Bulimia Nervosa
Al igual que AN, la BN es un trastorno que aparece preferentemente en mujeres (mujer/hombre) y frecuentemente aparecen juntas. Sin embargo pueden marcarse diferencias entre los dos grupos.
En general las personas con bulimia no presentan problemas serios de adelgazamiento pronunciado (emaciación) suelen ser mayores y no presentan problemas serios de relación en sus diferentes áreas de interacción social. Son habituales los síntomas de depresión y labilidad emocional, siendo mayor el riesgo de suicidio. No es frecuente la aparición de amenorrea ( pérdida del periodo menstrual).
Los episodios de ingesta compulsiva de alimentos suelen ocurrir por la tarde o por la noche a escondidas, en los que se consumen grandes cantidades de alimento, con preferencia dulces (productos de pastelería) muchas veces para arrojarlos una vez finalizada la ingesta. En ocasiones se asocia al uso abusivo de laxantes y diuréticos.
Cualquier situación de tensión, ansiedad, depresión o simplemente la visión de la comida puede ser el desencadenante.
Para la Asociación Americana de Psicología (APA, 2014) existen una serie de criterios a cubrirse para diagnosticar Bulimia nerviosa (BN): A. Episodios recurrentes de atracones. Un episodio de atracón se caracteriza por los dos hechos siguientes: 1. Ingestión, en un periodo determinado (p. ej., dentro de un período cualquiera de dos horas), de una cantidad de alimentos que es claramente superior a la que la mayoría de las personas ingerirían en un período similar en circunstancias parecidas. 2. Sensación de falta de control sobre lo que se ingiere durante el episodio (p. ej., sensación de que no se puede dejar de comer o controlar lo que se ingiere o la cantidad de lo que se ingiere).
B. Comportamientos compensatorios inapropiados recurrentes para evitar el aumento de peso.
C. Los atracones y los comportamientos compensatorios inapropiados se producen, de promedio, al menos una vez a la semana durante tres meses. D. La autoevaluación se ve indebidamente influida por la constitución y el peso corporal. E. La alteración de la Imagen corporal no se produce exclusivamente durante los episodios de anorexia nerviosa.
Especificar la gravedad actual: La gravedad mínima se basa en la frecuencia de comportamientos compensatorios inapropiados (véase a continuación). La gravedad refleja otros síntomas y el grado de discapacidad funcional. Leve: Un promedio de 1 3 episodios de comportamientos compensatorios inapropiados a la semana. Moderado: Un promedio de 4 7 episodios de comportamientos compensatorios inapropiados a la semana.
Grave: Un promedio de 8 13 episodios de comportamientos compensatorios inapropiados a la semana. Extremo: Un promedio de 14 o más episodios de comportamientos compensatorios inapropiados a la semana. Trastornos alimentarios y de la ingestión de alimentos.
Etiología o Causas Atribuidas a la Bulimia Nervosa. Al igual que la AN el origen de la BN es multifactorial, si bien los aspectos psicológicos tienen gran importancia. Diferentes autores sugieren que la bulimia es un trastorno asociado a cuadros depresivos puesto que se acompaña de síntomas característicos de la depresión y son frecuentes las alteraciones afectivas entre los familiares del paciente. Las mujeres bulímicas suelen ser muy sensibles al rechazo y al fracaso son muy exigentes y con frecuencia tienen problemas de control de impulsos (Kanarek 1991).
Al igual que la anorexia nervosa la la presión social de las sociedades desarrolladas contribuye al progresivo aumento de los trastornos del comportamiento alimentario. Los cambios en el rol social y profesional de la mujer pueden favorecer la aparición de conflictos y pulsiones alimentarias patológicas. El entorno familiar del paciente bulímico muchas veces es conflictivo y desorganizado. Dificulta la comunicación entre sus miembros e inhibe la conducta autónoma e independiente.
Consecuencias Físicas. Algunas de las consecuencias sobre el aparato gastrointestinal derivan del rápido consumo de grandes cantidades de alimentos, se producen dilatación gástrica, con molestias epigástricas y nauseas. La estimulación pancreática continuada puede generar episodios de pancreatitis, con fiebre, distensión abdominal y dolor o cólico.