ATENCIÓN PRIMARIA Febrero 2014 Sumario Utilidad de Vertigoheel en el tratamiento del desequilibrio y mareo persistente Dr. Héctor Guiral Torner Especialista en Otorrinolaringología
MEDICINA BIORREGULADORA EN ATENCIÓN PRIMARIA Aplicaciones Prácticas Utilidad de Vertigoheel en el tratamiento del desequilibrio y mareo persistente Dr. Héctor Guiral Torner. Especialista en Otorrinolaringología. Doctor en Medicina y Cirugía. Premio a la mejor tesis doctoral de la SEORL 1995 sobre alteraciones persistentes del equilibrio y patología vascular. Hospital Quirón (Valencia) y Hospital Rey Don Jaime (Castellón). El desequilibrio es uno de los síntomas mas comunes presentados por el paciente a los médicos 1. Puede ser un síntoma de una enfermedad auditiva neurológica u ocular y es a menudo pobremente entendido y mal diagnosticado. Quizás no exista otra entidad clínica en la cual la evaluación clínica y el diagnóstico ulterior sea mas complejo. El mareo y/o vértigo es un síntoma muy común entre la población geriátrica. Los estudios epidemiológicos muestran un margen muy amplio respecto a la incidencia que varía entre la población mayor de 60 años entre un 9 y 70%, según el National Ambulatory Care Surrey 2. Kroenke, un investigador del vértigo, cita en los Annals of Internal Medicine, que desde finales del siglo pasado la alteración del equilibrio es la queja mas importante que reciben los médicos en su practica diaria de sus pacientes mayores de 75 años 1. Para el médico clínico de atención primaria el mareo es doblemente problemático: 1- Es una sensación subjetiva difícil de explicar que abarca un gran abanico de posibles patologías, que incluyen un amplio diagnóstico diferencial. 2- Existen escasos datos clínicos sobre el mareo y/o vértigo persistente y la mayoría de publicaciones existentes van dirigidas a especialistas ORL. Los escasos trabajos sobre el mareo en la población muestran una distribución por diagnósticos diferente en cada grupo de edades. En individuos mayores de 50 años el vértigo posicional paroxístico benigno es el más frecuente (25,9%) seguido a corta distancia por los trastornos cerebrovasculares (21,6%). Para muchos otorrinolaringólogos, la atención de pacientes con vértigo o mareo persistente resulta frustrante. Un paciente con alteraciones del equilibrio se nos presenta con un amplio abanico de posibilidades diagnósticas y con un pequeño arsenal terapéutico. En pocas áreas de la medicina como ésta el diagnóstico se establece sólo cuando se logran reunir las piezas de muchos datos dispares. El considerar el diagnóstico de estos pacientes como una carga y no como un reto dificulta un trabajo que es mentalmente estimulante y también gratificante. El vértigo constituye uno de los motivos mas frecuentes por el que los pacientes acuden a su médico de cabecera y en particular al otorrinolaringólogo. Sin embargo, a pesar de los métodos diagnósticos disponibles actualmente, los médicos, en general, experimentan un cierto desánimo al conocer que la queja por la que su paciente consulta es vértigo. Probablemente a ello contribuyen varios factores: 1) La dificultad por parte de muchos pacientes para describir sus síntomas, 2) El hecho de formar parte en muchos 15
Dr. Héctor Guiral Torner casos de una patología poco grave, en la que se mezclan un porcentaje de enfermos con patologías generalmente incluidas en el campo de la psiquiatría, 3) La dificultad por parte de médicos de cabecera y especialistas de encontrar una alteración definitiva que justifique el vértigo, y por último 4) Los escasos tratamientos médicos eficaces y libres de efectos secundarios que permitan evitar los sedantes vestibulares y vasodilatadores centrales. El término vértigo siempre es un síntoma y nunca una enfermedad, este síntoma es muy difícil de describir para algunos pacientes que se refieren a él como mareo. Se trata de vocablos que utilizan los enfermos que hace referencia a varias situaciones diferentes. Por lo general se refieren a trastornos episódicos, transitorios del equilibrio o a alteraciones breves de la conciencia. Algunos textos, principalmente americanos, con su pragmatismo habitual se han ocupado de esta queja y clasifican los mareos en cuatro tipos: a) Vértigo; b) Síncope c) Desequilibrio y d) Mareo psicógeno. Por eso, como primer paso a dar por el clínico es fundamental realizar una aproximación sistemática con el fin de obtener una buena historia clínica. Es esencial preguntar sobre tres aspectos: 1) Si es una ilusión de movimiento de uno mismo o del medio o si, más bien, es una sensación de pérdida inminente de conocimiento o de control; 2) Si los ataques son realmente episódicos o si el paciente se encuentra mareado constantemente y 3) Cómo varían los síntomas con los movimientos o cambios posturales cefálicos, así como 4) Ver si existen síntomas auditivos. Una vez obtenido un diagnóstico clínico de vértigo, el médico debe determinar si la queja es atribuible a una causa periférica o a el término vértigo siempre es un síntoma y nunca una enfermedad alguna alteración del Sistema Nervioso Central. Muchos autores han dedicado un buen número de páginas a sentar las diferencias semiológicas entre los síndromes vestibulares periférico y central. También hay quien opina que esta diferenciación categórica es de poca utilidad y muchas veces irreal. Sin embargo se observa que en la mayoría de los casos el vértigo típico, con o sin nistagmo, indica en muchas ocasiones una patología periférica, casi siempre laberíntica. De los periféricos, el vértigo posicional paroxístico benigno es el más frecuente seguido de la neuritis vestibular y del Síndrome de Ménière. Las alteraciones centrales que originan vértigo y nistagmus simultáneo, tales como la patología vascular vértebro basilar, la migraña e infartos cerebelosos, en ocasiones presentan semiológica de pares craneales y/o vías largas que ayudan en el diagnóstico topográfico. Es fundamental realizar una buena exploración física, sistemática y oto-neurológica, para el diagnóstico diferencial así, la existencia o no de alteraciones de pares craneales, fuerza muscular, reflejos musculares profundos, tono coordinación, marcha, pruebas de Romberg, Hallpike, Rinne y Weber, ayudarán a diferenciar un vértigo de origen central o periférico. En algunos casos el órgano periférico del equilibrio estará lesionado por afectarse el sistema vascular central. Precisaremos de pruebas como la angio-rm y el Eco doppler transcraneal. Las pruebas audiológicas constituyen una parte importante de la batería de estudios en el paciente con vértigo para localizar el proceso responsable de los síntomas. Se han descrito multitud de pruebas, cuya importancia ha ido variando con la introducción de métodos mas modernos. En la actualidad se utiliza la audiometría de tonos puros, la 16
audiometría verbal, y la impedanciometría. Sin embargo el uso de estas pruebas psicoacústicas, aunque pueda ser útil para diferenciar entre lesiones cocleares y retrococleares, queda muy limitada por su escasa especificidad. Para ello se utilizan otras pruebas tales como los potenciales auditivos evocados, de elevada sensibilidad para el diagnóstico de disfunción del nervio coclear y de la vía auditiva en el tronco cerebral. El problema radica en la existencia de falsos positivos para el neurinoma del acústico en individuos sanos, que nos obligan a recurrir al diagnóstico por la imagen mediante tomografía axial computerizada o resonancia magnética nuclear. El autor Guiral y cols. narra en un estudio observacional realizado en 86 pacientes afectos de vértigo vestibular y con edades comprendidas entre 19 y 73 años, cómo Vertigoheel demostró eliminar las crisis de vértigo rotatorio e inestabilidad en el 91,9% de los pacientes. Todos los pacientes afectos de vértigo presentaban síntomas vegetativos hipoacusia y/o acúfenos. Se excluyeron aquellos afectos de laberintitis, otitis o colesteatoma. A la exploración todos presentaban una alteración en la videonistagmografía. Los pacientes afectos recibieron tratamiento con Vertigoheel complementándose con fitoterapia, productos de la colmena (Jalea y polen) y rehabilitación cervical. Los resultados fueron muy satisfactorios estando 79 pacientes libres de síntomas a los 3 meses, 6 precisaron medicación convencional con L- tiroxina o antidepresivos. Y uno precisó de radiocirugía extereotáxica por presentar un neurinoma del acústico. Vertigoheel no posee ningún efecto secundario negativo, su acción esta mediada por el cóculo que disminuye la cinetosis, el ámbar gris que atenúa la excitabilidad laberíntica, la cicuta, efectiva para el temblor, el vegetatismo y el mareo posicional, y el petróleo, para las náuseas y los vómitos. Todos estos compuestos biorreguladores actúan según el principio de Bürgui (efecto sinérgico), basado en la ley del efecto inverso de Arndt-Schulz 4. Existen otros estudios como el de Klopp y colaboradores en Microvascular Research 2005 3 que utilizando una sonda microscópica envía imágenes de microcapilares. Con microscopía intravital, se demuestra la mejora de la microcirculación con Vertigoheel. Este fármaco biorregulador, aumenta el número de puntos nodales de perfusión sanguínea de la red de microcapilares, así como las tasas de flujo de hematíes en ambas arteriolas y la vasomoción. También se observa que aumenta el número de leucocitos adheridos a un endotelio venular definido y la presión parcial de oxígeno, con aumento de las concentraciones de ICAM-1 (molécula de adhesión intercelular tipo 1) y descenso de los valores de hematocrito. De este modo, la eficacia clínica de Vertigoheel se debe al aumento del aporte de oxígeno y nutrientes a las células y a un aumento de la adaptación a cambios en las condiciones metabólicas. Al mejorar la perfusión del laberinto y al mismo tiempo la microcirculación central, Vertigoheel tiene un efecto doblemente beneficioso siendo de esta forma su eficacia clínicamente demostrada en el tratamiento de vértigos, mareos e inestabilidad de etiología diversa. Vertigoheel además aporta una terapéutica libre de efectos secundarios. Facilita el evitar los sedantes vestibulares y vasodilatadores centrales en el tratamiento de pacientes con mareo crónico. Los nuevos fármacos biorreguladores como Vertigoheel son muy útiles y eficaces Utilidad de Vertigoheel en el tratamiento del desequilibrio y mareo persistente Vertigoheel demostró eliminar las crisis de vértigo rotatorio e inestabilidad 17
Dr. Héctor Guiral Torner en el tratamiento del vértigo y desequilibrio persistente y permiten tratar al paciente crónico con seguridad y sin efectos adversos. De todos es conocido las distonías focales, síndromes extrapiramidales, y parkinsonismos yatrogenos que con frecuencia vemos en los pacientes tratados con neurolépticos (sulpiride, clebopride) y sedantes vestibulares (tietilpiperazina), a quienes se les administran dosis altas y repetidas en las crisis de vértigo y los temblores en reposo y las rigideces de aquellos que reciben vasodilatadores centrales tipo flunaricina, cinarizina. Los nuevos fármacos biorreguladores cubren esta necesidad de fármacos seguros y eficientes. Vertigoheeel facilita la remisión de la intensidad y el número de crisis de vértigo desde las dos primeras semanas de tratamiento. Aportando un constante retroceso de la duración diaria de las crisis. Todas las evidencias clínicas y estudios prueban que su utilidad es tanto o más comparable a dimenhidrinato y betahistina 5,6, pudiendo combinarse con cualquier otro tipo de tratamiento vasodilatador o sedante vestibular. No produciendo interacciones con cualquier otra medicación al tratarse de un fármaco biorregulador de origen homeopático. La posología es en comprimidos: 1-2 comprimidos / 3 veces al día, pudiendo utilizar en niños y ancianos las gotas: 15-20 gotas / 3 veces al día. Y en las crisis de vértigo periférico la solución inyectable: 1 ampolla / 1-3 veces por semana, vía i.m., s.c., i.d. o i.v. Bibliografía 1. Kroenke K. Annals of internal medicine 1992; 117:898-909 2. Kroenke K. AM J. Med. 1989; 86: 262-266. 3. Klopp W, Niemer W, Weiser M. Microcirculatory effects of a homeopathic preparation in patients with mild vertigo: an intravital microscopic study Microvascular Research 2005; 69:10-6. 4. Issing W, Klein P, Weiser M. The homeopathic preparation Vertigoheel versus Ginkgo biloba in the treatment of vertigo in an elderly population: a double-blinded, randomized, controlled clinical trial. J Altern Complement Med 2005; 11(1):155-60. 5. Wölschner U, Strösser W, Weiser M, Klein P. Treating Vertigo Homeopathic Combination Remedy Therapeutically Equivalent to Dimenhydrinate. Biologische Medizin 2001; 30(4):184-90. 6. Weiser M., Strösser W, Klein P. Homeopathic vs Convencional Treatment of Vertigo A randomized Double-blind Controlled Clinical Study. Arch Otolaryngol Head Neck Surg 1998; 124:879-85. 18
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