COOPERACIÓN LATINOAMERICANA PARA RESCATAR CAPAQ ÑAN, EL CAMINO DEL INCA. Seis países sudamericanos trabajan en conjunto para recuperar el Camino del Inca y convertirlo en patrimonio de la humanidad en un intento por valorar nuestro legado común. Entrevista a Mario Vásquez Miembro del Consejo de Monumentos Nacionales Vicuña Mackenna # 84, Santiago de Chile tel. (56-2) 665 1516 www.monumentos.cl El Camino del Inca es la principal ruta construida por los incas hace más de quinientos años con el objetivo de unir América Latina. Con más de 8.500 kilómetros, este camino, que se conserva hasta nuestros días, se extiende desde el extremo sur de Colombia hasta la ciudad de Talca, en Chile, y en algunos tramos alcanza hasta quince metros de ancho. Además, aloja ecosistemas que se encuentran bajo amenaza de desaparecer, como son las yungas peruanas, el bosque seco de Marañón, el matorral chileno y la selva de invierno también de Chile. Considerada por los especialistas como una obra única en el mundo, hoy está siendo promocionada para adjudicarse el título de Patrimonio de la Humanidad entregado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). La idea de postular al Camino del Inca como patrimonio de la humanidad nace de una invitación hecha por Perú a los demás países que forman parte del denominado Capaq Ñan (camino del señor), entre los cuales se encuentran Argentina, Chile, Colombia, Bolivia y Ecuador. Esta iniciativa fue acogida por todas las naciones involucradas mediante un acuerdo 164
Cooperación latinoamericana para rescatar Capaq Ñan, el camino del Inca diplomático entre los presidentes respectivos, que dio curso a la postulación en el año 2000. Pero el proceso toma bastante tiempo, aún se deben cumplir varias etapas y por eso los países están trabajando en forma multilateral y bilateral. Argentina se unió a Chile, Perú a Bolivia y Colombia a Ecuador. Por otra parte, hay una especial colaboración del Centro de Patrimonio Mundial de la Unesco, que ha participado en las reuniones realizadas en La Paz, Cuzco, Lima y Santiago. En ellas toman asiento los encargados de los países involucrados. Por ejemplo, en Chile hace presencia el Consejo de Monumentos Nacionales y las sesiones se realizan esporádicamente, ya que la postulación lleva cinco años desde que se inició. El trabajo no ha estado exento de dificultades. La primera tarea que cada país debió cumplir fue la demarcación del territorio a ser postulado, ya que, por la longitud del camino, no se podía incluir en su totalidad, además de que un amplio tramo se ha ido perdiendo con el paso del tiempo. Otro factor a ser considerado fueron los disímiles niveles de desarrollo de la investigación. Por ejemplo, Perú lleva varios años de indagación sistemática; muy por el contrario, Colombia y Bolivia debieron explorar más para actualizar sus datos. Esta iniciativa tiene la característica de ser seriada, lo cual quiere decir que Chile, por ejemplo, debe postular una serie de sitios arqueológicos que forman parte de Capaq Ñan. Argentina, por su parte, presenta sus propios sitios y de igual manera los demás países; no obstante, se priorizan los tramos binacionales. Para Mario Vásquez, miembro del Consejo de Monumentos Nacionales (Chile), este es un proyecto complejo, ya que se debe buscar el acuerdo de los involucrados y por eso se decidió trabajar en forma grupal. Dentro de los principales objetivos del proyecto se encuentra la conservación, restauración e investigación arqueológica, además de la inserción de las comunidades que habitan la zona, ya que también se pretende desarrollar los poblados que habitan dentro de los tramos de cada país. Así mismo se contempla la restauración de la ruta principal y de áreas arqueológicas, la identificación y manejo especial de sitios sagrados y la conservación de la biodiversidad. Para obtener finalmente el título es necesario cumplir una serie de requisitos ante la Unesco. En el caso del Camino del Inca se alcanzan casi todos, entre 165
Proyecto Espiral ellos: representa una obra maestra del genio creador del hombre; testimonia un intercambio de influencias considerable durante un periodo concreto o en un área cultural determinada del mundo; es testimonio único, o por lo menos excepcional, de una tradición cultural o una civilización viva o desaparecida; es ejemplo excepcional de un tipo de construcción, conjunto arquitectónico, tecnológico o de paisaje; es ejemplo excepcional de formas tradicionales de asentamiento humano o de utilización de las tierras, representativas de una cultura o varias culturas, especialmente cuando son vulnerables debido a mutaciones irreversibles. Una vez obtenido el título de Patrimonio de la Humanidad los países se comprometen a proteger y conservar el sitio. Si ello no se llegase a cumplir, la Unesco pone al patrimonio en una lista de riesgo, en la que se evalúa su estado a fin de destinar fondos para su mantenimiento. No hay precedentes de un trabajo multilateral de esta envergadura. Solo en Europa existe un camino de similares características, en Santiago de Compostela, España, pero no han sido proyectos en los que se involucre a tantos países. Es importante destacar el trabajo conjunto que se está realizando. Como señala Mario Vásquez, las alianzas o disputas con los países vecinos se representaban en el nivel económico, político o territorial, pero en esta iniciativa hay acuerdo: los que trabajan no son diplomáticos, son especialistas. En estos momentos Chile, Argentina, Perú, Bolivia, Ecuador y Colombia aún están identificando los terrenos, misión que debería estar lista para noviembre de 2005. Pero todavía queda mucho camino por recorrer. El proceso de postulación de un patrimonio es largo, y en este caso es aún más complejo, por la magnitud del proyecto. Sin embargo, las organizaciones a cargo confían en las virtudes del Camino del Inca y la importancia que tiene para los países latinoamericanos preservar testimonios de la cultura Inca. El Camino del Inca puede ser un primer proyecto entre muchos más, debido a que en América Latina existen pasados indígenas comunes que poco a poco han sido destruidos por la mano del hombre y es importante rescatar el legado de nuestros antepasados, sobre todo cuando los aborígenes de la zona comienzan también a desaparecer; los investigadores aseguran que 2.500 lenguas aborígenes han dejado de existir en el mundo. 166
Cooperación latinoamericana para rescatar Capaq Ñan, el camino del Inca Asimismo, es importante rescatar el legado común como un aporte a la integración por encima de las fronteras y como facilitador de la comunicación latinoamericana. Esta iniciativa tiene la gran particularidad de unir a seis países con la intención de rescatar el legado que los incas dejaron en el continente americano hace más de quinientos años. Pero también es cierto que detrás de cada postulación ante la Unesco de un monumento o sitio como Patrimonio de la Humanidad existe un interés económico, ya que ella promueve un aumento del turismo. Muchos especialistas sostienen que la gran ventaja de estos asuntos son los dividendos que obtiene la región favorecida. El lugar se promociona y se torna más reconocido para el resto del mundo, por lo que resulta mucho más atractivo para los visitantes extranjeros. En Chile fue designado Patrimonio de la Humanidad el casco histórico de la ciudad de Valparaíso, y en esa región el incremento de turistas se ha duplicado desde su declaración; incluso los cruceros, que hace algunos años eran escasos, ahora arriban al puerto casi a diario. Por otra parte, se comienzan a postular proyectos de rescate para la zona, en los cuales hay dinero de por medio. Claramente, la postulación del Camino del Inca se puede interpretar desde dos puntos de vista: el primero, como la unión de Chile, Argentina, Perú, Ecuador, Bolivia y Colombia para preservar zonas de valor arqueológico, y el segundo como el incremento de divisas que la iniciativa generaría para cada país. Significativo ha sido el trabajo conjunto que se desarrolla por parte de los seis países interesados. La cooperación mutua es fundamental para que la postulación de Capaq Ñan sea una realidad, y si trabajamos por rescatar nuestro pasado común, por qué no lo trasladamos a otros ámbitos, ya sean políticos, sociales o económicos? Si existe un interés común que beneficia a Perú, Argentina, Chile, Colombia, Bolivia y Ecuador, se deben buscar nuevas fórmulas de cooperación que unan a Latinoamérica. Claro está que si existe la disposición de trabajar en conjunto se pueden lograr resultados que sean positivos para el continente y que sirvan de ejemplo para el resto del mundo. 167
Proyecto Espiral Sobre todo cuando hoy se habla de globalización y de progreso, es importante preocuparse de nuestro pasado, rescatarlo y preservarlo, que nadie desconozca sus orígenes y que forme parte de la cultura regional. Con Camino del Inca ya existen precedentes de que es posible que los latinos trabajen en conjunto con un objetivo común. Ahora deberían continuar muchos más proyectos de interés común, proyectos como este, que contribuyen a la integración de las naciones y a rescatar una identidad común que se niega a desaparecer. Carla Osorio Rojas carlitaosorio@hotmail.com 168