Una superficie perfecta es una abstracción matemática, ya que cualquier superficie real por perfecta que parezca, presentará irregularidades que se originan durante el proceso de fabricación. El aspecto o calidad superficial de una pieza depende del material empleado en su fabricación y del proceso seguido para su terminación. Obviamente la función a realizar por la pieza será la que nos indique su grado de acabado superficial, que debe especificarse en el diseño previo.
Podemos clasificar las superficies de un elemento de acuerdo con su función: a) Superficie funcional. El término se refiere al tipo de superficies que presentan contacto directo y dinámico con otras, es decir, que van a experimentar movimientos relativos de rotación o traslación respecto a superficies de otro u otros elementos. Debido a su trabajo, necesitan de un acabado superficial muy fino para evitar pérdidas importantes de energía y calentamiento por rozamiento. b) Superficie de apoyo. Son superficies que mantienen un contacto estático, y por tanto sin rozamiento dinámico, con otras, por lo que no necesitarán un acabado demasiado fino. c) Superficie libre. Se refiere a aquellas superficies que no van a presentar contacto alguno con otras, por lo que podremos especificar un acabado basto, siempre que éste sea regular. En este caso priman generalmente condicionantes estéticos a los meramente funcionales.
Medición de la Rugosidad Superficial La magnitud de la aspereza se determina mediante la máxima profundidad de rugosidad Rt, por el valor medio de la rugosidad Ra, o por la profundidad de rugosidad media Rz. Rt es la distancia en mm. entre la cresta más alta y la depresión más profunda en el tramo de referencia. La profundidad de rugosidad media Rz es la media de los valores absolutos de las cinco crestas del perfil más altas y de las profundidades de los cinco valles del perfil más bajos, dentro de la longitud básica. Ra es la media aritmética de los valores absolutos de las separaciones y del perfil rugoso de la línea media dentro del tramo de medida. Viene a ser equivalente a la altura de un rectángulo, cuya longitud sea igual a tramo de medida completo y su superficie igual a la suma de las superficies comprendidas entre el perfil de rugosidad y la línea media.
Medición de la Rugosidad Superficial
Medición de la Rugosidad Superficial
Símbolos: Símbolo básico Símbolo completo Cualquier proceso Con retirada de material Sin retirada de material Requisito de calidad superficial para todas superficies del contorno de la pieza
Requisitos complementarios de la calidad superficial a: Requisito individual de la calidad superficial a y b: Dos o más requisitos de la calidad superficial c: Método de fabricación d: Surcos superficiales y orientación e: Tolerancias de mecanizado Ejemplos:
Indicación de los surcos superficiales:
Indicación de los surcos superficiales:
Ejemplos:
Ejemplos:
Ejemplos:
Símbolos:
Símbolos:
Calidad Superficial-Proceso de fabricac.
Calidad Superficial-Proceso de fabricac.
Calidad Superficial-Proceso de fabricac.
Calidad Superficial-Proceso de fabricac.
Calidad Superficial-Proceso de fabricac.
Calidad Superficial-Proceso de fabricac.
Relación Ra-Rz
Calidad Superficial-Función Función Ejemplo de aplicación Ra (µm) Fricción de Deslizamiento (Guía en Traslación) Fricción de Rodadura (Guía de en Rotación) Fricción de Fluidos Estanqueidad Dinámica Estanqueidad Estática Montaje fijo con facilidad Montajes fijos Pegado Pintado Soportes de árboles Jaula de rodamientos Conductos de alimentación Usado para juntas tóricas Usado para retenes Superficies de sellado con junta Superficie de sellado sin junta Soportes y piezas fijas desmontables Soportes de Cojinetes Soportes de Rodamientos Construcciones pegadas Piezas de Carrocería 0,8 0,4 6,3 0,4 0,3 1,6 0,1 3,2 1,6 0,8 1,6 à 3,2 3,2
Evolución de los símbolos de la C. S.