Un servidor, diputado Carlos Alonso Angulo Rentaría, en mi carácter de

Transcripción

1 Punto de Acuerdo para promover el acceso de la zona metropolitana de Mexicali, a los recursos del fondo monetario, del fondo metropolitano y su aprovechamiento en obras de infraestructura en las comunidades del Valle de Mexicali. C. Dip. Adriana Guadalupe Sánchez Martínez. Presidenta del Honorable Congreso del Estado de Baja California. Ciudadanas y ciudadanos diputados, público presente. Un servidor, diputado Carlos Alonso Angulo Rentaría, en mi carácter de integrante de la XIX Legislatura del Congreso del Estado de Baja California, con la representación del Partido Nueva Alianza, y con fundamento en lo previsto por el Artículo 27 fracción I de la Constitución Política del Estado de Baja California y el Artículo 18 fracción III de la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado de Baja California, me permito poner a consideración de este Honorable Congreso la presente propuesta de acuerdo para promover el acceso de la zona metropolitana de Mexicali, a los recursos del fondo metropolitano y su aprovechamiento en obra pública de infraestructura para el Valle de Mexicali, bajo la siguiente exposición de motivos: El fondo metropolitano fue creado con el objetivo de financiar la ejecución de estudios, programas, proyectos, acciones y obras públicas de infraestructura y su equipamiento que impulsen la competitividad económica y las capacidades productivas de las zona metropolitanas, coadyuven a su viabilidad y a mitigar su vulnerabilidad o riesgo por fenómenos naturales, ambientales y los propiciados por la dinámica demográfica y económica e incentiven la consolidación urbana y el aprovechamiento óptimo de las ventajas competitivas de funcionamiento regional, urbano y económico del espacio territorial de las zonas

2 metropolitanas. En el presupuesto de egresos de la federación para los ejercicios fiscales de 2006 y 2007, se asignaron recursos para el fondo metropolitano del Valle de México. En 2007, adicionalmente se canalizaron recursos a las zonas metropolitanas de las ciudades de Guadalajara y Monterrey y que en el presupuesto de egresos de la federación para el ejercicio fiscal 2008, el fondo metropolitano contempla recursos para siete zonas metropolitanas, Valle de México, ciudad de Guadalajara, ciudad de Monterrey, ciudad de León, Puebla; ciudad de Querétaro y la Región Lagunera, que abarcan nueve entidades federativas por la cantidad de 5 mil 550 millones de pesos, los cuales tienen el carácter de subsidio federal, con el objeto de ser destinados a planes y programas de desarrollo, estudios, evaluaciones, programas, proyectos, acciones y obras públicas de infraestructura y su equipamiento en las zonas metropolitanas, cuyos resultados e impacto impulsen los aspectos antes señalados. Gracias a las gestiones de esta XIX Legislatura del Congreso del Estado de Baja California, para este ejercicio fiscal del 2009, se logró incluir a la zona metropolitana de Tijuana en los beneficio del fondo metropolitano, el cual en total incorporó a nueve zonas metropolitanas del País, pasando de 7 a 16 las zonas metropolitanas a las cuales se le asignaron recursos en el ramo general 23 de acuerdo al Artículo 42 fracción 12 del Dictamen del Presupuesto de Egresos de la Federación, correspondiéndole a la ciudad de Tijuana un monto de 40 millones de una suma total de 5 mil 710 millones que integran dicho fondo. Este incremento de los recursos del fondo metropolitano se debe entre otras causas a la Iniciativa de ampliar el programa metropolitano a las Ciudades que muestran una tendencia de crecimiento

3 acelerado y que aparecen registradas en el libro de limitación de las zonas metropolitanas de México 2005, publicado por la Secretaría de Desarrollo Social, el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática y el Consejo Nacional de Población, este estudio tomado como referente oficial por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, define como zona metropolitana al conjunto de dos o más Municipios donde se localiza una Ciudad de 50 mil o más habitantes, cuya área urbana funciones y actividades rebasan el límite del Municipio que originalmente la contenía, incorporando como parte de sí misma o de su área de influencia directa a Municipios vecinos, predominantemente urbanos, con los que mantiene un alto grado de integración socioeconómica, en esta definición se incluye además aquellos Municipios que por sus características particulares son relevantes para la planeación y política urbanas. Adicionalmente se definen como zonas metropolitanas todos aquellos Municipios que contienen una Ciudad de 1 millón o más de habitantes. Así como aquellos con Ciudades de 250 mil o más habitantes que comparten procesos de conurbación con Ciudades de Estados Unidos de América. De modo que este importante documento reconoce para Baja California la existencia de dos zonas metropolitanas, Tijuana, que además de ese Municipio comprende a los Municipios de Tecate y Playas de Rosarito, y Mexicali con el agregado de que la zona metropolitana de Tijuana es también parte de un gran complejo binacional; sin embargo, ni una de las dos zonas aparece dentro de la lista del anexo 11 del Presupuesto de Egresos de la Federación para el presente ejercicio fiscal. Con el derecho a concursar por recursos del fondo metropolitano debido, entre otros factores, a la carencia de un marco

4 institucional adecuado a tal fin. La aplicación de los recursos del fondo metropolitano incluye de forma enunciativa y no limitativa las siguientes acciones: La elaboración y actualización de planes y programas de desarrollo regional y urbano infraestructura hídrica para agua potable, drenaje, alcantarillado y saneamiento de la zona metropolitana. Erogaciones para la construcción, reconstrucción, rehabilitación, ampliación, conclusión, mantenimiento, conservación, mejoramiento y modernización de infraestructura, además de la adquisición de los bienes necesarios para el equipamiento de las obras generadas o adquiridas como los sistemas de comunicación e información para la seguridad pública metropolitana. Bombas y sistemas para la operación y control de los servicios de agua potable y tratamiento de aguas residuales, entre otros. Erogaciones para la adquisición de reservas territoriales y derechos de vía, relacionadas con las obras, programas, proyectos y acciones de desarrollo de la zona metropolitana. Elaboración de proyectos ejecutivos, evaluación de costo-beneficio y estudios de impacto ambiental, evaluación y gestión de riesgos de alcance metropolitano, así como estudios técnicos para resolver problemas urbanos, estructurales y prioritarios que coadyuven al adecuado funcionamiento urbano y mejorar la calidad de vida de los habitantes de la zona metropolitana. Obras públicas y su equipamiento, así como acciones prioritarias para el mejoramiento y cuidado del ambiente y el impulso al desarrollo regional urbano, social y económico de la zona metropolitana y la realización de evaluaciones, acciones de apoyo al control, fiscalización y auditoría externa de la aplicación, destino, ejercicio y resultados alcanzados. De conformidad con sus reglas de operación,

5 los recursos federales del fondo metropolitano que se transfieren a los gobiernos de las entidades federativas, en las que se delimitan o donde están ubicadas las zonas metropolitanas, se deberán administrar a través de fondos concursables en fideicomisos de administración e inversión. Las entidades federativas y sus Municipios deberán constituir un consejo para el desarrollo metropolitano, conforme a las disposiciones federales y locales aplicables. Considerando las grandes necesidades que tiene la zona de Tijuana, es sin duda un gran acierto el haber logrado que la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión haya volteado sus ojos hacia esta zona en continuo crecimiento y determinado su inclusión en este mecanismo de asignación de recursos tipos subsidios, que le garantizan una fuente de apoyo para su futuro desarrollo. Lo mismo queremos hacer ahora para la zona metropolitana de Mexicali, integrada por aproximadamente un millón de habitantes y que como sabemos tiene rezagos en infraestructura hidráulica profunda, como lo es el drenaje pluvial y muy especialmente las carencias de servicios de drenaje y alcantarillado en la mayoría de las comunidades del Valle de Mexicali. Nos preocupa el alto riesgo en que viven las familias del Valle de Mexicali, que carecen de estos servicios, los cuales al no contar con un sistema de agua reconocido por nuestro marco jurídico local, tampoco pueden aspirar a contar con el servicio de drenaje y alcantarillado sanitario. Se anexa relación de todas estas comunidades. Este rezago normativo y de infraestructura es cada vez más una fuente de preocupación y reclamo de los habitantes de la zona rural que saben del daño que se está provocando a los mantos freáticos de la región por las filtraciones que se generan del sistema de letrinas que se utilizan y que este

6 rezago no puede, ni debe de continuar, los riesgos de sufrir nuevos estallidos infecciosos como el registrado recientemente en la zona de los santorales. Lo mismo sucede con el sistema para el suministro de agua, presente en la mayoría de comunidades rurales que por razones históricas se niegan a entregar la operación de este servicio a la Comisión Estatal de Servicios Públicos, previendo los costos que representan para su economía y la necesidad de contar con un sistema de regado en los huertos familiares que constituyen sin duda parte esencial de su entorno natural y patrimonio de las familias. Esta es una situación que tiene que ser resuelta para poder estar en condiciones de salvaguardar la salud pública de las comunidades del Valle y garantizar su derecho a contar con áreas verdes que además brindan un servicio ambiental a la Ciudad y al planeta en su conjunto. Las familias del Valle de Mexicali tienen el legítimo derecho como pioneras y fundadoras de esta gran región, de contar con el servicio de agua potable para el consumo humano y un servicio de agua para el regado de sus áreas verdes. Por ello, decimos que esta la hora de hacer las adecuaciones a nuestro marco jurídico para superar la situación que se viene dando y avanzar hacia una nueva etapa en el desarrollo sustentable de nuestras comunidades. Es hora de salir en defensa del entorno natural en lo que es la parte esencial de todo nuestro Municipio y que es la zona rural, el Valle de Mexicali, hoy amenazado por múltiples factores. En este sentido, es que se propone por un lado abrir nuevas fuentes de financiamiento para la obra pública en el Valle de Mexicali, y por otro, establecer una nueva relación con todas las comunidades que cuentan con su propio sistema de agua, reconociéndoles su derecho a la autogestión y ofreciéndoles alternativas para

7 su mejor funcionamiento, a fin de garantizar la salud de los usuarios y la protección de los huertos familiares y de las áreas verdes en todas las comunidades, reconociéndoles a estos como un servicio ambiental que brindan a la humanidad. Es por lo anteriormente expuesto y fundado que me permito presentar a consideración de este Pleno la siguiente propuesto de Punto de Acuerdo: PRIMERO.- Se acuerde hacer lo conducente para que la Honorable Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, en el proceso de elaboración del presupuesto de egresos de la federación para el 2010 incluya la zona metropolitana de Mexicali, a efectos de poder tener acceso a los recursos del fondo metropolitano y con ello atender las necesidades de infraestructura para el drenaje y alcantarillado de las comunidades del Valle de Mexicali. SEGUNDO.- Se acuerde promover la revisión del marco jurídico del agua en el Estado, para que el servicio que brindan los sistemas de agua comunitario del Valle de Mexicali sean reconocidos en la Ley y para salvaguardar el derecho a contar con el líquido necesario para el regado de los huertos familiares y áreas verdes, por la importancia que representa el servicio ambiental que nos brinda. Dado en el Salón de Sesiones Licenciado Benito Juárez Garcías, del edificio del Poder Legislativo del Estado de Baja California, a 10 de marzo de Atentamente: Dip. Carlos Alonso Angulo Rentaría.