El amor está presente en cada uno de los versos, hay un poema que lleva por título:

Transcripción

1 Humberto Lagos Schuffeger, abogado y Doctor Sociología. Director de la Oficina Nacional de Asuntos Religiosos del Ministerio Secretaría Geral de la Presidcia. Un saludo inicial a qui nos convoca. Yo iba a hablar de lo trinitario de este acto, pero como Mario Ríos me robó la palabra, saludo al Pastor y Obispo Francisco Javier Rivera Mardones, a los colegas también, que han estado comtando esta variadísima producción escritural del Pastor Rivera - el Obispo Emiliano Soto y Mario Ríos. Saludar a cada una y cada uno de ustedes este momto, que es una ocasión particularmte íntima. A mí se me pidió - tal vez porque he transitado mucho tiempo también por los caminos de la poesía - me solicitó el autor hacer algunos comtarios acerca de este libro que ya todos conoc o van a conocer, cuyo título es Sombra Nocturna. Sombra nocturna; el lguaje poético es un lguaje, que el caso del autor Francisco Javier Rivera Mardones está asiduo, premunido de aquella señanza que uno cutra dtro de los versos bíblicos, por citar alguna refercia. A mí, particularmte el ámbito poético, cuando desde niño comcé a escribir, me atraía muchísimo la versión Reina Valera de los años 1960, por el lguaje que ahí se usa: el lguaje poético. Siempre fue fuerte para mí, como también lo ha sido para el Pastor Rivera Mardones, para el poeta Francisco Rivera, el Salmo 23 cuando uno lo pisa ese lguaje: Jehová es mi pastor, nada me faltará. No es sólo la impresión intsa de lo que ahí está contido, sino que es la estructura gramatical, el verso. El verso vive manejado por los poetas del Antiguo y Nuevo Testamto de manera magistral. Una vez más, el poeta Francisco Javier Rivera Mardones nos sorprde y convoca con la luz de su palabra poética, curiosamte desde un íntimo espacio literario esculpido sombras nocturnas, espacio cuyo descifrar sólo es posible si caminando cada peldaño de sus versos llegamos al poema epílogo, el que literalmte nos susurra de la manera siguite: Si no hay sol, no hay sombra, si no hay luz, no hay sombra nocturna, la sombra proyecta esperanza, certeza, vida, nuestros días como sombra obligan remediando el tiempo a vivir lo efímero. Desde allí el poeta, fundado su inevitable perfil teológico, nos introduce con sabiduría y dominio de aquello que el terro literario poético se domina como verso libre, de las raíces bíblicas y valóricas que nutr cada palabra pronunciada el libro Sombra Nocturna. Francisco Javier es, sin duda, un poeta de oficio y cada verso que surge de su mano creacional los temas profundos mirados desde la cotidianeidad tej pedagógicamte desafíos para los lectores. El amor está preste cada uno de los versos, hay un poema que lleva por título: marzo del sesta y cinco te vi amada mía aniversario el más feliz de los días 1

2 siete años más tarde las almas se bifurcan crisis de rigor lodo cagoso tanatos separación y muerte octubre del setta y cuatro día de rescate y cambios ambos conocimos los destellos del amor eterno acudió el nazaro a nuestro hogar sanando lo dañado construydo un nuevo corazón gracias mil noviembre del dos mil once por estos cuarta y cinco años espero hacerte feliz perdóname si no lo he logrado aún un día diez y ocho como hoy hay esperanza noviembre El amor siempre va a poblar los dichos de la poesía, el poeta es siempre testigo de su tiempo y sus creaciones adquier vida relacional, las expericias personales y de su torno. No es posible para qui construye versos negarse a la realidad, pues desde esa cantera extrae las piedras que transformará con el fluir de la palabra. En las páginas de este libro el autor nos recuerda una fecha significativa, muy cercana, la describe así poéticamte: 31 de octubre con un clavo clava la historia 2

3 95 tésis la puerta 1517 la Catedral de Wittberg diario del pueblo martillando psamitos rectificando el preste un monje agustino proyectó mañanas cuatrocitos novta y cuatro años han pasado la triple A tanto dolor miseria Asia África América Latina muerto vida sin esperanza nace el niño siete mil millones golpeo psamitos sin rima sin coma sinfonía de letras una marcha un verso un día cambiará el curso de la historia el orig de maldad mil años será atado el justo por la fe vivirá hoy clavo un clavo tu cerebro la puerta de tu cátedra protesto Y sigue el poeta hablándonos de sus expericias personales, de sus lecturas de lo cotidiano, pero el gesto íntimo del poeta, y es el caso de nuestro amigo Francisco Javier, el tránsito textual es el dedo de dulce y amargo, no sólo términos de dar forma a lo propio, sino también de poemar alegrías, dolores y esperanzas de quies circulan alrededor del poeta. 3

4 La poesía ha sido siempre testimonio de aquello que nos sucede lo cotidiano y aquí nuestro amigo poeta nos habla de sus expericias personales: tribunal sin toga cuántas veces escribí tu nombre cabezando gritos escritos inttando hablar a oídos sordos quisiste hacer justicia con injusticia agregando tropiezo tras tropiezo abuso al abuso invto moldeando mtiras con yeso repitido hasta esculpirla verdad estatua relucite parece mármol no lo es el adversario triunfa hoy falsificando logró su objetivo transitorio los cielos darán mañana el veredicto 1639 un veintitrés de ero Francisco Maldonado da Silva por recitar de memoria la torá y salmos fue quemado vivo la hoguera un veintiuno de ero a las seis de la tarde Temuco dos mil doce tuvo su turno Cordillera 4

5 Las expericias personales hac parte también del poema cotidiano, el poeta Francisco Javier es un testigo de nuestros tiempos pero su expertise está nutrido los lguajes bíblicos donde habitan relatos míticos e históricos, que lo antiguo y lo neo-testamtario han marcado el devir de sus manos; desde allí sus versos lo desafían y acompañan. Agradezco al poeta Francisco Javier Rivera Mardones esta bella oportunidad de comtar su poesía y, para sellar estas palabras, no hay mejor manera que reflexionar íntimamte lo que él nos dice el verso: varios inviernos pasan para que árboles aceras contrarias se abrac hombres tardan geraciones un día lo imposible será El poeta Francisco Javier Rivera Mardones es un poema a la inoccia, a la paz, a la justicia, al amor, a la solidaridad y al perdón. Bivido el poeta que desde Sombra Nocturna atraviesa los umbrales hacia la luz, con pasos libres y trascdtes hacia nuestra luz. Muchas gracias. 5