ANÁLISIS NOTACIONAL EN JUGADORES DE VÓLEY PLAYA Jose Manuel Jiménez Olmedo.

ANÁLISIS NOTACIONAL EN JUGADORES DE VÓLEY PLAYA Jose Manuel Jiménez Olmedo. Profesor de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte de la Facultad de Educación, Universidad de Alicante, España. Introducción El deporte del vóley playa es un deporte en expansión que ha adquirido gran fama y popularidad, sobre todo después de ser incluido en el año 1996 dentro de los Juegos Olímpicos de Atlanta (Koch, C et al, 009). Fruto de la profesionalización y la expansión de este deporte, se ha producido de forma paralela un aumento en las publicaciones y estudios tanto de deportistas como del análisis del propio juego, centrándose en aspectos que han sido de interés para diferentes autores (Giatsis, 008; Koch & Tilp, 009). Estos autores se han centrado en comparar desde características propias del juego, hasta la influencia de los factores externos que condicionan el rendimiento de los deportistas durante el desarrollo de los encuentros. En cuando al análisis notacional, podemos llevar a cabo dos líneas principales de análisis para así tener una base de datos sobre factores técnicos, tácticos y en definitiva, factores de rendimiento (Nevil A, 008). Por un lado podemos realizar un análisis puramente científico (vertiente teórica), cuyo objetivo es conocer aspectos del juego que son de interés para el investigador, y por otro lado (vertiente práctica), podemos realizar un análisis que ayude a los deportistas a mejorar su juego u obtener información del juego de otros equipos (Tilp, 006) para poder enfrentarse a ellos con una información detallada que les de mayores garantías de éxito (Liebermann &Franks, 004). Objetivo El objetivo de este capítulo es mostrar un ejemplo de análisis notacional sobre el ataque de los jugadores de vóley playa, de modo que podamos establecer un patrón de ataque de los deportistas analizados, siguiendo la vertiente práctica del análisis notacional. Ejemplo de estudio Los datos sobre los que se ha llevado a cabo el ejemplo de estudio se corresponde con 3 partidos. Con esta muestra (n=3), podemos llevar a cabo un análisis que nos permita realizar de forma ilustrada y a modo de ejemplo un caso práctico de cómo realizar este tipo de análisis. A través del análisis de dicha pareja, se puede llevar a cabo un análisis notacional de modo que ayude a los equipos que se enfrenten a ellos, poder realizar planteamientos de partido que les facilite su camino al éxito. Toma de datos (Método) El material de videograbación sobre el que se ha realizado el análisis notacional cuenta con un total de 3 partidos grabados durante en el II Torneo Internacional de Entrenamiento Sixto Jiménez, llevado a cabo en la centro de alto rendimiento T3 de Tenerife en las Islas Canarias los días 3, 4 y 5 de Febrero de 01. 1

Para la videograbación, fue utilizada una cámara de video Panasonic NV-GS1 de grabación en mini-dv, modo LP. Durante la videograbación, es fundamental el colocar la cámara de video en un lugar donde se permita recoger todo el campo de juego, así como un 30% de más de campo a cada uno de los lados de la pista (Pérez-Turpin, 008), por tanto, recomendamos la colocación de la cámara detrás de las líneas de fondo de la pista (ver imagen 1). Esta posición de la cámara nos permite observar con claridad todas las acciones que se desarrollen durante la grabación de los encuentros, tanto en un lado del campo como en el otro (Callejón, 006). Imagen 1: Colocación de la cámara de video Otro de los aspectos importantes a la hora de llevar a cabo la videogravación es la de colocar siempre la cámara a la misma distancia de la pista, registrando por parte la persona encargada de realizar la videogración, tanto la distancia desde la linea de fondo del campo, como a la altura a la que se encuentra el objetivo de la cáma de dicha linea. En nuestro ejemplo, la cámara fue colocada a una distancia de cinco metros y medio desde la línea de fondo sobre una grada y a su vez sobre un trípode, proporcionando una altura de tres metros y medio desde el suelo hasta el objetivo. Definiciones operacionales A la hora de llevar a cabo el análisis de los jugadores, debemos establecer cuales son los aspectos que vamos a analizar. Estos aspectos deberán responder a las necesidades e intereses tanto de jugadores, como de entrenadores o de los propios investigadores, pero siempre deben quedar claros y definidos antes de realizar el análisis. En nuestro caso particular, estableceremos las diferentes acciones que se puedan dar a la hora de realizar un ataque por parte de los jugadores y que son de nuestro interés (ver figura 1).

Ataque Jugador Zona de ataque 1 Zona de ataque Gana Pierde Continua Zona de acción Figura 1: Diagrama de acciones a analizar Tal y como hemos mencionado anteriormente, se debe llevar a cabo una descripción clara y concisa de cada uno de los aspectos analizados, para poder reconocer y cuantificar cada vez que se produzcan a lo largo del desarrollo del juego. Tabla 1: Tabla Matriz de análisis Matriz de análisis Operación Jugador 1 Jugador Zona de ataque 1 Zona de ataque Línea Gana Pierde Continua Zonas de ataque Z1 Z Z3 Z4 Z5 Z6 Red Definición Jugador que juega por zona (parte derecha del campo) Jugador que juega por zona 4 (parte izquierda del campo) Zona que se corresponde con la mitad del campo de la derecha Zona que se corresponde con la mitad del campo de la izquierda La dirección del balón atacada se desplaza paralelo a la línea de campo La dirección del balón se dirige a la línea contraria desde donde ha sido atacado El balón cae dentro del campo del equipo contrario tras el ataque o el balón cae fuera del campo después de ser tocado por un miembro del equipo contrario El balón cae fuera del campo del contrario o se detiene en la red El balón continua en juego por parte del equipo contrario. Definición Área de 10,6m que se corresponde con la esquina inferior derecha de una de las mitades del campo, junto a la línea de fondo. Área de 10,6m que se corresponde con la esquina superior derecha de una de las mitades del campo, junto a la red. Área de 10,6m que se encuentra en el centro de una de las mitades del campo, junto a la red. Área de 10,6m que se corresponde con la esquina superior izquierda de una de las mitades del campo, junto a la red. Área de 10,6m que se corresponde con la esquina inferior izquierda de una de las mitades del campo, junto a la línea de fondo. Área de 10,6m que se encuentra en el centro de una de las mitades del campo, junto a la línea de fondo. Elemento físico que delimita los dos campos 3

Fuera Todo aquel lugar que se encuentra fuera de los límites del campo de juego de 16x8m. Una vez establecidas las diferentes acciones que cuantificaremos a medida que se producen, debemos dejar claro en este caso particular, las zonas de ataque 1 y así como las zonas de acción. Para las zonas de ataque 1 y, dividimos cada mitad de campo en, que se corresponderán con la posición del jugador 1 y con la posición del jugador. (ver imagen ). En cuanto a la zona de acción, estableceremos las zonas del campo donde se produce la acción del ataque en línea o diagonal, es decir, donde se gana, pierde o continua el ataque realizado por el equipo analizado. Esas zonas que establecemos son 8. En las zonas del campo delimitadas (ver imagen 3), delimitamos 6 zonas de campo más dos adicionales, siendo la red y fuera. Imagen : Zona de ataque 1 y zona de ataque Ejecución práctica del análisis Para llevar a cabo el análisis de las videograbaciones se debe seguir la siguiente secuencia (Pérez-Turpín, 008): A) Grabación y digitalización de las imágenes B) Creación de la matriz de código con los elementos a analizar C) Captura de imágenes para cada uno de los códigos Imagen 3: División del campo de juego D) Combinación de los códigos obteniendo una cuantificación de las acciones analizadas en bruto. A diferencia de otros deportes, debemos tener en cuenta que el deporte del vóley playa, cuenta con un periodo de tiempo oficial y un periodo de tiempo real. En cuanto al periodo de tiempo oficial, entendemos el periodo de tiempo comprendido entre la pitido inicial y el pitido final del partido. En este tiempo encontramos los tiempos muertos pedidos por los jugadores, los tiempos técnicos a mitad de set, así como los descansos entre set. En cuanto al tiempo real de juego, establecemos el tiempo desde que el jugador toca el balón después del pitido de saque del arbitro, hasta que el balón toca la arena finalizando el punto, por tanto, el tiempo real de juego, seria la suma de los tiempos reales de juego de cada uno de los puntos disputados. Dicho esto, para el análisis de acciones que nos ayuden a establecer patrones de juego, lo que realmente nos importa es el tiempo real de juego, por lo que recomendamos que el análisis se realice únicamente sobre ese tiempo real. Para mostrar la diferencia de tiempo real y tiempo de juego observamos que de los tres partidos analizados para el ejemplo encontramos que: 4

Tabla : Tiempos por partido Partido Tiempo de Oficial de Juego Tiempo Real de Juego 1 1h00'3" 17'58" 1h00'6" 18'36" 3 57'16" 16'4" Por tanto a modo de síntesis planteamos la siguiente secuencia de acciones para poder iniciar el análisis de la videograbación: 1 Obtener el material de videograbación Creación del vidio de Tiempo Real 3 4 Creación de las matrices de análisis Análisis de las imágenes CuantiIicar las veces que se repita cada aspectos a analizar Figura : Secuencia de análisis a seguir Resultados Una vez cuantificadas cada una de las acciones que eran de nuestro interés y que fueron recogidas en la matriz de análisis, obtenemos una cantidad de datos en bruto, que debemos interpretar para proporcionar tanto a entrenadores como a jugadores, la información necesaria que les ayude a afrontar los encuentros con mayores garantías. La información que el analista proporcione, debe ser presentada de forma clara y concisa, ya que un exceso de información puede dar lugar a no ser entendidos por parte de los jugadores o entrenadores, no comprendiendo realmente cual es el significado de una gran cantidad de datos que no saben interpretar. Dicho esto, será en analista el que presente la información según los intereses que tenga su equipo. A continuación mostraremos un ejemplo simplificado de los datos que se desprenden del análisis basado en la matriz presentada anteriormente. Jugador 1 5

Ataques del Jugagor 1 Perdidos 1% Continuados 8% Ganados 51% Ganados Continuados Perdidos Figura 3: Ataques Jugador 1 En cuanto a los ataque del jugador 1 (ver figura 3) encontramos que más de las mitad de los ataques que realiza (51%) los gana, el 8% son continuados por el quipo contrario y finalmente, pierde el 1% de los ataques. Además podemos desglosar cada uno de los finales de ataque según las variables tenidas en cuenta, en nuestro caso, si los ataques ganados, continuados o perdidos se produjeron al atacar línea o al atacar diagonal: Ataques ganados Jugador 1 36% 64% Figura 4: Ataques ganador por el Jugador 1 6

Ataques continuados Jugador 1 4% 58% Figura 5: Ataques del Jugador 1 continuados por el equipo contrario Ataques perdidos Jugador 1 Diago 11% 89% Diago Figura 6: Ataques perdidos por el Jugador 1 En cuanto a los ataques realizados por le jugador 1, el 64% de los ataques fueron a la diagonal, mientras que el 36% fueron ataques a la línea. Además de los ataques continuados, el 58% fueron a la diagonal y el 4% a la línea. Finalmente el 89% de los ataques perdidos, fueron a la línea y el 11% fueron a la diagonal. Por tanto, de estos datos se deprende que el jugador 1 tiene una preferencia destacada por el ataque en diagonal, siendo el ataque con el que mayor éxitos consigue, sobretodo al presentar un 89% de ataques fallados a la línea por lo que se confirma la confianza que presenta en sus ataques a la diagonal al no tener un buen ataque a la línea. Además, podemos establecer las zonas en las que se han producido esas acciones. 7

Puntos ganados por zonas Jugador 1 Número de ataques ganados 10 8 6 4 0 Z1 Z Z3 Z4 Z5 Z6 Zona de acción Figura 7: Puntos ganados del jugador 1 por zonas Puntos continuados por zona Jugador 1 Número de ataques continuados 9 8 7 6 5 4 3 1 0 Z1 Z Z3 Z4 Z5 Z6 Zona de acción Figura 8: Puntos continuados del jugador 1 por zonas 8

Puntos perdidos por zona Jugador 1 Número de ataques perdidos 10 8 6 4 0 FUERA Zona de acción RED Figura 9: Puntos perdidos del jugador 1 por zonas El jugador 1 presenta un elevado número de puntos ganados tanto en Z1 como en Z (ver figura 7), lo que reafirma la tendencia de este jugador por su ataque en diagonal. Por tanto obtiene mejores resultado, atacando tanto a la diagonal corta que a la diagonal larga. Nuevamente seguimos insistiendo en la idea de las diagonales y su falta de efectividad en las líneas debido al gran número de ataques que le continúan tanto en Z6 como en Z1 y Z (ver figura 8). Finalmente, en cuanto a los ataques fallados, podemos cuantificarlos para ver qué jugador de la pareja falla más y donde. De igual modo presentamos los datos que se desprenden del análisis del jugador. Jugador Perdidos 16% Ataques Juagor Continuados 9% Ganados 55% Ganados Continuados Perdidos Figura 10: Ataques realizados por el Jugador 9

Al desglosar cada uno de los finales de ataque según las variables tenidas en cuenta, en el caso del jugador encontramos que, el 55% de los ataques realizados por este jugador fueron ganados, el 9% fueron continuados y finalmente el 16%, fueron perdidos (ver figura 10). Además, del mismo modo que realizamos con el jugador 1, podemos desglosar cada uno de los finales de punto para conocer si fueron línea o diagonal. Ataques ganados Jugador 49% 51% Figura 11: Ataques ganados por el Jugador Ataques continuados Jugador 40% 60% Figura 1: Ataques continuados por el Jugador 10

Ataques perdidos Jugador 3% 68% Figura 13: Ataques perdidos por el Jugador En cuanto a los ataques ganados, observamos que el 51% de los ataques ganados por el jugador se realizan atacando a la línea, mientras que el 49% se ganan atacando a la diagonal (ver figura 11). Al igual que el jugador 1, el jugador presenta una tendencia al ataque en diagonal, pero al contrario que su compañero, obtiene mejores resultados atacando a la línea ya que únicamente se le continúan el 40% de los ataques frente al 60% de ataques continuados cuando ataca a la diagonal (ver figura 1). Dicha tendencia a la diagonal se entiende al observar que el 68% de los ataques a la línea los pierde frente al 3% de los ataques perdidos a la diagonal (ver figura 13). En cuanto a las zonas de ataque, podemos establecemos nuevamente las zonas donde el jugador gana, pierde o le continúan los puntos. Puntos ganados por zona Jugador Número de ataques ganados 5 0 15 10 5 0 Z1 Z Z3 Z4 Z5 Z6 Zona de acción Figura 14: Puntos ganados del jugador por zona 11

Número de ataques continuados 16 14 1 10 8 6 4 0 Puntos continuados por zona Jugador Z1 Z Z3 Z4 Z5 Z6 Zona de acciión Figura 15: Puntos continuados del jugador por zona Puntos perdidos por zona Jugador Número de ataques perdidos 0 15 10 5 0 FUERA Zona de acción RED Figura 16: Puntos perdidos del jugador por zona Del análisis de los finales de ataque por zona, observamos rápidamente dos cosas. En primer lugar, observamos como el jugador ha sido el jugador que más saques ha recibido debido a la gran cantidad de ataques que ha realizado en comparación a su pareja. Por otro lado, observamos como tiene una tendencia al ataque en línea (Z1), debido a los éxitos que le proporciona este ataque (ver figura 14). En cuanto a los ataques continuados (ver figura 15), observamos como la insistencia del jugador a la línea, conlleva que también se continúen muchos ataques cuando insiste sobre el fondo de la pista (Z1), sin obviar que también como se le continúan al atacar a la diagonal (Z5 y Z6). Por último podemos comparar y ver la cantidad de puntos que la pareja pierde al atacar fuera de la pista o dejar el balón en la red, donde el jugador 1 ha perdido en los 3 partidos que conforma la muestra del ejemplo de estudio un total de 13 puntos y el jugador un total de 5 puntos. 1

Variaciones del análisis planteado Tal y como se indicó al inicio de este capítulo, el ejemplo presentado se corresponde con un análisis práctico del juego del vóley playa. Siguiendo esa línea, podemos complicar o simplificar el análisis de modo que respondamos a las necesidades tanto de jugadores, como de entrenadores o analistas. Para el ejemplo descrito, podríamos hacer un análisis más complejo añadiendo simplemente, el momento en el que se produce el ataque, es decir, si se produce en situación de Side-Out (K1) o en situación de contraataque (K). También debemos tener en cuenta que el jugador realiza un ataque condicionado por el tipo de bloqueo que se encuentra por parte del bloqueador, por lo que también se podría incluir el ataque cuando se produce un bloque en línea, cuando se produce un bloqueo en diagonal o cuando se produce un bloqueo en uve 1. De este modo obtenemos una información detallada sobre la forma de jugar de las parejas que son objeto de nuestro análisis, ofreciendo una valiosa información que sin duda alguna ayuda y ofrece garantías de éxito tanto para los jugadores durante el desarrollo del partido, así como para entrenadores a la hora de preparar los encuentros. 1 Por bloqueo en uve entendemos el bloqueo que tiene por objetivo parar el balón abriendo y disponiendo los brazos en V, no teniendo por objetivo en cubrir una zona determinada, es decir, cubrir la línea o la diagonal. 13

REFERENCIAS 1. Callejón, D. (006). Research and analysis of the servece in the high performance men s Volleyball. International Journal of Sports Science, 6, 1-8.. Giatsis, G., & Zahariadis, P. (008). Statistical analysis of men s FIVB beach volleyball team performance. International Journal of Performance Analysis in Sport, 8 (1), 31-43. 3. Koch, C., & Tilp, M. (009). Beach volleyball techniques and tactics: A comparison of male and female playing characteristics. Kinesiology, 41, 5-58. 4. Koch, C., & Tilp, M., (009). Analysis of beach volleyball actions sequences of females top athletes. Journal of Human Sport and Exercise, 4(3), 7-83. 5. Nevill, A., Atkinson, G. and Hughes, M. (008). Twenty five years of sports performance research in the Journal of Sports Science. Journal of Sports Science, 6, 413-46. 6. Pérez-Turpín, J.A., Cortell-Tormo, J.M., Suarez Llorca, C., Chinchilla Mira, J.J., Ceuela Anta, R. (009). Gross movement patterns in elite female beach volleyball, Kinesiology, 41(), 11-19. 7. Pérez-Turpin, J.A., Cortell, J.M., Cejuela, R., Chinchilla, J.J., Suárez, C. (008). Analysis of jump patterns in competition for elite male beach volleyball players. International Journal of Performance Analysis, 8 (), 94-101. 8. Tilp, M., Koch, C., Stifter, S., and Ruppert, G. (006). Digital game analysis in beach volleyball, International of Journal of Performance Analysis in Sport, 6, 149-160. 14