Líneas de fuga El punto de fuga es el lugar en el que convergen dos o más líneas paralelas (reales o imaginarias) hacia el infinito en una imagen. Por ejemplo, imagina las líneas que generan los bordes de una carretera y su proyección hacia el infinito; hacia el fondo de la imagen. El lugar donde esas líneas se cruzan de forma literal o imaginaria, es lo que conocemos como punto de fuga. Los puntos de fuga son un elemento visual y compositivo con mucha fuerza visual. A través de las líneas que convergen (llamadas líneas convergentes) en un punto, sean estas reales (físicas) o imaginarias, podrás dirigir la mirada del espectador de tu imagen, directamente al punto donde estas líneas se cruzan. Es una forma de marcar el camino, a la vez que narras el grado de profundidad que contiene tu imagen. Regla de los tercios La regla de los tercios es, probablemente, el primer recurso compositivo que uno aprende en fotografía. Y probablemente también, es el primero en aprenderse por lo sencillo de aplicar a la vez que efectivo en sus resultados. La regla de los tercios es un medio simple de aproximación a la proporción áurea, una distribución del espacio dentro de la imagen que genera una mayor atracción respecto al centro de interés. La regla de los tercios consiste en dividir la imagen en tres tercios imaginarios horizontales y verticales. Los cuatro puntos de intersección de estas líneas fijan los
puntos adecuados para situar el punto o puntos de interés de la foto, alejando éste del centro de la fotografía. Cada uno de estos cuatro puntos de intersección se denominan puntos fuertes. Cuando estemos haciendo una foto, si solo existe un único punto de interés, es preferible situarlo en uno de los cuatro puntos de intersección mencionados en lugar de hacerlo directamente en el centro de la foto. Esto suele generar mayor atracción en el espectador que cuando el centro de interés está en el mismo centro de la fotografía. Figura y fondo Una imagen se divide, básicamente, en tres elementos distintos: marco, espacio negativo y espacio positivo. Lo que conocemos como espacio positivo (nuestro elemento principal, aquello que hemos fotografiado) es la figura de nuestra imagen. Mientras que el resto pasa, automáticamente, a ser el fondo. La figura de una imagen es aquel elemento que se diferencia del fondo, se trata de algo que percibimos de manera autónoma, que no necesita de otro elemento para existir. Sin embargo, no termina aquí. Y es que hay un concepto que lo complica todo: fondo y figura son siempre apreciados de manera alterna. Nunca a la vez. Significa que el ojo humano no puede ver dos cosas a la vez: primero ve una y, después, ve otra. Si decimos
que la figura es aquello que se diferencia del fondo, aquello que estemos mirando siempre será figura. Por ejemplo: Esta figura es la copa de Rubin. Diseñada por John Edgar Rubin, psicólogo danés conocido por estudiar la percepción de la figura y el fondo. Nos ayuda a entender la relación entre estos dos elementos. En la imagen está, claramente, el dibujo de una copa blanca. Pero, a la vez, se ve el perfil de dos caras silueteadas de color negro. En función de lo que se decida mirar, veremos una figura u otra y, en consecuencia, un fondo u otro: la copa siempre estará sobre un fondo negro y las caras, sobre uno de color blanco. Cuando nuestros ojos se centran en lo que originalmente era el fondo, éste deja de serlo para pasar a ser la figura de nuestra imagen. Así pues, si lo que queremos es que un elemento concreto de nuestra fotografía sea la figura y nunca el fondo, lo que debemos hacer es conseguir que ese elemento llame muchísimo más la atención que el fondo, conseguir que el ojo siempre lo considere
figura, conseguir que el ojo no sienta curiosidad por lo que, en principio, es el fondo. Es decir, que la figura llame la atención y el fondo pase inadvertido. Proporción aurea Leonardo Pisano, también conocido como Fibonacci, fue un famoso matemático italiano que difundió por Europa el sistema de numeración árabe (1, 2, 3...) con base decimal y con un valor nulo (el cero). Pero el gran descubrimiento de Fibonacci fue la Sucesión de Fibonacci que, posteriormente, dio lugar a la proporción áurea. Se trata de una serie numérica: 0, 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55, etc. Es una serie infinita en la que la suma de dos números consecutivos siempre da como resultado el siguiente número (1+1=2; 13+21=34). La relación que existe entre cada pareja de números consecutivos (es decir, si dividimos cada número entre su anterior) se aproxima al número áureo (1,618034) que se identifica con la letra Phi del abecedario griego. Aplicando todo esto al mundo visual. Creemos un rectángulo cuyos lados midan dos de los números de la serie de Fibonacci: Y si ahora vamos a dividirlo siguiendo la serie numérica:
Si dibujamos una línea que una todos estos pequeños recuadros, quedaría algo parecido a esto: La espiral resultante (conocida como Espiral de Oro) está permanentemente presente en la naturaleza: en las semillas de un girasol, en las conchas marinas... Componer una imagen siguiendo esta espiral nos resulta agradable visualmente porque las proporciones que se obtienen nos parecen naturales.
Es importante tener en cuenta que las fotografías no acostumbran a tener unas proporciones áureas (y si se trata de cámaras de medio formato, cuyos sensores suelen ser cuadrados, todavía menos) así que la espiral de Fibonacci debe ser sólo una guía que te ayude a componer y nunca una regla intocable que te cierre puertas creativas. También es cierto que muchas veces, componemos según la espiral de oro sin ser conscientes de ello, simplemente porque la composición que hemos creado nos ha parecido atractiva visualmente. Siguiendo la proporción áurea puedes tener una idea de dónde situar el horizonte o los puntos más importantes de tu fotografía. Lo importante es ser consciente de que no es una ley que se deba cumplir a rajatabla y de que en absoluto asegura la calidad de la imagen final. A veces puede salir una fotografía más atractiva visualmente rompiendo esta regla que siguiéndola, todo es cuestión de probar. Un claro ejemplo de ello son las imágenes simétricas.
Bibliografía http://www.dzoom.org.es/regla-de-los-tercios/ http://www.blogdelfotografo.com/aprende-utilizar-el-punto-de-fuga-como-elemento-decomposicion/ http://www.dzoom.org.es/la-figura-y-el-fondo-los-planos-de-informacion-en-lafotografia/ http://www.dzoom.org.es/descubre-que-es-la-proporcion-aurea-y-como-puedeayudarte-en-la-composicion-de-tus-fotos/