Universidad Central De Venezuela Facultad de Ciencias Escuela de Biología Departamento de Zoología Prof. Cristina Sanoja W. (Coordinadora). Semestre II-2013 PRÁCTICAS DE LABORATORIO - PARASITOLOGÍA GENERAL EXAMEN MICROSCÓPICO DE LA MATERIA FECAL Objetivos: Examen microscópico de la materia fecal. Reconocimiento de los elementos no parasitarios normales y anormales de origen vegetal y animal. La coprología es una ciencia que tiene por objeto el estudio macroscópico y microscópico de la materia fecal. Su importancia en el diagnóstico de enfermedades parasitarias se debe a que gran cantidad de helmintos y protozoarios se ubican en el tracto gastro-intestinal, ocasionando enfermedades cuyo diagnóstico se realiza comprobando la presencia en las heces de los agentes causales o de sus formas evolutivas (huevos, larvas o quistes). La materia fecal debe ser recogida en recipientes adecuados y limpios. Generalmente se utilizan pequeñas cajitas circulares de plástico. Si la recolección se hace sobre papel o cartón las heces pierden, por absorción de ese material, el agua normal proveniente del tracto intestinal. Las cajas deben ser rotuladas con el nombre del paciente (humano o animal), edad y fecha. Las heces deben estar exentas de orina, debido a que esta modifica su aspecto, consistencia y su reacción, así mismo altera ó destruye las formas vegetativas (móviles) de los protozoarios. La muestra no debe contaminarse con agua no corriente, que pueda contener protozoarios de vida libre. Las muestras de heces deben conservarse en los recipientes originalmente empleados en su recolección hasta el momento de su estudio. Es conveniente examinar las muestras inmediatamente después de ser recolectadas o bien en un tiempo no mayor de 6 horas, ya que las heces sufren un proceso de fermentación. Deben mantenerse a 4ºC sino son examinadas inmediatamente. El examen inmediato de la muestra es indispensable cuando se investiga trofozoitos de protozoarios ya que estos degeneran apreciablemente después de la defecación. Las muestras fecales recientes deben manipularse con mucho cuidado, ya que cada muestra representa una fuente potencial de material infeccioso (bacterias, virus y parásitos). ELEMENTOS EN EL EXAMEN MICROSCÓPICO El examen microscópico de la materia fecal, comprende el estudio de los elementos de origen parasitario, tales como trofozoitos y quistes de protozoarios intestinales, huevos y larvas de helmintos, así como el estudio de elementos normales y anormales no parasitarios de origen vegetal y animal. Es imprescindible el reconocimiento de los elementos normales no parasitarios, ya que son causa de errores frecuentes en observadores poco experimentados. En este sentido, los residuos alimenticios presentan grandes variaciones de forma y tamaño y tienen contornos irregulares, aún tratándose de partículas de una misma naturaleza. Esto no sucede con los elementos 1
de origen parasitario, los cuales presentan además estructuras nítidas y regulares en cuanto a su contenido y disposición, que pone de manifiesto una verdadera organización. ELEMENTOS NORMALES DE ORIGEN ANIMAL: son residuos alimenticios provenientes de fibras musculares, fibras de tejido conjuntivo y materias grasas. Fibras musculares: se observan como corpúsculos rectangulares cortos o alargados, de color amarillo o anaranjado. Estas fibras no digeridas se presentan bajo dos formas según su grado de digestión. Las de fibras con grado mas avanzado de descomposición se observan como fragmentos cortos, con ángulos redondeados y de coloración amarillenta. Las de menor grado se presentan como rectángulos alargados con ángulos bien delineados, presentando una doble estriación muy característica. Ambas fibras se tiñen de caoba con el lugol. Fibras de tejido conjuntivo: son más escasas en las heces. Se presentan como filamentos aislados o reunidos en haces entrecruzados o manojos intrincados. Materias grasas: podemos encontrar pequeños glóbulos de grasa neutra, que pueden ser confundidos con quistes de protozoarios. Son muy refringentes y se reconocen porque al elevar el tubo óptico del microscopio se rodean de un círculo negro. Estos glóbulos se tiñen de rojo con la solución alcohólica de Sudan II o con lacto-fenol. Cuando se presenta una cantidad anormal de glóbulos grasos no minerales en las heces, se piensa que puede existir una insuficiencia pancreática o biliar. ELEMENTOS NORMALES DE ORIGEN VEGETAL: en su mayoría, los detritos o residuos alimenticios de la materia fecal provienen de restos vegetales que pueden conducir a errores o falsos positivos en los exámenes coprológicos, al ser confundidos con huevos y larvas de helmintos y con quistes de protozoarios. Entre estos elementos se encuentran las féculas, la celulosa no digerible y los residuos de las frutas. 1. Féculas: en los exámenes coprológicos se reportan tres tipos diferentes de estructuras provenientes de los alimentos feculentos: Gránulos de almidón. Se presentan como corpúsculos de diferentes tamaños, de forma redondeada u ovoide, con estrías concéntricas muy características. Gránulos ovoides de 40 a 80 micras, con bordes ribeteados (festoneados) que presentan gran cantidad de alvéolos que contienen gránulos de almidón. Con gran frecuencia, estos gránulos son confundidos con huevos de helmintos, especialmente Ascaris y Necator. Al tratarlos con lugol adquieren una coloración oscura que varía entre rosado lila y violeta oscuro, debido al almidón intracelular. Su presencia anormal en las heces se debe por lo general a un transito intestinal acelerado. 2
Gránulos ovoides muy parecidos a los anteriores, que miden de 100 a 300 µm de diámetro diferenciándose en que no se tiñen con lugol. Estos residuos también provienen de las células de los feculentos y su abundancia y grado de digestión depende de la aceleración del transito intestinal. 2. Celulosa no digerible: podemos encontrar: Pelos vegetales: son elementos celulósicos alargados, que se caracterizan por poseer un canal en su centro que recorre el pelo de un extremo al otro y una base de implantación mas o menos visible. Son importantes ya que pueden ser confundidos con larvas de helmintos. Vasos en espiral: tienen forma de tráqueas o espiras, cerradas o abiertas en forma de resorte. Es posible observar separado uno de esos elementos circulares o anillados que forman los vasos en espiral, que visto de frente puede ser confundido con un quiste de amiba o un huevo de helminto. Estos vasos espirales o traqueidos provienen principalmente de las legumbres. Capas epidérmicas: son fácilmente reconocibles por su aspecto de mosaico, formadas por elementos rectangulares o poligonales. Aparecen frecuentemente en los exámenes de heces. 3. Residuos de frutas: entre los más importantes están los residuos de cambures y plátanos, que tienen aspecto de fragmentos de tenias o anillos de éstas. Se presentan como estructuras cintiformes formadas por elementos rectangulares a manera de anillos de color caoba. ELEMENTOS ANORMALES DE LAS HECES: pueden ser de origen parasitario, alimenticio, medicamentoso y de naturaleza intestinal. Los elementos anormales de origen parasitario provienen de dos grandes grupos de parásitos: los protozoarios y los helmintos, que revisaremos en prácticas posteriores. Entre los elementos de origen alimenticio podemos encontrar: pelos de animales, fragmentos de plumas de aves, fragmentos de conchas de moluscos, granos de polen, esporas de criptógamas (helechos, líquenes) y levaduras, entre otros. Por lo general, estas partículas entran al tubo digestivo accidentalmente con los alimentos. Las esporas de hongos también son frecuentes en las personas que gustan de los hongos comestibles. Las fibras vegetales o filamentos de raíces o cerdas de animales pueden simular larvas de helmintos. OTROS ELEMENTOS EN LAS HECES: 1. Glóbulos rojos o eritrocitos, que pueden indicar ulceración o problemas hemorrágicos. 2. Glóbulos blancos polimorfonucleares (PMNs) que pueden indicar inflamación, por ejemplo neutrófilos. Los eosinófilos, que por lo general indican la presencia de una respuesta inmune, que puede o no estar asociada con una infestación parasitaria. 3
3. Macrófagos, que pueden encontrarse presentes en infecciones bacterianas o parasitarias. 4. Hongos, como por ejemplo Candida spp. y otras levaduras. Los cristales también se pueden observar en las heces, de formas y naturaleza muy diversas. Los más frecuentes son: 1. Cristales de Charcot-Leyden: son cristales de fosfatos orgánicos, incoloros, hexagonales, con forma de aguja, muy refringentes y su tamaño varía entre 3 a 70 µm de largo. Se les encuentra frecuentemente en personas infectadas con Entamoeba histolytica. 2. Cristales de Oxalato de Calcio: se presentan como pequeños octaedros o prismas rectos. 3. Cristales de Fosfato Amónico Magnésico: so prismas alargados muy refringentes que semejan tapas de urnas. Pueden encontrarse aislados o agrupados. Resultan de productos elaborados en el intestino. 4. Cristales de colesterina: son cristales de colesterol, se presentan en forma de láminas romboidales incoloras, con los ángulos cortados irregularmente. 5. Cristales de hematina: se observan en forma de rectángulos más o menos alargados. TECNICA PARA REALIZAR EXAMEN DE HECES FRESCAS EXAMEN DIRECTO O EXAMEN SIMPLE: Consiste en examinar entre lámina y laminilla una pequeña porción de materia fecal previamente emulsionada con una gota de solución fisiológica (solución salina). Se debe evitar que la porción de materia fecal sea demasiado grande, ya que se obtendrán preparaciones muy espesas y poco translúcidas, inapropiadas para la correcta observación. Así mismo, no debe ser demasiado pequeña porque a una mayor dilución disminuyen las probabilidades de encontrar los elementos parasitarios. Procedimiento: 1. Colocar sobre el centro de una lámina portaobjetos bien limpia una gota de solución salina al 0,85% utilizando una pipeta Pasteur. 2. Tomar una pequeña porción de la muestra a examinar (2mg) empleando un palillo de dientes a manera de espátula y mezclar con la solución salina hasta lograr una suspensión homogénea. 3. Cubrir cuidadosamente con una laminilla cubreobjetos de 22x22 mm. Se debe tratar que no queden incluidas burbujas de aire entre lámina y laminilla. 4. Montar la preparación en el microscopio óptico y enfocar comenzando por el objetivo de menor aumento. Una vez enfocada la preparación debe ser revisada totalmente (aumento total 100x o 400x) y de forma ordenada. Los huevos de helmintos se observan muy bien a 100x. 4
5. Para examinar la muestra se procede de la siguiente manera: localizar uno de los ángulos de la preparación (superior izquierdo) y recorrer la lámina moviéndola en zigzag en el sentido como indican las flechas de la figura. enfoque inicial Fig. 1 Recorrido de la lámina en el microscopio óptico. Bibliografía consultada: Manual de Laboratorio en Parasitología. S.C. Schell. 1969 Editorial Academia. León, España Trabajos Prácticos de Parasitología. Manuel Gallardo. Facultad de Farmacia. UCV. Venezuela. Diagnóstico parasicológico. Manual de laboratorio clínico. Shore García-Ash. 1983. Editorial Médica Panamericana. Argentina. 5
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