OPOSICIÓN Y NEGATIVISMO La obediencia y la desobediencia son conductas que se aprenden Habitúe al niño a que obedezca a cosas muy fáciles o sencillas (a las que vea predisposición). Refuércelo por ello y que obtenga consecuencias agradables. No todos los niños obedecen siempre. Desobedecer es una forma de lograr la atención del adulto Diseñe situaciones en las que el niño tenga facilidad para obedecer. El niño debe tener atención por ello. Asocie la obediencia con las tareas cooperativas. La exigencia a obedecer debe ser gradual, comenzando por mandatos o situaciones fáciles o asequibles aumentando poco a poco la complejidad de la conducta de obedecer. No le dé excesivas órdenes al mismo tiempo. El niño debe recibir solamente 1 ó 2 instrucciones para obedecer. No acostumbre al niño a darle instrucciones en voz muy alta y de una a otra dependencia de la casa. Informe al niño de los progresos que va realizando en su obediencia. Ver la tele, ir de excursión, salir a la calle, tener paga semanal, etc; podrían ser consecuencias derivadas de aumentar su conducta obediente. Asocie estos reforzadores con los sociales: sonrisa, elogio, comentarios positivos, etc), cuando el niño obedezca. Podría obtener puntos por obedecer y canjearlos por reforzadores materiales (chucherías, etc). 1
Las instrucciones para que el niño realice determinada cosa deben ser claras, concisas y objetivas y nunca ambiguas, extensas, etc. CAUSAS Sobre los dos años el niño empieza a reafirmar su personalidad. Se opone a todo utilizando el no, incluso cuando le ofrecemos algo que quiere. Es a forma que tiene de expresar su voluntad propia. En este periodo empiezan a parecer las rabietas y el niño se hace más rebelde y desobediente. QUE LO MANTIENE Recibe mucha atención del adulto cuando manifiesta estos comportamientos. Consigue sus propósitos, salirse con la suya. No reforzar adecuadamente las conductas adecuadas. TENER EN CUENTA Es un periodo evolutivo normal. Todos los niños pasan por él y con educación adecuada se supera sin mayores problemas. Unas normas claras y una actitud calmada, firme y unánime de los padres, ayuda a que pronto el niño tome conciencia de lo que está bien o mal, lo que favorece su superación. Las tensiones, el autoritarismo o la permisividad exagerada, tener y transmitir expectativas negativas ( Mi niño no es capaz de obedecer ), afectan negativamente a la correcta evolución. QUÉ HACER Para fomentar una comportamiento deseado: Préstele atención cuando lo hace bien y prémieselo con abrazos, sonrisas, elogios. Reconózcale cualquier mejora por pequeña que sea. Concédale por sorpresa, pequeños privilegios, pequeños detalles que su hijo/a aprecie, cuando observe que se este esforzando por hacerlo bien. Ofrezca alternativas para que pueda elegir. Nunca ceda ante lloriqueos, enfados o pataletas. 2
Antes de que surja el conflicto o si éste se ha producido cuando su hijo este calmado, hable del problema con él, busquen juntos soluciones y créele un compromiso para llevarla a cabo. No caiga en provocaciones, ni se deje convencer por protestas. Comprenda su punto de vista pero trasmítale lo que espera que haga de forma clara, calmada y firme. - Haz la tarea. - Siempre igual, estoy cansado, etc. etc. etc. - Comprendo que estés cansado, pero debes hacer ahora tu trabajo. No responda a sus enfados con enfado. Mantenga la calma y explíquele brevemente y de forma clara lo que espera que haga. Intente ofrecer un buen modelo. Si usted no es una persona ordenada probablemente su hijo/a tampoco lo sea... No comente las dificultades ni lo descalifique cuando él pueda oírlo. Como evitar comportamientos inadecuados: Ignore siempre comportamientos inadecuados de poca importancia. Generalmente los niños/as los ponen en practica para llamar la atención. Muéstrele su enfado de forma breve, ordenándole claramente lo que debe hacer. No entre en polémicas inacabables con sus hijos/as. Utilice el tiempo fuera. Ve a tu cuarto un rato y cuando estés calmado/a hablaré contigo. Retire privilegios hasta que realice adecuadamente lo que debe hacer. Deje que se enfrente a las consecuencias naturales de su comportamiento. Si no pone atención al preparar su carpeta y olvida un libro, deje que afronte la reprimenda del maestro. Hágale que pida disculpas y repare la falta cometida. COMPORTAMIENTO ADAPTADO Y SEGUIMIENTO DE NORMAS MODELOS EDUCATIVOS: Ponerlo en contacto en casa con unos adecuados patrones educativos evitar ser excesivamente autoritarios o excesivamente sobreprotectores. 3
Intenten ser padres AUTORIZADOS, padres que ejercen su autoridad de forma responsable, razonada, con sentido común, dialogando pero a su vez de forma firme y serena. Trate a su hijo con respeto y consideración. Gritos, insultos y malos modos no son aconsejables. En vez de firmeza indican debilidad. NORMAS: Fijar normas claras. Acostumbrarlo a cumplir las normas, respetar el turno, esperar... Padres y madres han de ser coherentes en las normas, estar de acuerdo entre ellos y ser sistemáticos en su cumplimiento. Igualdad de criterios entre los padres. No desautorizarse. No cambiar las decisiones por presiones: pataletas, llantos, etc. Estar abiertos a razonamientos y cambiar si hay razones objetivas y poderosas. ÓRDENES: Dé pocas órdenes y normas, pero tajantes y precisas. Sea consecuente con lo que dice, no ceda si no existen razones poderosas, evitará que el/la niño/a se desoriente y le ayudará a tener un comportamiento más uniforme. No dé importancia a la terquedad, rabietas y pataletas; está afirmando su YO ante los demás. Si hace algo mal regáñele manteniendo en todo una actitud firme pero serena y calmada. Cuando el/la niño/a esté tranquilo indíquele el error y como evitarlo. Cuidado cuando utilice el NO suele dar al niño poca información. Si dice NO dejes tu abrigo en el suelo, probablemente lo deje en infinidad de sitios antes de caer en la cuenta de que debe dejarlo en la percha. Evite el NO y exprese directa y exactamente lo que desea que haga. PREMIOS Y CASTIGOS: Explicitarle que confiamos en él, que es querido: besos, abrazos. Reforzarlo frecuentemente con elogios, en sus avances, cuando se esfuerza. El/la niño/a necesita que se le valore y felicite frecuentemente. NO LO CONFUNDA CON LOS PREMIOS. Si se acostumbra a ser premiado/a por todo lo positivo que hace recurrirá al chantaje y le pasará factura por todo. Si haces esto te doy... es una forma de chantaje inadecuada. Premios y castigos han de ser pocos y siempre productos de la reflexión. Reforzar con elogios. Los premios a veces y por sorpresa. Evitar chantaje. Mostrar interés cuando el/la niño/a realiza su trabajo. Cuando no hace algo bien se le indica, pero tener en cuenta que se critica el fallo, no la persona (Debemos decir te has salido al colorear, nunca decir eres un inútil ). Evite muletillas insultantes: eres tonto!, y las comparaciones: tu hermano es más listo que tú. Comentarle lo que ha hecho mal y sugerir como hacerlo mejor. 4
PROBLEMAS DEL CASTIGO Castigo = presentar algo desagradable o quitar algo agradable. Puede crear habituación. El niño se acostumbra y no surte efecto. Puede que se haga conformista, paga un precio y sigue haciéndolo mal. Puede crear un sentimiento de rebeldía. Agresividad. Suele provocar un efecto escalada o circulo vicioso. Cada vez hay que recurrir a un castigo mas fuerte. Educa poco por su escaso valor informativo. Suele informar al niño lo que no debe hacer sin ofrecer alternativas adecuadas. Solo suele cambiar la conducta en presencia de la persona que castiga y cuando piensa que puede ser castigado. Es una medida muy utilizada. Procure buscar otras alternativas, si no las encuentra, úselo lo menos posible y correctamente: que sea proporcional, tenga relación con la falta cometida y se cumpla en su totalidad. Procure preservar el máximo respeto y afecto, actitud calmada y firme evitando voces y la perdida de control. El niños debe saber siempre la causa del castigo, así como la alternativa adecuada. En ningún caso esta justificado usarlo si no remite o se reduce la conducta que queremos cambiar. Distinguir entre: Castigo a destiempo, con alguna medida que nada tiene que ver con la conducta realizada (castigar sin dejar salir por haber roto algo, sin exigir reparación). Suele verse como algo arbitrario, como una venganza. Sanciones directamente relacionadas con la conducta que se desea cambiar. (Reparar lo que ha roto, y como consecuencia quizá no le quede tiempo para salir). Algunos tipos de castigo: Tiempo fuera. Sacar al niño de la situación en que crea el problema e indicarle qué debe hacer para restituir la situación normalizada y dejarle que pueda decidir cuando hacerlo. Costo de respuesta. Privarle de algún privilegio. Pagar un precio por la falta cometida Sobrecorrección. Hacer varias veces bien lo inadecuado Regañinas. Expresarle nuestro disgusto o desaprobación. ALTERNATIVAS AL CASTIGO Ignorar todos aquellos comportamientos inadecuados poco importantes y que suelen tener la intención de llamar la atención de los padres. Reforzar prestando atención, un beso, un muy bien,..., los comportamientos adecuados. Alabar cualquier avance que se produzca en relación con la conducta que deseemos realicen. 5
Hacer despacio, paso a paso, para que ellos lo observen, lo que deseemos que ellos realicen tal y como consideramos debe hacerse. Reforzar, prestando atención o premiando, cualquier conducta incompatible con la no adecuada. Llegar a un acuerdo sobre sus obligaciones. Ir anotando cuando se cumplen y cuando se realicen un determinado numero de veces conseguir privilegios acordados previamente. Ofrecer alternativas. En vez de decirle haz los deberes de matemáticas proponerle Qué prefieres hacer primero los deberes de lenguaje o los de matemáticas?. Adoptar una actitud constructiva ante el conflicto: Aceptarlo como algo normal. Anticiparse, tomar la iniciativa, prevenirlo, cuando sea posible, antes de que ocurra. No caer el provocaciones en situaciones de poca importancia. Ignorarlas. Mantener siempre una actitud calmada. Evitar los gritos y las decisiones precipitadas. No ceder nunca ante el chantaje. Pensar la respuesta adecuada, darla con un mensaje corto y claro y mantenerla siempre a pesar de que el niño plantee un conflicto. Tratar de evitar siempre la pasividad y la agresividad. 6