Ponencia del LIC. ARÍSTIDES FERNÁNDEZ ZUCCO Secretario de Estado Director Ejecutivo del Departamento Aeroportuario SEMINARIO LA AGROINDUSTRIA Y SU COMERCIALIZACIÓN COMO MEDIO DE DESARROLLO ECONÓMICO PARA LA PEQUEÑA Y MEDIANA EMPRESA San Juan, Puerto Rico 20 de junio 2013
La cercanía geográfica entre y Puerto Rico, en un contexto que ubica realidades sociales, políticas y económicas diferentes, es aprovechada no sólo para impulsar el comercio e intercambio de negocios, sino también para estrechar los lazos culturales entre ambos pueblos. Con el paso de los años, este intercambio entre ambos países se ha mantenido vigente y lo único que ha cambiado ha sido el incremento en la importancia de esta conexión para ambos. Por mucho tiempo, Puerto Rico fue el segundo socio prioritario de negocios de y el primero a nivel del Caribe. Con el pasar de los años se ha perdido terreno. Precisamente, la creación de la Comisión Mixta Bilateral República Dominicana-Puerto Rico para el fortalecimiento bilateral y la reactivación económica de ambas naciones busca recuperar ese terreno perdido. Nuestros gobiernos tienen un compromiso claro de trabajar para incrementar marcadamente el intercambio comercial en todos sus ámbitos entre y Puerto Rico. Tanto la Administración del Presidente Danilo Medina como la del Gobernador Alejandro García Padilla reconocen que las relaciones bilaterales son de vital importancia para ambas naciones líderes en el Caribe, con capacidad de incidir en los mercados regionales. 1
Las iniciativas adoptadas dentro del marco de la creación de esta Comisión son en estos momentos el principio de la búsqueda definitiva para afrontar la situación actual que aqueja distintos sectores productivos. Este seminario sobre La Agroindustria y su Comercialización como Medio de Desarrollo Económico para la Pequeña y Mediana Empresa es, el escenario por excelencia para intercambiar impresiones, trazar pautas y procurar soluciones partiendo del reto y las oportunidades comerciales que han existido entre y Puerto Rico, dos pueblos vecinos con una larga tradición de lazos comerciales, culturales y laborales sustentados en la producción e intercambio a través de la industria y en el comercio de mercancías. Específicamente en el área de transporte aéreo, que es el renglón bajo nuestra responsabilidad, adicionado al marítimo, hace poco más de un mes que iniciamos, de manera puntual, el acercamiento oficial entre ambos países para el análisis y búsqueda de soluciones que beneficien al sector, cuando realizamos un primer encuentro con el equipo oficial relacionado con el transporte aéreo y marítimo, aeropuertos y turismo de esta hermana nación, con el objetivo de intercambiar impresiones y poder proponer recomendaciones viables de cara a producir una reactivación del intercambio comercial de pasajeros y carga entre ambas naciones. 2
El tráfico aéreo y marítimo entre los dos países es parte vital para fomentar ese intercambio comercial y constituye un instrumento vital para el desarrollo. Como derivado, el turismo recíproco es una de las áreas de potencial crecimiento pues las ofertas de ambos países son mutuamente complementarias. Es una meta compartida lograr los mecanismos que permitan incrementar sustancialmente la cantidad de vuelos, asientos y rutas entre y Puerto Rico, y de ahí conectar nuestros países con el resto del mundo, como aliciente de desarrollo económico para ambas naciones. Nuestros países, al igual que los demás de la región del Caribe, dependen esencialmente del turismo. A nivel general, el Caribe es el número 13 entre las mayores industrias de turismo del mundo en cuanto a tamaño absoluto; primero internacionalmente en contribución relativa del turismo a las economías nacionales, y décimo en cuanto a su contribución al crecimiento nacional de largo plazo. En adición a esto, el turismo es el primer generador de empleo en la región luego del sector público. Entre los objetivos trazados durante el encuentro con las autoridades puertorriqueñas está el realizar un análisis de las tarifas del servicio aéreo comercial en ambos países y su comparativa con aeropuertos de la región a fin de buscar forma de colocarla en mejores condiciones competitivas, así como revisar la normativa de protección al 3
consumidor y los incentivos que ofrecen ambas naciones para el intercambio comercial. Parte de la búsqueda de una solución sería procurar atraer nuevas compañías aéreas que se interesen en la ruta - Puerto Rico en sus diferentes destinos y procurando la diversificación de la oferta y compartiendo estrategias de explotación conjunta de ambos países como destino compartido, por supuesto, involucrando todos sectores relacionados, y procurando mayores inversiones, nuevas líneas aéreas y un mejor mercado competitivo. La salida de importantes líneas aéreas como American Airlines, American Eagle e Iberia por razones de rentabilidad fueron causadas por el descenso de la demanda como consecuencia de la crisis, el incremento del precio del petróleo y los elevados costes de la compañía en relación a otras aerolíneas con las que compiten, definiendo para ambas empresas que estas rutas sean insostenibles en el momento. Más aún, el retiro del Centro de Conexiones de American Airlines y American Eagle en San Juan ha ocasionado que se perdieran cientos de asientos en las rutas comunes entre ambos países, reduciéndose en la actualidad en casi un 50% en la capacidad de oferta en comparación con el año 2000. La preocupación en el sector turístico ha ido calando poco a poco, y es por ello que las autoridades del sector público y la dirigencia empresarial deben llegar a un consenso y procurar buscar una solución a corto y mediano plazo, viendo el problema del transporte aéreo no 4
sólo desde la óptica de la salida de líneas aéreas, sino englobar todos los inconvenientes que aquejan el sistema aeroportuario en nuestros países para solucionarlos. Preocupa igualmente que la salida de las líneas aéreas se pudiera producir un monopolio con las líneas que actualmente manejan estas rutas, y como consecuencia una subida de los precios de los pasajes, algo que en definitiva perjudica a otros sectores. Estamos conscientes de que el problema en sí no es el transporte aéreo como tal. El elevado coste de los boletos aéreos y sus imprevisibles fluctuaciones, adicionado al hecho de que somos islas y por consiguiente más del 95% de nuestros pasajeros llega por vía aérea, nos pone en desventaja competitiva frente a otros destinos de la región. Es sobradamente sabido los problemas que ocasionan los impuestos a la aviación comercial y su impacto en el alza de los boletos, los precios de los combustibles y su reflejo en la actividad, y las trabas que existen en contra de un mayor y mejor transporte intrarregional en el Caribe. De hecho, hay una percepción de que con frecuencia es más barato viajar desde cualquiera de los dos países a Estados Unidos que entre ambas naciones. Y la preocupación es válida. Para realizar un análisis adecuado de la problemática, debemos tener en cuenta, en primer lugar, cómo se determinan los precios. Por un lado, las líneas aéreas fijan sus precios sobre el producto para vendérselo al consumidor adecuado en el momento adecuado, lo que 5
conlleva una discriminación en el precio. En buen español, mientras más temprano compramos el boleto más barato nos sale. Por otro lado, están los impuestos que son fijados por los gobiernos. Hoy día los impuestos representan entre 30% y 40% del costo total del boleto. En el caso de Puerto Rico están los impuestos Federales y los Estatales, más los cargos aeroportuarios. En nuestro caso están los impuestos directos del Gobierno Central sobre tarjetas de turismo, combustibles y cargos directos al consumidor, las tasas aeronáuticas que constituyen los ingresos de diversas instituciones gubernamentales, y la tasa aeroportuaria que es beneficio directo de los operadores aeroportuarios. En ambos países, se le adicionan los costos operativos que cobran los aeropuertos a las líneas aéreas por el uso y disfrute de sus infraestructuras. Cada renglón aplicable en la determinación del precio finalmente recae en el pasajero. En resumidas cuentas, todos ganamos a costa del pasajero, y nadie parece estar dispuesto a dar su brazo a torcer, ya que no existen políticas conjuntas de incentivos que permitan que la ruta sea más competitiva y por consiguiente más utilizables. Pero buscar una solución a esto implicaría una reforma fiscal integral que permita aligerar el cargo directo al pasajero, y procurando aplicar el viejo y conocido principio del Menos es más. Con esto procuraríamos, promover un incremento inmediato en el volumen de pasajeros que aunque al final representarían el mismo nivel de ingresos 6
directos, representa igualmente un aumento importante y compensador de los ingresos por los consumos directos que esos pasajeros harían en ambos destinos. De esta forma, se conseguiría una reactivación del sector turístico en ambos destinos, se consoliden aun más como destinos atractivos para los visitantes y, por tanto, para las compañías aéreas. La idea al final es mantener el flujo de pasajeros constante y balanceado durante todo el año, de manera que sea rentable para las líneas aéreas, los aeropuertos, y los hoteles y servicios turísticos, y de manera directa e indirecta de todo el sector productivo que hacen vida del turismo. Por otro lado, volar a, Puerto Rico, o cualquier otro destino en la región caribeña, desde otros lugares no es rentable para las compañías aéreas, ya que se tratan de aeropuertos esencialmente turísticos los cuales reciben una gran cantidad de pasajeros en los meses de invierno, pero que apenas tienen actividad en los restantes meses. Esta estacionalidad obliga a mantener grandes aeropuertos, que han costado grandes inversiones, pero que sólo obtienen beneficios en pocos meses, dando lugar a problemas de rentabilidad ya que el exceso de demanda puntual produce condiciones de insuficiencia de la infraestructura y de saturación de los aeropuertos. 7
Esto trae como consecuencia que los aeropuertos deban adaptarse a las necesidades originadas por el aumento constante del número de vuelos, mejorando la eficacia, medida en niveles de seguridad y en la reducción de las demoras. Estas adaptaciones suponen fuertes inversiones en la ampliación de aeropuertos y en la construcción de otros nuevos. Es por esto que debe considerarse diseñar un Plan Turístico Conjunto, teniendo con base las facilidades aeroportuarias, cuya columna vertebral consista en la eliminación de trabas administrativas y fiscales, incentivos y buena voluntad. Este plan debe fomentar la competencia en las rutas existentes y el desarrollo de líneas nuevas mediante esfuerzos coordinados entre y Puerto Rico, así como incrementar la promoción como destino entre ambos países. Igualmente, requerirá una evaluación de posibles cambios en los esquemas impositivos para incentivar el tránsito entre ambos países. Esta es la visión y el compromiso de nuestro Honorable Señor Presidente de la, Lic. Danilo Medina. Parte de los pasos que se han venido llevando a cabo en ese sentido es la de fomentar medios alternativos de viaje, principalmente la que se dedica a los vuelos de aviación general y privada, para lo cual el Gobierno Dominicano dictó una serie de exenciones impositivas gubernamentales a este tipo de aviación y ha logrado acuerdos con los operadores aeroportuario para obtener también incentivos de parte de ellos. 8
A nivel de los aeropuertos contamos con un sistema aeroportuario remozado y adecuado tanto en su infraestructura, como en el servicio que se brinda. cuenta con nueve aeropuertos internacionales de calidad mundial, seis propiedad del Estado Dominicano operadores bajo el esquema de concesión y tres de propiedad privada con el correspondiente permiso de explotación comercial. Estos aeropuertos movieron durante el año 2012 más de 10 millones de pasajeros. Igualmente cuenta con cinco aeródromos nacionales que interconectan el territorio nacional con los principales puntos turísticos. Durante el año 2012, más de 112 mil puertorriqueños visitaron por vía aérea, de los cuales el 75% viajaron por motivos de recreación, un 10% por razones de negocios y el resto entre estudios y conferencias. Del total que viajó como turista, el 61% visitaron el destino turístico de Punta Cana, el 30% la ciudad de Santo Domingo y el 7% al área del Cibao, en el centro de la isla. En cuanto al movimiento de carga aérea, anualmente se transportan aproximadamente 240 mil toneladas, de las cuales, el 52% se maneja por Las Américas, el 22% por Punta Cana, el 19% por el Cibao y el 9% restante por los demás aeropuertos. De esta carga total, se exportan anualmente aproximadamente 75 mil toneladas son de carga seca, 40 mil toneladas son carga refrigerada y 2 mil toneladas de flores. 9
Hablando del sector marítimo, pese a no ser un renglón bajo nuestra responsabilidad por ser competencia de la Autoridad Portuaria Dominicana, nuestra infraestructura portuaria cuenta con ocho puertos principales ubicados en: Santo Domingo, Barahona, Haina, Las Calderas, Boca Chica, Caucedo, San Pedro de Macorís y Puerto Plata y otros 17 puertos menores. En el país, operan 6 líneas marítimas que atienden el tráfico con Europa y 18 con Estados Unidos. Todos los puertos están conectados por 19,705 Km de vías entre las cuales destacamos la autopista Duarte, que comunica con las principales ciudades Santo Domingo y Santiago por el Norte, la Carretera Sánchez con las regiones Sur y Suroeste, y finalmente la carretera Mella, que enlaza con la región Sureste. Podríamos decir que el 96% del comercio internacional y local en se realiza por esa vía, razón por la que ha desarrollado una buena infraestructura portuaria con alrededor de una docena de puertos en sus 1,280 Km. de costas. El país recibe una media de 4,400 buques mercantes anualmente, de los cuales el 79% se concentra en Río Haina, Caucedo y Puerto Palta. En cuanto al turismo marítimo, unos 180 cruceros visitan República Dominicana durante la temporada correspondiente. El total de los cruceros visita La Romana, Santo Domingo y Samaná. Este último carece de Terminal para Pasajeros y sólo usan los Tenders. 10
Para el transporte de pasajeros por vía marítima, el Ferry constituye el principal Courier marítimo entre y Puerto Rico, impactando la economía de ambos países con ingresos en diversos renglones, que totalizan entre 50 y 60 millones de dólares al año y generando unos mil empleos directos e indirectos. En momentos en que se ha registrado un alza en los pasajes aéreos y hay cada vez más restricciones en el transporte de equipaje, este medio de transporte se ha convertido en una opción más económica para los que prefieren como destino a o Puerto Rico, habiendo transportado más de 180 mil pasajeros desde el inicio de sus operaciones a mediados del año 2011. Adicional a esto, unas 350 pequeñas y medianas empresas, principalmente de carga, entre los dos destinos, se benefician del puente marítimo que constituye el Ferry. A nivel de movimiento de carga por vía marítima, cada año se manipulan cerca de 12 millones de TEU s (furgones de 20 pies) en los puertos del país. Un 70% es tránsito. Este tránsito se concentra en el Puerto Multimodal Caucedo, operado por DP World. La carga general suelta totaliza aproximadamente 1.61 millones de toneladas. Un 54% es por Río Haina. Se importan anualmente unos 52 mil vehículos, solamente por tres puertos: Río Haina 45%, Santo Domingo 43% y Puerto Plata 12%. 11
El crudo y sus derivados, incluyendo el Gas Licuado de Petróleo, alcanzan los 5 millones de toneladas. Sólo un 30% es crudo y se descarga a través de San Pedro de Macorís, en aguas profundas, conectado por oleoducto a la Refinería Dominicana S. A., Río Haina. 1.5 millones de derivados se descargan en la terminal de la propia refinería. Las terminales del resto del país se dedican a descargar fuel oil importado para plantas de generación. Los Otros Grandes Líquidos totalizan al año aproximadamente 1.2 millones de toneladas, principalmente aceites comestibles, asfaltos y Gas Licuado Natural (LNG). Del LNG se reciben anualmente unos 1.5 millones de metros cúbicos. Los Otros Grandes Sólidos comparten la importación con la exportación y llegan hasta los 2.5 millones de toneladas anuales. Barahona exporta sal mineral y yeso; Cabo Rojo bauxita y agregados; La Romana azúcar y derivados de la caña; San Pedro de Macorís cemento, azúcar y agregados; y Río Haina cemento y agregados. San Pedro de Macorís importa fertilizantes y Río Haina carbón. Los granos (cereales) alcanzan 2 millones de toneladas anualmente y se descargan principalmente por Río Haina, Puerto Plata y Santo Domingo. Más de 195 mil toneladas de banana orgánica se exporta por Manzanillo. 12
Distinguido auditorio, son múltiples las oportunidades de negocios entre las dos naciones, y por consiguiente las relaciones comerciales entre y Puerto Rico tienen que estar basadas y orientadas en la reciprocidad, solidaridad y cooperación mutua. A nivel del turismo, consideramos que sería un grave error si Puerto Rico y cayeran en una carrera de competencia por atraerse el turismo en la región del Caribe, por lo que lo lógico sería que se aplique una política de cooperación, ya que ambos países representan un destino compartido en la zona del Caribe que debe ser aprovechado para ensanchar los niveles no tan sólo en áreas económicas, sino también de inversión. Ambos países podrían aprovechar las oportunidades comerciales y de conexión que las podrían complementar entre sí, incentivando la conectividad -Puerto Rico, Puerto Rico-República Dominicana, considerando por un lado que Puerto Rico tiene un acceso directo a más destinos en los Estados Unidos con facilidades aeroportuarias menos transitadas que la vasta mayoría de los aeropuertos grandes de Estados Unidos, mientras que República Dominicana cuenta con un superior componente de rutas directas desde Europa y Latinoamérica. Igualmente, ambas naciones tienen múltiples destinos que podrían ser explotados o incrementados en sus rutas y frecuencias, permitiendo esto un crecimiento en el intercambio comercial entre estos puntos, a la vez que fomentan el desarrollo de las regiones fuera de nuestras respectivas capitales. 13
Ya para concluir, señoras y señores, desde sus orígenes y hasta el día de hoy, y Puerto Rico, han ido de la mano siempre siendo el soporte y complemente una de la otra, no sólo por los lazos comerciales y culturales entre ambos, sino por una larga historia de amistad y solidaridad que nos une. El momento es propicio para que las relaciones domínico-puertorriqueñas caminen hacia una mayor consolidación y fortalecimiento, y debemos abogar porque se amplíen los vínculos comerciales, especialmente en las áreas tecnológicas, industriales, educativas y turísticas. Estamos confiados pues, que el resultado de la gestión que recae bajo nuestra responsabilidad compartida, sirva de base para el incremento de la confraternidad dominico-puertorriqueña, fomentar la convivencia y fortalecer la buena amistad que nos une, y que día a día se estrecha cada vez más con cada vuelo que entra o sale o cada pasajero que viene o va, indistintamente en cuál de los dos países se trate, teniendo por seguro que ese Bienvenido que nos decimos contienen el mismo sentimiento de afecto y hospitalidad. Me honra su apreciada atención y me honro al reiterarme como su servidor de siempre. Muchas gracias. 14