Una Alianza Estratégica

Transcripción

1 Una Alianza Estratégica Preparado por Vianco Martínez y Berkys Féliz De la Unidad de Comunicación Estratégica y Relaciones Publicas del CONAVIHSIDA 1. Las relaciones con los comunicadores y con los medios de comunicación son, por definición, una alianza estratégica. Esta alianza se sostiene en dos líneas de acción. a) La creación de un flujo de información b) La capacitación 2. Las estrategias, acciones y actividades de difusión tienen como objetivo fortalecer los programas de prevención que impulsan el CONAVIHSIDA y las instancias que integran la Respuesta Nacional en todo el país, en tanto ayudan a crear un clima favorable al desempeño de los programas y proyectos, y a situar en la agenda pública la problemática de la epidemia en sus diferentes vertientes, facilitando la movilización de los actores involucrados en la Respuesta Nacional. 3. Para que las acciones de difusión y prevención sean más eficaces, el CONAVIHSIDA considera que es necesario impulsar y fortalecer, como premisa, el otro componente: la capacitación de los comunicadores en relación a los temas asociados al VIH, el Sida y las ITS. Eso quiere decir que hay una asociación, más que directa,

2 indisoluble, entre las acciones informativas y las acciones formativas, es decir, entre las estrategias de comunicación y las estrategias de prevención. Esta relación está llamada a generar flujos informativos de calidad, así como contenidos acertados. Por tanto, está llamada a mejorar la calidad de los programas. 4. Las actividades de capacitación de comunicadores abarcan todo el territorio nacional, haciendo énfasis en aquellos escenarios de intervención (zonas, provincias, regiones) considerados críticos en el mapa de la epidemia de VIH, por sus altos indicadores. 5. En la implementación de las estrategias de comunicación e información, las instancias representativas del periodismo están llamadas a jugar un papel preponderante. Entre ellas citamos al Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) y el Círculo de Periodistas de la Salud (CIPESA), que siempre han sido aliadas naturales de los programas de prevención en salud, en general, y de VIH y Sida, en particular. Esas instancias son garantes de la eficacia de los programas. Cuentan con redes organizadas a nivel nacional que garantizan la movilización de los comunicadores, y con canales permanentes por donde se fortalecen los flujos de información. En adición, bajo su cobertura los periodistas actúan con un sentido de compromiso social que tiende a fortalecer las alianzas en curso.

3 6. La capacitación de los comunicadores, así como los flujos de información derivados de los programas de VIH y Sida, deben ser continuos, como continuos son los programas de prevención y atención. 7. Si el CONAVIHSIDA ha logrado alguna repercusión en los programas de comunicadores quizás se deba a que ha tejido con la paciencia de una costurera, una red de comunicadores a nivel nacional, en alianza con el CDP, el SNTP y el CIPESA. La red de comunicadores ha sido, ante todo, una red para el intercambio de ideas, que ha abierto canales de información alimentados y actualizados desde la Respuesta Nacional, en forma permanente. 8. Buscando nuevas oportunidades para ampliar las estrategias de comunicación e información, y alcanzar nuevos escenarios de intervención, el CONAVIHSIDA llegó a las Radioemisoras Comunitarias adscritas a los 94 Centros Tecnológicos Comunitarios (CTC) que opera hoy en día la Vicepresidencia de la República (antes lo hacía el Despacho de la Primera Dama). Allí ha integrado a una legión de jóvenes comunicadores que tienen un perfil comunitario, y que, en algunos casos, llegan a las poblaciones de lugares apartados y de difícil acceso. En esos centros han sido capacitados más de 700 comunicadores y facilitadores de las Radioemisoras, y en ocasiones, el llamado a participar ha tocado a los encargados

4 de otras áreas vitales que tienen contacto con las comunidades, entre ellos los facilitadores del Programa Progresando y las bibliotecas por donde pasan cada día numerosos jóvenes, adolescentes y estudiantes. En algunos casos, la experiencia de la intervención ha madurado rápidamente, posibilitando la creación de programas radiales de prevención de VIH y Sida, conducidos por los comunicadores de la Emisora Comunitaria que han sido preparados para tal efecto. Como un ejemplo de ese nivel de impacto, puede citarse la experiencia de la Radio Restauración, en la zona fronteriza de Dajabón. 9. La lección aprendida mas importante de este proceso es que las herramientas de la comunicación siguen siendo válidas paraa fortalecer los programas de prevención del VIH y el Sida. También que las actividades de comunicación deben mirar a todos lados y encontrar siempre ideas innovadoras que tiendan a renovar y adecuar las estrategias. Otro elemento a tomar en cuenta: las estrategias de comunicación deben cubrir todos los espacios donde haya comunicadores, medios de comunicación y poblaciones necesitadas de un mensaje de prevención. Eso sin importar el lugar donde se encuentre ni que difícil pueda resultar el acceso. Y en eso, las experiencias con los Centros Tecnológicos Comunitarios y sus Radioemisoras son enriquecedoras.

5 10. Entre las tareas que quedan pendientes hay que priorizar el seguimiento. Quizás uno de los puntos de donde han cojeado las estrategias de comunicación y de formación de comunicadores es, precisamente, del seguimiento. Por la naturaleza del medio, que es cambiante, y por la naturaleza del conocimiento asociado al VIH, que también es cambiante, es necesario hacer de la capacitación una actividad continua. Para cerrar esta intervención, es necesario una reflexión: dondequiera que haya un comunicador por apartado que esté, donde quiera que haya un medio de comunicación, por pequeño que sea, y donde quiera que haya una comunidad sedienta de un mensaje de aliento y un mensaje de prevención, por inaccesible que esté, tiene que llegar la magia de la información. Ese es nuestro reto.