Inventario de rutinas receptivas Rutinas receptivas diarias Implemente una rutina flexible (comer, dormir, en el interior-exterior) para que los niños pequeños aprendan a predecir Brinde una rutina diaria que satisfaga las necesidades de cada bebé y niño pequeño para alimentarse y dormir Utilice las rutinas como oportunidades para la interacción emocional y el aprendizaje Brinde cuidado primario Disponga de rutinas receptivas para la alimentación de los bebés y niños pequeños Brinde un lugar privado para los miembros de la familia para alimentar a un bebé, si la familia lo desea Reciba a la familia para que coma con sus hijos Respete el deseo de la madre de amamantar y adapte las rutinas adecuadamente Brinde un sistema para documentar los deseos de la familia sobre cuestiones relacionadas con el paso del amamantamiento al biberón y respete sus deseos Consulte a las familias sobre sus preferencias culturales y familiares sobre los hábitos de alimentación del niño, necesidades y preferencias de comidas Brinde información diaria a la familia sobre cómo, cuándo y qué come el niño
Disponga de rutinas receptivas para la alimentación de los bebés y niños pequeños Siéntese con los niños pequeños para comer, en lugar de rondar a su alrededor o ir de un lado al otro mientras los espera. Responda a los pedidos y comentarios, verbales y no verbales, de los bebés y niños pequeños mientras los alimenta o come con ellos. Sostenga a los bebés suavemente para darles el biberón. Se debe cargar a los bebés para alimentarlos, para brindarles seguridad y satisfacer sus necesidades emocionales. Hable suavemente, tararee, cante o guarde silencio de acuerdo a las indicaciones del bebé. Hable de manera positiva, alentadora y suave a los niños mientras se alimentan. Responda cuando los bebés y niños pequeños indican que tienen hambre o quieren más comida, y respételos cuando indican que están satisfechos o ya no desean comer más. Brinde oportunidades a los niños pequeños para comenzar a servirse, verter leche de una jarra pequeña y limpiar la mesa con una esponja. Acepte los accidentes y las exploraciones sensoriales de la comida como parte del proceso de aprendizaje. Use el momento de la alimentación de los bebés como una oportunidad para establecer conexiones emocionales entre el adulto y el niño. Use el momento de la alimentación de los niños pequeños como una oportunidad para establecer conexiones emocionales entre los adultos y los niños, y entre los niños mismos. Observe a los niños durante los momentos de la alimentación. Disfrutan la experiencia?
Disponga de rutinas receptivas para cambiar pañales e ir al baño Disponga imágenes de los miembros de la familia u otras imágenes interesantes en la pared a una altura en que el bebé pueda verlas en el área para cambiar pañales. Haga que el cambio de pañales sea un momento especial para que los adultos estén presentes emocionalmente con los niños, siguiendo sus señales. Use palabras positivas y alentadoras en todo momento. Use conversaciones como primero y luego y palabras que sean reconfortantes. Aliente a los niños a participar en la rutina (ponerse de pie y subirse los pantalones, etc.). Coordine el aprendizaje para ir al baño con la familia a fin de brindarle continuidad desde el hogar al programa. Nunca fuerce a los niños pequeños a usar el baño o a permanecer allí. Use los momentos para cambiar pañales/ir al baño como oportunidades para las conexiones emocionales entre adultos y niños.
Disponga de rutinas receptivas para dormir/descansar Acune o dé palmaditas suavemente a los bebés que necesitan ayuda para dormir. Mire y esté atento a las señales cuando desean que los levanten de la cuna y responda de manera positiva y rápida a ellas. Disponga de una cuna para los niños pequeños que tenga un rótulo donde figure su nombre y un símbolo o una imagen especial. Asegúrese de que las sábanas, almohadas y mantas estén rotuladas de la misma manera. Planifique e implemente el tiempo de transición desde el momento del juego al momento de dormir con una secuencia previsible para los niños pequeños. A fin de entablar relaciones positivas, lea cuentos, hable con suavidad o dé palmaditas cuidadosamente mientras el niño se duerme, según sus necesidades. Los niños pequeños pueden escoger un libro especial o tener su propio juguete de peluche o manta si es necesario. Si los niños pequeños tienen dificultades a la hora de dormir, quizás necesiten más palmaditas, canciones, lecturas de libros, un objeto preferido, auriculares con música muy suave. Permita que los niños pequeños duerman/descansen el tiempo que necesiten. Se planifica una actividad tranquila para los que se despierten. Ayude a los niños pequeños en la transición desde el momento de la siesta hasta despertarse, sosteniéndolos y acunándolos o frotándoles la espalda para que comiencen a despertar. Para los niños pequeños, prepare el área de la siesta antes de almorzar, de modo que si se sienten cansados o se quedan dormidos durante ese momento, el maestro pueda ayudarles en la transición hacia la hora de la siesta. Use los momentos para dormir/descansar como oportunidades para establecer conexiones emocionales entre adultos y niños, y para las interacciones sociales con los compañeros.
Disponga de momentos receptivos de saludos y despedidas Salude a cada bebé y niño pequeño y a los miembros de su familia afectuosamente por la mañana para contribuir a la transición desde el hogar al centro/hogar de cuidado infantil y brinde a los miembros de la familia la posibilidad de comunicar sus necesidades, prioridades e inquietudes. Ayude a cada niño a despedirse de los miembros de su familia y continúe con una actividad Cuando un niño tenga dificultades para separase, planifique las tareas del personal para permitir al maestro principal del niño el tiempo adecuado para ayudarle a sentirse más cómodo al llegar o al partir. Reconforte al niño y dígale que el miembro de su familia regresará luego del almuerzo, la siesta, etc. Salude a los miembros de la familia afectuosamente cuando recojan al niño. Esto contribuye con la transición desde el entorno de cuidado infantil al hogar al final del día y es una oportunidad para describir el día del niño. Dé a cada bebé y niño pequeño una despedida especial. Use las rutinas de transición como oportunidades para establecer conexiones emocionales entre el niño y su familia, el maestro y el niño, y entre compañeros. Adaptado con la autorización de Wittmer & Petersen (2006) FUENTE: The Center on the Social and Emotional Foundations for Early Learning; Universidad Vanderbilt (http://www.vanderbilt.edu/csefel)