EL PROFESOR COMO COMUNICADOR. USO COHERENTE DE LOS PROGRAMAS PARA REALIZAR PRESENTACIONES. Por: Rafael Velasco Sánchez 1. INTRODUCCIÓN Durante unas recientes jornadas de creación literaria, el escritor y parlamentario andaluz José Calvo Poyato comentó, al empezar su disertación, que iba a realizar una presentación centrada por completo en la palabra, dejando de lado las herramientas como el PowerPoint, pues con ese tipo de medios ha bajado mucho el nivel y cualquiera imparte una conferencia aunque no tenga mucho que decir. Y es totalmente cierto. Desde unos años a esta parte quién no se ha encontrado en un curso, jornada o seminario en la que algunos de sus ponentes han centrado su exposición en una presentación realizada con alguna de las herramientas comentadas (PowerPoint, Impress o similar), y que ha resultado de lo mas aburrida y frustrante? Seguro que muchos de nosotros. Por esta razón he decidido realizar este artículo. Como buen informático estoy en contra del uso, sin medida, de los programas de presentaciones. Este tipo de programas sólo deben utilizarse cuando sea necesario o como apoyo a nuestra exposición, nunca convertirse en el centro de nuestra comunicación. Además, es contraproducente. Cuando se realiza una presentación y ésta es utilizada en distintas ocasiones, sin hacer ningún tipo de adaptación o actualización, ésta pierde frescura y el comunicante se comporta de forma monótona y repetitiva con lo que se hace difícil establecer el canal de comunicación con la audiencia. Este artículo comienza haciendo una defensa de la comunicación y de cómo nos afecta a nuestra labor como enseñantes. 1
Luego comento como realizar un uso adecuado de los programas de presentación. Aclarar que hablo de programas y no directamente de PowerPoint, como es lo habitual, porque disponemos de una herramienta en Guadalinex, dentro del paquete OpenOffice, igual de válida y totalmente gratis, como es Impress. Para terminar se da una relación de puntos básicos a tener en cuenta a la hora de realizar una presentación. Este último punto no pretende ser una guía exhaustiva de cómo se debe realizar una presentación, sino más bien una serie de consejos prácticos que han surgido de la experiencia. 2. LA IMPORTANCIA DE LA COMUNICACIÓN Cuantas veces nos hemos encontrado con auténticos cerebros, dominadores de su materia que luego no eran buenos comunicadores y por tanto profesores. O el caso contrario, compañeros que no tenían el suficiente dominio de la asignatura que les había tocado impartir y eran buenos profesionales incluso en ese campo. Es evidente que el ser un buen profesional dentro de nuestro campo de conocimiento no nos habilita a ser un buen transmisor de ese conocimiento, siendo incluso, a veces, un impedimento. La comunicación es un proceso en el que se ven involucradas dos partes: el transmisor y el receptor; y deben estar completamente adecuadas una a la otra. El transmisor, en este caso el profesor, debe realizar un análisis del alumnado al que va a dirigir su explicación: conocimientos de partida, desarrollo cognitivo, entorno socioeconómico y cultural, etc. Debemos adaptar lo que queremos transmitir al nivel de nuestra audiencia. Este es la teoría, la práctica es otra cosa. Cuando te encuentras audiencias tan numerosas como nos suele suceder a los docentes, compuestas de entre treinta y treinta y cinco alumnos, y a veces más, es difícil adaptar la comunicación. Podemos pensar que los profesionales de la comunicación se encuentran con audiencias mayores en número, pero en nuestro caso nos encontramos con alumnos muy variopintos, diversos incluso en nacionalidad, con los que es difícil conectar. Relacionado con este tema últimamente se habla mucho del bajo nivel de nuestro sistema educativo y de la necesidad de resolver los grandes problemas que le adolecen, ya sea de forma puntual o mediante un gran pacto. Y uno de los grandes problemas que los expertos han constatado es la falta de adaptación de los profesores a sus alumnos realizando sus explicaciones de forma mecánica y repetitiva. Y puede que como siempre, llevan razón, aunque sólo en parte. Ya he comentado que no es fácil adaptar el modelo de enseñanza, en este caso la comunicación, a una audiencia tan amplia y diversa. Sin entrar en la falta de tiempo que nos amenaza cada vez más, por la carga de burocracia que traen las últimas políticas educativas y a lo que prometo dedicar un artículo en fechas próximas, si de verdad quieren mejorar la 2
educación en este apartado, y nos ponen como ejemplo el modelo finlandés, vamos a tomarlo también como ejemplo en su ratio: clases de doce a quince alumnos. 3. UN CORRECTO USO DE LAS HERRAMIENTAS Hace unos años, concretamente en junio del año 2006 asistí a unas jornadas que se celebraron en Málaga. Una de las ponencias la realizó el que era uno de los inspectores de la zona donde tenía mi destino a partir de septiembre. El caso es que le tocó exponer a las cinco de la tarde, un día de auténtico bochorno. Para apoyarse para su explicación utilizó un PowerPoint que era un claro ejemplo de lo que no se debía utilizar en ese tipo de herramientas, sobre todo en temas de elección de colores, con colores vivos y fuertes. Al final, me planteé indicarle la mala elección que a mi parecer había hecho, y así lo hice. La explicación que me dio es que había preparado unas diapositivas (pues así llama PowerPoint a cada una de las páginas) con unos colores bastante suaves, pero que al ver la hora que le tocaba había decidido cambiarlas. El efecto que consiguió fue justo el contrario ya que la gama de vivos colores que utilizó hacía que muchos de los textos no se distinguiesen bien y que los gráficos quedaban apagados y en un segundo plano. Este es un ejemplo de los que nos puede suceder si no tenemos cuidado. Veamos una serie de principios que debemos tener en cuenta a la hora de utilizar un programa de presentaciones: 1. El principal de todos: la presentación creada con el programa es una herramienta, un apoyo, que nunca debe sustituir al resto de elementos de la comunicación. 2. Uno de los elementos de diseño más importantes y cruciales en tu presentación es el color. El color crea el tono de la presentación y ayuda a establecer las expectativas de la audiencia. Ayuda a comunicar hacia donde va a ser dirigida. De todos los estímulos visuales el color es el más poderoso. 3
3. El utilizar pocos colores cuidadosamente seleccionados y posicionados es más efectivo que muchos colores colocados de forma indiscriminada. 4. No has de vender en la presentación, puede que estés muy orgulloso de ella pero debe quedar en segundo plano. 5. No pongas mucho texto en cada diapositiva pues es difícil de leer. Las letras deben ser grandes y claras. 6. Las diapositivas deben ser limpias y no recargadas. Debemos conseguir más con menos. 7. La transición de diapositivas debe ser lo más simple y fluida. Es cierto que existen muchos efectos de transición pero no debemos demostrar que los conocemos todo el rato. 8. Existen diseños que nos pueden ahorrar mucho tiempo y que son perfectamente válidos y originales. Sobre ellos podemos dar un toque personal a nuestra presentación. 4. CONSEJOS BÁSICOS PARA REALIZAR UNA PRESENTACIÓN Esta es una lista con algunos consejos acerca de aquellas cosas que se deben, y no se deben hacer, al realizar una presentación. No debemos: Hablar alto: nos hace parecer agresivos y parece que estamos intentando ocultar nuestros nervios mediante el tono de voz, dando una falsa impresión de confianza. Hablar bajo: estamos tan nerviosos que apenas podemos hablar. Ser monótonos: si siempre hablamos con el mismo tono de voz, perderemos la atención de la gente en menos de cinco minutos. Movernos demasiado: será difícil para nuestro público seguir nuestras explicaciones. Ellos prestarán una mayor atención a nuestros movimientos que a las ideas que pretendemos transmitirles. Gesticular mucho: los gestos deben acompañar a las palabras, nunca deben ser un sustituto de ellas. Tener algún objeto en las manos que haga ruido: obvio. Meter las manos en los bolsillos: éste es un gran signo de inseguridad. Es muy difícil conectar con la audiencia si estamos inseguros. En esta posición no podemos comunicar con la suficiente fuerza. 4
Es normal que nos sintamos nerviosos al comienzo de una presentación. Incluso la gente con gran experiencia siente nervios, aunque sean actores que han estado trabajando durante mucho tiempo. Lo más importante es irse relajando poco a poco. Para conseguir esto: Debemos dar una introducción acerca qué es lo que vamos a explicar. De esta forma nos sentiremos más relajados: atraeremos la atención de la audiencia y nos sentiremos más seguros. Cuando hayan pasado unos minutos, se debe intentar ser natural, usando una tono de voz cómodo para nosotros, lo suficiente para que todo el mundo pueda escucharnos. La presentación debe tener su propio ritmo. Debemos comenzar con unas cuantas ideas para captar la atención de la gente, desarrollar las ideas principales y terminar con una conclusión. Debemos verlo como una obra de teatro: introducción, desarrollo y desenlace. Como el desarrollo de una presentación es largo, se puede utilizar, por una parte, algunos trucos o recursos para mantener la atención de la audiencia, y por otro lado, intentar recuperar a aquellos que han perdido la atención utilizando: Un programa de presentaciones, tipo Impress o PowerPoint, con lo que hacemos más fácil de seguir nuestra explicación. Pero debemos recordar no leer, todo el mundo sabe leer y daríamos la impresión de que no tenemos nada más que decir acerca de ese tema. Un cambio de voz, un movimiento distinto, realizar una pregunta que haya que meditar, e incluso contar una anécdota o chiste. Debemos terminar la presentación con una conclusión. Tenemos que tener en cuenta que nuestra audiencia va a recordar, sobre todo, el principio y el final. Por eso, terminar de forma correcta es importante. Y como idea final. Nosotros podemos conocer un tema o dominarlo. Cuando realizamos una presentación debemos mostrar que tenemos un gran dominio de lo 5
que hablamos. Para conseguirlo es necesario transmitir que es un tema que nos gusta y apasiona, aunque no siempre sea verdad. 5. CONCLUSIONES Realizar una buena comunicación con un auditorio, ya sea una clase de alumnos o grupos mayores, es cuestión de prepararla, práctica y experiencia. Si aún cumpliendo los preceptos anteriores tenemos problemas de comunicación existen multitud de cursos que nos pueden ayudar a mejorar, ya sea empleando algunos de los trucos que existen, o bien potenciando nuestras virtudes y enseñándonos a disimular nuestros defectos e incluso superarlos, como puedan ser los nervios. Cualquiera puede hacer una presentación con PowerPoint o Impress. Hacer una buena presentación es dedicarle más tiempo las primeras veces y veremos como vamos mejorando. No utilizar la misma presentación una y otra vez aunque el tema que vamos a explicar sea el mismo. Eso nos lleva a relajarnos, volvernos monótonos y perdemos frescura en nuestro discurso. Hay que superar los nervios. Un perfecto dominador de un tema parece un simple principiante si no es capaz de controlar sus nervios. 6. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS. Toledio, Purificación y Hervás, Carlos (2009) El software libre en los contextos educativos. Editorial MAD. Sevilla. Maggio, Mariana, Lipsman, Marilina y Litwin, Edith (2005) Tecnologías en las aulas: las nuevas tecnologias en las prácticas de la enseñanza: casos para el análisis. Amorrortu editores, S.A. Buenos Aires. 7. WEBGRAFÍA http://depsicologia.com/lenguaje-hablado-versus-comunicacion-no-verbal/ (imágenes y texto) http://weblog.maimonides.edu (imágenes) http://1.bp.blogspot.com (imágenes) http://media.tumblr.com (imágenes) http://arteppt.blogspot.com (texto) 8. OTRAS REFERENCIAS La creación literaria como estrategia formativa: circuito literario de narradores docentes. Córdoba. 2010. 6
II Jornadas provinciales de centros TIC. Málaga. 2008. Jornadas sobre software educativo para centros TIC. Málaga 2007. 7