TRABAJO PRÁCTICO Nº4. Románico y Gótico. Taller de Reflexión Artística II. Fisicaro Clarisa. Bernal Micaela. Diseño de Indumentaria

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1 TRABAJO PRÁCTICO Nº4 Románico y Gótico Taller de Reflexión Artística II Fisicaro Clarisa Bernal Micaela Diseño de Indumentaria 4 30/05/2017 1

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3 Románico y Gótico. La evolución que sobrevivió más de tres siglos. Resumen: El estilo gótico es la evolución del románico, esto permite identificar con facilidad los elementos que éste aportó al primero, el cual también rompió con diversas características propias de su antecesor; son estas diferencias, algunas sutiles y otras marcadas con mayor fuerza, las que permiten al espectador diferenciar entre una construcción gótica de una románica. Palabras clave: gótico románico arquitecto estilo evolución 3

4 Introducción: El arte Gótico es un estilo artístico europeo que surge entre el siglo XII aproximadamente y las últimas décadas del siglo XVI. Fue aplicado en el campo de la arquitectura, la escultura, las vidrieras, la pintura mural y sobre tabla, los manuscritos y las diversas artes decorativas. El término gótico fue empleado en el Renacimiento en sentido peyorativo, para referirse al arte de la edad media, el que se consideraba inferior comparado con el arte clásico. Este movimiento tuvo su aparición a continuación del románico, a lo largo de la baja edad media, y en la actualidad es considerado uno de los momentos más importantes desde el punto de vista artístico en Europa. El estilo gótico encontró la arquitectura como su medio de mayor expresión, las mayores manifestaciones del gótico se encuentran en la arquitectura religiosa. En contraste con la arquitectura románica, cuyas características esenciales son el arco de medio punto, las estructuras macizas y las bóvedas de cañón o artista, la arquitectura gótica empleó el arco apuntado, agujas, chapiteles y gabletes. Dos son los elementos esencialmente característicos de la arquitectura gótica: la bóveda de crucería y el arco apuntado u ojival, la primera produce un cambio en la estructura y la otra en las formas exteriores. 4

5 Desarrollo: Se conoce como gótico al estilo que evoluciona del románico y domina las corrientes artísticas durante los últimos tres siglos de la Edad Media, quien le otorga este nombre es Giorgio Vasari, un historiador del arte italiano del siglo XVI. El estilo gótico toma una difusión geográfica mucho más amplia que el estilo románico. Al ser una evolución del románico, desde el punto de vista estético refleja una actitud espiritual, con gustos distintos y en algunos aspectos opuestos. Se observa que las características fundamentales del románico son el dominio de la masa sobre el vano y en los interiores la sombra triunfando sobre la luz, por el contrario lo que hará el arquitecto gótico es elevar y dar espacio a la luz (ver anexo, figura 1. Pág. 12). El afán de luz hace al arquitecto gótico prescindir del muro hasta que se comienza a implementar el hierro y el cemento, nuevos materiales que revolucionarían la arquitectura. En el estilo gótico el muro pierde su función esencial de soporte y es reemplazado por vidrieras, dando lugar a los amplios ventanales góticos que son el extremo opuesto a las ventanas románicas (ver anexo, figura 2. Pág. 12). Los arquitectos romanos y bizantinos construyeron sus edificaciones de no menos altura que muchas catedrales góticas, pero para ellos la altura representaba un factor de monumentalidad, en cambio el arquitecto gótico lo primero que considera es la elevación y el sentir ese movimiento ascendente con la mayor intensidad posible, en el fondo es la representación del ansia de Dios, los soportes y las cubiertas sirvieron para dar ese efecto. Las columnas comienzan a afinarse y se espiritualizan hasta transformarse en finos baquetones, acompañadas de molduras verticales producidas por las aristas de los antiguos pilares cruciformes, esta construcción tenía como finalidad generar la elevación a las alturas del espectador, donde los arcos apuntados de las bóvedas señalan el camino al cielo (ver anexo, figura 3. Pág. 13). 5

6 La tensión espiritual hacia las alturas es fundamental en el monumento gótico, en el exterior de las construcciones una serie de elementos arquitectónicos ayudan a completar ese deseo de elevación, como las torres que terminan agudas como flechas (ver anexo, figura 4. Pág.13). No obstante, durante el período gótico se conserva la importante de la arquitectura monástica, siendo la catedral el monumento donde alcanza su mayor expresión, la construcción se levantaba en el centro de la gran ciudad, donde su atura y magnificencia dominaban por completo (ver anexo, figura 5. Pág. 14). La catedral pasaba a ser el templo de las grandes masas burguesas formadas en los últimos siglos. La manifestación perfecta de la importancia de la espiritualidad en la Edad Media. Como en el estilo románico, la evolución del gótico se encuentra en la cubierta y son consecuencia de las novedades introducidas en la bóveda. El arco apuntado u ojival (ver anexo, figura 6. Pág. 14), ya utilizado en el románico, presenta una mayor verticalidad y recibe diversos nombres según la proporción entre su altura y su luz, se denomina de todo punto cuando sus centros están en los arranques, de tercio punto cuando dividido su ancho en cinco partes, los centros se encuentran en los extremos de los tres quintos centrales, y de cuarto punto cuando su ancho dividido cuatro se hace centro en los extremos de los cuartos inferiores. En el siglo XV se generaliza el arco apuntado conopial de cuatro centros, dos dentro a loa altura de las impostas, y dos fuera en la parte superior (ver anexo, figura 7. Pág. 15), posterior es la aparición del arco rebajado tipo carpanel de tres centros, dos de la línea de las impostas y uno mucho mayor por debajo de ella (ver anexo, figura 8. Pág. 15), también es empleado en los vanos secundarios dentro de la arquitectura gótica el arco escarzano, que no llega a ser un semicírculo (ver anexo, figura 9. Pág. 15), por 6

7 último a finales del período gótico, el arco mixtilíneo, producido por la introducción de pequeños trozos rectilíneos dentro del arco (ver anexo, figura 10. Pág. 16). La sección del arco gótico, como consecuencia de las molduras cada vez más ricas que las aristas del románico, es apuntada, y se decora con las mismas molduras que el pilar (ver anexo, figura 11. Pág. 16). La bóveda de crucería o de ojivas gótica deriva de la bóveda de artistas románica, pero se diferencia muy bien de ella, debido a que se descompone la bóveda en dos elementos: los arcos que cruzan diagonalmente como antes eran las aristas, que son los arcos de crucería, los formeros y los fajones, todos constituyen el esqueleto de la bóveda, y los plementos, que, apoyándose en ese esqueleto cierran la bóveda (ver anexo, figura 12. Pág. 17). La organización de la bóveda de nervios gótica resulta de dos arcos cruceros en diagonal y cuatro exteriores, que al igual que en la arista románica, la carga se concentra en cuatro puntos. Y al agregarse un nervio que une las claves de dos arcos laterales con la bóveda, se crea la bóveda sexpartita (ver anexo, figura 13. Pág. 17). Cuando debía marcarse la continuidad de la nave, se dispuso un nervio en el sentido del eje de ésta, uniendo las claves de todas sus bóvedas, este nervio se denominó combado, aunque la novedad surge por trazar las bisectrices de los ángulos inferiores de cada témpano, que en su punto de convergencia se unen a otro nervio secundario descendiendo de la clave, este tipo de bóveda nombrada terceletes (ver anexo, figura 14. Pág. 18), es de gran valor decorativo y representa un paso en el proceso de enriquecimiento de la bóveda, e incluso en la transformación misma de su estructura. Esta transformación, da lugar a las bóvedas estrelladas (ver anexo, figura 15. Pág. 18), la que efectivamente traza una forma de estrella, generalizada en el siglo XV. Papel decisivo para el enriquecimiento de la bóveda de crucería fueron los múltiples nervios curvos que ligan las naves secundarias. En Inglaterra, evolucionando, es 7

8 creada la bóveda de abanico (ver anexo, figura 16. Pág 19) y en Alemania la reticulada (ver anexo, figura 17. Pág 19), en la que se excluyen los nervios cruceros e incluso perpiaños. La bóveda de crucería abarca otros aspectos interesantes, aunque de menor importancia desde el punto de vista decorativo, como son los de la altura y forma de los arcos, cruceros y el despiece de los plementos (ver anexo, figura 18. Pág 19). Mientras que en lo constructivo el gótico es consecuencia de la evolución del estilo románico, en lo decorativo esa continuidad no existe. Sin perjuicios de alcanzar a mostrar extremos de riqueza y exuberancia que superan a los del estilo anterior, la decoración gótica nace de la reacción cisterciense de pulir todo ornamento. Los temas preferidos nacen del arco, por la combinación de curvas de uno o varios centros. La tracería gótica comienza con la yuxtaposición de círculos y triángulos curvos, decorados en su interior con arquillos de medio punto o apuntados (ver anexo, figura 19. Pág. 20). El uso del arco conopial con su doble curva da lugar en el siglo XV a una nueva etapa en la decoración geométrica. El entrecruzamiento de sus líneas crea una serie de curvas y contra curvas que por acercarse al ondulamiento de una llama, recibió el nombre de flamígero (ver anexo, figura 20. Pág. 20). En este punto los temas decorativos que hasta ese momento eran circulares o triangulares, se transforman en una serie de óvalos apuntados de diversas proporciones. La decoración geométrica gótica demuestra que la actitud espiritual del decorador gótico no sólo es diferente, sino opuesta a la del románico, apuntada al carácter vegetal, las preferidas, sobre todo en los primeros tiempos del estilo, son las hojas de hiedra, de vid, de roble y de trébol, más adelante comienzan a tomar terreno la hoja de cardo, que los castellanos de la época llamaban berza, y que terminan convirtiéndose en el tema vegetal corriente para decorar arquivoltas, jambas y capiteles (ver anexo, figura 21. Pág 21). 8

9 Además de estos temas de follaje, en los últimos tiempos del gótico se pone de moda otro, también vegetal, que refleja el agudo realismo característico del gótico tardío. Los troncos de plantas erizados de nudos y muñones y de rugosas cortezas deleitan el cincel minucioso del decorador del siglo XV. Son, además, frecuentes la flor del cardo y la granada, que se emplean sobre todo en los tejidos. La decoración de animales se distingue igualmente por el naturalismo de su interpretación, aunque no por ello se representen monstruos y seres fantásticos, que aparecen entremezclados con el follaje o formando pequeñas escenas o aislados en gárgolas, remates de barandales, etc. (ver anexo, figura 22 y 23. Pág. 21 y 22). La decoración gótica, como la romántica, se concentra en las puertas, ventanas y claustros, pero con la nueva corriente que trae el estilo gótico, en el interior del templo se abren tres nuevos campos, que son las vidrieras de los grandes ventanales, el retablo y la sillería del coro. Las portadas góticas son abocinadas, como las románicas (ver anexo, figura 24 y 25. Pág. 22); pero el tímpano suele dividirse en varias zonas horizontales, la decoración escultórica de las arquivoltas no se dispone radialmente, sino en el sentido de su curva, y las esculturas de arquivoltas y jambas suelen protegerse con chambranas o doseletes. La forma apuntada de la portada gótica suele completarse con el gablete o moldura angular, que le sirve de coronamiento. El gablete (ver anexo, figura 26. Pág. 23) se aplica también a otros elementos arquitectónicos, como la parte superior de los estribos, pilares decorativos, etc. La ventana, por su gran amplitud, ofrece problemas inexistentes en el estilo románico. Para cerrar y decorar su gran vano se levantan en su interior una o varias columnillas o baquetones unidos en su parte superior por arcos sobre los que descansa trazado calado. En los primeros tiempos, este trazado se limita a uno o varios óculos circulares tangentes; después se enriquece el interior con arquillos decorativos; por último, se 9

10 introduce la tracería flamígera. En los ventanales del templo los vanos de la tracería se cierran con vidrios de colores (ver anexo, figura 27. Pág. 23). Cuando se dirige la mirada hacia el templo, las principales novedades que se pueden apreciar en el estilo gótico se deben al reflejo que sobre ella tiene la cubierta. Desaparecen las formas curvas debido a las dificultades que presenta construir ventanales en muros con esa forma. Los grandes ábsides, las girolas y las capillas del crucero dejan de ser semicirculares convirtiéndose en poligonales. El empleo de una forma poligonal en la capilla produce en la girola una serie de tramos trapezoidales que, al cubrirse con bóvedas de crucería, obligan a que la clave no se encuentre en el centro o a que las ojivas se quiebren para que su cruce tenga lugar en él. Entre las soluciones excepcionales se encuentran la de la catedral de París (ver anexo, figura 28. Pág. 24), consistentes en tramos trapezoidales con nervios en triángulo, y la de la catedral de Toledo, que reemplaza los tramos trapezoidales por otros rectangulares y triangulares. En cuanto a la sección del templo, es frecuente que la nave central se eleve mucho sobre las laterales exteriores. Como los arbotantes hacen innecesarias las bóvedas laterales de contrarresto, que el románico aprovecha en segunda planta para la tribuna, ésta pierde importancia y el arquitecto gótico la convierte en simple galería o triforio a través del grosor de los pilares (ver anexo, figura 29. Pág. 24). Ese triforio, como sucede en algunas catedrales francesas, se continúa exteriormente en la fachada principal. En lo que respecta a los monumentos de carácter civil, tanto domésticos como públicos, adquieren ahora mayor importancia. 10

11 Conclusión: Tratándose de un estilo que perdura durante un período de más de tres siglos, la evolución de las formas arquitectónicas góticas es grande. Esta evolución es notoria y se realiza en el sentido de su progresiva complicación y de su constante crecimiento en la riqueza decorativa. Posterior a una etapa transitoria representada por el estilo cisterciense, se pueden distinguir tres períodos principales que corresponden a los siglos XII, XIV y XV aproximadamente. En Francia estas etapas fueron claramente visibles, la inicial en las iglesias con tribunas de la segunda mitad del siglo XII. Otra correspondiente a los siglos XII y XIV, de las iglesias con triforios, primeramente solo con ventanas en el interior de la nave y después con un fondo de vidriera al exterior del templo. Y la tercera, comenzando a fines del siglo XIV, en la que el triforio es suprimido y el gran ventanal pasa a ocupar toda la altura de la nave mayor hasta las cubiertas laterales. 11

12 Anexo: FIGURA 1. EVOLUCIÓN DEL ESTILO FIGURA2. IZQUIERDA ROMÁNICO, DERECHA GÓTICO 12

13 FIGURA 3. COLUMNAS GÓTICAS FIGURA 4. TORRES GÓTICAS 13

14 FIGURA 5. CATEDRAL EN EL CENTRO DE LA CIUDAD FIGURA 6. ARCO APUNTADO U OJIVAL 14

15 FIGURA 7. ARCO CONOPIAL FIGURA 8. ARCO CARPANEL FIGURA 9. ARCO ESCARZANO 15

16 FIGURA 10. ARCO MIXTILÍNEO FIGURA 11. PILARES DEL GÓTICO 16

17 FIGURA 12. ELEMENTOS DE LA BÓVEDA DE CRUCERÍA FIGURA 13. BÓVEDA SEXPERTITA del Monasterio de Santa María de Huerta 17

18 FIGURA 14. TERCELETES EN LAS BÓVEDAS de la iglesia de Santiago de Utrera. FIGURA 15. BÓVEDA ESTRELLADA DE LA CATEDRAL DE MURCIA 18

19 FIGURA 16. BÓVEDA ABANICO EN LA CAPILLA DEL KING COLLEGE FIGURA 17. BÓVEDA RECTICULADA, MONASTERIO DE MAULBRONN FIGURA 18. ELEMENTOS DE LA BÓVEDA DE CRUCERÍA 19

20 FIGURA 19. TRACERÍA DEL ARCO FIGURA 20. FLAMÍGERO 20

21 FIGURA 21. CAPITELES CON DECORACIÓN DE HOJAS FIGURA 22. GÁRGOLAS 21

22 FIGURA 23. GÁRGOLAS FIGURA 24. PUERTA ABOCINADA GÓTICA FIGURA 25. PUERTA ABOCINADA ROMÁNICA 22

23 FIGURA 26. GABLETE, CATEDRAL DE COLONIA FIGURA 27. VENTANALES GÓTICO 23

24 FIGURA 28. VISTA DEL ABSIDE DE NOTRE DAME FIGURA 29. TROFIO, BASÍLICA DE SAINT DENNIS 24

25 Figurín de inspiración 25

26 Memoria descriptiva El diseño presentado se encuentra inspirado en la fachada de las naves laterales de las catedrales góticas. La estructura rectangular alargada se representa en la silueta del traje, terminando con un cuello alto y un tocado, que simulan la punta de la torre. Los colores oscuros hacen referencia a los materiales de construcción que se utilizaban para edificar, mientras que los llamativos que se encuentran en la cinta que envuelve al cuerpo y los zapatos representan a los coloridos ventanales característicos de este estilo. Las transparencia o el dejar ver al cuerpo se encuentra en representación a la entrada de luz que caracterizo un quiebre entre este estilo y el anterior. 26

27 Bibliografía: - Características y expresiones del arte gótico y románico. Disponible en: - Diferencias entre el arte románico y gótico: características, materiales y elementos arquitectónicos. Óscar. Marzo, Disponible en: - Arte Gótico. Características y diferencias con el arte románico. Angélica Porras Pimentel. Septiembre, Disponible en: - Gótico o románico? Cómo distinguirlos en la arquitectura. Disponible en: 27