Pieter van de Velde (Amberes 1634 1707) Paisaje costero con figuras Óleo sobre lienzo 80 x 118 cm. 1680 ca.
Para el mes de Abril hemos elegido este impresionante paisaje costero realizado por importante pintor flamenco Pieter van de Velde, nacido en Amberes en 1634 y perteneciente a una importante familia de artesanos. Influenciado por el gran Willem van de Velde El Joven, el cual probablemente fue su maestro, se especializó en marinas y vistas costeras. Gracias a la documentación de la época sabemos que en 1654 se convirtió en maestro de la Guilda de San Lucas de Amberes, lo que indica su prestigio como artista ya por aquel entonces. Técnicamente sus obras nos recuerdan a las de Jan y Bonaventura Peeters, pero con un dibujo menos preciso que muestra una mayor naturalidad. Su trayectoria artística fue brillante, gozó de gran reconocimiento y renombre ya en su época, tanto por su magnífica calidad artística como por la temática de sus obras, que eran de las más solicitadas por la sociedad burguesa del momento. Gracias a su extenso repertorio de obras podemos afirmar que Pieter van de Velde fue un gran estudioso de Historia Antigua, lo que le llevó a viajar por toda Europa llegando hasta el sur de España, interesándose sobre todo por las grandes ciudades de la Antigüedad como Constantinopla. En sus cuadros podemos observar como reconstruye las arquitecturas de dichos lugares incorporándolas a paisajes costeros, con embarcaciones y personajes del siglo XVII. Sus obras se caracterizan por estar envueltas en una ligera bruma dorada, de un gusto muy italiano, con un predominio de tonalidades azules y ocres. Sus composiciones están siempre llenas de movimiento, prestando atención hasta el más mínimo detalle.
Podemos dividir la obra en dos zonas. A la derecha el espacio ocupado por el mar en absoluta tranquilidad que como un espejo refleja con mucho detalle las cuatro embarcaciones. Uno de estos barcos dispara sus cañones, provocando un humo denso en tonos grises, como señal de celebración o bienvenida. A pesar de las grandes dimensiones de nuestro lienzo, es increíble como Van de Velde representa hasta el más mínimo detalle de estos veleros, pudiendo ver a la perfección sus mástiles, banderas y los bellos cascos de madera. En concreto hay que destacar la popa del barco de la izquierda, en la parte superior vemos el relieve de dos leones dorados enfrentados salvaguardando el escudo del barco, en la parte inferior la decoración viene dada por volutas plateadas y doradas. A la derecha aparece este divertido fragmento de una pequeña barca con sus tripulantes remando. Es increíble la minuciosidad con la que están pintados cada uno de los personajes ataviados con una indumentaria diferente para que no se confundan.
La ciudad amurallada que aparece en la colina, es un ejemplo de esas reconstrucciones tan del gusto de Van de Velde, que como gran historiador usaba como referencia las ciudades antiguas. En este caso, es muy probable que se trate de Constantinopla. Representa hasta el más mínimo detalle de dicha ciudad amurallada, de esta forma podemos ver desde una perspectiva aérea, sus torres, templos, palacios, incluso el trazado de las calles. Se trata de una urbe en una situación estratégica en cuanto a comercio marítimo, de hecho la escena representada más abajo indica el movimiento típico de un día cualquiera de mercado. A la izquierda vemos un puerto, que utiliza los recursos naturales del terreno para amarrar y abastecer las embarcaciones. Volvemos de nuevo a hacer hincapié en el detalle del campamento, las barcas varadas, los diminutos personajes, los caballos y el perrito de la derecha.
Los expertos afirman que entre los numerosos viajes por Europa de Pieter van de Velde, visitó el sur de España, y es muy probable que esta montaña que aparece en el centro de la composición sea una vista lateral del Peñón de Gibraltar. Es maravilloso detenernos a observar como a través de una superposición de planos el artista consigue crear el volumen del peñón. Como podemos observar, el cuadro engloba diferentes épocas y conceptos. Dentro de un paisaje costero con las características típicas de la Escuela Flamenca del Siglo XVII, ubica una ciudad de la Antigüedad llena de actividad. En la parte inferior del lienzo vemos como los personajes son de diferentes nacionalidades y ámbitos sociales, e interactúan armónicamente. A la derecha una elegante dama aparece junto a unos señores ataviados con un turbante, uno de ellos con una cesta llena de pescado a sus pies y el otro con un curioso artilugio cuadrado que rodea su cintura con exóticos pájaros probablemente loros, que gustaban mucho en aquella época como divertidos animales de compañía.
BIBLIOGRAFÍA - W. Bernt, The Netherlandish Painters of the Seventeenth Century, tomo 3, pág. 123, plates 1245 y 1246 - J. Maere & M. Wabbes, Illustrated Dictionary 17th Century Flemish Painters, pag. 407, plates 1147 y 1205. - R. Preston, Seventeenth Century Marine Painters of the Netherlands, 1974, págs. 49-50. - R.H. Wilenski, Flemish painters, Vol I, pág 675 - Catálogo All the paintings of the Rijkmuseum in Amsterdam, pág 564. - U. Thieme & F. Becker, Allgemeines Lexikon der Bildenden Künstler von der Antike bis zur Gegenwart, Leipzig, 1950. - E. Benezit, Dictionnaire des peintres...,. tomo 14, 1999, Pag.102 y 103. PROCEDENCIA Galería De Jonckheere, París, 1992 Colección privada, París. MUSEOS Existen obras de Pieter van de Velde en las colecciones de museos de las siguientes ciudades entre otras: Ámsterdam- Rijksmuseum, Ansbach- Residenz Gemadegalerie, Estocolmo- Statens Konstmuseum, Kiev- Museo Nacional, Lille- Museo de Bellas Artes, Londres- Greenwich National Maritime Museum, Praga- Nostitz Museum, San Petersburgo- Hermitage, Sibiu- Museo Brukenthal.