Una lectura de la mujer castradora entredichos Al leer algunos apartes en el libro la injerencia divina sobre la mujer castradora escrito por Allouch, a manera de entredicho en su texto la injerencia divina: Prisioneros del gran otro, me encuentro en el texto el poema de J. Lacan Acteón demasiado culpable de correr a la diosa, Presa que apresa, cazador, la sombra que te vuelves, Deja que caya la jauría sin apurar el paso, Diana reconocerá a los perros por lo que valen J. Lacan Cuando Allouch sita este poema nombra en el lugar de Diana a Ariadna a quien hace referencia como la mujer castradora por excelencia; Ariadna ( la más pura) ; es una joven hija del rey Minos y Pasifae de Creta, quienes atacaron a Atenas y ganaron la guerra ; a cambio de la paz, los Atenienses debían enviar siete hombres jóvenes, y siete doncellas, cada año para alimentar al minotauro el cual, Minos tenía en un laberinto de su palacio, ante esta infamia el gobernante de Atenas, Egeo da la misión a su hijo Teseo de matar el minotauro (hijo de Pasifae y el toro de la isla de Greta) así, Teseo va al palacio del rey y cuando Ariadna lo ve se enamora de él; le pasa un ovillo de hilo con el que estaba tejiendo, para que acabe con el minotauro. Luego ella huye con Teseo evitando así enfrentar la furia de su padre por haber ayudado a Teseo a acabar con el minotauro.
El mito de Ariadna ( wilquipedia) ya en la isla de Nexos ella se queda dormida en una playa, al despertar encuentra que Teseo no está, la embarcación se ha ido, sin embargo, Ariadna no se deja amilanar por el abandono de Teseo y rápidamente supera este desengaño con la presencia de Dionisio quien se casa con ella y de regalo de bodas le da la corona que fue ascendida al cielo como la constelación Corona Borealis. Ariadna tienen tres hijos, y permanece al lado de Dionisio hasta que más tarde Perseo combatió contra Dionisio en Argos y mató a Ariadna al petrificarla como cabeza se Medusa. Así Ariadna es nombrada por Allouch como la mujer castradora la que ordena la castración, es no toda, tiene la posibilidad de destituir a Dios y al hombre como dios, lo humaniza,ella sabe de la segunda muerte, la cual es entendida, como aquella posición ante la pérdida en la que ella destituye todo y queda solo responsable de su acto, por fuera de cualquier creencia o mandato y de esta manera, deviene el deseo que deja alguna marca o efecto.es el caso como en nombre del amor que siente por Teseo, Ariadna trasgrede la ley paterna al ayudarle a su amado a acabar con el minotauro, símbolo de poder y sometimiento al pueblo de Atenas por parte de su padre. Así, ella nos deja leer como actúa en nombre del amor. Renunciando al mandato de su padre y la ley impuesta por el. Esta renuncia tiene dos momentos un primer momento, el enamoramiento de Teseo que implica la renuncia al amor del padre, un segundo momento cuando le da a Teseo el ovillo con los hilos para acabar con el minotauro, lo cual representa la trasgresión de la ley que tiene como consecuencia la liberación del pueblo de Atenas de la tiranía de su padre. Al respecto Lacan dice: La mujer es primordialmente una tejedora, el hombre es, sin duda el alfarero el hilo es para la aguja como la chica para el muchacho la mujer se presenta, sin duda, con apariencia de la vasija él se imagina que esta vasija puede contener el objeto de su deseo. (J. Lacan seminario 10 pg. 221)
En el ejemplo de Ariadna dado por Allouch, hay dos características que son relevantes en este asunto; el uso de las figuras mitológicas para dar cuenta de lo femenino, - en ella la representación el uso de los hilos, y el del amor a Teseo que provoca la destitución del padre y de la ley; es decir renunciar al padre para valerse de él. El asunto de la segunda muerte como aquel momento de soledad por fuera de todo mandato que lleva al sujeto a tomar decisiones las cuales tienen efecto sobre la subjetividad y o la cultura. Pero qué es lo femenino, que es ser mujer, más allá de la mujer castrada, para pensar en la posición de la mujer como castradora? El concepto de la mujer castrada, es desarrollado ampliamente por Freud, en tanto su diferencia anatómica con el hombre, la mujer, al no poseer el pene, se encuentra incompleta, lo cual la deja sin posibilidades en lo simbólico entonces ella adopta el falo como posibilidad de ser, ello marca su destino como ser en falta: por la presencia de la ausencia, por el vacío: la vagina; o por la ausencia de la ausencia, por la llenura, ello alrededor del falo, premisa que determinan las funciones psíquicas y eróticas de ellas y de ellos. Visto así, lo anatómico promueve a partir de la mirada del Otro(s), de la llamada pulsión escópica, la visión del padre y/o de la madre, un vacío en ellas (el continente negro) y una llenura (fálica) en ellos una satisfacción o una frustración para el padre y/o la madre, según sea la expectativa y el género del sexo esperado. De allí se deriva el asunto, de la mirada, la ley, el discurso sin embargo, ella es no toda, en relación a la propuesta de ser en falta para la cultura y su relación al padre. Luego de Freud hace su recorrido desde Ana o y luego por todo el complejo de Edipo,3 ensayos para una teoría sexual, el caso Dora, para nombrar algunos de sus escritos entonces, adviene una frase: la mujer es continente oscuro, o bien planteando el asunto de lo femenino a manera de enigma y más aún, cuando en el caso Schreber nos muestra como este se estabiliza en su discurso cuando se nombra ante el espejo como la mujer de dios. Es decir la mujer presente en el amor de la histérica, y la mujer presente como la mujer de Dios; como posibilidad de estabilización de la psicosis en Schreber. Y a en 1913 Freud trabaja el asunto de la elección del cofrecillo que lo lleva a una serie de interrogantes en relación a lo femenino, y acude a la mitología para preguntarse por el origen de la naturaleza de lo femenino: retomando el mito de las Moíras que son hilanderas del destino; ellas portan hilos negros e hilos dorados lo cuales son usados según la circunstancia : El hilo negro para tejer el infortunio, y el hilo dorado para tejer las fortunas que van a determinar el destino de la humanidad; Freud las nombra como inexorables guardianas del orden de la vida humana, ellas son: Gloto ; es quien hila la hebra de la vida, Laquesis; posee una regla para trazar el destino humano, Atrópos; lleva unas tijeras ; ella determina en que momento corta el hilo de la vida, al respecto Freud dice así la creación de las Moíras es el resultado de una intelección que advierte al ser humano, que también es parte de la naturaleza y por eso está sometido a la inexorable de ley de la muerte. Así Freud se refiere a esa mujer que esta una condición especial de vacío y tejer alrededor de la vida, el destino, la belleza, el amor, la fatalidad y la muerte.
Mito de las Moíras ( wilquipedia ) Por su parte Lacan hace un planteamiento en relación a lo femenino el cual pasa por premisas como la mujer no existe, asunto sobre el cual no me detendré. En su alusión a lo femenino retoma a Antígona aquella jovencita hija de Edipo que es capaz de oponerse a las leyes de Tebas dictadas por Creonte, y crear un quebrantamiento de la ley de la ciudad. Antígona ante la muerte de su padre Edipo queda sumida en la desesperanza incluso nombra la muerte de su padre como desenlace fatal y dice que a su padre no lo han llevado los dioses cuando muere sino, que se lo han tragado las praderas, expresión esta que ya marca la soledad y desesperanza aun en los dioses, ella dice que su herencia es de desgracia y maldición y debe partir a Tebas a ayudar a sus hermanos. Al ser anoticiada de la muerte de su hermano Polineses y la determinación de Creonte de no darle sepultura sino, de dejarlo expuesto para que sea comido por las aves de rapiña, en un primer momento asume una posición fálica propia de las coordenadas de lo simbólico, la ley del padre, en principio acude al até (honor familiar) como una forma de vérselas con la pérdida de su hermano, perdida que le resulta innombrable y dice : Mi hermano es todo lo que quieran, el criminal, el que quiso incendiar, arrasar los muros de la patria y llevarse sus compatriotas como esclavos, el que condujo los enemigos alrededor del territorio de la ciudad, pero finalmente él es el que es, y porque es lo que es y no hay nadie más que él pueda serlo, por esto en virtud de esto,es que avanzo hacia ese límite fatal Es así, como ante lo acontecido con Polineses, ella desesperada de dolor, esta en posición de imposibilidad para nombrarse, para aceptar la pérdida de su hermano pues, habla de él como si aún existiera cuando dice: él es el que es lo que nos deja leer que ella aun no acepta su muerte. Concomitante con ello, anuncia la fatalidad como límite ante lo ocurrido. En consecuencia se ubica en posición de defender el honor familiar; y anuncia su consigna de hacer valer la ley familiar hasta las últimas consecuencias nombrándolas como limite fatal Ahora bien, a partir de esa frase donde ella anuncia que avanza hacia ese límite aparentemente fatal, en tanto ella desafía las leyes de la ciudad de Tebas, asume la ley dictada por su padre
Edipo de defender el honor familiar y no permitir que el cuerpo de su hermano Polineses sea expuesto para ser comido por las aves de rapiña, como lo enuncia la ley de la ciudad de Tebas.En su lugar, decide darle una digna sepultura así ello implique desafiar las leyes de la ciudad dictadas por su gobernante Creonte. Esta posición de Antígona puede ser leída como el paso que ella da a manera de trámite del duelo de renuncia a la creencias en las leyes de la ciudad, a los dioses mismos; y así pasa de la demanda a ese ser querido perdido, a la posición simbólica marcada por Edipo pues al ella decidir asumir la ley de su padre Edipo la cual expresa en la frase; mantener el honor familiar,es a partir de ahí que ella consciente el paso a lo simbólico, al deseo que le permite en el plano imaginario del falo simbólico; tramitar la pérdida de su hermano a partir del deseo; el falo en su dimensión imaginaria. De esta manera se juega la acepción misma de la ley en tanto de lo que se trata para ella no es de la ley de la ciudad, sino de la otra ley; la ley familiar que se refiere a mantener el honor (Lacan sem 6) A partir de esta posición frente a lo acontecido, hay un movimiento en Antígona que marcará de otra forma el significado de la tragedia; hemos descrito en un comienzo que la joven actuaba en conformidad con el até.mandato paterno de proteger el honor familiar bajo la ley divina, ella guiada y protegida por los dioses. De allí se precipita un segundo momento: manifiesto en el pasaje en el cual Creonte le reclama por su acto que esta por fuera de las leyes de la ciudad y nombra el acto de Antígona de dar sepultura a su hermano, como acto de desobediencia. A ello responde Antígona; Hades desea leyes iguales - Quien sabe si allá abajo estas cosas son las piadosas - De quién es la acción, Hades y los dioses de abajo son testigos.yo no amo uno de los míos, si solo de palabra ama (Sófocles, 2004, p. 69). En este momento Antígona da cuenta de su soledad, de ese relámpago; momento de duda, la ley dictada por Creonte, la creencia que viene de los dioses, incluso el amor en ella misma. Así abandona toda creencia, destituye todo mandato para su acto, cuestiona la ley de la ciudad y la credibilidad de los dioses, ya que no solo pone en duda las leyes dictadas por Creonte, tampoco está segura de lo que dirían los dioses frente a lo que haga Creonte o ella misma. Es allí donde se nos revela el tejido de su soledad en el acto; Ella asume su vacío, su soledad, las consecuencias de su acto. Ella misma dice, que todo lo ha hecho ella sola; y en consecuencia ella elige morir. Es aquí donde se introduce la segunda muerte: mi alma hace rato que ha muerto por estar prestando ayuda a los muertos (Sófocles, 1992, p. 68,69) Antígona a su muerte desnuda de todo mandato que viene del otro, deja como legado de deseo; haber hecho valer la ley familiar, el honor por encima de las leyes de la ciudad, y nos muestra como la ley de la ciudad no es la única opción para el sujeto sino, que puede haber otra ley, la ley del deseo y así el até equivalente a defender el honor familiar, aparece como elección que rompe con la ley de la ciudad y mantiene la vía a la subjetividad que se puede pensar en un primer momento como el lugar del fantasma, a partir del cual Antígona hace su trayecto hasta hacer valer su deseo en relación a la muerte de su hermano, y el honor familiar el cual podríamos formular, como el falo que recubre el fantasma a través del cual se tramita la perdida. A este respecto Lacan en el seminario del deseo y su interpretación nos dice:.el sujeto ha de hacer el duelo por el falo De acuerdo a este planteamiento se podría pensar el fantasma de esta mujer de la siguiente manera; Antígona sujeto dividido $, el fantasma, lugar del rombo <> seria el ate; defender el honor familiar mediante el acto de dar sepultura a su hermano Polineses, acto por fuera de la ley de la ciudad, ello deviene en el lugar de la pérdida a manera de velo:
$<>a Así Antígona de una forma valiente, en un primer momento recubre su perdida, desafía la ley de la ciudad y en medio de su dolor, logra saber algo de ella desde su soledad con la consciencia de haber sido abandonada por los dioses, pone en duda incluso su decisión de defender el até, incluso sus propias creencias al consentir el deseo inmerso en la ley paterna. En un segundo momento abandona toda creencia y es consciente de su soledad pone en duda incluso la existencia de los dioses de su propia decisión y la de Creonte, así da cuenta de la segunda muerte en tanto logra nombrar en forma diferente esa derrota fundamental y asume las consecuencias de su acto eligiendo la muerte como camino. Al respecto este momento es nombrado por Allouch como relámpago y plantea: huella que aparece en acto de olvido, de desprendimiento. Se trata de una mente liberada de su propia obsesión mediante el ejercicio de una suspensión de toda veleidad de pensar estrictamente por sí misma y con toda consciencia: No pienso demasiado, soy aquel que deja que llegue la idea por sí misma, se encuentra dividido como agente de la relajación: Ese lugar extraño sino, extranjero abierto a la alteridad y de donde surge la idea inesperada. J Alloush (la segunda muerte) pg. 12 sept 2009. Sol Beatriz Botero. Psicoanalista Mayo 7 2017 Bibliografía J. Allousch : la injerencia divina libro 1, La segunda muerte. S. Freud: Obras completas. j. Lacan: seminario la angustia, El deseo y su interpretación. Sófocles: Edipo en Colono, Antígona. Revista electrónica de mitología griega.
Sol Beatriz Botero G Medellin Abril 1 2017.