábitos saludables con la finalidad de prevenirlos y/o controlarlos a tiempo. (Ver gráfica No.6) En relación a los antecedentes patológicos, 35.6% de la población estudiada, ha cursado con patologías que han requerido intervención quirúrgica en un 44%, las cuales son producto de alteraciones propias de la edad (apendicetomía, amigdalectomia, fracturas) y 56% presentan cuadros de alergias, los cuales son propiciados por condiciones ambientales e inmunológicas. (Ver gráfica No.7) Respecto al hábito de cuidado bucodental los alumnos afirmaron que realizan el cepillado de dientes tres veces al día en un 51%, 47% de una o dos veces y 2% nunca lo realiza, lo cual indica que se requiere reforzar y/o iniciar información focalizada acerca de los riesgos que conlleva el no tener hábitos bucodentales saludables, puesto que en esta etapa de vida brotan las últimas piezas dentales definitivas y existe labilidad del esmalte que origina caries de tipo rampantes.(ver Gráfica No. 8) Las adicciones también están presentes en estos jóvenes, el 22% del alumnado consume tabaco (Ver Gráfica No. 9); en la adolescencia se es más susceptible a desarrollar cualquier adicción, en este caso el tabaquismo, hábito que se hace cada vez más frecuente en los jóvenes durante esta etapa. El 97% de los alumnos afirmaron que consumen menos de 1 cajetilla al día y el 2% una cajetilla; situación que indica que empiezan a tener una dependencia cada vez más fuerte hacia el tabaco, y por consiguiente hace más difícil el dejar este hábito. (Ver Gráfica No. 10)

3 El 35% de los alumnos son consumidores de alcohol (Ver Gráfica No. 11), 52% de éstos, lo ingiere una vez al mes, el 40% cada semana y el 8% dos o tres veces a la semana; existiendo una asociación entre el consumo de alcohol y el tabaco, refiriendo que les proporciona una potenciación de las relaciones sociales, emociones de alegría, euforia y superación de la timidez, así como un buen estado de ánimo. Situación que identifica alto riesgo, reflejado en problemas de salud y desempeño escolar. (Ver Gráfica No. 12) El 7% del alumnado consumen drogas (Ver Gráfica No. 13), del cual el 19% hace uso del cristal, 19% cocaína, 4% solventes, 4% LSD, 2% heroína, 7% ansiolíticos y antidepresivos; destacando la marihuana en 45% (Ver gráfica no. 14), esta última los alumnos la adquieren de otros compañeros que son consumidores y/o proveedores de la misma fuera de la institución educativa. Sin duda, al igual que este grupo de jóvenes valorados, muchos adolescentes se inician en ello por la presión de los compañeros, la creencia que no es dañino, la curiosidad, la suposición de que las drogas pueden ayudarlos a olvidar sus problemas y padres con adicciones. En referencia a la ingesta alimenticia, la mayoría de los jóvenes, 58%, consumen alimentos 3 veces al día, el 26% comen 2 veces al día, 3 % comen una vez al día, mientras que 13% comen 4 veces o más al día (Ver Gráfica No. 15). La dieta es rica en carbohidratos, originando sobrepeso, obesidad, o en su defecto desnutrición. Con respecto al consumo de líquidos, sólo el 20% ingieren más de 8 vasos de líquidos al día, 42% toman entre 5 y 8 vasos y el 38% consumen menos de 4 vasos de líquidos al día, esto indica la poca cultura en el consumo de este líquido vital. (Ver Gráfica No. 16) Referente a los alumnos que han detectado variaciones de peso, se encontró que el 56% ha notado cambios en los últimos 6 meses, de los cuales el 54% ha aumentado, mientras que el 40% ha disminuido de peso y el 6% ha tenido ambas variaciones. (Ver gráfica No. 17 y 18). Durante la etapa de la adolescencia es importante que exista como hábito la práctica de algún ejercicio y deporte, principalmente para evitar problemas

4 como el sobrepeso y la obesidad en una etapa temprana, además se obtiene incremento del nivel de energía, fortalecimiento del sistema músculo esquelético, combate ansiedad y estrés, ayuda a quemar calorías, eleva el autoestima, etc. Según los resultados se encontró que solamente el 46% de los alumnos realiza alguna actividad física (Ver gráfica no. 19), de éstos, el 55% lo hace diariamente, el 36% una vez a la semana y el 9% una vez al mes (Ver gráfica no. 20). Con respecto a la percepción que tienen de sí mismos, el 70% se describe como persona alegre, el 15% seria, el 8% optimista, 4% irritable, mientras que el 3% se considera temeroso (Ver gráfica no. 21) y las principales preocupaciones que afrontan los adolescentes (Ver gráfica no. 22) son las relacionadas con la escuela (29%), con su persona (31%) y con la familia (22%). La respuesta sobre lesiones autoinfligidas intencionalmente, el 14% de los alumnos comentó que han presentado ideas suicidas (Ver gráfica no. 23); recordemos que en esta etapa el joven esta en la búsqueda de una identidad propia, lo que les origina problemas de índole escolar, personal y familiar; de ésta última un 24% de los alumnos encuestados han sufrido pérdida de algún familiar (Ver gráfica no. 24) y 46% de ellos comentó que nada en lo actual los ayudaría a sentirse mejor, por lo que fue necesario canalizarlos a las instituciones correspondientes para apoyarlos (Ver gráfica no. 25). Respecto valoración de aspectos de salud reproductiva, los resultados arrojan que el 42% de los estudiantes se encuentran sexualmente activos. (Ver Gráfica No. 26) Lo cual genera factores de riesgo, como embarazos prematuros, enfermedades de transmisión sexual, mayor riesgo de padecer displasia (en el caso de las mujeres), entre otros. La edad de inicio de vida sexual en los jóvenes osciló entre los 15 y 17 años, presentando una mayor incidencia a los 15 años con el 30%, siguiendo a los 16 años con el 29% y finalmente a los 17 años con el 20% (Ver Gráfica No. 27). El 64% de los adolescentes han tenido una pareja sexual, el 11% han tenido 2 parejas, el 9% han tenido 3 parejas, el 4% han tenido 5 a 9 parejas, mientras

5 que el 8% no recuerda el número de parejas sexuales; existe el riesgo de aumentar el número de parejas sexuales en los jóvenes que han iniciado vida sexual, el alto grado de experimentación a tempranas edades hace que las conductas de riesgo influyan en el consumo de alcohol y drogas. Por lo que es importante trabajar con énfasis en la prevención de ETS y en el concepto de monogamia. (Ver Gráfica No. 28). En cuanto al uso de metodología anticonceptiva, el 84% ha hecho uso de ellos, mientras que un 16% no lo ha utilizado (Ver Gráfica No. 29). El método que predomina en 83% es el preservativo masculino, 6% han hecho uso de la pastilla del día siguiente, mientras que un 9% usa hormonales orales, el 2% restante tienen dispositivo intrauterino y hormonales inyectables (Ver Gráfica No. 30). Es importante hacer notar que un 16% de los adolescentes con vida sexual activa no utilizan ningún método y por ende son sujetos de seguimiento focalizado. Entre las mujeres que tienen vida sexual activa (112 Alumnas) encontramos: que el 21% ha cursado o cursa un embarazo (ver Gráfica No. 31), de éstas el 37% cursó con un embarazo en el ciclo escolar ( ), el 17% finalizó su embarazo en parto (una de ellas prematuro), el 13% cursa actualmente periodo gestacional y 7% presentó aborto. (Ver Gráfica No. 32). El embarazo en adolescentes se encuentra como una de las primeras causas de egreso hospitalario en mujeres adolescentes entre 10 a 19 años (INEGI/Secretaria de salud en México, 2000). Los factores relacionados con el embarazo adolescente, son: Ser hijos de familias monoparentales, curiosidad, desconocimiento de las consecuencias de la actividad sexual y el cambio de actitudes en materia sexual. Las consecuencias en el recién nacido es el bajo peso o ser prematuro, lo cual incrementa el riesgo de muerte infantil, ceguera, sordera, trastornos respiratorios crónicos, dislexia, hiperactividad, parálisis cerebral, retraso mental y otras disfunciones psíquicas; además de que los hijos de parejas adolescentes presentan mayores índices de maltrato y abandono. (Reeder, 1995).

6 Se cuestionó a los jóvenes, si alguno había embarazado a su pareja, el 8% respondió afirmativamente, situación que lo enfrenta a carencias para apoyar a su pareja ya que su escolaridad es insuficiente para acceder a un empleo bien remunerado (Ver Gráfica No. 33).

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