1. Acercar a los niños y niñas la realidad de muchos niños, niñas y adolescentes que no disfrutan de un hogar. 2. Entender qué nos brinda un hogar y por qué es un derecho. 3. Reflexionar sobre la responsabilidad de nuestros gobiernos de hacer cumplir este derecho. 4. Fomentar actitudes de solidaridad y colaboración en nuestro entorno más cercano para defender el derecho a un hogar en el mundo. La persona que dinamiza reúne al grupo en asamblea, les indica que van a jugar al juego de Palabras arriba sobre el derecho a un hogar y les introduce las instrucciones: Se les entregará unas tarjetas con las palabras del abecedario (Anexo 1), con las que formarán palabras tanto en horizontal como en vertical, que tendrán que colocar en el suelo en un espacio que se les indique (que hará como de tablero). Las palabras deben tener relación con aquello que nos brinda un hogar, tanto lo material como lo no material, es decir, que pueden poner palabras que se refieran a las personas que están presentes en nuestro hogar; a cosas que tiene nuestro hogar y que si faltaran, las echaríamos de menos; o a ciertos sentimientos y valores que nos brinda en general un hogar como la seguridad o el cariño. Además de construir palabras nuevas, pueden poner las letras unas encima de otras ya colocadas en el tablero, para formar desde ahí diferentes palabras. 3
A los más pequeños y pequeñas se les puede reunir en un círculo, y entre todos y todas ir proponiendo ideas de palabras, de manera que sea la persona que dinamiza quien las coloque en el centro. En este caso el juego termina cuando, tras un tiempo, haya suficientes palabras para trabajar con ellas después, en una puesta en común. Los mayores se pueden dividir en grupos de cuatro a cinco personas y jugar por turnos, de manera que se coloquen las tarjetas con las letras boca abajo en un montón y cada grupo escoja diez tarjetas y comience el juego por turnos. Cuando un grupo forme una palabra, cogerán del montón tantas tarjetas como hayan gastado en la palabra. El juego termina cuando ningún grupo pueda formar más palabras. Después, se abre un espacio para reflexionar en torno a las palabras que han salido en el juego. Se puede ir repasando entre todos y todas qué palabras han salido sobre las personas que se encuentran en nuestro hogar, sobre qué nos aporta un hogar, sobre qué cosas echaríamos de menos, etc. Y después la persona que dinamiza puede plantear algunas de las siguientes preguntas: Qué pasaría si no tienes (nombrar las palabras que han salido que tienen que ver con el cariño, la seguridad, la protección )? Sabías que tener un hogar es un derecho de todos y todas? Cómo te imaginas la vida de los niños y niñas que no tienen un hogar? Quién o quiénes tienen la responsabilidad de lograr que se cumpla el derecho a un hogar en todo el mundo? Y tú, qué responsabilidades tienes en tu hogar para que sea un lugar que aporta cariño, seguridad y protección a todos los miembros? Qué puedes hacer en tu colegio, en tu familia o en tu barrio para defender el derecho a un hogar para todos los niños y niñas del mundo? Y tú, qué haces por el derecho a un hogar? La persona que dinamiza les muestra una enorme silueta de una casa en papel continuo, y todos y todas van pegando las palabras con cinta adhesiva o barra de pegamento, de manera aleatoria dentro de la casa. Mientras puede ponerse una música instrumental de fondo. Después lo podéis colocar en un lugar visible del colegio con algún lema como: 4
1. Analizar la situación que tienen que afrontar hombres, mujeres, niños y niñas en el mundo al no contar con un hogar digno donde desarrollarse. 2. Reflexionar sobre qué nos brinda un hogar y por qué es un derecho. 3. Adoptar una posición crítica y de compromiso ante situaciones en las que se vulnera el derecho a un hogar. 4. Fomentar actitudes de solidaridad y colaboración en nuestro entorno más cercano para defender el derecho a un hogar en el mundo. La persona que dinamiza pide a los y las participantes que se coloquen de manera individual. Se les reparte dos folios en blanco, lápiz, borrador y lápices de colores. En primer lugar, para uno de los folios se les da la consigna de dibuja una casa. La persona que dinamiza intentará no dar más explicaciones al respecto para dejar que fluya su imaginación y creatividad. Si realizan comentarios se les puede decir dibuja una casa lo mejor que puedas. Para ello, se les dejará unos 15 minutos y mientras dibujan puede ponerse una música de fondo que les guste, por ejemplo, los días antes de la actividad, se les puede sugerir que traigan sus propios CDs de música, que no tengan ni tinte religioso ni político, para así no tener problemas o desacuerdos. 5
Una vez que hayan dibujado la casa, la persona que dinamiza les pide que dejen el dibujo a un lado boca abajo y que tomen el otro folio. Esta vez se les da la consigna de dibuja un hogar. Igualmente en este caso, la persona que dinamiza intentará no hacer más comentarios al respecto. Después, se facilitarán dos espacios para poder colgar por un lado los dibujos de la casa y por otro lado, los dibujos del hogar, de manera que queden visibles para todos y todas las participantes. Se les pedirá que en silencio durante unos 5 o 10 minutos, vayan observando los dibujos, y escriban qué diferencias observan entre los dibujos de las casas y los dibujos de los hogares. La persona que dinamiza les animará a escribir cualquier cosa que se les ocurra, hasta el mínimo detalle será importante. Posteriormente, se abrirá un espacio de debate y reflexión en torno a las siguientes preguntas: Qué diferencias has encontrado entre los dibujos de la casa y los dibujos del hogar? Por qué crees que se ha dado esto? Qué entiendes entonces por casa y qué entiendes por hogar? La idea es llegar a la conclusión de que la casa está formada por lo material y el hogar por lo no material. Qué nos brinda un hogar? Crees que todos los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a un hogar? por qué? Cómo te imaginas la vida de los niños, niñas y adolescentes del mundo que no cuentan con un hogar? Y tú, qué haces por el derecho a un hogar? En esta segunda parte de la actividad podemos reflexionar sobre la responsabilidad ante el derecho a un hogar. Tanto de los estados como nuestra. Entonces se abrirá un debate en torno a preguntas como quién o quiénes tienen la responsabilidad de lograr que se cumpla el derecho a un hogar en todo el mundo? o qué puedes hacer en tu colegio, en tu familia o en tu barrio para defender el derecho a un hogar para todos los niños y niñas del mundo? Por último, podemos cerrar la actividad con una dinámica que simbolice la responsabilidad de cada uno y de cada una en su hogar, para que sea un lugar que aporte cariño, seguridad y protección a todos los miembros. Así pues, podemos repartir una pieza de puzzle del Anexo 2 a cada participante, que recortará y escribirá dentro, qué aporta a su hogar. Se les puede poner ejemplos como alegría, buen humor, ayuda, etc. Así entre todos y todas, podemos terminar juntando las piezas del puzzle y comprometiéndonos con una acción a hacer en nuestro hogar en defensa del derecho a un hogar en todo el mundo. 6
1 A E I O U 1 Recomendamos que la persona que dinamiza prepare más tarjetas de vocales que de consonantes, para después mezclar todas en el montón. 7
B C D F G H J K L 8
M N Ñ P Q R S T V 9
W X Y Z 10
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Esta Navidad... Te proponemos que llenes tu hogar, tanto en casa como en el cole, de escuelas que cambian el mundo. Puedes colocar una escuelita en el Belén o colgarlas como adorno en el árbol