PARA VIVIR EL AÑO DE LA FE

Transcripción

1 Comisión Episcopal para la Pastoral Litúrgica Compilador: Cristóbal Orellana González, S.I. PARA VIVIR EL AÑO DE LA FE Subsidios pastorales (Oración universal, pláticas cuaresmales, visita al Santísimo Sacramento, Horas Santas )

2 Para vivir el Año de la Fe Subsidios pastorales Comisión Episcopal para la Pastoral Litúrgica Compilador: Cristóbal Orellana González, S.I. Primera edición: diciembre Hecho en México Con las debidas licencias Derechos reservados a favor de: Obra Nacional de la Buena Prensa, A.C. Orozco y Berra 180. Sta. María la Ribera Apartado M México, D.F. Tel Fax ventas@buenaprensa.com Ventas: Tel (55) , exts Lada sin costo: , Fax: Librerías San Ignacio: México, D.F. Ribera de San Cosme 5. Sta. Ma. la Ribera. Tels: y Orizaba 39 bis. Col. Roma. Tels y Congreso 8. Tlalpan. Tels y Donceles 105-D. Centro. Tels y Chihuahua, Chih. Av. Tecnológico Plaza Comercial San Agustín. Col. Granjas. Tels. (614) y Culiacán, Sin. Jesús G. Andrade 214, Oriente, esq. con Ángel Flores. Centro. Guadalajara, Jal. Madero y Pavo, Sector Juárez Tels. (33) y Guadalupe, Zac. Calle Jardín de Juárez 10. Tel. (492) León, Gto. Hermanos Aldama 104. Col Centro Tel. (477) Mérida, Yuc. Callejón del Congreso 490B. Col. Centro. Parque La Madre. Tel. (999) Monterrey, N.L. Washington 812 pte. Esq. Villagómez. Centro. Tels. (81) Puebla, Pue. Blvd. Valsequillo 115. Plaza Crystal locales Col. Residenciales Boulevares. Tel. (222) Tijuana, B. C. Gral. Juan Sarabia 8570 (Calle 10). Centro. Tel. (664) Torreón, Coah. Cuauhtémoc 750 Nte. Col. Centro. Tels. (871) y Tuxtla Gutiérrez, Chis. Tercera Oriente Sur Col. Centro. Tel. (961) Se terminó de imprimir esta primera edición el día 12 de diciembre de 2012, festividad de Nuestra señora de Guadalupe, en Offset Santiago, S.A. de C.V. Río San Joaquín 436. Col. Ampliación Granada 11520, México, D.F. Tel.:

3 Índice Oración universal u Oración de los fieles... 5 Formularios para la Oración de los fieles en los diversos tiempos litúrgicos... 9 Cristóbal Misael Orellana González Pláticas cuaresmales...15 M. Fernando Sedano López Para orar con Jesús Sacramentado Visita a Jesús Sacramentado Jorge Raúl Villegas Chávez Acto Mariano Misa Votiva La Virgen María, defensora de nuestra fe Introducción a las Horas Santas La fiesta de Navidad...52 La Cuaresma: camino de la Iglesia hacia la Pascua...56 Tiempo de Pascua...59 Tiempo Ordinario

4 Esquema de las Horas Santas para el Año de la fe Tiempo de Adviento...69 Tiempo de Cuaresma...75 María Guadalupe Puente Invocaciones, como un Rosario, en el Año de la fe Salvador Párvol Vega 4

5 Oración universal u Oración de los fieles Pbro. Lic. Cristóbal Misael Orellana González, S.I La Oración de los fieles u Oración universal es uno de los elementos mayores de la celebración litúrgica. Incluso puede afirmarse que esta plegaria viene a ser una de las manifestaciones más expresivas del mismo ser de la Iglesia en cuanto pueblo sacerdotal que intercede en favor del mundo. La importancia y centralidad de esta oración se desprende del hecho de que la encontramos aludida ya en el Nuevo Testamento (1 Tim 2, 1-2) y pormenorizada en la más antigua descripción de la Misa (Justino, Apologiæ cap. 65 y 67). La Oración universal, por otra parte, figura en todas las liturgias, tanto orientales como occidentales; y si en una época posterior desapareció de la liturgia romana en Italia no en los demás lugares en que se usaba también el rito romano, este hecho se debió a determinados cambios históricos y constituyó sin duda una de aquellas deformaciones a las que tanto el Vaticano II (Sacrosanctum Concilium 50) como Pablo VI (Constitución Apostólica Missale Romanum) se refirieron y determinaron poner remedio. Vocabulario litúrgico En el vocabulario litúrgico resuenan casi siempre, a manera de eco, los modos de hablar de la Escritura. Es el lenguaje con el que el Dios-Esposo se dirige a la Iglesia- Esposa. Conviene, pues, que la respuesta de la Iglesia en oración se realice con expresiones o formas de hablar que estén por encima de las que se usan habitualmente en la vida cotidiana y ello incluso cuando se trata de súplicas, como es el caso de la Oración de los fieles. Por otro lado, pedagógicamente es también importante lograr que el pueblo vaya comprendiendo, mediante el mismo lenguaje de la celebración, que la oración que se dirige a Dios en la liturgia es algo más que la plegaria simplemente personal que cada uno de los cristianos hace según sus propios sentimientos. Al poner en labios de los fieles de hoy las mismas expresiones de fe y de amor a Jesucristo que alimentaron la oración de cristianos de otros lugares y de otros tiempos, se garantiza la más auténtica tradición espiritual cristiana, y la oración de nuestras comunidades llega a ser, en el más pleno sentido de la palabra, voz de la 5

6 Cristóbal Misael Orellana González Iglesia. Es decir, expresión de lo que la Iglesia, como Cuerpo de Cristo y pueblo sacerdotal, puede pedir a Dios en su plegaria litúrgica, no simple expresión de una espiritualidad subjetiva o personal. Sin embargo, el ser y la expresividad orante de la Iglesia no puede limitarse sólo a los tiempos antiguos, sino que debe abarcar todas las épocas. Por eso no deben faltar peticiones alusivas a días y circunstancias de nuestro tiempo que, como todas las épocas de la Historia, ha visto surgir necesidades derivadas de acontecimientos desconocidos en otras épocas. Publicaciones periódicas Las publicaciones periódicas no pueden, con todo, constituir la solución plena y definitiva del problema, principalmente por dos motivos: a) porque el uso exclusivo de estos formularios presenta el peligro de que las celebraciones no dominicales queden desprovistas de esta importante intercesión. b) Porque la creación continuada de formularios siempre nuevos corre el riesgo de que, a la larga, llegue a desfigurarse la finalidad primordial de la Oración de los fieles y su carácter fundamental de intercesión universal. En efecto, ha de ser la intercesión universal por las grandes necesidades, evitando derive hacia una serie de peticiones subjetivas, más propias de la oración personal que de la intercesión sacerdotal del pueblo cristiano en bien de la humanidad. Carácter universal La Oración de los fieles que nos ha transmitido la tradición cristiana y que ha restaurado el Vaticano II es, fundamentalmente, una intercesión por las grandes necesidades del mundo y de la Iglesia, no la plegaria por el último y quizá pequeño acontecimiento local. Sin duda alguna, los acontecimientos locales pueden añadirse, si el caso lo requiere, pero nunca constituyen el centro de aquella oración que, por su propia naturaleza, es universal. Las necesidades cotidianas tienden a empequeñecer el ámbito de la oración. La Plegaria universal de la Iglesia, sobre todo por su insistencia en rogar por las grandes necesidades del mundo, ayuda a que se abran los horizontes de la oración a unos ámbitos que, por ser más universales, resultan ser también más repetitivos. En la tradición para que una oración fuera plegaria de la Iglesia, era necesario que superara el ámbito realmente personal o local y tuviera un matiz verdaderamente eclesial o comunitario que abarcara no simplemente la pequeña asamblea reunida, sino que expresara la plegaria de la Iglesia católica o universal. Hoy la Sede Apostólica no exige que los formularios de la Oración de los fieles sean jurídicamente oficiales, es decir, promulgados por la autoridad eclesiástica territorial (cfr. Inter Oecumenici, 56), sino que se limita a pedir que se compongan con aquella sapienti libertate (sabia libertad) que pide la naturaleza de esta plegaria pública (cfr. Eucharistiae participationem, 16). Actualmente, resulta aún más urgente insistir en que esta libertad esté siempre acompañada de la otra nota: la sabiduría ( sapienti libertate ). Dicho de otra forma: hoy, más que nunca, se ha de tener especial cuidado para que las 6

7 Oración universal u Oración de los fieles peticiones propuestas al pueblo en la Oración de los fieles sugieran exclusivamente aquellas peticiones que la Iglesia como tal puede pedir en su oración comunitaria. La Oración universal u Oración de los fieles en el Misal Romano 3ª edición típica y el Catecismo de la Iglesia católica La Institución General del Misal Romano, 3ª edición típica (nn ), en el capítulo Diversas partes de la Misa en el inciso B, dice: Oración universal 69. En la Oración universal u Oración de los fieles, el pueblo responde de alguna manera a la Palabra de Dios recibida con fe y, ejerciendo su sacerdocio bautismal, ofrece a Dios sus peticiones por la salvación de todos. Conviene que esta oración se haga normalmente en las Misas a las que asiste el pueblo, de modo que se eleven súplicas por la santa Iglesia, por los gobernantes, por los que sufren alguna necesidad y por todos los hombres y la salvación del mundo El orden de estas intenciones será generalmente: a) Por las necesidades de la Iglesia, b) por los que gobiernan las naciones y por la salvación del mundo entero, c) por los que padecen por cualquier dificultad, d) por la comunidad local. Sin embargo, en alguna celebración particular, como en la Confirmación, el Matrimonio o las Exequias, el orden de las intenciones puede amoldarse mejor a la ocasión. 71. Corresponde al sacerdote celebrante dirigir esta oración desde la sede. Él mismo la introduce con una breve monición en la que invita a los fieles a orar y la concluye con una oración. Las intenciones que se proponen deben ser sobrias, redactadas con pocas palabras y con sabia libertad, y deben expresar la plegaria de la comunidad entera. Las pronuncia un diácono o un cantor o un lector o un fiel laico desde el ambón o desde otro lugar conveniente 2. El pueblo, estando de pie, expresa su súplica con una invocación común, que se pronuncia después de cada intención, o bien orando en silencio. Por su parte el Catecismo de la Iglesia católica dice que: La liturgia de la Palabra comprende los escritos de los profetas, es decir, el Antiguo Testamento, y las memorias de los Apóstoles, es decir sus cartas y los Evangelios; después la homilía que exhorta a acoger esta palabra como lo que es verdaderamente, Palabra de Dios (cfr. 1 Tes 2, 13), y a ponerla en práctica; vienen luego las intercesiones por todos los hombres, según la palabra del apóstol: Ante todo, recomiendo que se hagan plegarias, oraciones, súplicas y acciones de gracias por todos los hombres; por los reyes y por todos los constituidos en autoridad (1 Tim 2, 1-2). 1 Institución General del Misal Romano, 3a edición Típica, n. 67, cfr. SC, n Institución General del Misal Romano 3ª edición Típica, n. 71, cfr. Sagrada Congregación de Ritos, Instrucción Inter Oecumenici, 16 de septiembre, 1964, n. 56: AAS 56, 1964, p

8 Cristóbal Misael Orellana González Según estos documentos, la Oración de los fieles es: a) una oración hecha por toda la asamblea de fieles; b) una oración que tiene por finalidad la súplica o petición; y c) una oración que tiene como objetivo las grandes necesidades de la Iglesia y del mundo. Estos aspectos son tan fundamentales y necesarios que, si alguno falta en la oración, ésta deja de ser la Oración de los fieles o, al menos, queda dañada su identidad. Por consiguiente, cualquier tipo de plegaria en la que falte alguna de estas características continuará siendo oración, puede ser incluso plegaria litánica, personal o comunitaria, pero no será Oración de los fieles 3. Bibliografía Farnés Acherer, Pedro, Roguemos al Señor, Plegaria de los fieles, Buena Prensa, México, Institución General del Misal Romano, 3ª edición típica, Buena Prensa, México, Catecismo de la Iglesia católica, Coeditores Católicos Unidos, México, Pedro Farnés, p