Los cuidados no profesionales a través de redes sociales de atención. El papel de las organizaciones benéficas y de los cuidadores familiares
Factores determinantes de la dependencia Fragilidad, problemas de movilidad y enfermedades Factores ambientales Limitaciones sensoriales Factores vinculados a la personalidad Cuando la dependencia es definitiva se necesitan de manera sistemática cuidados de otra persona Consumo de fármacos Depresión Factores psicológicos
Definiciones de familia Grupo de individuos interdependientes que tienen un sentido de identidad, experimentan algún grado de nexos y tienen formas de satisfacer las necesidades de los miembros de la familia y de la familia como grupo (Sabatelli y Bartle, 1995). Se define como un grupo de personas unidas por lazos de parentesco, con sentido de pertenencia y vínculos de afecto y solidaridad (Carmen Barros). Experiencia intergeneracional en que cada ser humano nace en presencia de, al menos otra persona, que requerirá de otros para su sobrevivencia, estableciéndose una relación que durará largos años (SERNAM-Chile).
Realidad actual de las familias Cambios en los patrones de conyugalidad: menor número de matrimonio, mayor número de personas solteras, separadas y divorciadas, incluyendo a las personas mayores. Cambios en los patrones de fecundidad: disminución de la tasa de fecundidad por bajo en nivel de reemplazo. Extensión de valores relacionados con el deseo de mayor libertad y desarrollo personal, laboral y educacional. Aumento de personas mayores que viven solos o con sus parejas. Nueva realidad lleva a una complejidad creciente: Aumento en el número de personas mayores con una mayor esperanza de vida y mayor requerimiento de apoyo y cuidados. Disminución de red de parentesco.
Realidad actual de las familias No hay claridad que este fenómeno haya impactado en la calidad de las relaciones intergeneracionales. La familia es capaz de mantener su coherencia y seguir cumpliendo con su labor de protección y ayuda. No obstante enfrenta ciertos costos como los conflictos, las ambivalencias y las tensiones. Reacomodo de las familias para seguir protegiendo y ayudando a sus miembros. Dos fenómenos importantes: LAZOS INTERGENERACIONALES BIDIRECCIONALES: personas mayores demandan apoyo, pero a su vez lo proveen y contribuyen. PROCESO DE VERTICALIZACIÓN: transferencias de responsabilidad desde abajo hacia arriba o viceversa en la escala vertical familiar.
Realidad familiar Chilena Hoy las personas mayores no perciben que sus hijos tienen la obligatoriedad de entregarles cuidado y protección. 46% sostiene que es un deber de los hijos cuidar a sus padres cuando ellos ya no pueden cuidarse solos. 58% plantea que es un deber de los padres escuchar a sus hijos y aconsejarlos. 49% estaría dispuesto a que los hijos e hijas vuelvan a vivir con ellos. 50% declaran que si fuese necesario preferirían vivir solos y contratar a alguien externo que los cuide o vivir en un establecimiento de larga estadía. 37% declara que de necesitar ayuda permanente preferiría vivir en casa de un hijo o hija.
La práctica del cuidado Mantener la autonomía de la persona mayor Otorgar atención personalizada a la persona mayor Respetar la dignidad de la persona mayor
La práctica del cuidado Alimentación saludable Socialización y uso del tiempo libre Actividad física
Práctica virtuosa del cuidado Estado Familia Sociedad Civil Proveer un mínimo de condiciones de vida digna. Redistribuir los recursos y garantizar la construcción de políticas en torno al cuidado de las personas mayores. Apoyo y solidaridad intergeneracional. Responsabilidad social empresarial. Aliados y articuladores de las políticas públicas. Operan bajo convenios interinstitucionales. Entregan sus servicios y experiencias de trabajo hacia la población más vulnerable. Proveen servicios de calidad en territorios específicos. P e r s o n a s m a y o r e s
Resultados de la práctica virtuosa del cuidado Mejora ostensiblemente la autoestima de la persona mayor. Se sienten más fuertes, tolerantes y autónomos. Mejora su mirada ante la vida, disfrutan más, aumenta su nivel de bienestar subjetivo. Las personas mayores adquieren hábitos de vida saludable, tanto desde el ámbito físico como cognitivo. Aumenta la valoración positiva de la familia frente a la persona mayor, dado que se les facilita el trabajo de cuidado por medio de la información y la capacitación. A nivel comunitario mejoran las representaciones sociales de la vejez y el envejecimiento. La sociedad mejora su valoración frente al trabajo comunitario y social. Se establecen redes locales, profesionales y sociales, formales e informales, de colaboración mutua.