Una Mirada a la Educación: Resultados del Programa Mundial de Indicadores WEI 2004 Abril de 2005

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1 Una Mirada a la Educación: Resultados del Programa Mundial de Indicadores WEI 2004 Abril de 2005 Departamento de Estudios y Desarrollo División de Planificación y Presupuesto

2 Departamento de Estudios y Desarrollo Una Mirada a la Educación: Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 Este documento ha sido elaborado por el Departamento de Estudios y Desarrollo de la División de Planificación y Presupuesto del Ministerio de Educación. El documento fue desarrollado por los profesionales Vivian Heyl y César Muñoz de dicho Departamento. Ministerio de Educación República de Chile Alameda 1371, Santiago Abril

3 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 INDICE PRINCIPALES RESULTADOS...5 INTRODUCCION...7 RESULTADOS DE LA EDUCACIÓN...9 Porcentaje de la población por tramo de edad... 9 Población con al menos educación secundaria alta Población con educación terciaria INVERSIÓN FINANCIERA Y EN RECURSOS HUMANOS...14 Gasto por alumno Gasto en educación primaria Gasto en educación secundaria Gasto en educación terciaria Gasto en educación por alumno en relación al PIB per cápita Gasto en educación como porcentaje del PIB Distribución del gasto, según fuente y por nivel educativo Gasto público en educación como porcentaje del gasto público total ACCESO A LA EDUCACION, PARTICIPACION Y PROGRESO...25 Esperanza escolar Cobertura Educación Pre-primaria Educación primaria y secundaria Tasa de entrada a educación terciaria, según edad AMBIENTE DE APRENDIZAJE Y ORGANIZACION EN LAS ESCUELAS...29 Tamaño de curso Relación alumno profesor Salarios docentes

4 Departamento de Estudios y Desarrollo Figura 1: Cambio demográfico estimado para la población de 5-14 años, Figura 3: Porcentaje de población con al menos secundaria alta, según tramo de edad...11 Figura 4: Porcentaje de la población con educación terciaria tipo A, según tramo de edad...13 Figura 5: Gasto anual por alumno en educación primaria, en dólares PPA...15 Figura 6: Gasto anual por alumno en educación secundaria, en dólares PPA...16 Figura 7: Gasto anual por alumno en educación terciaria, en dólares PPA...17 Figura 8: Gasto en educación por alumno como % del PIB per cápita, por nivel educativo...18 Figura 9: Gasto en educación como porcentaje del PIB, según fuente...20 Figura 10: Distribución del gasto por fuente de financiamiento pre-primaria...22 Figura 11: Distribución del gasto por fuente de financiamiento primaria-secundaria...22 Figura 12: Distribución del gasto por fuente de financiamiento terciaria...23 Figura 13: Gasto público en educación como % del gasto público total, según nivel educativo...24 Figura 14: Esperanza Escolar...25 Figura 15: Cobertura, según tramos de edad...27 Figura 16: Tasa de entrada a educación terciaria...28 Figura 17: Tamaño de curso, según nivel educativo...30 Figura 18: Relación alumno profesor, según nivel educativo...32 Figura 19: Salarios docentes primaria, en dólares PPA...34 Figura 20: Salarios docentes secundaria, en dólares PPA

5 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 PRINCIPALES RESULTADOS 1. De acuerdo a las proyecciones de crecimiento de la población en Chile, para el periodo comprendido entre los años 2002 y 2012, para el tramo de edad de 5-14 años, se observa una pequeña disminución (alrededor de un 3%) y para el tramo de años, un aumento de cerca de 9%, lo que indica la presión que podría enfrentar el sistema escolar durante ese período En relación a los niveles de escolaridad alcanzados por la población adulta (45 54 años), se advierte que en Chile el porcentaje de la población con al menos secundaria alta 2 (42%) es menor que para el promedio de los países OCDE (61%), pero más alto que para los países de América Latina. Sin embargo, se registran avances importantes, ya que en la generación más joven (25 a 34 años) un 60% ha logrado ese nivel educativo. 3. Chile sigue los patrones de gasto de la mayoría de los países: mayores gastos en los niveles educacionales superiores (secundaria y terciaria). En efecto, el gasto por alumno es de 1.766, 2.110, 2.085, y dólares PPA en educación pre-primaria, primaria, secundaria y terciaria, respectivamente. Aunque Chile registra valores altos de gasto por alumno, en relación a los países WEI, está lejos del promedio OCDE, que llega a 4.490, 4.819, y dólares PPA, en dichos niveles, respectivamente. 4. En Chile, el gasto total en educación relación al PIB es de 7,5%, por sobre el promedio de los países OCDE, que muestran un valor de 6,2% en este indicador. Esto refleja el interés e importancia de la inversión en educación en Chile. Lo mismo ocurre en Argentina (6,2%), Malasia (7,2%) y Paraguay (6,6%). Los otros países WEI registran un gasto total en educación en relación al PIB inferior al promedio OCDE: Brasil con un 4,1%, Federación Rusa un 3,0%, Perú un 4,2% y Uruguay un 3,4%. 5. Se advierte que, en general, los países participantes del Programa Mundial de Indicadores WEI, destinan a educación una fracción mayor del gasto público total que los países de la OCDE (12,7% en promedio). Destacan los casos de Perú, Malasia y Chile, que registran los valores más altos de gasto en educación en relación al gasto público total dentro de los países WEI (23,5%, 20,0% y 18,7%, respectivamente). En los países OCDE, México alcanza un 24,3% y le sigue Corea (17,7%) y Estados Unidos (17,1%). 6. En Chile, la cobertura del sistema educacional, para el tramo de edad entre 5 y 14 años, se encuentra cerca del promedio de la OCDE, ya que aproximadamente el 92% de los niños está en el sistema educativo comparado con el 99% de la OCDE. Entre los 15 y 19 años, las tasas de participación tanto en Chile como en los países OCDE caen a 68% y 79%, respectivamente. Lo mismo ocurre en los otros países del WEI, es decir, para el tramo de 5 a 14 años, la mayoría de los 1 Proyecciones de población a partir de la base de las Naciones Unidas y el período es desde el 2002, ya que los indicadores considerados son para ese año. 2 En el caso de Chile corresponde a 4º medio. 5

6 Departamento de Estudios y Desarrollo países registran altas tasas de participación (por sobre el 80%) y para el tramo de 15 a 19 años, están todos bajo el promedio OCDE. 7. Respecto al tamaño de curso en primaria, Chile presenta un valor superior al promedio de la OCDE (de 33 y 22 alumnos por curso, respectivamente). Dentro de los países OCDE, el que tiene un mayor valor es Corea, con 36 alumnos por curso y para los países WEI, Malasia presenta un número similar a Chile. 8. En cuanto al número de alumnos por profesor, Chile tiene un valor similar para primaria y secundaria, e igual al número de alumnos por curso. El valor promedio para la OCDE es de 17 y 14 alumnos por profesor, para los niveles de primaria y secundaria, respectivamente. 9. En educación primaria, el salario inicial docente anual con capacitación mínima, en Chile, es de alrededor de dólares PPA, el más alto de los países WEI considerados. Después de 15 años de experiencia, el salario en Chile es cerca de un 17% mayor que al inicio, y al momento de finalizar la carrera docente, este llega a ser un 20% más. En el caso de la OCDE, el salario al iniciar la carrera es el doble ( dólares PPA) al de Chile. Sin embargo, después de 15 años de experiencia, en los países OCDE, el salario es cerca de 37% superior, y al finalizar la carrera, el salario de término, es cerca de 65% mayor que el salario inicial. En el nivel de secundaria la situación en Chile es similar en cuanto a las diferencias según experiencia, y entre Chile y el promedio OCDE. 6

7 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 INTRODUCCION Este documento presenta los resultados más importantes de la publicación Education at a Glance, OECD , la cual analiza la situación de la educación desde una perspectiva internacional. Se presenta un conjunto amplio de indicadores comparables, que reflejan el consenso entre expertos, de cómo medir el estado de la educación, desde una perspectiva internacional. Los indicadores que se presentan proveen información sobre: - Resultados de la educación - Recursos humanos y financieros - Acceso, participación y progreso - Ambiente de aprendizaje y organización en las escuelas Si bien, esta publicación tiene como foco principal de atención lo que ocurre en los países de la OCDE 4, también considera a aquellos países que participan en el Programa Mundial de Indicadores de la Educación 5. Este programa, al igual que lo realizado por la OCDE para sus países miembros, desarrolla un conjunto de indicadores comparables a nivel internacional que permiten tener una visión global del funcionamiento de los sistemas educacionales, considerando tanto insumos como resultados de dichos sistemas. Chile participa desde su inicio en 1997, lo que le permite contar con herramientas para observar el sistema educacional chileno en relación a otros países. Junto a Chile participan países de América Latina: Argentina, Brasil, Paraguay, Perú y Uruguay, y otros países del resto del mundo: China, Egipto, India, Indonesia, Jamaica, Jordania, Malasia, Filipinas, Federación Rusa, Sri Lanka, Tailandia, Túnez y Zimbabwe. En el Informe Nacional que se elabora para el país, se presentan y analizan diversos indicadores para Chile y su comparación con otros países que participan en el Programa WEI y algunos de la OCDE. Se selecciona una muestra de países, tanto de la OCDE como del WEI, que son relevantes para el país, en términos de comparación internacional. Los países que se consideran son: Argentina, Brasil, China, Federación Rusa, Malasia, Paraguay, Perú y Uruguay (del WEI); y Canadá, Corea, España, Estados Unidos, Finlandia y México (de la OCDE). La información que se muestra en este documento, para los países que participan en el Programa Mundial de Indicadores de la Educación, corresponde al año 2001, salvo para Chile que es del año 3 Organization for Economic Co-operation and Development. 4 En español: Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico y los países miembros son: Australia, Austria, Bélgica, Canadá, República Checa, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, Hungría, Islandia, Irlanda, Italia, Japón, Corea, Luxemburgo, México, Holanda, Nueva Zelanda, Noruega, Polonia, Portugal, República Eslovaca, España, Suecia, Suiza, Turquía, Reino Unido y Estados Unidos. 5 World Education Indicators Programme WEI. El Programa WEI, es un proyecto desarrollado conjuntamente por la OCDE y UNESCO, a través del IEU (Instituto de Estadísticas de la UNESCO), para países no OCDE. 7

8 Departamento de Estudios y Desarrollo 2002, al igual que para los países de la OCDE. En el caso de los indicadores de gasto la información para los países OCDE es del año

9 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 RESULTADOS DE LA EDUCACIÓN Porcentaje de la población por tramo de edad El tamaño de la población joven, en edad escolar, en relación a la población total influye tanto en la renovación de las calificaciones de la fuerza de trabajo como en la magnitud de los recursos y esfuerzo institucional que un país debe realizar en su sistema educacional. En el caso de Chile, es posible observar que en los tramos de edad vinculados a los niveles de educación primaria y secundaria (5-14 y años), el porcentaje de población es superior al promedio OCDE (de 18%). Dentro de los países de la OCDE se destaca México con un 32% de su población en este tramo etáreo, situación similar a la de los países WEI de la región. Chile tiene una proporción de población de 5-19 años, de un 28%, similar a la de Argentina y Brasil, de un 31%. Sin embargo, a partir de las proyecciones de crecimiento de la población hacia el año 2012, para los tramos de 5-14 años y años, en las figuras 1 y 2, se observa una tendencia a la baja en la proporción de jóvenes para el primer tramo etáreo, mientras que para el tramo de edad vinculado a educación secundaria, la tendencia indica un aumento en la proporción de jóvenes. 6 Figura 1: Cambio demográfico estimado para la población de 5-14 años, Promedio OECD = Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Argentina Brasil Chile China Federación Rusa Malasia Paraguay Perú Uruguay 6 Las proyecciones de población para el año 2012 son tomadas por la OCDE a partir de la base de población de las Naciones Unidas. 9

10 Departamento de Estudios y Desarrollo Figura 2: Cambio demográfico estimado para la población de años, = Promedio OECD Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Argentina Brasil Chile China Federación Rusa Malasia Paraguay Perú Uruguay 7 Población con al menos educación secundaria alta El aumento de la demanda por conocimientos, en los países con mayor nivel de desarrollo, lleva a que la educación secundaria alta sea el requisito mínimo para una entrada exitosa al mercado laboral. Dicho nivel educacional constituye la base tanto para un mayor aprendizaje y mejores oportunidades de capacitación, como para la entrada al mercado laboral. La tasa de graduación de secundaria alta refleja el resultado actual del sistema educativo. Si bien no permite determinar si los graduados efectivamente poseen las habilidades básicas y el conocimiento necesario para ingresar al mercado laboral, es posible considerarla como un indicador de logro del sistema educativo al mostrar los niveles de educación alcanzados por el país. Adicionalmente, comparar los niveles educacionales entre diferentes generaciones permite identificar su evolución en el tiempo, reflejando tanto la demanda del mercado del trabajo como los cambios en las políticas educativas del país. La comparación de los niveles de educación alcanzados por una generación mayor (45-54 años) y otra más joven (25-34 años), muestra el nivel de progreso alcanzado. 7 En Chile, la educación secundaria alta, de acuerdo a la Clasificación Internacional CINE 97, corresponde a educación media. 10

11 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 Figura 3: Porcentaje de población con al menos secundaria alta, según tramo de edad % años años Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Brasil Chile Malasia Paraguay Perú Uruguay La figura 3 muestra el perfil educativo de los 14 países seleccionados, más el promedio de la OCDE, para la población adulta, entre 45 a 54 años, comparada con el tramo de población más joven, entre 25 y 34 años. La distancia entre ambos puntos indica la brecha (o progreso) entre el tramo más joven y el tramo de mayor edad. En promedio, para los países OCDE, el 61% de la población entre 45 y 54 años logra al menos secundaria alta, mientras que para la generación más joven (25 34 años) este porcentaje llega a un 75%. Sin embargo, casos como el de Corea y Malasia, cuya proporción de personas entre 25 y 34 años, que alcanza al menos secundaria alta (95% y 58%, respectivamente) es cerca del doble del porcentaje para el grupo de entre 45 a 54 años (51% y 24% respectivamente), contrastan con países como Estados Unidos y Canadá, para los que la brecha entre tramos etáreos es considerablemente pequeña, presentando niveles relativos altos. Efectivamente, Estados Unidos es el país que tiene un mayor porcentaje de población entre 45 y 54 años que ha terminado al menos la educación secundaria (89%), 10 veces más que México (9%), país con el menor porcentaje de población con al menos dicho nivel educacional. Es decir, mientras en EEUU cerca de 9 de cada 10 personas ha completado al menos secundaria, en México 1 de cada 10 ha alcanzado este nivel educativo. Por otra parte, Chile se encuentra bajo el promedio OCDE, llegando a tener el 47% de la población con al menos secundaria. Sin embargo, Chile presenta una situación más favorable cuando se 11

12 Departamento de Estudios y Desarrollo compara con el resto de los países de América Latina, en particular en relación con México, Paraguay y Brasil, para los distintos tramos etáreos. Chile, que logra mejorar el perfil educativo de la generación más joven, mantiene su posición privilegiada en relación a los otros países de la región, pero sigue por debajo del promedio de la OCDE. Para el tramo etáreo de 25 a 34 años, Chile llega a tener cerca del 61% de la población con al menos secundaria alta, es decir, 6 de cada 10 personas logra este nivel educacional, 2 más que para el grupo de 45 y 54 años. 8 Población con educación terciaria La creciente demanda por conocimientos más especializados del mercado laboral, el aumento en el desempleo durante los últimos años, y las mayores expectativas de los individuos y la sociedad, influyen en la proporción de gente joven que obtiene educación terciaria, lo que significa un incremento general en el stock de conocimientos en la población adulta. Las tasas de graduación de educación terciaria son un indicador de la producción actual de conocimiento avanzado del sistema educativo de cada país. Aquellos países con altas tasas de graduación a nivel terciario tienen más probabilidades de desarrollar o mantener una fuerza de trabajo altamente calificada. Entre los países de la OCDE, sólo el 14% de la población entre 45 y 54 años tiene educación terciaria tipo A, mientras que este porcentaje llega a 19% para la población entre 25 y 34 años. En algunos países, como Corea y España, por ejemplo, este aumento es significativo, pasando de un 11% y 13% de la población entre 45 y 54 años, a un 26% y 25% de la población de 25 y 34 años de edad, respectivamente. En este punto cabe señalar que Chile sobresale en comparación con algunos países del Programa WEI, con un porcentaje de población entre 25 y 34 años que termina educación terciaria tipo A de 15%, pero que aún está por debajo del promedio OCDE. Al comparar ambos tramos de edad, el caso de Malasia resulta destacable, ya que es el país WEI con un mayor incremento en el porcentaje de población con educación terciaria tipo A (ver figura 4). Sin embargo, aún persiste una marcada distancia entre los países OCDE (con excepción de México) y el resto de los países. 8 La educación terciaria corresponde a educación superior (Universidades, Institutos Profesionales y Centros de Formación Técnica). Los programas de educación terciaria tipo A, son programas principalmente basados en teoría y diseñados para proveer conocimientos que permiten continuar en programas de investigación avanzada y profesiones con altos requerimientos de conocimiento. Los programas de educación terciaria tipo B tienen un carácter más técnico, están más orientados al trabajo y conducen directamente al mercado laboral. 12

13 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 Figura 4: Porcentaje de la población con educación terciaria tipo A, según tramo de edad % años años Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Brasil Chile Malasia Paraguay Perú 13

14 Departamento de Estudios y Desarrollo INVERSIÓN FINANCIERA Y EN RECURSOS HUMANOS Un sistema educativo que funcione con efectividad requiere de una combinación de personal capacitado, infraestructura adecuada y estudiantes motivados por aprender. Por ello, la pregunta de si los recursos destinados a educación producen retornos adecuados a la inversión realizada ocupa un lugar predominante en el debate. Si bien el volumen óptimo de recursos necesarios para preparar a cada estudiante para la vida y el trabajo, en las sociedades actuales, es difícil de medir, las comparaciones internacionales sobre gasto en educación por alumno, pueden proporcionar un punto inicial para evaluar la efectividad de los distintos modelos de educación provistos. 9 Gasto por alumno La comparación de la distribución del gasto por alumno entre los distintos niveles educacionales constituye tanto una medida del énfasis relativo puesto en cada uno de ellos, como de los costos relativos de proveer educación para esos niveles. Por ejemplo, algunos países de la OCDE privilegian un mayor acceso a niveles de educación más altos, mientras otros, invierten en expandir la educación para los niños más pequeños (entre 3 y 4 años). En general, para los países considerados se observan patrones de gasto similares. Entre éstos, los países de la OCDE y los que participan en el Proyecto WEI, presentan mayores gastos en los niveles educacionales superiores, es decir, en secundaria y terciaria. Este patrón de gasto se puede entender mirando los principales características del gasto, particularmente la ubicación y modo en que se provee el servicio educativo. La mayor parte de los servicios educativos aún se lleva a cabo dentro de un contexto tradicional con una organización, currículo, estilos de enseñanza y administración, generalmente similares. Si bien, en todos los países, el gasto por alumno aumenta a mayor nivel educativo, desde primaria a terciaria, al comparar entre países, se observan montos distintos. En secundaria, el gasto por alumno en los países OCDE es en promedio 1,4 veces el gasto en primaria; en los países WEI considerados, se registran mayores diferencias, desde ser prácticamente equivalentes en Brasil, Chile y Uruguay, hasta cerca de 1,7 veces, en Malasia y Paraguay. Asimismo, los países OCDE gastan, en promedio, 2,6 veces en educación terciaria lo que gastan en primaria. En efecto, mientras Corea y España sólo gastan cerca de 1,8 veces en educación terciaria de lo que gastan en educación primaria, México y Estados Unidos gastan hasta 3,2 y 2,9 veces, respectivamente. En los países WEI, en cambio, se registran diferencias aún mayores. Mientras Uruguay gasta en educación terciaria cerca de 1,8 veces lo que se gasta en primaria, en Perú llega a 9 Las comparaciones están basadas en PPA (Paridad del Poder Adquisitivo). Este método refleja el poder adquisitivo relativo de las monedas de diferentes países respecto a los mismos tipos de bienes y servicios. Por lo tanto, se utilizan dólares PPA como una medida estandarizada que permite hacer mejores comparaciones internacionales. 14

15 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 ser casi 10 veces más. En Chile, esta relación entre el gasto en educación terciaria y primaria, alcanza a 3,3 veces Gasto en educación primaria En los países OCDE, el gasto anual promedio por alumno en educación primaria es de dólares PPA, con valores que van desde dólares en México a dólares PPA en Estados Unidos. Sin embargo, el grupo de países del Programa WEI, en cambio, presenta niveles de gasto muy inferiores al promedio OCDE en primaria, siendo Chile el que más invierte en este nivel con dólares PPA, lo que equivale, por ejemplo, a 4,9 veces y 2,5 veces lo que gasta Perú y Brasil respectivamente (ver figura 5). Figura 5: Gasto anual por alumno en educación primaria, en dólares PPA Dólares PPA 8,000 Primaria 6,000 4,000 Promedio OCDE 2,000 0 Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Argentina Brasil Chile Malasia Paraguay Perú Uruguay 10 Ver cuadro N 4 en anexo. 11 En Chile, la educación primaria, de acuerdo a la Clasificación Internacional CINE 97, corresponde a los grados 1º a 6º de educación básica. 15

16 Departamento de Estudios y Desarrollo 12 Gasto en educación secundaria En educación secundaria se observa que el promedio OCDE llega a dólares PPA. Sin embargo, Estados Unidos, por ejemplo, alcanza casi dólares PPA de gasto por alumno, cinco veces más de lo que gasta México. En secundaria, al igual que en primaria, los países que participan en el Programa WEI tienen un gasto por alumno inferior al promedio OCDE, variando por ejemplo, desde 534 dólares PPA en Perú a dólares PPA en Argentina. En el caso de Chile, el gasto promedio de los países de la OCDE es 3 veces de lo que gasta Chile en secundaria (2.085 dólares PPA). Por otra parte, con la excepción de Argentina, Chile supera a los países WEI de la región. (Ver Figura 6). Figura 6: Gasto anual por alumno en educación secundaria, en dólares PPA Secundaria Dólares PPA 12,000 10,000 8,000 6,000 4,000 2,000 0 Promedio OCDE Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Argentina Brasil Chile Malasia Paraguay Perú Uruguay Gasto en educación terciaria Al analizar el nivel de educación terciaria, se observa que en los países OCDE, el gasto promedio anual por alumno, en dicho nivel educacional, es de dólares PPA, con valores que van desde dólares en México a dólares PPA en EEUU. 12 En Chile, la educación secundaria, de acuerdo a la Clasificación Internacional CINE 97, va desde 7º de educación básica a 4º de educación media. 16

17 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 Sin embargo, dentro de los países WEI considerados, sólo Malasia, con un gasto promedio de dólares PPA se acerca al gasto promedio de la OCDE, lo que constituye una excepción a lo que ocurre con el resto de los países WEI. Por una parte, el gasto promedio OCDE es casi el doble de lo que se gasta en Chile (con un gasto por alumno de dólares PPA), y por otra, triplica el gasto por alumno de países como Paraguay, Perú y Argentina (con 4.030, y dólares PPA respectivamente). (Ver figura 7). Figura 7: Gasto anual por alumno en educación terciaria, en dólares PPA Terciaria Dólares PPA 25,000 20,000 15,000 10,000 Promedio OCDE 5,000 0 Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Argentina Chile Malasia Paraguay Perú Uruguay Se advierte entonces, que los patrones de gasto para los distintos niveles educacionales tienden a mostrar diferencias similares entre países. Del mismo modo, al comparar educación primaria y secundaria, los niveles de gasto al interior de cada país tienden a mostrar leves diferencias. Sin embargo, en educación terciaria la situación tiende a ser distinta, donde la mayoría de los países presenta niveles de gasto por alumno sustantivamente mayores a los observados en el resto de los niveles educacionales. Gasto en educación por alumno en relación al PIB per cápita El gasto en educación por alumno en relación al PIB per cápita, es una medida que toma en cuenta la riqueza relativa de los países, y que puede interpretarse como la relación entre los recursos destinados a los alumnos en relación a la disponibilidad por habitante del país. Es así como países con distintos niveles de ingreso per cápita pueden presentar distribuciones de inversión por nivel educacional similares. 17

18 Departamento de Estudios y Desarrollo En los niveles de educación más altos (terciaria por ejemplo), este indicador tiende a estar afectado por una combinación entre ingreso nacional, gasto y tasas de cobertura. Es decir, en niveles superiores de educación, los países pueden estar destinando más recursos a una población de alumnos relativamente menor. En la figura 8, se observa esta relación. Para la OCDE en conjunto, el gasto en educación por alumno en relación al PIB per cápita es de un 17% en pre-primaria, en primaria corresponde a un 20%, en secundaria a un 26% y finalmente, en terciaria a un 42%. Del mismo modo, se presentan países con niveles de PIB per cápita distintos como Paraguay, Reino Unido y Finlandia, los que muestran relaciones entre gasto por alumno y PIB per capita similares en los niveles de educación primaria y secundaria Figura 8: Gasto en educación por alumno como % del PIB per cápita, por nivel educativo Parvularia Primaria Secundaria Terciaria Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Brasil Chile Malasia Paraguay Perú Uruguay En general, se observa que para los niveles educacionales inferiores (pre-primaria, primaria y secundaria) no existen grandes diferencia entre países, lo que no ocurre con el nivel terciario. Efectivamente, para este nivel educacional mientras en los países ODCE existe una porcentaje que se mueve entre el 35% y 63%, en los países WEI hay casos como el de Uruguay con un 26% y Malasia con un 131%. Esto se puede explicar, por un lado, porque existen países que efectivamente tienen aún bajos niveles de gasto en alumnos que asisten a educación terciaria, y por otro lado, países que destinan importantes cantidades de recursos a bajas poblaciones de alumnos en este nivel de educación. 18

19 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 En el caso de Chile, es posible observar un patrón de gasto por alumno en relación al PIB per cápita similar al resto de los países WEI. Mientras en pre-primaria, primaria y secundaria los porcentajes se mueven entre un 18% y un 22%, en educación terciara se alcanza un 71%. Gasto en educación como porcentaje del PIB El gasto en educación puede considerarse como una inversión que ayuda a estimular el crecimiento económico, mejorar la productividad, contribuir al desarrollo personal y social, y reducir las desigualdades sociales. En relación con el Producto Interno Bruto, el gasto en educación muestra la prioridad que se le da a la educación en un país en términos de la distribución de recursos disponibles. La proporción total de recursos destinados a educación es una de las decisiones claves que los países más desarrollados hacen; es una decisión a nivel agregado hecha por los gobiernos, empresas, familias e individuos. Si los retornos privados y sociales de esta inversión son suficientemente grandes, hay incentivos para expandir la matrícula y la inversión. Para contestar la pregunta de cuánto gastar en educación, los gobiernos tienen que evaluar las demandas por mayor gasto en áreas como salarios docentes e infraestructura educacional. El gasto como porcentaje del PIB, puede proveer un punto de referencia para esto, ya que muestra el volumen del gasto en educación relativo al tamaño de la riqueza nacional. Este indicador considera el gasto en escuelas, universidades y otras instituciones públicas y privadas que están involucradas en la entrega de servicios educativos. Estos gastos no se limitan a considerar sólo gastos en enseñanza sino que también incluyen servicios auxiliares para los alumnos y sus familias (alimentación, por ejemplo). A nivel de educación terciaria, incluye además el gasto en investigación y desarrollo. Los países OCDE invierten una parte importante de los recursos nacionales en educación. Considerando el gasto público y privado, en promedio, los países de la OCDE gastan 6,2% del PIB en los distintos niveles educacionales; y países como Corea y EEUU, registran las inversiones más altas, con un 8,2% y 7,4% del PIB, respectivamente. En relación a los países del Programa WEI, este indicador presenta una variabilidad importante. Mientras Chile y Malasia alcanzan un porcentaje de gasto en educación en relación al PIB de 7,5% y 7,2%, respectivamente; Uruguay y Brasil solo presentan un porcentaje de 3,4% y 4,1% 13. Por otra parte, según lo que se observa en la figura 9, en todos los países la mayor parte del gasto en educación corresponde a gasto público. Sin embargo, en Chile y Corea el grado de participación del gasto privado es cercano a los niveles del gasto público, a diferencia de países como Malasia y Federación Rusa donde la participación privada es prácticamente nula. 13 Para el indicador desagregado por nivel educacional ver cuadro N 6 en anexo. 19

20 Departamento de Estudios y Desarrollo Figura 9: Gasto en educación como porcentaje del PIB, según fuente Publico Privado % Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Brasil Chile Federación Rusa Malasia Paraguay Perú Uruguay Distribución del gasto, según fuente y por nivel educativo Este indicador permite ilustrar la política de distribución de costos en educación en cada país, y entrega luces acerca de la influencia que el financiamiento público, como una herramienta de política en el sector, puede y efectivamente tiene sobre los resultados, a nivel del sistema educacional como un todo. Cabe agregar que en la medida que aumenta el número de actores que participan en una gama más amplia de programas educacionales, y que eligen entre más oportunidades dentro un mayor número de proveedores, los gobiernos se ven en la necesidad de formar nuevas alianzas para movilizar los recursos necesarios para financiar la educación. Por tanto, se diseñan nuevas políticas de modo de permitir que distintos actores participen más activamente y compartan los costos y beneficios más equitativamente. Como resultado, se observa que el financiamiento público de la educación provee solo parte de la inversión en educación, observándose un rol creciente del sector privado en el financiamiento de la educación. Las escuelas, universidades y otras instituciones educacionales aún son financiadas principalmente con recursos públicos, aunque hay un sustancial y creciente grado de financiamiento con recursos privados. En promedio, para los países OCDE, cerca del 87,8% del financiamiento de instituciones educacionales proviene directamente de fuentes públicas, mientras el restante 12,2% corresponde a privados. 20

21 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 Por otra parte, se plantea que la inversión en educación pre-primaria es clave para construir cimientos sólidos para el aprendizaje a lo largo de la vida y lograr un acceso equitativo a las oportunidades de enseñanza futura en la escuela. En educación pre-primaria, para los países OCDE, la participación privada en el total de gastos es muy variable, llegando a un promedio de 18,7% por ciento. Esta va desde un 4,3% en el Reino Unido, a 51,3% en Corea. Para los países WEI, por su parte, es posible observar el caso de Argentina donde la participación privada es prácticamente nula en la provisión de este nivel educativo, y Paraguay donde el gasto en educación pre-primaria es prácticamente financiado en su totalidad por fuentes privadas. (ver figura 10). A nivel de educación primaria, secundaria y post-secundaria (no terciaria), como puede observarse en la figura 11, predomina el financiamiento con recursos públicos. Así, en promedio los países OCDE reciben cerca del 93% de los recursos de fuentes públicas, aunque en algunos países existen niveles importantes de gasto privado, como Corea (23,8%), México y Reino Unido (ambos con un 12,8%). (Ver figura 11). En los países WEI, la participación privada también muestra variabilidad, si bien se dispone de menos información. Mientras en Chile y Perú, estos niveles educativos se financian en poco más de un 70% con recursos públicos, en Uruguay y Argentina, cerca del 90% del gasto proviene de fuentes públicas. En cuanto a educación terciaria, la proporción de gasto público, en promedio para los países OCDE, alcanza el 78,2%, variando desde un 15,9% en Corea, a cerca de 96% en Finlandia. En la mayoría de los países WEI presentados, la participación pública presenta distintas realidades. Desde un 99,5% (casi la totalidad) de financiamiento público en Uruguay, hasta el caso de Chile, donde un poco más del 80% del financiamiento del nivel terciario proviene de fuentes privadas. (Ver figura 12). 21

22 Departamento de Estudios y Desarrollo Figura 10: Distribución del gasto por fuente de financiamiento pre-primaria % Pre-primaria Público Privado Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Chile Malasia Paraguay Perú Uruguay Figura 11: Distribución del gasto por fuente de financiamiento primaria-secundaria Primaria - Secundaria - Postsecundaria no terciaria % Público Privado Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Chile Perú Uruguay 22

23 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 Figura 12: Distribución del gasto por fuente de financiamiento terciaria % Terciaria Público Privado Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Chile Paraguay Perú Uruguay Gasto público en educación como porcentaje del gasto público total La participación del Estado en la provisión de servicios educativos se explica por diferentes razones. Si el beneficio público de entregar un servicio específico resulta ser mayor que el beneficio privado, entonces el mercado por si sólo puede fracasar en la entrega de estos servicios adecuadamente. Resulta que la educación es una de las áreas en las cuales todos los gobiernos intervienen para financiar o para proveer los servicios. Como no hay garantía que los mercados ofrezcan un acceso equitativo a las oportunidades educacionales, el financiamiento público de los servicios educativos asegura que estos lleguen a todos los miembros de la sociedad. Adicionalmente, el gasto público en educación como porcentaje del gasto público total, indica el valor de la educación relativo al resto de inversión pública que se lleva a cabo en otras áreas como salud, seguridad social y defensa, entre otras. Se observa que en promedio, los países OCDE destinan un 12,7% del gasto público total a educación. Sin embargo, los valores para cada país varían desde un 11% en países como España y el Reino Unido, a un 24% en México. En la figura 13, se aprecia que varios países WEI destinan a educación una fracción mayor del gasto público total, que los países OCDE. Destacan los casos de Perú y Malasia, países que registran los valores más altos de gasto en educación en relación al gasto público total con 23,5% y 20,0%, 23

24 Departamento de Estudios y Desarrollo respectivamente. Chile, por su parte, se encuentra entre aquellos países que está por sobre el promedio de gasto de los países OCDE, alcanzando un valor de 18,7%. Figura 13: Gasto público en educación como % del gasto público total, según nivel educativo % Primaria y Secundaria Terciaria Otros Niveles Canadá Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Brasil Chile Federación Rusa Malasia Paraguay Perú Uruguay El gasto público por nivel de educación en relación al gasto público total, es distinto entre los países. Por ejemplo, en los países OCDE en promedio, cerca del 9% del gasto público total se destina a los niveles primaria, secundaria y post-secundaria, mientras que cerca del 3% va a educación terciaria. Es decir, el gasto en los primeros niveles educacionales es 3 veces el gasto en educación terciaria, lo que en gran parte refleja la proporción de alumnos que asisten a los niveles primaria, secundaria y postsecundaria en relación a los que asisten a educación terciaria. Sin embargo, esta magnitud varía al comparar los distintos países, tanto dentro de la OCDE como entre los países WEI. De este modo, hay países con una diferencia menor al doble en Canadá, Malasia y Finlandia, hasta países en que esta relación es más de 5 veces como en Corea, México y Chile. Esto último tiende a indicar la importancia de la participación de fondos privados en el financiamiento de la educación terciaria. 24

25 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 ACCESO A LA EDUCACION, PARTICIPACION Y PROGRESO Una población bien educada es clave para el desarrollo económico y social de un país, tanto en el presente como en el futuro. Las sociedades, por lo tanto, tienen interés en asegurar el acceso a una amplia variedad de oportunidades educacionales a niños y jóvenes. Así, los programas de educación pre-primaria preparan a los niños para la educación primaria, ayudando a combatir las desventajas lingüísticas y sociales, y proveyendo oportunidades para mejorar y complementar las experiencias educacionales del hogar. La educación primaria y secundaria, por su parte, representan la base para un amplio rango de competencias y preparan a los jóvenes para un aprendizaje a lo largo de la vida y ser miembros productivos de la sociedad. Finalmente, la educación terciaria provee un rango de opciones para adquirir conocimientos y habilidades avanzadas, ya sea inmediatamente después del sistema escolar o posteriormente. Esperanza escolar Una forma de mirar la participación en educación, es estimar el número de años que un niño(a) de 5 años espera estar en el sistema educacional durante su vida, dadas las tasas de cobertura existentes. Luego, la esperanza escolar se estima tomando la suma de las coberturas por edad simple, comenzando a los 5 años. Figura 14: Esperanza Escolar Años de escolaridad Promedio OCDE Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Argentina Brasil Chile China Federación Rusa Paraguay Perú Uruguay 25

26 Departamento de Estudios y Desarrollo En los países OCDE, un niño(a) puede esperar estar en el sistema educacional, en promedio, alrededor de 17 años (figura 14). Sin embargo, esta situación varía, por un lado, se tienen países como el Reino Unido y Finlandia en que la esperanza escolar alcanza los 20 años, y por otro lado, México donde ésta es cerca de 13 años. Gran parte de la variación en la esperanza escolar entre estos países se debe a diferencias en las tasas de cobertura en secundaria alta. Los países WEI, por su parte, presentan una esperanza escolar menor al promedio de la OCDE, con la excepción de Argentina que bordea el promedio OCDE. Chile, con un valor cercano a los 15 años, está muy cerca del promedio de países OCDE y supera al conjunto de países WEI 14. Cobertura Educación Pre-primaria La esperanza escolar se puede complementar con las tasas de cobertura, debido a que una alta esperanza escolar no necesariamente implica que todos los jóvenes participan en educación por un tiempo largo. Como se puede apreciar en la figura 15, a nivel del promedio de los países OCDE, cerca del 68% de los niños de 4 años o menos en relación a la población de esa edad, está matriculado en algún programa escolar. Estas tasas van desde cerca de 20% en Corea, a más de 80% en España 15 y el Reino Unido. Los países WEI, por su parte, muestran tasas de matrícula en este nivel por debajo del promedio OCDE. El rango va desde 16% en Malasia hasta cerca de un 58% en Perú. Chile presenta una tasa de 28% en este segmento de la población. Educación primaria y secundaria Son varios los factores que influyen en la decisión de permanecer en el sistema escolar más allá de la educación obligatoria, dentro de los cuales se incluye el riesgo de desempleo y otras formas de exclusión de gente joven con educación insuficiente. En muchos países OCDE, la transición desde el sistema educacional al mercado laboral ha llegado a ser un proceso más largo y complejo, que provee oportunidades o la obligación a los estudiantes de combinar el aprendizaje y el trabajo para desarrollar conocimientos más apropiados para el mercado laboral. La educación obligatoria en los países OCDE termina entre los 14 años (Corea) y 18 años (Bélgica y Alemania), y en la mayoría de los países a la edad de 15 o 16 años. Mientras las tasas de participación en la mayoría de los países OCDE son altas hasta el fin de la educación obligatoria (99% entre 5 y 14 años, y 79% entre los 15 y 19 años), en países como México por ejemplo, éstas caen por debajo de 14 Para detalle por nivel educacional, ver cuadro N 9 en anexo 15 En el caso de España, existe una sobreestimación de estas tasas. 26

27 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 estos promedios (42% entre los 15 y 19 años), para el tramo de edad en el cual los jóvenes no están obligados a asistir a la escuela. En los países WEI, ocurre una situación similar, ya que entre los 5 y 14 años, cerca de la edad de graduación de la enseñanza obligatoria, la mayoría de los países registran tasas altas de participación (todos por sobre el 80%); mientras que entre los 15 y 19 años están todos por debajo del promedio OCDE, destacando Brasil con un 71% y Argentina con un 69%. En el caso de Chile, se registra un tasa de cobertura entre los 5 y 14 años de 92%, mientras que entre los 15 y los 19 años la cobertura alcanza un 68%. Figura 15: Cobertura, según tramos de edad 4 y menos Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Brasil Chile China Federación Rusa Malasia Paraguay Perú Uruguay Tasa de entrada a educación terciaria, según edad Altas tasas de entrada y participación en educación terciaria ayudan a asegurar el desarrollo y mantención de una población y fuerza de trabajo educada. La educación terciaria está asociada a un mejor acceso al empleo y a mayores ingresos. La tasa de entrada a la educación terciaria es un indicador parcial del grado en el cual la población está adquiriendo conocimientos de alto nivel son valorados por el mercado del trabajo en las sociedades del conocimiento. 27

28 Departamento de Estudios y Desarrollo A medida que los estudiantes se dan cuenta de los beneficios sociales y económicos de la educación terciaria, las tasas de entrada a educación terciaria, tanto general como técnico-profesional, aumentan. Se observa que un crecimiento continuo en la participación y una diversidad mayor de intereses y experiencias de la gente que aspira a estudiar en el nivel terciario, requerirá de una nueva forma en la oferta educativa. Las instituciones de educación terciaria, por ende, deberán hacer frente a una demanda creciente, expandiendo el número de cupos para alumnos y adaptando sus programas y enseñanza a las distintas necesidades de las nuevas generaciones de estudiantes. En la figura 16 se observa que en los países OCDE, en promedio, un 51% de los jóvenes del tramo etáreo relacionado con este nivel, ingresan a programas de educación terciaria tipo A, con Finlandia y Estados Unidos con tasas superiores al 60% y por otro lado, México con una tasa del 33%. En los países WEI considerados, se muestran tasas que van desde un 10% en China hasta tasas superiores al 60%, en Argentina y Federación Rusa. Chile, con un 47% de los jóvenes en edad de estudiar, matriculados en el nivel terciario, está cerca del promedio OCDE. Figura 16: Tasa de entrada a educación terciaria Terciaria General % Corea España Estados Unidos Finlandia México Reino Unido Promedio OECD Argentina Brasil Chile China Federación Rusa Uruguay En relación a los programas de educación terciaria técnico-profesional, la tasa de entrada es generalmente más baja que la entrada a los programas tipo A. Esto ocurre tanto en países OCDE, que alcanza como promedio cerca del 16%, como en los países WEI seleccionados, con tasas entre 16% y 37%. En este caso, Chile presenta una tasa de entrada neta a este nivel educacional de 17% Ver Cuadro N 12 en anexo. 28

29 Resultados del Programa Mundial de Indicadores - WEI 2004 AMBIENTE DE APRENDIZAJE Y ORGANIZACION EN LAS ESCUELAS Tamaño de curso El indicador de tamaño de curso es un indicador ampliamente debatido en los países OCDE. Por una parte, los cursos pequeños son valorados porque permiten a los alumnos recibir mayor atención individual de los docentes y reducir las desventajas de trabajar con muchos estudiantes. Además, los cursos pequeños pueden resultar un factor importante para los padres al momento de elegir un establecimiento educacional para sus hijos. Sin embargo, dada la magnitud de los costos por docentes, en el costo total de la educación, reducir el tamaño de cursos conduce a un abrupto aumento en los costos de la educación. El tamaño promedio de curso en educación primaria, para los países OCDE, es de 22 alumnos. Sin embargo, se observa que este valor varía entre países, y va desde 36 alumnos por curso en Corea a 21 alumnos en España y México (ver figura 17). Al comparar los promedios de alumnos por curso, entre la dependencia de los establecimientos, no se muestran diferencias importantes entre los países de la OCDE 17. Adicionalmente, al revisar lo que pasa entre el nivel de educación primaria y secundaria en los países de la OCDE, el número de alumnos por curso tiende en promedio a aumentar en 2 alumnos de un nivel a otro. En efecto, en secundaria baja, el tamaño de curso promedio es de 24 alumnos, con tasas que van desde 23 alumnos por curso en Estados Unidos hasta 37 alumnos en Corea. En algunos países, como México y España, el tamaño de curso entre primaria y secundaria baja, aumenta en promedio en 9 y 4 alumnos, respectivamente. Una situación similar se observa en el caso de los países WEI seleccionados. Mientras algunos países como la Federación Rusa, Perú y Paraguay tienen en primaria un tamaño de curso menor al promedio OCDE, otros países como Malasia y Chile registran tamaños de curso más altos. En el caso de Chile, con un promedio de 33 alumnos por curso, se observan diferencias considerables entre tipo de establecimientos, según su dependencia 18. Del mismo modo, al comparar el tamaño de curso en secundaria baja en relación a primaria, se observa un aumento para todos los países, si bien el promedio OCDE se mantiene en 24 alumnos por curso. En el caso de Chile, tanto en primaria como en secundaria baja, el promedio se mantiene en 33 alumnos por curso. En general, los países WEI registran valores por sobre o cercanos a 30 alumnos por curso, con la excepción de la Federación Rusa con una relación de 21 alumnos por curso. 17 Ver Cuadro N 13 en anexo. 18 Ver Cuadro N 13 en anexo 29

30 Departamento de Estudios y Desarrollo Figura 17: Tamaño de curso, según nivel educativo Primaria Promedio OCDE Corea España Estados Unidos México Brasil Chile Federación Rusa Malasia Paraguay Perú Secundaria Baja Promedio OCDE Corea España Estados Unidos México Brasil Chile Federación Rusa Malasia Paraguay Perú Uruguay 30