Las Mujeres y La Curación Natural

Transcripción

1 Este boletín presenta información acerca de 50 enfermedades de interés para las mujeres y una variedad de remedios naturales para curarlas. A continuación se da información sobre cómo usar cada uno de los métodos curativos; en los apartados para cada enfermedad se indican los remedios concretos y las instrucciones para usarlos. Se explica cuáles son los remedios más efectivos o más sencillos. Una lista de diez métodos curativos está representada por los remedios. Estos métodos han sido mencionados antes pero son: 1. Vitaminas y minerales 2. Hierbas 3. Naturopatía 4. Homeopatía y sales celulares 5. Aminoácidos 6. Acupresión 7. Aromaterapia 8. Esencias florales 9. Piedras preciosas y sus esencias 10. Curación emocional Entre otros métodos no incluidos aquí pero que se recomiendan están el Reiki, los ajustes quiroprácticos u osteopáticos, el masaje neuromuscular, el trabajo corporal, la curación por el contacto, el trabajo con el aura, los colores, la acupuntura y la terapia gestáltica. En todos los casos, los remedios usados aquí se han elegido por su seguridad, efectividad y disponibilidad. Es preciso tener en cuenta también las causas emocionales de la enfermedad; en ellas se descubren valiosas claves para la curación. La curación natural funciona con el ser humano completo, con el cuerpo, las emociones, la mente y el espíritu, y muchas veces todo lo que se necesita para curar una enfermedad es llegar a un acuerdo con las emociones que la rodean. 1. VITAMINAS Y MINERALES Las vitaminas y los minerales son componentes intrínsecos de la química corporal y son necesarios para la vida. Las vitaminas regulan el metabolismo y liberan la energía producida por la digestión de los alimentos. Son precursores coenzimáticos que regulan y trabajan con las enzimas para activar todos los procesos del cuerpo. Los minerales también participan en los procesos enzimáticos. Son necesarios para la formación de la sangre y los huesos, la formación y química de los fluidos corporales y el mantenimiento de la actividad nerviosa y el funcionamiento de todo el sistema nervioso. Tanto las vitaminas como los minerales se obtienen principalmente de los alimentos. Dado que las vitaminas hidrosolubles (solubles en agua) se excretan por la orina, han de tomarse diariamente. Entre estas vitaminas están la vitamina E y todo el complejo de vitaminas B. Las vitaminas liposolubles (solubles en grasa) se almacenan durante un tiempo en el hígado y en los tejidos grasos. Las vitaminas A, D, E Y K son liposolubles. 1

2 Los minerales se encuentran en la tierra, que es el cuerpo del planeta y penetran en la materia vegetal. Así pues, las mujeres obtienen minerales comiendo verduras, carne, ave o pescado. Hay dos tipos de minerales: los microminerales u oligoelementos y los macrominerales. Los oligoelementos se necesitan en pequeñísimas cantidades pero esas cantidades son esenciales. Entre ellos se encuentran el zinc, el hierro, el cobre, el boro, el manganeso, el cromo, el germanio, el selenio y el yodo. Entre los macrominerales, que se necesitan en cantidades mayores, están el calcio, el magnesio, el sodio, e l p o t a s i o y e l f ó s f o r o. L a s c a r e n c i a s alimentarias más frecuentes en las mujeres son las de l o s m i n e r a l e s calcio y hierro, del ácido fólico de las vitaminas B y de vitamina B6. Los minerales se almacenan en los tejidos óseo y muscular, pero solo tendrán efectos tóxicos si se toman en grandes cantidades durante un largo período de tiempo. El 98% de las mujeres (y un porcentaje ligeramente menor de hombres) sufren de carencia de ácido fólico del complejo vitamínico B, y el 90% sufren de carencia de vitamina B. La carencia de calcio afecta a un 73% de mujeres, la carencia de zinc a un 57%, y la de hierro a un 60%. El ácido fólico es esencial para la formación de la sangre, como lo es también la vitamina B6; la v i t a m i n a B e s fundamental para el metabolismo de los aminoácidos y proteínas. El estrés premenstrual de muchas mujeres tiene su c a u s a e n l a carencia de estas v i t a m i n a s ; riesgo especial corren las mujeres que toman la píldora anticonceptiva. El calcio se necesita para la formación y funcionamiento de los huesos, músculos y nervios, así como para la producción de leche en las madres en período de lactancia. La carencia de calcio también está implicada en la tensión nerviosa premenstrual, la retención de líquido, los espasmos musculares en las piernas y la osteoporosis. El zinc regula el sistema inmune, la curación de órganos y heridas y el desarrollo sano de la piel y el cabello. El hierro produce hemoglobina, que es el componente de los glóbulos rojos que transportan el oxígeno. Las mujeres que tienen reglas muy abundantes suelen tener anemia por carencia de hierro. Las carencias de vitaminas y de minerales son un factor importante en la salud de la mujer. Si las vitaminas y los minerales se encuentran en los alimentos, por qué ocurre esto incluso a mujeres que siguen una dieta sana? Por qué es cada vez más frecuente esta carencia de vitaminas y minerales en cuanto factor de enfermedad en la mujer? Las vitaminas y los minerales son elementos nutritivos 2

3 esenciales para la vida humana. La cadena alimentaria comienza con la absorción de los minerales que extraen de la tierra las plantas. Esta tierra es el planeta, que ahora está mermado y contaminado hasta el extremo de crisis. La carencia de vitaminas y minerales comienza con la pobreza de la tierra, con la ausencia de los elementos nutritivos, que ya no están disponibles para que las plantas los asimilen de la tierra. La mala nutrición de la planta significa mala nutrición a todo lo largo de la cadena alimentaria. La tierra carece de minerales debido a la sobreexplotación del terreno y a la práctica del monocultivo. La erosión del suelo es una crisis mundial que continúa quitando minerales a la tierra y a las p l a n t a s a l i m e n t i c i a s. L o s fertilizantes químicos con que se los reemplaza suelen no ser elementos nutritivos que puedan ser asimilados por los seres humanos o animales que comen las plantas así cultivadas. En la actualidad, los agricultores empresarios utilizan productos químicos para estimular el crecimiento de la planta, darle una apariencia atractiva y alargar su vida durante el viaje de transporte y el tiempo de exposición en los estantes de las tiendas, a expensas de su valor nutritivo (y sabor). En los cultivos agrícolas actuales se emplea un exceso de pesticidas, c u y o s r e s i d u o s s e encuentran en todos los alimentos. Los largos períodos de transporte, ese tiempo que transcurre entre el momento de la cosecha y el consumo, agotan el contenido v i t a m í n i c o d e l o s alimentos, lo que ocurre t a m b i é n c o n l a c o n s e r v a c i ó n mediante productos químicos, colorantes y aditivos. La irradiación reduce el contenido vitamínico entre un 20 y 80 por ciento. Los alimentos que se cultivaban y se consumían hace 100 años, e incluso 50 años atrás, contenían las vitaminas y minerales esenciales para la buena salud. Por este motivo son muchas las mujeres que carecen de vitaminas y/o de minerales; un buen suplemento multivitamínico y mineral es obligatorio para todo el mundo. Esta sola y sencilla medida es un gran paso para prevenír la enfermedad, y muchas veces el solo hecho de añadirlo a la dieta es suficiente para sanar problemas de salud de muchas mujeres. Escoja un suplemento de calidad en una tienda especializada, no en un supermercado, y tómelo con las comidas. Las vitaminas Y minerales que se sugieren como r e m e d i o s e n e s t e b o l e t í n p a r t e n d e l a suposición de que usted ya toma diariamente un suplemento múltiple vitamínico -mineral. Muchas vitaminas precisan ir acompañadas de otras 3

4 para realizar su trabajo. A continuación, una muy somera información sobre las vitaminas y los minerales y su empleo en la curación de la mujer. La vitamina A es antioxidante. Protege el cuerpo de las sustancias contaminantes, del envejecimiento y del cáncer, y estimula el sistema inmune. Es efectiva para la ceguera nocturna y cansancio de la vista, para la aspereza y sequedad de la piel y el cabello, para el acné, el eccema, las anginas, los resfriados recurrentes, gripes o infecciones y el deterioro del sentido del olfato. La vitamina A puede contribuir a sanar o sanar las úlceras gástricas, los furúnculos, las alergias, la fiebre del heno, las infecciones respiratorias, el hipertiroidismo, el enfisema y cualquier enfermedad de la piel, cabellos, ojos, dientes y encías. Puede retardar el infarto en las mujeres con alto riesgo y su presencia es importante para recuperar el peso, para el desarrollo y crecimiento de los niños y la formación de los huesos. El beta-caroteno se convierte en vitamina A en el hígado, de manera que la vitamina se puede tomar en esta forma. Sin embargo, es posible que las mujeres que tengan hipotiroidismo o diabetes no sean capaces de convertir adecuadamente el betacaroteno. Las mujeres que padezcan alguna enfermedad hepática no deberán tomar vitamina A en grandes cantidades y es posible que las que toman la píldora anticonceptiva necesiten menos cantidad que las demás. Si está embarazada, no consuma más de UI al día. El beta-caroteno es hidrosoluble, por consiguiente no hay peligro de sobredosis, y la vitamina A también se presenta en forma hidrosoluble. El complejo B es un conjunto de vitaminas que requieren ser tomadas juntas y no como vitaminas individuales solas. En una situación de carencia, tome todo el complejo vitamínico o una vitamina múltiple que lo contenga y añada la vitamina individual que necesita. Las vitaminas B son útiles para los trastornos mentales y nerviosos, la depresión, el insomnio, el estrés y la ansiedad. Son beneficiosas para la tensión premenstrual, las migrañas, la epilepsia, la candidiasis, el asma, la anemia y las alergias. Las vegetarianas, las mujeres que están en tratamiento con antibióticos y las que toman diuréticos, necesitan especialmente el complejo B. La zidovudina (AZT), que es el principal fármaco usado para. el sida, elimina las vitaminas B del organismo. Las vitaminas B son calmantes equilibradores de la energía, recomendadas para la piel, los ojos, el cabello, el hígado y los nervios. La vitamina B1 (tiamina) favorece la circulación, la digestión, la formación de la sangre, la actividad mental, el funcionamiento del corazón, la actividad muscular y del sistema nervioso central. Es útil para el mareo en viajes, el dolor posterior a operaciones dentarias, las herpes, el daño cerebral, el cansancio, la confusión mental, las enfermedades cardíacas y el entumecimiento de manos y pies. Las mujeres embarazadas o en período de lactancia, 4

5 las que toman la píldora, las que sufren de esclerosis múltiple, las fumadoras, y las que tienen problemas digestivos, necesitan más vitamina B. Los antibióticos, los medicamentos sulfas, la cafeína, el alcohol, el azúcar, el estrógeno, una dieta rica en hidratos de carbono y el calor bajan el nivel de tiamina en el cuerpo. La vitamina B1 es esencial para toda persona que tenga una enfermedad o daño en el sistema nervioso central. La vitamina B2 (riboflavina) es una importante vitamina antiestrés. Es necesaria para la formación de los glóbulos rojos, la producción de anticuerpo s por el sistema inmune, el metabolismo celular, el crecimiento, la absorción de hierro y el metabolismo de las proteínas, grasas e hidratos de carbono. La riboflavina sirve para prevenir defectos de nacimiento; es muy importante tomarla durante el embarazo, en los casos de cansancio ocular y de la vista, cataratas, anemia, problemas digestivos, eccema, llagas en la boca, labios o lengua, piel grasa, agotamiento y depresión. Previene la caída del pelo, la caspa y la comezón vaginal, es un agente anticancerígeno y es útil en el síndrome del canal carpiano (acompañada de la vitamina B6). Las vegetarianas, las diabéticas, las mujeres que siguen una dieta para las úlceras, las que toman la píldora o las que hacen mucho ejercicio enérgico, necesitan más vitamina B2 La luz, la cocción, los antibióticos y el alcohol destruyen la vitamina. La vitamina B2 podría disminuir los efectos de algunos medicamentos para el cáncer. Las grietas e irritación en las comisuras de los labios son una indicación de carencia de riboflavina. La vitamina B3 (niacína) es necesaria para la circulación y para el funcionamiento del sistema nervioso; participa en el metabolismo de los hidratos de carbono, grasas y proteínas, ayuda a la digestión produciendo ácido clorhídrico en el estómago. La niacína reduce el colesterol en la sangre y baja la presión arterial. La vitamina B3 es útil en los casos de vértigo, dolores de cabeza, estreñimiento o diarrea, dolores de espalda, mal aliento, estrés e insomnio. La esquizofrenia podría ser una enfermedad de carencia de niacina, así como el autismo en los niños, la agresividad, la paranoia y los cambios de personalidad. El rubor niacínico, esa tendencia de la vitamina B3 a provocar un pasajero calor, hormigueo, sofoco y enrojecimiento de la piel, comienza unos 15 minutos después de tomaria y tiene una importante utilidad para las mujeres que sufren de migrañas. Si se toma diariamente, a los pocos días el efecto disminuye y finalmente desaparece. Tan pronto se notan indicios de migraña, una dosis de 50 mg de niacina (que es una forma del ácido nicotínico) produce este calor súbito que, al dilatar los vasos sanguíneos aumenta la circulación hacia el cerebro y la cabeza y detiene el ciclo. Si estos primeros 50 mg no producen el acaloramiento, tome una segunda dosis unos 15 minutos después. Las mujeres que sufren de gota, úlceras pépticas, glaucoma, enfermedad hepática o diabetes, o están embarazadas deberán usar la vitamina B3 con moderación. 1