LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA EN LA PROVINCIA DE ALICANTE (1808-1814) Gerardo Muñoz Lorente



Documentos relacionados
NOS INTERESA EL FUTURO Y TENEMOS LOS EQUIPOS PARA CONSTRUIRLO

Lección Era capaz el hombre endemoniado de salvarse el mismo del poder de todos los demonios que lo controlaban? -No.

TEMA 9: EFECTOS COMERCIALES A COBRAR

Controles de los motivos de detención

Las redes sociales. Lo que hacen sus hijos en Internet

Si quieres, te enseño mi pueblo!

GUÍA PARA LOS PROCEDIMIENTOS DE TEMOR CREÍBLE Y TEMOR RAZONABLE

Las ONGs denuncian el aumento de mendicidad

Tenemos derecho a un nombre y a la identidad

Lección 11. -En el principio, Dónde vivían Adán y Eva? -En el Jardín del Edén.

EL TEMA ES. Talleres de reparación de vehículos automóviles REVISTA KONTSUMOBIDE 2012 Nº 16

Tenemos en España un libro especial lleno de muchas normas que debemos de respetar

El Antiguo Testamento

Un cuento de reyes y papeles.

Santa eresa. de Jesus

COSMOS Y PIRÁMIDES PRINCIPIO Y FIN DE LA ERA DEL RAYO GALÁCTICO

ENTREVISTA A OLGA GÓMEZ

Desde Yo Sí Sanidad Universal (Madrid) y Jo Sí Sanitat Universal (Valencia) queremos puntualizar algunas de las cuestiones aducidas por el hospital:

Diocèse de Lausanne, Genève et Fribourg Carta pastoral 2015: «Vengan y vean»

Base de datos en Excel

BOLETÍN DE INTERÉS PARA LA PERSONA QUE DESEA INICIAR EL ESTUDIO DEL ÁRBOL GENEALÓGICO DE SU FAMILIA

Lección A pesar de haber pasado mucho tiempo desde que Dios prometió enviar el Salvador, Se olvidó Dios de Su promesa? -No.

Aprendizaje Sobre la Ley

Estrategias para enfrentar los malos tratos y el bullying

Análisis de Noticias Diario Clarín y Página 12

Juan José JOSÉ HUMBERTO MATOS COLONIA

PREGUNTAS Y RESPUESTAS SOBRE LA VISA U

PROPOSICIÓN NO DE LEY SOBRE LA PERSECUCIÓN DE CRISTIANOS EN EL MUNDO, Y ESPECIALMENTE EN IRAK Y SIRIA

Pero lo que más le gustaba hacer a la princesa Tesa era jugar al fútbol. Por eso, le llamaban la princesa futbolista, y a ella le gustaba mucho ese

4años. para torrejoneros

Pasos para elaborar un presupuesto. Un presupuesto nos permite: Algunos consejos:

BLOQUE 0: LA ADMINISTRACIÓN GENERAL DEL ESTADO

DIOS ES NUESTRO PADRE BUENO (A.3.1.1)

DISCURSO DE DESPEDIDA DE LA XXXV PROMOCIÓN DEL COLEGIO SANSUEÑA

12 falsos mitos sobre las nulidades matrimoniales en la Iglesia Católica

Abogados Juan José Pérez Sánchez, ofrece un asesoramiento de alta profesionalidad

PROPUESTA POR LA RECUPERACIÓN DE LA MEMORIA HISTÓRICA. EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

Familias inmigrantes Somos muchos en casa

V MODELO DE NACIONES UNIDAS DE LA UNIVERSIDAD LATINOAMERICANA

por el sistema de seguimiento, disfruta de un permiso penitenciario o cualquier otra salida o es excarcelada, el dispositivo del sistema de

SERVICIO DE ASISTENCIA INTEGRAL

Práctica del paso de generación de Leads

L O S CENTROS DE A C C ESO A LAS TIC DE MEDELLIN C A N A L IZAN SERVICIOS D E LA A L C A L D ÍA

La Vida de Cristo. del evangelio de Juan. Lección 45. Crea! Juan 20: Currículo 2010 Misión Arlington Misión Metroplex

1.- INFORMARSE. I. Qué es una Constitución? Para qué sirve?... 3

enseñanza Pensiones de jubilación del profesorado de la enseñanza pública de España en abril de 2012

TIENES DERECHO A VOTAR QUE NADIE TE LO QUITE

El impacto de la crisis en las ONG

Datos del autor. Nombres y apellido: Germán Andrés Paz. Lugar de nacimiento: Rosario (Código Postal 2000), Santa Fe, Argentina

Entrega de los primeros Premios Por la igualdad de Género de la Diputación de Granada

Consejos para Veterinarios en Tiempo de Crisis

Modificación y parametrización del modulo de Solicitudes (Request) en el ERP/CRM Compiere.

LA OLA. Cinco cuentos para leer en voz alta. Autor: Antonio Pons

BASE DE DATOS FINANCIADA POR:

La ventana de Microsoft Excel

Actividad 2.- Cuento y vídeo de Ubuntu

Situación Económica de la Hermandad

ÍNDICE 1. INTRODUCCIÓN 2 2. BARRIOS Y ZONAS URBANAS

PROYECTO DE DECLARACIÓN LA HONORABLE CÁMARA DE DIPUTADOS DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES DECLARA

Lección Marta pensó que Jesús iba a resucitar a su hermano en el último día. Es eso lo que Jesús quería decir? -No.

La contemporaneidad de Juan Comenio en la educación. El presente texto hace referencia a un gran teólogo, pedagogo y

Lección IV-1 Unidad IV: La Iglesia Página 221 La Iglesia: Prometida y Establecida

Lección En vez de creer en La Palabra de Dios, Qué querían ver los fariseos y maestros de la ley? -Ellos querían ver una señal milagrosa.

ÍNDICE. Ficha técnica Encuesta y cuestionario Finalidad y resultados de la encuesta Primera parte: conocimiento...

LAS ASOCIACIONES Y LA REFORMA FISCAL 2015

Por qué interesa suscribir un plan de pensiones?

CASO 8. esarrollo de un sistema de información para una ONG con implicaciones éticas. Luz Amparo Acosta Salas. Casos

El Deber de Protección del empleado expatriado o desplazado en la legislación española Por Javier Contin Guillén Abogado SOS Assistance España, S.A.

Cuando los Estados no eran: el pueblo de origen africano asentado en el territorio región del Pacífico, ya era 20

MANUAL COPIAS DE SEGURIDAD

Descubrimiento y conquista de Chile?

El Doctor sábelotodo Hermanos Grimm

CÓMO ELABORAR UN PRESUPUESTO? PRÉSTAMOS AHORREMOS REGULARMENTE. Consejos para Ahorrar: Un presupuesto nos permite: Algunos Consejos:

CARPETA DIDÁCTICA. Belgrano. Museo Histórico Provincial de Rosario Dr. Julio Marc

LA SUMISION DEL HIJO


FOSA COMÚN EN VALDELALLAMA VILLANUEVA DE VALDUEZA (LEÓN)

RESOLUCIÓN 2012/60 I.- SOLICITUD

TEMA 12. EL SIGLO XVII: LA CRISIS DEL IMPERIO ESPAÑOL

GUIA APLICACIÓN DE SOLICITUDES POR INTERNET. Gestión de Cursos, Certificados de Aptitud Profesional y Tarjetas de Cualificación de Conductores ÍNDICE

CONGRESO DEL ESTADO INDEPENDIENTE, LIBRE Y SOBERANO DE COAHUILA DE ZARAGOZA

ESTATUTOS DE LA CONFERENCIA DE DECANOS DE CENTROS UNIVERSITARIOS CON TÍTULOS DE MAGISTERIO Y EDUCACIÓN

Pregunta 1. QUÉ REQUISITOS SON NECESARIOS PARA PONER EN MARCHA UNA GUARDERÍA (local, título del profesorado, número de profesorado...)?

COMO AUMENTAR MIS VENTAS: ENFOQUE EN PROMOCION Y PUBLICIDAD

Notificación sustitutiva de la HIPAA

CRECIENDO EN LA FE. En la biblia encontramos 3 hermanos que tuvieron que activar la fe pero fueron probados para ello.

El tigre blanco y el joven leñador. En un lugar de China, en una pequeña aldea, vivía un joven leñador con su anciana madre.

COMO SACAR DE LA CÁRCEL A UN FAMILIAR EN MATERIA DE MIGRACIÓN

la primavera surge, cada vez con más frecuencia,

I.- ANTECEDENTES. PRIMERO.- En fecha 16 de septiembre de 2014 tuvo entrada en registro de esta Institución queja de carácter individual.

Reglamento sobre el Control de la Información y el Acceso a los Ficheros de INTERPOL

Moisés 7. Llegando a la tierra prometida Versión para líderes. Para un estudio de una hora, sólo hagan las preguntas marcadas con asterisco (*)


SOLOKOETXE Y LA CONTAMINACIÓN ELECTROMAGNÉTICA

ALCANZANDO LA AUTONOMÍA INDEPENDENCIA DEL HOGAR MATERNO

Licencia. Todos los derechos reservados. Este reporte puede ser distribuido libremente pero queda

En un país cálido y lejano había un. Prólogo

Juan 9:1-12 Jesús sana a un ciego de nacimiento

COMO PRESENTAR UNA RECLAMACION POR SUS BENEFICIOS DE JUBILACION

Transcripción:

LA GUERRA DE LA INDEPENDENCIA EN LA PROVINCIA DE ALICANTE (1808-1814) Gerardo Muñoz Lorente

Título: La Guerra de la Independencia en la provincia de Alicante (1808-1814) Autor: Gerardo Muñoz Lorente Ilustración portada: Batalla de Castalla 1812. Óleo de Langlois; original en el museo de Versalles; copia en el Ayuntamiento de Castalla. Ilustracion contraportada: Dibujo de Biar correspondiente a 1813. Reeves. ISBN: 978 84 8454 746 4 Depósito legal: A 1286 2008 Edita: Editorial Club Universitario Telf.: 96 567 61 33 C/. Cottolengo, 25 San Vicente (Alicante) www.ecu.fm Printed in Spain Imprime: Imprenta Gamma Telf.: 965 67 19 87 C/. Cottolengo, 25 San Vicente (Alicante) www.gamma.fm gamma@gamma.fm Reservados todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de este libro puede reproducirse o transmitirse por ningún procedimiento electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación magnética o cualquier almacenamiento de información o sistema de reproducción, sin permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright.

Para mi nieto César

ÍNDICE 1.- Noticias del 2 de mayo y juntas rebeldes... 7 2.- Falsas alarmas... 13 3.- A la caza del francés... 17 4.- Extranjeros y prisioneros... 27 5.- Revueltas y motines... 29 6.- Sospechosos... 31 7.- Espías... 39 8.- Afrancesados... 41 9.- Alistamientos... 47 10.- Luchando lejos de casa... 49 11.- Milicias... 53 12.- Guerrilleros y bandoleros... 57 13.- Desertores... 69 14.- Primeras medidas defensivas... 71 15.- El conflictivo gobernador Iriarte... 79 16.- El comienzo de las fortificaciones en Alicante... 81 17.- Avance francés... 83 18.- Continúan las fortificaciones... 85 19.- Epidemia... 87 20.- Acaban las fortificaciones... 89 21.- Cementerios... 93 22.- Alicante, capital del reino valenciano... 97 23.- Invasión francesa del territorio alicantino... 111 24.- Cortes de Cádiz y Constitución de 1812... 121 25.- Liberales y absolutistas... 125 26.- Iglesia... 129 27.- Prensa... 135 28.- Primera batalla de Castalla... 139 29.- Desembarco aliado en Alicante... 149 30.- Impuestos y donaciones... 151 31.- Escasez de víveres... 157

32.- Requisa de caballos... 161 33.- Saqueos... 163 34.- Rehenes... 171 35.- Intentos de liberación. Avances y retiradas... 175 36.- Segunda batalla de Castalla... 183 37.- Suchet... 193 38.- Liberación española... 195 39.- Liberación de Denia... 197 40.- Fin de la guerra... 203 Breves pero sentidos agradecimientos... 205

1.- NOTICIAS DEL 2 DE MAYO Y JUNTAS REBELDES La noticia de lo sucedido en Madrid los días 2 y 3 de mayo de 1808 llegó hasta el último rincón de España en pocos días, provocando la inquietud general. Pero las autoridades, temerosas de que la rebelión se extendiera, mantuvieron el orden publicando bandos y decretos en cascada que combinaban las peticiones de calma con las amenazas. Así, el Consejo Supremo se apresuró a publicar un bando en el que condenaba a pena de muerte al que usara armas blancas, o de fuego y recomendando la mejor armonía con la tropa francesa. El Consejo de la Inquisición llamó sublevación escandalosa a la rebelión popular madrileña. Desde Bayona, Carlos IV envió una proclama el 4 de mayo instando a los Españoles, amados súbditos: Hombres pérfidos quieren extraviaros. Desean que peleéis con los franceses, y recíprocamente animan a éstos contra vosotros. También el príncipe Fernando y los infantes Carlos y Antonio advertían a la nación en otro decreto de que todo esfuerzo de sus habitantes sería, no sólo inútil, sino funesto. Incluso un mes más tarde, dieciséis días después de que Napoleón proclamara en Bayona la cesión de la corona española a favor de su hermano José (6 de junio), mientras España entera se levantaba contra el ejército invasor entre vivas al rey Fernando VII, éste escribía a Napoleón (22 de junio) una carta dándole su parabién por haber sido ya instalado en el trono español José I. Pero, como decíamos, para entonces la rebelión de los españoles hacía ya semanas que se había producido en todos los pueblos y ciudades de España. Los efectos del 2 de mayo en tierras alicantinas En 1808 no existía aún la provincia alicantina, tal como la conocemos ahora. A excepción de algunos municipios (como 7

Gerardo Muñoz Lorente Villena y Sax, que pertenecían al reino de Murcia), el conjunto de los pueblos y ciudades que unos años después (1833) configurarían la provincia de Alicante, formaban parte de una provincia mucho más extensa y que coincidía con el antiguo reino de Valencia. Esta provincia estaba dividida en once gobernaciones, corregimientos o partidos, dependientes de la capital (Valencia), al frente de los cuales había un gobernador o corregidor, que representaba el poder político y militar. Jerárquicamente, detrás de los gobernadores en cada municipio estaban los cabildos (alcaldes y regidores) y los justicias, representantes del poder judicial. En Valencia, cuatro días después de la rebelión madrileña del 2 de mayo, el capitán general del Reino, Vicente Esteve, firmó un bando instando a la tranquilidad pública y calificando a los rebeldes de Madrid de corto número de personas inobedientes a las leyes con las tropas francesas, enviándolo a todos los gobernadores de la provincia con la orden de que lo distribuyeran por todas las ciudades, villas y pueblos. Esta versión oficial de los sucesos del 2 de mayo fue recibida, por correo extraordinario, en las cinco gobernaciones meridionales del reino (que ahora componen la provincia alicantina): Alcoy, Alicante, Denia, Jijona y Orihuela; si bien hubo poblaciones a las que tardó bastante en llegar, como la villa de Elche (perteneciente a la sazón al partido de Jijona), donde no se recibió dicho bando hasta el día 20. Como decíamos, estas medidas mantuvieron al pueblo en orden, pero intranquilo, hasta que ese mismo día 20 de mayo publicó la Gaceta de Madrid la noticia de las abdicaciones de Carlos IV y sus hijos, incluido Fernando, a instancia de Napoleón, en Bayona. Esta noticia se extendió a gran velocidad por todo el país. En Valencia se conoció al cabo de tres días. Uno después, el 24 de mayo, estalló un motín popular. El 25 se creó la Junta Suprema de Valencia, que asumió el mando del reino, reconoció a Fernando VII como único y legítimo rey, y declaró la guerra a Napoleón, mandando ese mismo día una orden a todos los gobernadores para que secundaran el levantamiento y prepararan la movilización general. Esta orden llegó a las gobernaciones de Alcoy, Denia, Jijona y Alicante el 28 de mayo (al gobernador de esta última, le anticipó la noticia el alcalde eldense, José Verdú y Mirambell, a quien le llegó desde Orihuela, cabeza de partido al que pertenecía Elda). Curiosamente, la más alejada de la capital, 8

La Guerra de la Independencia en la provincia de Alicante (1808-1814) Orihuela, se rebeló contra Napoleón cuatro días antes (al mismo tiempo que Valencia), al saber que ya lo habían hecho Cartagena y Murcia. La rebelión en Orihuela Aquel martes 24 de mayo de 1808 se celebraba en Orihuela el mercado semanal, al que afluía mucha gente de la huerta y de los pueblos cercanos, y en el que se escuchaban romances cantados por ciegos en los que se relataban los fusilamientos del 3 de mayo en Madrid y la prisión en Bayona de Fernando VII. La llegada, entre las dos y las tres de la tarde, de un correo de Cartagena levantó enseguida gran expectación, pues se murmuraba que traía noticias de una sublevación en tierras murcianas. Y, en efecto, el capitán de artillería Manuel de Velasco anunció que las ciudades de Murcia y Cartagena se habían levantado contra el ejército de Napoleón. Espontáneamente todos los oriolanos presentes en el mercado comenzaron a dar vítores de alegría y vivas a Fernando VII. Entre ellos destacó Pedro Armengual de Colomo, un agrimensor que gozaba de gran popularidad, que se puso a la cabeza de los ya amotinados, para acudir a casa del gobernador, Juan de la Carte. Éste recibió a la exaltada muchedumbre con ánimo de apaciguarla, recordando las severas instrucciones que había recibido para mantener el orden público, lo que sirvió para indignar aún más a Amengual y a sus seguidores. Para enmendar su error, el gobernador salió entonces al balcón para dirigirse a la multitud, anunciando que ya había convocado un cabildo extraordinario para aquella misma tarde. Los ánimos se aplacaron, aunque la muchedumbre siguió mostrando su júbilo con vítores y aplausos. Pero el vehemente Amengual volvió a exaltar al gentío poco después, dirigiéndolo hasta las puertas del Ayuntamiento (que se hallaba al final de la calle Mayor, en un edificio que se destruiría en la inundación del 15 de octubre de 1834), mientras estaba reunido el cabildo, presidido por el gobernador y el alcalde mayor, Juan Francisco Gascón. Interrumpió Amengual la reunión, irrumpiendo en la sala al frente de un numeroso grupo de amotinados, para exigir que se cumplieran todos los puntos reseñados por las juntas rebeldes murcianas. Exigencia que acataron todos los presentes. 9

Gerardo Muñoz Lorente Al día siguiente, constituida ya la Junta de Gobierno de Orihuela, se enviaron circulares a los pueblos de la gobernación, animando a la sublevación. El primero en contestar fue el alcalde de Rojales, Luis López, pero le siguieron muy pronto todos los demás, adhiriéndose al levantamiento. Lo mismo ocurrió en el resto del territorio alicantino. A finales de mayo, todos los pueblos de la actual provincia de Alicante se habían manifestado a favor del levantamiento contra las tropas napoleónicas. Juntas rebeldes Como ya hemos visto, Orihuela fue la primera cabeza de gobernación alicantina que declaró la guerra a Napoleón. Su Junta Local de Gobierno se constituyó formalmente el 26 de mayo, presidida por el gobernador Juan de la Carte, un brigadier de avanzada edad que ocupaba este cargo desde 1789, y que paradójicamente era de origen francés, tal como indicaba su apellido. La junta se compuso de los miembros del ayuntamiento, a los que se unieron el conde de Pinohermoso, el vicario general del episcopado y un ciudadano. Las demás cabezas de gobernación también constituyeron sus juntas en los días siguientes, dependientes de la Junta Suprema del Reino de Valencia, y todas ellas lo hicieron de forma similar: a las autoridades existentes se unieron representantes de la nobleza, el clero, los comerciantes y algunos militares. El 28 de mayo hicieron lo propio en Jijona (con la presidencia del gobernador Francisco del Castillo Valero) y en Denia (gobernador Pedro Ferrer de Costa). En Alcoy se constituyó el 31 de mayo, con el gobernador Bernardo Cebasco y Rosete al frente de tres representantes eclesiásticos, cinco nobles, dos representantes ciudadanos y labradores, seis de la Real Fábrica de Paños, uno de la Fábrica de Papel, otro de los comerciantes y otros varios de los gremios. El 4 de junio Cebasco fue sustituido como gobernador por Juan Bermejo, procedente de Valladolid. Lo mismo sucedió en cada una de las villas y pueblos. En Elche, por ejemplo, el gobierno municipal se reunió en cabildo extraordinario el 29 de mayo, bajo la presidencia del alcalde mayor, José Catalán y Calderón, para nombrar a los vocales 10

La Guerra de la Independencia en la provincia de Alicante (1808-1814) que integrarían la Junta Local. Si bien estas juntas locales se disolvieron poco después, siguiendo las instrucciones que la Junta Suprema del Reino envió con fecha 6 de julio. La de Elche lo hizo diez días después, rehabilitándose el ayuntamiento. A partir de entonces, las juntas quedaron reducidas a las cinco cabezas de partido. Las razones por las que se procedió a la extinción de las juntas locales fueron las mismas por las que, apenas tres meses más tarde, se disolvieron también las juntas de gobierno de las cabezas de gobernación: la necesidad de recuperar a los ayuntamientos y resolver el conflicto de competencias que había en dichas cabezas de partido. En Orihuela, por ejemplo, se prodigaron las desavenencias y las intrigas entre la Junta de Gobierno y el Ayuntamiento, tal como dice el historiador García Soriano: Estas rencillas, malevolencias y resquemores existentes de continuo entre ambas ilustres entidades, puestas en pugna y que se habían declarado en silencio condena a muerte y sin cuartel, tenían forzosamente que ocasionar la desaparición de una de ellas, único medio de terminar tales escándalos, y ésta no podía ser otra que la Junta de Gobierno, por su carácter provisional y transitorio. Escándalos por los que condenaron a varios miembros de la Junta en causas criminales. Las primeras en disolverse, sin embargo, fueron las juntas provinciales, como la Suprema del Reino de Valencia, que lo hizo en setiembre, después de que sus competencias fueran asumidas por la Junta Central, constituida en Aranjuez y de la que formó parte como vocal (hasta su muerte el 14 de noviembre de ese mismo año) el presidente de la junta de Alicante, conde de Lumiares. El 20 de octubre fue cuando se disolvió esta Junta de Gobierno de la ciudad de Alicante, pasando la dirección política a la corporación municipal, aunque tutelada por el gobernador. Difíciles relaciones institucionales Pese a la desaparición de las juntas, las relaciones institucionales entre los gobernadores y los cabildos municipales en las ciudades cabezas de partido (Alcoy, Alicante, Denia, Jijona y Orihuela) no siempre fueron tan buenas como las que mantuvieron en Jijona el corregidor Francisco del Castillo y 11

Gerardo Muñoz Lorente los regidores. Aquí, el día 21 de octubre de 1808, se reunió el ayuntamiento para premiar al gobernador por su lealtad a nuestro legítimo y amado Fernando VII, por el penoso trabajo y fatigas, y las sabias disposiciones que ha acordado su prudencia, evitando desordenes y conmociones. Pero, como no hay fondos para premiar económicamente al Corregidor, se decide dirigir una carta a la Junta Central recomendando su ascenso. En Alicante, por el contrario, los conflictos entre los sucesivos gobernadores y el Ayuntamiento fueron numerosos y graves, tal como veremos más adelante. Durante los seis años que duró la guerra de la Independencia, Alicante tuvo seis gobernadores, por solo dos alcaldes. El primero de éstos fue Antonio Lorenzo Martínez del Pozo, a quien sustituyó en abril de 1811 José Olivas y Denia. 12

2.- FALSAS ALARMAS A pesar de que en el verano de 1808 las tropas francesas estaban aún algo alejadas del territorio alicantino, el miedo a la invasión era patente por estos pagos, hasta el extremo de que las noticias que venían de La Mancha, Murcia o Valencia sobre el avance del ejército napoleónico hacían saltar de inmediato las alarmas, produciendo el pánico entre la población y las autoridades. El 30 de junio, por ejemplo, al conocerse el ataque francés a la ciudad de Valencia llevado a cabo dos días antes, provocó que mucha gente buscara refugio en Denia, procedente de pueblos próximos. Algo parecido ocurrió dos años después en Elche, cuando las tropas francesas avanzaron por el sur desde Murcia. El temor a una inminente invasión sumió en el pánico a los ilicitanos, incluidos los alcaldes primero y segundo, quienes huyeron el día 24 de abril de 1810. Uno se refugió en la torre del Pinet y el otro marchó hacia Valencia, aunque debió de volverse enseguida, ya que el día 26 (el mismo en que los franceses entraban en Orihuela y eran inmediatamente expulsados) ambos regidores asistían a una reunión del ayuntamiento de Elche. Sin embargo, muchas otras noticias no fueron tan ciertas como ésta. Como escribió el historiador oriolano García Soriano en el centenario de la guerra de la Independencia (1908) más de una vez rasgó el silencio solemne de las noches estivales, en la vega, el ronco sonido de las caracolas tocando alarma. Se repetía unas veces que los franceses habían desembarcado en Guardamar, otras que se acercaban por Murcia, pasando a cuchillo a cuantas personas encontraban, devastando las iglesias, rompiendo los Santos y profanando y robando los sagrados objetos de culto. Pero nada de esto era cierto, al menos en aquel verano de 1808. 13

Gerardo Muñoz Lorente El caso del vicario de Campo de Matanza Para reflejar el enorme pánico colectivo que reinaba en estas tierras por aquellas fechas, pongamos como ejemplo lo sucedido en los primeros días de junio de 1808: Vicente Alcaraz y Calatayud, vicario de la Ayuda Parroquia del Campo de la Matanza, partió de allí el 1 de junio a las cinco y media de la tarde, acompañado por varios vecinos, camino de la cercana ciudad de Orihuela. Según cuenta en su curioso relato, cuando llegamos al ladrillar, o cruz cubierta, oímos una gran confusión de alaridos y una gritería tal en la huerta de Orihuela, que nos llenó de admiración; no obstante, seguimos el rumbo que llevábamos, pero a pocos pasos de haber pasado el camino nuevo de Callosa (actual carretera de Alicante) ya vimos venir multitud de gentes corriendo que con altas voces decían: Los franceses, los franceses, que en número de catorce mil han desembarcado en Guardamar, Santa Pola y Torrevieja. Al oír esta novedad nos volvimos para el Campo llenos de susto y pavor, como lo pedían las circunstancias del caso, comunicando tan triste noticia a cuantos encontrábamos en el camino, como el médico de Fortuna, quien iba acompañado por otros hombres, y que se volvieron a su villa alarmados. En cuanto llegó a Campo de la Matanza, el vicario y quienes le acompañaban comunicaron la noticia a sus vecinos, tocando a rebato la campana mayor de la Ayuda Parroquia, a cuya voz acudieron la mayor parte de los vecinos del Campo, a quienes conminó a tomar las armas para salir en defensa de los vecinos de los pueblos atacados, pues según nos decían gentes que venían huyendo del partido de San Bartolomé (entre ellos Francisco Martínez), ya estarían degollados o a punto de serlo; en particular dijo: que los franceses habían pasado a degüello a todo el pueblo de Almoradí, y que así lo había oído a las gentes que huían de aquellos contornos. Estas noticias le llegaron al gobernador de Alicante, José de Betegón, a la una de la madrugada del 2 de junio, por medio de un oficio del alcalde de Elche en el que le contaba cómo se le habían presentado dos hombres (uno de Játiva y otro de Dolores), para avisarle de que habían desembarcado franceses entre Guardamar y Torrevieja. 14

La Guerra de la Independencia en la provincia de Alicante (1808-1814) Inmediatamente Betegón dio la alarma y ordenó que saliesen varias partidas del Provincial de Ávila, batallón que guarnecía el castillo de Santa Bárbara, para cubrir puestos estratégicos de la ciudad y vigilar los caminos del sur. Y antes del alba mandó tocar a generala, soliviantando a todos los alicantinos, quienes se apresuraron a armarse con los fusiles y municiones que bajaron de la fortaleza. A las cinco de la mañana regresó la partida que marchó hacia el sur, la cual solo llegó a Santa Pola, ya que allí le aseguraron unos arrieros de pescado procedentes de Torrevieja, que no había habido tal desembarco enemigo. Desmentido que también le llegó una hora después a Betegón desde Elche, cuyo alcalde le mandó otro oficio en el que le informaba de que los vecinos de Játiva y Dolores que le habían comunicado el falso desembarco, habían sido arrestados. El vicario de Campo de la Matanza no fue arrestado por propagar aquella misma falsa alarma. Quizá porque aquel mismo día, 2 de junio de 1808, fue testigo, según aseguró, de la aparición de la Virgen del Remedio, igualita a la imagen que se veneraba en su iglesia, sobre un ciprés cercano a su casa. El caso del presbítero de Aspe Al cabo de un mes, el 4 de julio de 1808, Miguel Cantó, presbítero y miembro de la Junta de Gobierno de Aspe, se presentó en Alicante advirtiendo a todo con el que se tropezaba que, según había sabido, la Junta de Novelda había armado al pueblo para enfrentarse a una partida de franceses que bajaban por La Romana. Tal noticia había provocado la huida de muchos vecinos de Aspe y, comoquiera que no había encontrado al alcalde de este pueblo, había decidido marchar a Alicante para informar personalmente al gobernador Betegón. El pánico cundió por la ciudad antes incluso de que Betegón adoptara las primeras medidas, alertando a las milicias y las guarniciones de los baluartes y del castillo, y enviando a varias partidas a caballo para que confirmaran tan alarmante noticia. Aquella noche muchos de los residentes en extramuros (barrios de San Francisco, San Antón, Arrabal Roig) se refugiaron en el interior de la ciudad, así como vecinos de los pueblos aledaños. 15

Gerardo Muñoz Lorente Al amanecer del día 5, las partidas de reconocimiento regresaron de Novelda, Aspe y Monforte, desmintiendo la noticia difundida por el presbítero Cantó, el cual fue recluido en el convento de Santo Domingo y multado con 1.500 reales de vellón. El caso del ondareño Juan Montaner Con el paso del tiempo y la proximidad real de las tropas francesas, las alertas ciertas y falsas se fueron prodigando. Un último ejemplo de falsa alarma causada por la mendacidad (enfermiza o simplemente estúpida) que se desata en situaciones dramáticas, la encontramos en Ondara, durante la liberación por los guerrilleros y soldados españoles de la ciudad de Denia, en octubre de 1813. El primer día de aquel mes, un tal Juan Montaner dijo en Ondara que los franceses habían encerrado en el castillo a los españoles que allí quedaban, degollándolos a todos: hombres, mujeres y niños, causando el terror entre sus vecinos. Noticia que fue desmentida por José Balandó, quien había logrado escapar de Denia ese mismo día. Lejos de amilanarse, cuando los españoles entraron por fin en Denia, Juan Montaner volvió a propalar la noticia en Ondara de que habían degollado a todos los que encontraron en su camino, fueran o no franceses. Lo que tampoco era cierto. Y es que, como escribió en su diario mosén Palau, clérigo dianense que vivió aquellos acontecimientos, Montaner era un hombre que dice lo que no sabe o no sabe lo que se dice. Defecto este de algunas personas que sumió injustificadamente a muchas otras en el pánico y en el terror durante aquellos años, ya de por sí difíciles y dramáticos, de la guerra de la Independencia. 16

3.- A LA CAZA DEL FRANCÉS Eran muchos los ciudadanos franceses o de origen francés que residían o transitaban por las ciudades y pueblos alicantinos a principio del siglo XIX, dedicados a diferentes oficios, principalmente comerciantes. En la ciudad de Alicante, en 1807, residían 98 franceses, 43 de ellos comerciantes. Como en el resto del país, también aquí dirigieron hacia ellos su odio muchos españoles en aquellos primeros días tras el estallido de la guerra de la Independencia. Fue en Orihuela (primera ciudad alicantina que declaró la guerra al francés) donde se hicieron las primeras advertencias serias a los vecinos galos o de origen galo. Y fue precisamente Pedro Amengual (el agrimensor que, al frente de los amotinados, presionó al ayuntamiento para que apoyara la rebelión) quien pronunció aquellas advertencias. Tal como refleja el acta capitular del 24 de mayo de 1808, exigió al gobernador y regidores: Que se exhorte a todos los naturales de Francia, y demás alistados bajo el pabellón francés, a que guarden la mejor moderación, y que eviten todo motivo de disgusto, quitándose la escarapela de que acostumbran y llaman tricolor como odiosa a todo buen español. Como ya sabemos, el entonces gobernador oriolano era de origen francés, Juan de la Carte, caballero y señor de la Chaloniere-Des- Roches. Sin embargo, nadie cuestionó su patriotismo, pues hacía muchos años que este anciano brigadier gobernaba el distrito de Orihuela. Un día más tarde, el 25 de mayo, las autoridades jijonencas se adelantaron a las del resto de la provincia en tomar represalias efectivas contra los residentes de origen francés. Para ello, se acogieron a las competencias de la Junta de Represalias, una organización policial creada durante las guerras habidas entre Carlos II de España y Luis XIV de Francia, y que no fue suprimida hasta el 4 de junio de 1811, siendo sustituida entonces en sus funciones 17

Gerardo Muñoz Lorente por las Audiencias Territoriales de cada distrito. Concretamente, las medidas aprobadas por el pleno del ayuntamiento jijonenco de aquel día fueron contra Esteban Filiol, justificadas en que había dicho expresiones de amenaza, manifestándose afecto a Napoleón, por lo que es presumible que ejecute lo que pueda en perjuicio de nuestra nación y la patria, por lo que se ordenaba que se le encarcelara. Como no había hasta el momento precedente de encierro de franceses, se decidió elevar consulta a la Junta Suprema de Valencia, aunque también se resolvió, sin esperar a la respuesta de dicha consulta, que se le embarguen todos los bienes y efectos que se le encuentren en su casa, y se averigüe ser propios al mismo, custodiándolos y poniéndolos en seguro depósito. La milagrosa donación de Filiol Los antepasados franceses de Esteban Filiol habían emigrado a Jijona alentados por la demanda que había en el siglo XVIII de aserradores de madera, imprescindibles para la fabricación de cajitas para el turrón. Debieron de hacer fortuna, ya que Esteban poseía mucho dinero. Tanto que, entre otros bienes, las autoridades jijonencas le confiscaron dos mil pesos (unos treinta mil reales), una suma muy elevada que fue guardada en un arca custodiada por el depositario de propios Marcos Verdú, y que debió de multiplicarse milagrosamente a lo largo de los tres años siguientes, tal como se deduce de los pagos hechos gracias a ella y reseñados en varias actas del cabildo. Así, el mismo día en que le fue requisado ese dinero a Filiol, el Ayuntamiento se sirvió de él para pagar los gastos de los soldados que debían marchar a Almansa. El 12 de noviembre de aquel mismo año, el gobernador propuso hacer un retrato de nuestro legítimo Soberano, D. Fernando VII, cuyo coste se podría suplir, atendiendo a que no hay caudales para hacerlo, del donativo voluntario que tiene hecho Estevan Filiol. Lo de donativo voluntario es un eufemismo que se repite en varias actas, al igual que de lo que dio gratuitamente Filiol. El 13 de enero de 1809, Verdú aún guardaba 1.700 pesos de los donados por el francés Filiol. De ellos se pagaron 400 al reverendo clero, el cual los prestó a este ilustre cuerpo (Milicias). Doce días después, se recurrió a esta misma donación para pagar los gastos de fortificación que se realizaron 18

La Guerra de la Independencia en la provincia de Alicante (1808-1814) en la ciudad. El 30 de mayo de aquel mismo año, se recompusieron algunos cañones y llaves de fusil en mal estado; que se recojan y recompongan y que este gasto sea a cargo de los fondos que tiene D. Marcos Verdú, procedentes de D. Estevan Filiol ( ). Y el 1 de diciembre se aprobó construir una nueva acequia, cuyos gastos fueron sufragados con lo que dio gratuitamente Estevan Filiol, de nación francés, y de los que aún había 1.300 pesos. La misma cantidad que había el 13 de enero, tras pagar lo que el clero había prestado para gastos de la milicia! Durante 1810 se hicieron otros tres pagos a cuenta del donativo de Filiol: tres mil reales al comandante de las Milicias, para su traslado a la comarca de Játiva (10 de enero); los gastos ocasionados otra vez por la milicia al marchar esta vez a Aragón (6 de marzo); y la manutención de los guerrilleros de la gobernación de Jijona (6 de agosto), pagados con lo que le queda a Marcos Verdú. No obstante, a Verdú aún debía quedarle más dinero en el arca, puesto que el 9 de enero de 1811 se pagaron los víveres que precisaban los 160 soldados de caballería que pasaron por Jijona con el resto del donativo de Estevan Filiol. Por cierto que este mismo día, Filiol presentó ante el Ayuntamiento un memorial en el que pedía que la cuota que le correspondía pagar de los 40 millones de impuestos que se requería al vecindario, se lo cobraran del donativo voluntario que les dio un año y medio antes. Y así se hizo, pese a que los restos de dicho donativo se usaron en el pago de víveres! Aun así, el 26 de noviembre de aquel año de 1811, el depositario de propios, por acuerdo del cabildo, pagó tres mil reales a los milicianos y guerrilleros con los fondos procedentes del donativo de Estevan Filiol. El cronista jijonenco Fernando Galiana, comenta al respecto: Parece milagroso que esta cantidad de dinero que se le incautó, hacía casi tres años, hubiese podido remediar tantos apuros. Y tiene razón, pues milagroso al estilo de la multiplicación de los panes y los peces parece éste, en que el dinero requisado a Filiol da la impresión de reproducirse en el interior del arca vigilada por Verdú. No se sabe cuánto tiempo estuvo Esteban Filiol en la cárcel. Probablemente no fue mucho. Lo que sí sabemos es que el depositario del dinero que le fue confiscado, Marcos Verdú, murió 19

Gerardo Muñoz Lorente a primeros de marzo de 1813. Su cadáver fue el último en ser enterrado en la Iglesia Vieja; aunque no sería aquel un entierro tranquilo, tal como veremos más adelante. El cónsul francés y la familia Lattur En Alicante, el primer francés en ser detenido fue el cónsul de aquel país, Augusto Legay de Barriera, el 29 de mayo de 1808, siendo encerrado en los calabozos del castillo de Santa Bárbara. Los demás galos avecinados en la ciudad fueron llevados a la Casa de Misericordia, se supone que para librarles del odio de los alicantinos más exaltados, pero sus bienes fueron además confiscados. Junto con los franceses, fueron arrestados los naturales de las naciones conquistadas por Napoleón, sobretodo genoveses, hasta que un decreto del 3 de junio ordenaba que se les investigara y se pusieran en libertad si no había pruebas de que confabularan contra la patria. No obstante, un mes después (6 de julio), la Junta Suprema de Valencia aclaraba que los transeúntes, genoveses, individuos de otras nacionalidades sometidas por Francia, así como descendientes de franceses eran reputados como verdaderos franceses para los efectos civiles de la orden sobre represalias. En algunas poblaciones, como Alcoy, no constan detenciones o abusos contra los franceses, a pesar de que residían algunos de ellos. Pero son muy pocas. En la mayoría, los naturales de Francia o de origen francés sufrieron graves represalias, aunque sin atentar contra sus vidas, tal como hemos visto. En Elche, el 6 de junio, fueron al menos cuatro los ciudadanos franceses a los que les embargaron los bienes y fueron detenidos. Y en Denia, si bien no fueron apresados, ilustres ciudadanos con apellidos galos (pero a los que se les reconocía espíritu patriótico) como los Lattur, Morand, Merle, Lostalot, Bordehore, Vignau, Polart, Chabás, fueron desposeídos de sus derechos cívicos, al mismo tiempo que se les exigían contribuciones de guerra. Por cierto que algunos de ellos eran en efecto afrancesados que fueron bien tratados por las tropas imperiales cuando ocuparon Denia, como los Chabás; mientras que otros, tal como veremos en otro momento, fueron arrestados por el comandante francés y encarcelados en el castillo, por ser ciertamente patriotas españoles, como los hermanos Juan 20

La Guerra de la Independencia en la provincia de Alicante (1808-1814) Antonio y Manuel Lattur. Familia esta la de los Lattur que, como se ve, sufrió la represión de ambos bandos. Matanza de franceses Pero no en todas partes supieron las autoridades salvaguardar la vida de los franceses. En Valencia, nada más estallar la guerra, se produjeron violentos tumultos a diario contra los extranjeros, especialmente contra la numerosa colonia francesa, realizándose terribles sucesos. Tan violenta turba fue acaudillada al principio por un franciscano monovero llamado Juan Rico Vidal. Pero Rico fue sustituido muy pronto por otro religioso, Baltasar Calvo, canónigo de San Isidro de Madrid, tan cruel y sanguinario que incluso el fraile monovero hubo de esconderse por temor a perder su cabeza. El feroz canónigo madrileño exasperó todavía más los encrespados ánimos de los amotinados españoles, alimentando con calumnias las ansias de venganza de muchos contra indefensas familias, algunas ni siquiera de nacionalidad francesa, hasta que acabaron cometiéndose los más execrables crímenes. El punto culminante de esta espiral de violencia se alcanzó en la noche del 5 de junio, cuando fueron asesinados doscientos franceses. Pero antes y después de esta fecha fueron masacradas otras doscientas personas de origen galo y muchas otras valencianas, acusadas de afrancesadas, como el barón de Albalat. Aunque demasiado tarde, las autoridades valencianas reaccionaron al fin, arrestando a los criminales y recuperando la calma. Baltasar Calvo fue detenido y, después de ser trasladado a Mallorca mientras se apaciguaban los ánimos, fue devuelto a Valencia para ser ejecutado al garrote en la noche del 3 de julio, siendo su cadáver expuesto al público en la mañana siguiente. Además, la Junta Suprema ordenó el ahorcamiento de otros doscientos reos, acusados de la matanza de más de cuatrocientos franceses y muchos otros habitantes de la ciudad de Valencia. Afortunadamente, en tierras alicantinas no se produjeron hechos tan terribles como los acaecidos en Valencia. Aunque hay un historiador, el oriolano García Soriano, que asegura que, por aquellas fechas, en Villena también se cometieron desmanes parecidos a los valencianos, pero a menor escala. En concreto, 21