Puesta al día Enfermedad de Alzheimer La Enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia en las personas mayores. Es una enfermedad neurodegenerativa, irreversible, que afecta progresivamente la memoria, las aptitudes del pensamiento y con el tiempo afecta la capacidad para llevar a cabo tareas sencillas que previamente se realizaban sin dificultad El 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial de la Enfermedad de Alzheimer. Esta fecha fue establecida por la OMS (Organización Mundial de la Salud) y la Federación Internacional de Alzheimer, con el objetivo de informar y concientizar a la población general sobre esta enfermedad que afecta a más de 35 millones de personas en el mundo. La Demencia, es un síndrome que se caracteriza por el deterioro progresivo y persistente de las funciones intelectuales, este deterioro incluye a la memoria, lenguaje, orientación, resolución de problemas. La Enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia en las personas mayores. Es una enfermedad neurodegenerativa, irreversible, que afecta progresivamente la la memoria, las aptitudes del pensamiento y con el tiempo afecta la capacidad para llevar a cabo tareas sencillas que previamente se realizaban sin dificultad. En este tipo de demencia se pierde el funcionamiento cognitivo, es decir, la capacidad de pensar, recordar, razonar, esto genera a mediano y largo plazo que se afecten las actividades de la vida cotidiana y la vida social, tanto de la persona que padece la enfermedad como de su familia.
Cuáles son los factores de riesgo para padecer la enfermedad? La edad es un factor de riesgo importante para el desarrollo de la misma. Se estima que esta enfermedad la padece el 10% de las personas mayores de 65 años, alcanzando cifras superiores al 30 % en mayores de 80 años. Cada vez hay más evidencia que el ejercicio físico regular, la alimentación saludable y el control de los factores de riesgo cardiovasculares (principalmente la hipertensión arterial, diabetes, tabaquismo) reducen el deterioro cognitivo y podrían reducir el riesgo de demencia Cuáles son los signos o síntomas tempranos de la Enfermedad de Alzheimer? El deterioro de la memoria reciente (olvidos) así como la dificultad para recordar el nombre de algunas cosas (anomia) son dos síntomas tempranos de la enfermedad, pero por sí solos no son suficientes para hacer el diagnóstico, debido a que ambos síntomas son frecuentes en otras circunstancias como por ejemplo el envejecimiento normal, sin ser esto sinónimo de Enfermedad de Alzheimer.
Cuándo debemos consultar al médico? Cuando una persona nota que ha comenzado a tener olvidos frecuentes, dificultad para recordar cosas de la vida cotidiana, debe consultar con su médico para que realice un interrogatorio minucioso y pueda evaluar la necesidad de realizar evaluaciones y test cognitivos y otros estudios que puedan acercar o alejar el diagnóstico de Alzheimer. Hay situaciones que no deben considerarse como normales, llamados de atención a veces a la persona misma que padece la enfermedad y otras veces a sus familiares y amigos. Estos síntomas no deben pasar desapercibidos y deben ser evaluados por un profesional, como ser : Desorientación en un lugar habitualmente conocido. Desorientación en el tiempo. Dificultad para reconocer a un familiar/amigo. Repetir varias veces la misma pregunta. Repetir varias veces un mismo relato. Tardar mas tiempo para completar tareas diarias normales. Cambios en el comportamiento y en el estado de ánimo. Cómo se diagnostica la Enfermedad de Alzehimer? La única forma de tener el diagnóstico con certeza de la enfermedad es con una biopsia de cerebro, técnica que no se realiza en una persona viva. Hoy en día hay varios métodos y herramientas que permiten determinar con bastante precisión si una persona puede tener la enfermedad. Para ello, los médicos suelen: Realizar una historia clínica detallada de los síntomas (tiempo de evolución, características, si tiene una evolución lenta o brusca, si los síntomas aparecieron progresivamente). Interrogar sobre los antecedentes de la persona, problemas de salud preexistentes. Realizar test y evaluaciones cognitivas que permiten evaluar la memoria, el razonamiento, la capacidad de resolver problemas, la capacidad de atención, habilidades del lenguaje. Realizar estudios de laboratorio como ser análisis de sangre y de orina para descartar otras enfermedades. Realizar estudios de imágenes como Tomografías computada o Resonancia magnética.
Tratamiento En la actualidad y dependiendo del estadío de la enfermedad hay diferentes fármacos que se utilizan con el fin de retrasar o enlentecer la evolución de la enfermedad a través de un efecto neuroprotector, así como también fármacos destinados a tratar situaciones clínicas que acompañan a la Enfermedad de Alzheimer en algún momento de su evolución, como por ejemplo la depresión, alteraciones del sueño, agitación, síntomas psicóticos. Si bien el tratamiento farmacológico es un aspecto importante en el manejo inicial de las demencias, un pilar fundamental del tratamiento se basa en un manejo NO farmacológico: el Abordaje terapéutico familiar. Debemos recordar que cuando una persona sufre de Alzheimer, una familia sufre con ella, y en este aspecto es importante tener en cuenta el cuidado de la salud del cuidador el poder detectar signos de agotamiento, para poder prevenir el síndrome del cuidador cansado. Recomendaciones para el Cuidador y/o Familia del paciente con Alezheimer Intente mantener una rutina diaria predecible, ejemplo una pequeña caminata, un juego de cartas sencillo. Intente que los horarios de las comidas y de los descansos sean siempre a la misma hora. Si se constata que tiene dificultades con una tarea, trate de simplificarla. La ropa debe ser de fácil manejo (velcros en vez de botones) Ante una situación conflictiva, no intente hacerlo entrar en razones, es mejor y mas sano para ambos distraer la atención en otro tema de conversación. Sepa que las reuniones familiares o lugares donde haya mucha gente pueden generarle estrés y romper su rutina, ponerlo nervioso frente a preguntas que no pueda responder, respete su decisión de no ir si esto le genera conflicto. No se enfade si le repite varias veces lo mismo o le hace varias veces la misma pregunta, no lo corrija, sólo le generará frustración y cansancio. Revise las medidas de seguridad de su hogar a fin de prevenir caidas y accidentes. Hable con su médico acerca de sus dudas y miedos. Cuando se sienta sobrepasado pida ayuda, si usted se enferma, no podrá cuidar de su ser querido.
Los programas que instruyen a las familias sobre las diversas etapas de la enfermedad, así como las estrategias para manejar situaciones difíciles, (anticipación) proveen una ayuda vital a quienes cuidan a personas con Alzheimer. Es importante la presencia de una red de apoyo que incluya a familiares y amigos que le ayuden a manejar el estrés de cuidar a un ser querido que padece este tipo de demencia. La participación en grupos de apoyo muchas veces permite a las personas encargadas del cuidado del paciente con Alzheimer encontrar un lugar donde expresar sus preocupaciones, compartir experiencias, obtener consejos y recibir apoyo emocional. La contención, la educación y el cuidado de la familia, tiene como resultado final un paciente mejor cuidado. Cualquier duda consulte con su médico de familia