Degollada de Cruz Grande Cima Pedro González, (Los Palmitos).

Degollada de Cruz Grande Cima Pedro González, (Los Palmitos). Sí el sendero que nos lleva a Güi-Gui, es uno de los más conocidos y transitados de nuestra isla, la ruta que nos lleva desde la Degollada de Cruz Grande a la Cima de Pedro González, no tiene nada que envidiarle, es frecuentada sobre todo por turistas, que aprovechan el buen estado del sendero y la poca exigencia física que exige para conocer la Gran Canaria natural, lejos de ruidos y del turismo de masas. Hasta no hace mucho, el sendero nos conducía directamente hasta Palmitos Park, pero hoy por hoy, no podemos llegar hasta este parque temático, pues han cerrado la bajaba desde Los Palmitos. Entre barrancos, así podríamos resumir este sendero, que nos lleva por una gran parte de las cabeceras de los barrancos que forman el Parque Natural de Pilancones. El Parque Natural de Pilancones, fue declarado por la Ley 12/1987, de 19 de junio, de Declaración de Espacios Naturales de Canarias como parque natural de Ayagaures y Pilancones y reclasificado por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias. Tiene una superficie de 5797 4 hectáreas, y se encuentra en su totalidad en el municipio de San Bartolomé de Tirajana,(Tunte). Este espacio es también zona de especial protección para las aves según lo que establece la Directiva 79/409/CEE relativa a la Conservación de las Aves Silvestres. El parque es por definición área de sensibilidad ecológica, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico. En cuanto a su extensión es el tercer espacio protegido más grande de Gran Canaria, después del Parque Rural del Nublo y del de Tamadaba. Es un espacio poco alterado en su interior, siendo su aspecto más relevante, un pinar de repoblación en un buen estado, destacando la espectacularidad de los procesos erosivos. Su formación comienza hace 12 millones de años, formando parte del gran estratovolcán en escudo, hasta los 9 6 millones de años (Mioceno) donde cesa la actividad eruptiva de la zona, recibiendo posteriormente, sobre los 3,4 millones de años,

brechas, deslizamientos gravitacionales y coladas procedentes del centro de la isla en el ciclo Roque Nublo. Hasta los 9,6 m.a. se crea una gran rampa, unida a Inagua y a Tauro, que descendía paulatinamente hasta la costa. La Erosión se ha encargado de separar este espacio de ambos macizos; creando una importante cuenca, donde destacan el barranco de Ayagaures, La Data, Chamoriscán, Vicente, Vicentillos y el Palmito. Encontramos relieves culminantes residuales como el Morro del Hierva huerto, Morro Las Vacas, Cruz Grande, etc. Es un espacio donde la erosión, es el factor más destacado, dotándolo de un alto valor geomorfológico, ya que conserva paisajes de una gran antigüedad sin que exista ningún retoque constructivo, es decir, sin emisiones lávicas posteriores. Se caracteriza por una sucesión de coladas de ignimbritas, coladas Fonolíticas y brechas de Roque Nublo. En cuanto a la vegetación, del Pinar de ambiente seco, pasamos a una vegetación de Tabaibas y Jaras, donde podemos encontrar Tederas, Cornicales, Balillos, Jarones, Tomillos, Palmeras, cañas, juncos y la más variada vegetación azonal. etc. De las 109 especies de flora inventariadas, 80 son endémicas, de las cuales 27 son endemismos de Gran Canaria. Dentro de este espacio natural nos encontramos con una más que suficiente red de senderos, pero podemos afirmar, que transitamos por el más amable, ya que nos permite una amplia visión del parque sin tener que sortear grandes pendientes, su única dificultad radica en su kilometraje. Se ha dividido el recorrido en tramos claramente diferenciados, en base a lugares concretos fácilmente identificables o donde cambia básicamente, pendiente, vegetación, tipo de firme, etc. TRAMO 1: Degollada de Cruz Grande Degollada del Sordo. TRAMO 2: Degollada del Sordo - Pista de Tierra. TRAMO 3: Pista de tierra Cima de Pedro González. TRAMO FIRME ALTITUD PENDIENTE DIFICULTAD DISTANCIA TIEMPO* 1 Pista. Sendero. 1255-1130 m. Media-Baja Baja 5300 m. 1,5 horas 2. Sendero 1130-929 m. Media- Baja Media 4140 m. 1 hora 3 Pista- Sendero- Pista 929-490 Media - Baja Media 6960 m. 2,5 horas Distancia total : 16.4 Km. Área : 14,79 Km 2 Ascenso total : 426 m. Descenso total: 1173 m. Cota máxima: 1278 m. Cota mínima: 490 m. Las distancias y lo tiempos son aproximados.

TRAMO 1: Degollada de Cruz Grande Degollada del Sordo Comenzamos en la Degollada de Cruz Grande, punto de referencia importante dentro de la red de caminos reales de la isla, siendo nexo de unión entre el Sur y la Cumbre de la isla. Empezamos caminando por la pista de cemento, donde se encuentra el cartel informativo del topónimo, Cruz Grande. La pista pasa a ser de tierra, cogemos la pista de nuestra izquierda, vemos como la que baja nos conduce a la casa forestal, saltaremos la cadena que impide la entrada de vehículos para seguir por ella aproximadamente unos 1,5 Km hasta que observamos una estaca del Cabildo que señala la dirección para llegar a la Degollada de la Manzanilla. Justo en el poste del Cabildo vemos a nuestra derecha el comienzo de un sendero, es por donde cogeremos. Sobra decir que desechamos seguir hacia la D. de la Manzanilla. El sendero en muy buen estado, toda una autopista, discurre por las distintas cabeceras del barranco Cueva de Millares, tributario relevante del barranco de Ayagaures. Continuamos cómodamente por el sendero, bajando nos toparemos con un cruce de caminos, cogeremos por el de nuestra derecha, el que se ve mucho más pisado. Seguiremos por la falda sur de dos extravagantes roques, Guirre y Picachos, para comenzar a subir y cambiar de vertiente con extraordinarias vistas a la Cercados de Araña y la presa de Chira. No hay perdida, vamos superando degolladas (Cho Benito, Los Chicharros) hasta la D. del Sordo, muy fácil de identificar, ya que se encuentra debajo del Morro del Hierba Huerto, con un cruce de muros de piedra, cogeremos a nuestra izquierda, desechando el sendero que sigue de frente mucho más pisado. El Morro del Hierba Huerto, vestigio de la extensa rampa que formaban Pilancones, Tauro e Inagua, es un relieve culminante residuar.

En la Carta Etnográfica de la Fedac encontramos lo siguiente sobre la presa de Chira: Su muro de piedra roja de cantería es de unos 3 metros de ancho en su parte superior, que aumenta con la profundidad. Tiene una capacidad 4.030.000 m 3. es la cuarta en capacidad tras Soria, Cueva de las Niñas y Parralillo. Se desconoce la superficie total del embalse pero la obra que cierra el barranco sobrepasa los 200 metros. TRAMO 2: Degollada del Sordo - Pista de Tierra. Comenzamos en tramo más incomodo, ya que aunque el sendero se sigue correctamente, es más estrecho y mucho menos transitado. Nos adentramos en el pinar, muy abierto al ser de exposición sur y con muy poco sotobosque, no obstante con muy buena salud. Las vistas de la cuenca de Ayagaures son sobrecogedoras, el moldeado erosivo se aprecia en toda su intensidad. Las diferentes coladas crean zonas rubrefactadas, donde se aprecian pequeñas fuentes, los Juncos desentonan con la aridez del pinar, y nos prometemos volver al lugar cuando estén en funcionamiento sus barrancos, después de una buena borrasca de sur, que haga rebosar sus presas y el agua alcance el mar. Las sensaciones que nos producen este tramo del recorrido en particular y toda la caminata en general, nos llevan a recordar la letra de una conocida canción: Para entrar en el cielo no es preciso morir

El sendero no tiene perdida, nos encontramos con dos bifurcaciones, una que viene a nuestra derecha y otra, en un llano, después de un gran mojón de piedras que baja a Ayagaures. Debemos seguir siempre rumbo Sur. Las dunas organógenas de Maspalomas nos sirven de faro, espectaculares en su comunión con el mar. El sendero nos conduce a una pista de tierra, donde finalizamos el tramo 2. El caserío de Las Tederas. En centro de la imagen se observa el sendero que sube a Tunte por la Degollada de La Manzanilla, y que pasa por dos hitos ya históricos de nuestra isla: El descansadero de los muertos y el lugar donde habitó el gran Pino Pilancones. TRAMO 3: Pista de tierra Cima de Pedro González. Seguimos la pista por nuestra derecha, siempre dirección Sur, hasta su finalización; también a la derecha vemos una puerta formada por dos mojones donde comienza nuevamente el sendero. Después de una pequeña bajada llegaremos al Lomo de Chamoriscán, divisoria de aguas entre el barranco de Las Charquitas y el de Chamoriscán, el sendero cruza por su cauce el barranco de Las Charquitas y sigue sin perdida, para luego girar a la izquierda y bajar al barranco de Palmito, al llegar a su cauce accedemos por su ladera izquierda a una pista bastante deteriorada, a las casas de Los Palmitos; continuamos por la carretera, primero tierra y luego asfaltada hasta la Cima de Pedro González. La bajada en zig-zag al B. de Palmito, está muy bien marcada por mojones. El lomo de Palmito, nos regala una esplendida visión de las presas de Gambuesa (1,4 Hm 3 )y Ayagaures (1,7 Hm 3 ).

Pilancón en el B. de Palmito. Pilancón o Marmita de gigante son concavidades que se forman en los cauces de ríos y barrancos por el arrastre de materiales que transporta el agua, estos materiales caen en algún hueco o en la zona débil de la roca y al girar por el movimiento de las aguas va escarbando creando verdaderas piscinas naturales. Vegetación. NOMBRE CIENTIFIVO Scirpus holoschoenus Lavandula canariensís Aeonium Percaneun Aeonium Manriqueorum Aeonium simssi Pinus canariensis C.symphytifolius Sonchus acaulis Cistius symphytifolius Phoenix Canariensis Asphodelus aestivus NOMBRE COMÚN Juncos Lavanda Verol Bejeque. Pastel de risco Pino Canario Jara Cerraja Jarón Palmera canaria. gamona

Recomendaciones: Imprescindible las botas. No ir con lluvias, pues se corre no sólo el riesgo de desprendimientos sino de que se formen barranqueras. El agua y un gorro protector no deben faltar. Si se tiene vértigo abstenerse totalmente. No dejar la más mínima huella de nuestra estancia en el lugar. Evitar los días calurosos, en verano puede ser un tormento. Camina para disfrutar, vete siempre a tu ritmo. José M. Quesada Medina