C LÁSIC O S D E A R G E N T O R E S MARÍA LUISA BEMBERG Y JORGE GOLDENBERG. De eso no se habla. EditorÍal Bibl08. Librería Garcia Cambeiro

Transcripción

1 C LÁSIC O S D E A R G E N T O R E S MARÍA LUISA BEMBERG Y JORGE GOLDENBERG De eso no se habla EditorÍal Bibl08

2 Prólogo Óscar Barney Finn Guardo de María Luisa Bemberg ( ) el recuerdo de sus obras y la amistad. Lo público y lo privado, el ser social frente al más íntimo y profundo. Pero en ella lo público y lo privado se conjugaron en una sola y atractiva protagonista de Crónica de una señora, y se alejaron del mundo que más tarde atraparía en su mejor filme, Miss Mary. El director, según Andréi Tarkovski, es "un cazador de imágenes que trata de atrapar y fijar el tiempo para abrirse a los recuerdos". Tiempo y recuerdos, dos caras de una misma moneda, y en esos tiempos han quedado atrapadas para siempre las protagonistas de María Luisa: Lucía viviendo su aventura en un desértico hotel Provincial, Leonor abandonando su casa y tratando de ser libre para enfrentar a sus hijos, Camila huyendo hacia una efímera felicidad y desatando sus pasiones, Miss Mary aferrándose a hijos ajenos, sor Juana encerrada en un convento a la búsqueda del conocimiento, o Carlota dejando al señor D'Andrea para irse con el circo. Todas mujeres buscando la posibilidad de ser, saliendo del camino trazado, enfrentando un entorno que las relegaba, queriendo justificar su vida ahogadas por una sociedad que no las dejaba trascender. Sus obras son espacios cerrados donde las tramas crecen y las emociones estallan y con las que ella fue [ 9]

3 10 Óscar Barney Finn creciendo. Desde la intimidad de Momentos a la poesía de De eso no se habla, pasando por la intelectualidad y el mundo cerrado de Yo, la peor de todas y sin dejar el fresco social en Miss Mary o la historia de Camila. Su estilo fue cobrando fluidez y su cámara, indagando el espacio y la luz con sutileza (Miguel Rodríguez y Félix Monti); estilo y cámara se unieron en un ascético equilibrio. Sus obras no abandonaron nunca la calidad y generaron hechos en los que las búsquedas estéticas nos hablan de algunas constantes y de una pasión renovada. Un mes antes de morir reunió a un grupo de amigos y colaboradores para leer su último guión, en el que junto a Antonio "Taco" Larreta recrearon la historia de "El impostor", un relato de Silvina Ocampo. Ella seguía atenta la lectura que hacía Larreta y cuando todos estábamos prisioneros de los climas inquietantes de la Ocampo su voz no se hizo esperar y, con la exigencia de siempre, nos impulsó a un análisis y una crítica. Así era de rigurosa, de inclaudicable, y así se la aceptaba para coincidir o para discutir, pero para seguir apostando a lo creativo. Ella vivió tantas vidas como películas pudo fijar en el tiempo. Sus personajes hoy tienen vida y si llegáramos a encontrarnos con Camila o sor Juana, nadie dejaría de reconocer en ellas a su hacedora. Es realmente acertado que Argentores haya elegido De eso no se habla, último film de María Luisa en colaboración con el dramaturgo y guionista Jorge Goldenberg basado en el cuento de Julio Llinás, dado que significó una importante vuelta de tuerca en su filmografía. La propuesta centra su acción en San José de los Altares, un pueblo cordobés en el relato, pero que en la ficción se parece a Colonia del Sacramento. Sus protagonistas son atípicos, rozan la poesía y establecen pautas nuevas en la poética de su realizadora. No son los climas a los que nos tenía acostumbrados; en esa galería de personajes se mezclan curas, alcaldes, policías y prostitutas que no les eran afines. Charlotte, la protagonista, es un ser diferente

4 Prólogo 11 en el rebaño y hace su propio camino para vivir un amor diferente, loco y apasionado. Más allá de su madre, que intenta ignorar que es enana, o del fabulador Ludovico D'Andrea, que se convertirá en su marido, Charlotte logra su verdadera identidad y decide irse con el circo que abandona ese pueblo lleno de prejuicios. Es allí, desde su guión, donde la directora fija su objetivo y no respeta el final escrito por Llinás, llevando a su protagonista a una actitud de ruptura frente a lo establecido. No quiso hacer un filme de gueto y nos dejó una obra que bucea en otras direcciones que hoy, a casi veinte años de su realización, sigue siendo atractiva.

5 MARÍA LUISA BEMBERG Y JORGE GOLDENBERG De eso no se habla Las obras de María Luisa Bemberg ( ) son espacios cerrados donde las tramas crecen y las emociones estallan: desde la intimidad de Momentos a la poesía de De eso no se habla, pasando por la intelectualidad y el mundo cerrado de Yo, la peor de todas, sin dejar el fresco social en Miss Mary o la historia en Gamila. De eso no se habla, último film de María Luisa Bemberg en colaboración con el dramaturgo y guionista Jorge Goldenberg basado en el cuento de Julio Llinás, significó una importante vuelta de tuerca en su filmografía. Es desde el guión donde la directora fija su objetivo y no respeta el final escrito por Llinás, llevando a su protagonista a una actitud de ruptura frente a lo establecido. No quiso hacer un film de gueto y dejó una obra que bucea en otras direcciones y que hoy, a casi veinte años de su realización, sigue siendo atractiva. Osear Bamey Flnn b EdÍtorial Bihlos