LA SANTÍSIMA TRINIDAD. SOLEMNIDAD DOMINGO 26 DE MAYO DE 2013. Invocación del Espíritu Santo por medio de un canto, una oración que ayuden a entrar en un ambiente de recogimiento y reflexión. Empezar hacer la Lectio Divina por el Evangelio ayuda a comprender mejor el pensamiento que nos ofrece la Palabra de Dios en los textos bíblicos de cada domínica. No es el único, pero orienta hacer la lectura orante de la palabra desde el mismo Jesucristo, Verbo Divino. (Cfr. Preludio Evangelio de San Juan). Es necesario tener bien presente los cuatro pasos, si se comprende el sentido y significado de cada texto, se puede encontrar el mensaje que quiere dar el Señor hoy con esta Palabra. Las preguntas ayudan a descubrir las experiencias humanas y su relación con la experiencia de fe. 1. Lectio: Lectura, Qué dice la Palabra de Dios? Lectio o lectura: Escuchamos a Dios: Dios habla en la Sagrada Escritura. Nos fijamos en el mensaje que el texto bíblico contiene. Teniendo presente que este mensaje es palabra viva y eficaz, más cortante que una espada de dos filos que discierne los pensamientos y las intenciones del corazón (Hebreos 4,12) por eso, es el momento de la lectura atenta del texto bíblico. Pueden ayudarme preguntas como: Qué dice este pasaje bíblico? Quién habla? Qué temas o argumentos trata? Cuáles son los personajes allí implicados? Cuál es el contexto: persecución, sufrimiento, alegría, esperanza, desprendimiento, felicidad? Cuáles son los sentimientos y actitudes de los actores? Leer de una vez, e ir descubriendo el tema central de la Palabra: Primera lectura: Proverbios 8, 22-31 Salmo: 8,4-9 Segunda lectura: Romanos 5, 1-5 Evangelio: Juan 16, 12-15 Contexto bíblico: Hay muchas cosas que los discípulos no logran comprender aún (Cfr. Juan 16, 12); de hecho, hemos percibido dicha actitud, a propósito en Pedro, Judas (no el Iscariote) y otros de los discípulos (Cfr. Jn 13,36-38; 14, 5. 8; 16,16-20; Hechos 1, 6). Necesitan una ayuda permanente, pues muestran su incapacidad para 1
asimilar todo lo que el Maestro les comparte. Por eso, Jesús promete el envio del Espíritu Santo. Y es justo aquí donde aparece el Espíritu Santo, cuya misión, ya descrita en 14, 24-26, recordar lo que Jesús ha enseñado, misión que es confirmada en el texto de hoy: su acción se fundamenta en guiarlos a la verdad, que no es otra que el mismo Jesús, pues Él dice Yo soy el camino, la Verdad y la vida (Cfr. Jn 14,6). El texto: Quiénes son los personajes? Cuáles son los verbos del versículo 13? Quién es el sujeto de dichas acciones? Según los versículos 14-15: Qué clase de relaciones se perciben? Cuáles son los tres verbos claves? Cuáles son las expresiones más repetidas? San Juan 16, 12-15 Como preparación a la Fiesta de Pentecostés los textos evangélicos de los discursos de Jesús en la última Cena, nos hablan de la misión del Espíritu Santo, aspecto ratificado en este Domingo de la Santísima Trinidad. En los vv. anteriores al texto de hoy y en consonancia con la Palabra del día de Pentecostés, se describía la misión del Espíritu en cuanto separar de lo profano, ayudando así a purificarse del pecado(cfr. Juan 16, 8-10). Según la Palabra de hoy, podríamos decir que el Espíritu es el profeta de Jesús : efectivamente, Él recibirá de Jesús su mensaje para explicarlo a los discípulos; y obrando así, le dará gloria (Cfr. Juan 16,14) una gloria que según el Cuarto Evangelio, es mucha más que poder, es la capacidad de donación hasta el extremo. Y es precisamente en el v. 15 donde se explica aún más esta última afirmación: Todo lo que tiene el Padre es mío : lo que posee Jesús en común con el Padre es en primer lugar la gloria que le ha comunicado (Cfr. Juan 1,14), se trata entonces de una relación dinámica con Él, de un compartir incesante y mutuo, que hace de los dos uno (Cfr. Juan 10,30). Esta relación se manifiesta en su amor; un amor realizado ya en Jesús con su pasión, muerte y resurrección. Estas acciones de relación han de realizarse así mismo en la comunidad y orientar su actividad en medio de la toda la humanidad; es aquí donde el Espíritu asume, por decirlo de alguna forma, el protagonismo, haciendo partícipe a la comunidad del dinamismo de Jesús. El texto del evangelio de hoy nos deja percibir y comprender la Santísima Trinidad con su esencia de la gloria y del amor : a) el Padre glorifica al Hijo y Éste a su vez 2
es glorificado por el Espíritu, y b) al mismo tiempo que el Hijo con sus palabras y obras manifiesta su amor por el Padre y demuestra que necesita del Espíritu para ser conocido verdaderamente por sus discípulos. En las Tres Divinas Personas lo que es importante resaltar, al menos desde el Evangelio que hoy proclamamos, es que cada una de ellas necesita a la otra. Hay, pues, una relación de dependencia mutua en la Trinidad, aspecto que sólo se entiende desde el Amor: ninguna de las Tres Personas vive para sí, ninguna de Ellas es autónoma ni autócrata, no; todo en ellas da a entender que sólo buscan la gloria de las demás y es precisamente este aspecto el que las lleva a ser un solo Dios que se revela como Padre, Hijo y Espíritu Santo. Contexto litúrgico: En el año de la fe: Cómo me ayudan a mi experiencia de fe los textos de hoy? Haciendo una buena relación de los textos del día de hoy podemos sacar el siguiente mensaje para dinamizar nuestro caminar en la fe. Al igual que el salmista, cuando observamos este mundo inmenso y maravilloso, nos damos cuenta que Dios es bello, generoso, perfecto Aún más, qué misterio tan grande! saber que Él, siendo trascendente e ilimitado, se fije en nosotros, que no somos más que barro. Y es que precisamente la sabiduría, proyecto divino sobre el mundo, adquiere su más plena manifestación en el ser humano, creado a imagen y semejanza de Dios (Cfr. Gen 1,26). Pues Dios Trino es ante todo amor, un amor sin límites, superior a la muerte, a la cruz y al fracaso, un amor ágape: lo da todo sin exigir recompensa, que se gloría de amar y amar! La experiencia de este amor, hace que se fije en la pequeñez humana para darle sabiduría, lo hace precisamente porque todo en Él es gloria Qué misterio tan grande es este de la Santísima Trinidad! Jamás lograremos comprenderlos desde la razón, sino desde el corazón: todo en las tres divinas personas habla de amor y entrega, tanto así que el mismo Cristo, habiendo aprendido cómo se ama, quiso entregar la vida por nosotros, pecadores. Qué bueno sería si nos propusiéramos ser imagen de la Santísima Trinidad, cómo cambiaría el mundo si logramos purificar nuestros corazones de toda ambición y deseo de superioridad sobre los demás! Aprendamos pues, a ser imagen de Dios Amor, dejemos que se cumpla en nosotros el proyecto divino: ser sabios en la medida en que vemos todo con los ojos de Dios, en la medida en que la dependencia mutua nos impulsa a ser uno en medio de la diversidad. 3
Es cierto que la comunidad está conformada por miembros débiles pero pueden llegar al camino por la acción del Espíritu Santo y por la fe en Jesús. Así el mundo podrá saber que hoy es posible ser santo, justo, y servidor, como hijos e hijas del Dios Trinidad, pues según la Sagrada Escritura, Palabra de Dios, una persona justa es aquella capaz de ajustarse a la voluntad de Dios. 2. Meditatio: Meditación. Qué me dice esta Palabra? Meditatio o la meditación: Dios habla para la vida: su mensaje nos interpela, nos ilumina nuestra vida y nos muestra el camino a seguir. La Palabra que encuentra en el texto bíblico penetra en el corazón. Qué me dice el texto bíblico? Aquí el orante profundiza. Interioriza el sentido de las palabras, las escenas, los personajes, la expresión más impactante, busca la expresión más diciente, la que toca la vida de fe. Relacionando así la vida de fe con las experiencias de las situaciones, realidades y personajes del texto bíblico. Centrados en el texto del Evangelio y teniendo en cuenta las demás lecturas: Qué se de la Santísima Trinidad? Cómo me ayuda la primera lectura para comprenderlo? Cómo puedo asociar el salmo y el evangelio? Cómo deja ver el salmista la gloria y el amor de Dios? Cómo me ayudan a recorrer el camino de la fe la segunda lectura de Romanos 5,1-5? Qué impacto causan en mí las palabras de Jesús? Cuándo demuestro que me abandono con confianza en el amor de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo? Cómo se fortalece mi fe con la celebración de esta Solemnidad? Escribo un mensaje para compartir. Con quién lo haré? 3. Oratio: Oración. Qué me hace decir esta Palabra? Oratio o el momento para la oración: incluye el momento en el cual se ora con el texto. Con la oración se responde a Dios, es un diálogo con Dios a su invitación a cambiar de actitud, de afianzar las actitudes evangélicas. Para orar lo mejor es 4
responder a la pregunta Qué me hace decir este texto. Se expresan los sentimientos, las decisiones, la confrontación hecha por la palabra de Dios que se encuentra en el texto bíblico para mi mente y mi corazón. La vida se ofrece a Dios: desde la vida iluminada por la Palabra, dialogamos con Dios y como persona o comunidad orante, celebramos nuestra fe, alabando, bendiciendo, glorificando, dando gracias, pidiendo Cómo responde mi corazón al Señor? Ponte en posición orante (por ejemplo: de rodillas, o con las manos abiertas hacia arriba sobre las rodillas ) lo imprescindible es sentir la presencia de Jesucristo. Oh Santísima Trinidad! eres nuestro amparo y esperanza. Oh Santísima Trinidad! eres nuestra redención y salvación. Oh Santísima Trinidad! eres todo amor y ternura. Oh Santísima Trinidad! Eres fortaleza y sabiduría. Oh Santísima Trinidad! Eres compasión y perdón. Oh Santísima Trinidad! Eres misericordia, luz y guía. Oh Santísima Trinidad! eres la gloria que nos lleva a la felicidad de la vida eterna. Oh Santísima Trinidad! te alabo y te bendigo, Gloria a Dios Padre creador, misericordioso, compasivo. Gloria a Dios Hijo Jesucristo, salvador, redentor. Gloria a Dios Espíritu Santo, santificador, defensor. (Terminar recitando el Credo) Creo en un solo Dios Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con él Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén. 5
El símbolo Niceno-Constantinopolitano 4. Contemplación: Cómo me ayuda esta Palabra a encontrarme con Jesús? Qué actitudes y vivencias cristianas? Contemplatio o sea la contemplación: La Palabra se contempla para vivirla, es el momento del enamoramiento de la Palabra. Me permite llevar los ecos, las resonancias y las decisiones de la oración. Me ayudan preguntas como Qué decisión me sugiere el texto? Qué cambio necesito asumir? Qué acciones sugiere? Es necesario formular las vivencias y actitudes que despiertan este encuentro con el Señor y que me impulsan a revisar mi vida de fe, mi encuentro con Jesucristo. Por ejemplo, Cuáles actitudes voy a vivir durante la semana? Es dejarse permear por el pensamiento de Dios. Son las actitudes cristinas que suscitan este encuentro. Me impacta y causa profunda admiración, adoración y reverencia: Jesús el Hijo enviado del Padre, nos hace santos por medio del Espíritu y es el mismo Espíritu quien nos regala la rectitud para ser íntegros en la presencia del Señor. Nosotros sin el Espíritu Santo no seriamos capaces de recorrer el camino del evangelio que nos ofrece Jesucristo y llegar a la meta. Pues la santidad viene desde dentro. A mi misma(o):cuando dejo que la Palabra de Dios me acerque a tener una relación cálida con Dios Trino, donde pueda con profundo sentimiento y pasión agradecer a un Padre lleno de ternura y amor que traza un plan de salvación para mí, cobijándome con su presencia paternal con su Hijo Jesucristo. Un Dios encarnado que recorre nuestros caminos, sufre hambre y sed, siente nuestros calores y fríos, se agobia de cansancio invitándome a vivir en Él y dejar que viva y obre en mí, su propia vida; por último se revela como Espíritu Santo rico y generoso en los dones necesarios para que la vida del evangelio dé los frutos suficientes para la felicidad, para la vida eterna. Tendré siempre presente que: La acción que realiza el Espíritu Santo en cada cristiano es de luz y guía, fortaleza y consuelo, protección y seguridad para recorrer la vida del evangelio en medio de las realidades terrenas. Repetiré: Gloria la Padre, al Hijo y al Espíritu Santo! ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén. La lectura orante de la Sagrada Escritura es mi apoyo. Y tú? 5. Escríbelo te ayuda bastante. 6