Fig.18 EL CALENDARIO, TU NUEVO MEJOR AMIGO

Transcripción

1 Fig.18 EL CALENDARIO, TU NUEVO MEJOR AMIGO

2 DECIMOCTAVA DOSIS EL CALENDARIO, TU NUEVO MEJOR AMIGO Ahora que tenemos una estructura pensada y más o menos organizada, el siguiente paso es ordenarla en el tiempo para que se haga realidad. Este método lo he usado cada vez que tengo una idea en la cabeza que no sé cuánto me puede llegar a llevar en términos de tiempo. Aunque luego no haga nada, me sirve para organizar mi mente y descartarla forever o dejarla preparada para cuando llegue su momento. Lo primero es hacer una lista de pasos necesarios, pero no una lista tipo to do, de pequeñas tareítas diarias, sino que se trata de englobar temas. Pero mejor me explico con un ejemplo. Pongamos que me quiero montar un negocio de paseanta de perros. Voy a empezar solo yo y luego, si me funciona, intentaré contratar a más gente para poder crecer ligeramente, pero de momento tengo que arrancar por mi cuenta. Los pasos que se me ocurre que tendría que ir dando (para cada tipo de negocio o proyecto será distinto, por supuesto, y también para cada persona, ya que un business de paseanta de perros mío probablemente resultará muy distinto al de alguien más) son:

3 Diseñar logotipo, slogan. Diseñar web y redes sociales. Establecer estrategia de marketing. Escribir textos de venta para web o para productos promocionales. Hacer búsqueda de clientes. Analizar competencia. Organizar gestión de dinero, de facturas, de sistemas de pago, legalizar el negocio (o estar preparada para cuando sea el momento de legalizarlo, haber pensado en las opciones que tengo para este negocio en concreto). Aprender sobre etología canina y técnicas de adiestramiento. Podrían salir algunos temas más, tampoco tengo muy claro todo lo que sería necesario para ser paseanta de perros, pero en todo caso para el ejemplo ya sirve con éstos. Ahora tendría que preguntarme un par de cosas: - Cuánto tiempo al día o a la semana tengo para poner en marcha este negocio? - Tengo alguna fecha límite para arrancar o deseo ponérmela a mí misma para forzarme a actuar? (Recomiendo MUCHO tener una fecha límite, sea la que sea, pero mejor pronto que tarde). Pongamos que hoy es día 1 de enero y que quiero empezar a trabajar en ello ya mismo, porque para abril me gustaría tenerlo todo atadito y empezar a pasear algunos perros. Eso me da tres meses para ponerme las pilas. Pongamos que tengo otro trabajo ahora mismo, pero como tengo los fines de semana libres los voy a dedicar a saco (y alguna hora por la noche entre semana, of course, pero no la vamos a contar de momento para no agobiarnos). Eso quiere decir que voy a emplear como mínimo 16 horas semanales de trabajo aproximadamente. FASES PRELANZAMIENTO LANZAMIENTO MESES ENERO FEBRERO MARZO ABRIL FINES DE SEMANA LOGO + SLOGAN WEB + REDES MARKETING TEXTOS BUSCAR CLIENTES COMPETENCIA DINERO APRENDER PRIMEROS CLIENTES Aquí te muestro un ejemplo de cómo se podría organizar el tiempo con estas tareas durante estos meses. Cada persona haría su modelo de temporalización diferente, según sus necesidades y su forma de estimar el tiempo que quiere dedicar a cada cosa.

4 En este caso, como ves, intento concentrar en un mismo fin de semana, o máximo dos, las tareas más concretas (hacer el logo, la web, escribir los textos, analizar la competencia) y dejo otras cosas de largo recorrido a las que doy mucha importancia marcadas durante tooooodo el proceso de preparación. Por ejemplo, la estrategia de marketing, que se va a ir desarrollando con el tiempo y que hay que preparar despacio y con antelación para que sea capaz de perdurar en el tiempo una vez arranque el negocio. O el aprendizaje sobre perros y su comportamiento, que me va a ser muy necesario si quiero destacar en mi trabajo y aportar más valor que los demás. Solapo cosas porque sé por experiencia que este tipo de tareas no son de acabar una y empezar otra, sino que por su misma naturaleza están entretejidas de tal forma que se van haciendo en paralelo. Pero el darles fecha de principio a fin ayuda a sacarlas adelante en el tiempo marcado. Este modelo te puede servir también para marcar todo lo que necesites, ya que lo puedes hacer tan extenso como desees o tan específico como te convenga. Podrías dividirlo por días en lugar de por fines de semana y asignar tareas mucho más concretas: Buscar todos los foros de amantes de perros y escribir un mensaje presentándome. Crear un sorteo. Montar una newsletter para mis clientes. Buscar correas para cinco arneses. Empapelar mi barrio o dar flyers a las tiendas. Organizar una fiesta para gente perruna. Incluso podrías usarlo para marcar las tareas de la gente que te ayuda. Por ejemplo, si la web te la va a hacer otra persona, unas filas abajo puedes escribir Web Pepita Diseñadora y marcar las fechas de entrega que te ha dado. Y, por supuesto, no te limites al primer mes después del lanzamiento del proyecto. Este gráfico puede hacerse largo y largo y seguir abarcando todas tus etapas de crecimiento. Así, si en tus cuentas tienes previsto, por ejemplo, acabar de devolver un pequeño crédito el año que viene, puedes marcarlo. Y si tu plan es contratar a alguien más cuando tengas catorce clientes, marcarlo también. O apuntar todos los hits de marketing que tengas previsto hacer en un año, o las newsletters mensuales que tendrás que escribir, o las fiestas para gente perruna que montarás cada tres meses. Tú mandas aquí. De esta manera, además de tener un plan en la mente lo tendrás sobre papel, que vale triple, y lo tendrás sobre calendario, que vale por diez. Aprender a adquirir compromisos contigo misma es parte del proceso de ser tu propia jefa, así que nunca es tarde para empezar a organizarte mejor y cumplir tus propios plazos. Además, el hecho de desglosar la puesta en marcha de tu proyecto en partes medibles y asumibles te ayuda a vencer el miedo de que es demasiado trabajo o de que no sé por dónde empezar. Piensa que no hay una manera correcta o incorrecta de trabajar, ni un orden de tareas mejor que otro. Intenta que tu proceso tenga sentido para ti y punto. En estos momentos previos al arranque es cuando tienes que sentarte a pensar largo rato, darle vueltas

5 a cada parte del puzzle y ver si todo cobra sentido al juntarlo. Y si hay piezas que te fallan, que te faltan, que no encajan, ver cómo puedes hacerlas encajar o decidir si las necesitas realmente. En realidad, esta es la mejor parte, porque es la que te permite volcar sobre papel todas tus intenciones y diseñar, verdaderamente, tu plan de despegue para una nueva vida. Para hacerte la vida más fácil te adjunto un archivo de Excel con la plantilla del calendario ya hecha, lista para ser modificada. CALENDARIO Ahora se trata de que te tomes tu tiempo para meditar, ordenes la marabunta de cosas que has generado y tomes decisiones que te ayuden a ser más feliz y más auténtica. Y que estén reflejadas en un calendario. Un abrazo,