Marcos Barraza Gómez Ministro de Desarrollo Social Ernesto Ottone Ramírez Ministro Presidente del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes Texto: Macarena Alejandra Roca Leiva Ilustraciones: Pamela Martínez Rodríguez Ministerio de Desarrollo Social Consejo Nacional de la Cultura y las Artes ISBN (pdf): 978-956-352-213-6 Primera edición Otoño 2017 Santiago, Chile. Esta obra fue seleccionada como mención honrosa en la categoría Naturaleza, juegos y medioambiente, línea cuentos ilustrados del Concurso Chile Crece Contigo para la Primera Infancia, 2016. Chile Crece Contigo es el Sistema de Protección Integral a la Infancia del Estado de Chile. Encuentra más información y materiales de apoyo a la crianza en www.crececontigo.cl y en Facebook/chcrececontigo.
CONCURSO NACIONAL DE CREACIÓN MUSICAL Y CUENTOS ILUSTRADOS PARA LA PRIMERA INFANCIA
Esta es una fotografía antigua. Soy yo con mi abuela.
Vivía en el sur, en las afueras de Valdivia, más allá de las carreteras y sus pueblos.
Recuerdo un sendero interminable que llevaba hasta su casa, la que no era más que una cabaña, amparada bajo las ramas de una luma.
Por las noches nos sentábamos junto al fogón y me narraba historias que me llevaban a tiempos lejanos y a rostros que nunca conocí.
Con ella aprendí a identificar el canto de las aves, el lenguaje del viento cuando trae agua y, sobre todo, el poder de la naturaleza.
Mi abuela era yerbatera.
Una tarde, como todas las tardes de esos inolvidables veranos, fuimos a caminar junto al río. Ella recogía hierbas y plantas; yo perseguía mariposas y corría soplando dientes de león.
De repente escuchamos unos gritos de auxilio, pero por su lejanía no nos dejaban orientarnos con claridad. Sin embargo, estos fueron haciéndose más cercanos hasta que mi abuela reconoció de dónde venían. - Ayuda! Mi Pablito, se quemó mi Pablito! - Qué pasó señora Inés?, gritó mi abuela desde el río. - Venga! Venga por favor!
De lejos se escuchaban los llantos de un niño. No había duda de que algo muy doloroso le sucedía.
Corrimos las tres hacia un bosque de peumos y nos encontramos con la casa de la señora Inés, cuya puerta abierta dejaba salir los quejidos del pequeño. Su brazo estaba rojo como el pecho de una loica. - Qué sucedió?, preguntó mi abuela. - Jugando con su autito, tropezó con el brasero caliente!
Mi abuela no preguntó nada más. Salió corriendo a buscar su canasta que había quedado olvidada. Hurgó entre sus flores, ramitas y hierbas cortadas. Tomó unas hojas de matico, las pasó por agua y las llevó al brazo del niño. Vendó su herida y lo calmó con un durazno maduro. - Cómetelo y olvida la pena! Sana, sana bracito sana, si no sanas hoy, sanarás mañana.
La madre agradeció la atención y le dio un frasco de miel de ulmo, tal vez para retribuir el gesto cariñoso de mi abuela. Ella le dio indicaciones de lavado y cuidado para el brazo del pequeño Pablo.
Recuerdo ir caminando junto al cauce del río, cuando mi abuela me preguntó si me había asustado. -No, no me asusté, pero el niño sí estaba muy asustado, le respondí. -Le dolía mucho la quemadura, pero sanará. Volveremos en un par de dias a verlo, dijo mi abuela.
Luego de mucho andar, llegamos a nuestra casa. Se veía tan acogedora y tranquila. Sentía que era el mejor lugar del mundo, aunque no conocía muchos.
Al terminar el día, y como todas las noches, nos sentamos junto al fogón. Mi abuela me dio un vaso con agua caliente, charqui y algunas nueces.
- Toma, bébelo. Es manzanilla. Te ayudará a dormir y a no tener pesadillas. Olía bien y era reconfortante. La verdad es que si no me hubiera gustado, igual me lo habría tomado. Mi abuela sabía mucho de yerbas.
Macarena Alejandra Roca Leiva es la autora de Domitila, encantadora de las aguas (ReCrea Libros), que fue ganador del Fondo del libro 2016 del CNCA, y cuya temática es el rescate del conocimiento de un Tesoro Humano Vivo reconocido por la Unesco (Domitila Cuyul, Maestra de Paz del pueblo huilliche). Es investigadora del Centro de Estudios del Patrimonio (CEPA) de la UAI, donde se desempeña como profesora de Literatura y directora del Diploma en Lectura Crítica. Pamela Martínez Rodríguez es artista y diseñadora. Ilustradora de Domitila, encantadora de las aguas (ReCrea Libros), ha publicado también el libro de fotografía Memorias Anónimas, con el apoyo del CNCA y el Grupo BRAC de la Universidad de Barcelona. Actualmente es investigadora de la plataforma artística iberoamericana Vértices. Las ilustraciones de Con matico y una canción fueron realizadas en plumilla y tinta china sobre papel, coloreado digitalmente.